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miércoles, 17 de agosto de 2016

Marcos Carámbula será mano derecha de Miranda



El senador Marcos Carámbula, quien ocupa su banca en representación del Partido Comunista, aceptó pasar a desempeñarse como secretario político del Frente Amplio, en los hechos la mano derecha del flamante presidente de la coalición, Javier Miranda.



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Carámbula será mano derecha de Miranda | Noticias Uruguay y el Mundo actualizadas - Diario EL PAIS Uruguay

lunes, 1 de agosto de 2016

"El FA debe dirigirse a los frenteamplistas enojados"



El politólogo Oscar Bottinelli consideró que en la elección interna del FA hubo una menor votación porque esta fuerza política tiene dificultades de participación. Dijo que para recuperar el caudal
electoral debe orientarse en los frenteamplistas enojados, que no quieren irse a otros partidos.
Aclaró que a este fenómeno se debe sumar lo que indican las
encuestas: el FA tiene menor adhesión y sin embargo, blancos y colorados no registran aumento. “Hay mucha gente que votó al FA, que puede seguir
considerándose frenteamplista o no, que está desilusionada o enojada, o descontenta. El FA el problema que tiene, es que polemiza con blancos y
colorados, pero el objetivo no está en los partidos tradicionales sino con los propios frenteamplistas que están desconformes”, señaló
Bottinelli.
Aclaró que el FA le debe de hablar a los frenteamplistas, que no se van con a los blancos y colorados. “El problema es que no se quieren ir y  están desconformes con el FA”, sostuvo.
Señaló que la coalición de izquierda no tiene fugas hacia blancos y colorados, sino que lo está empezando a tener, hacia Unidad Popular (por
la izquierda) y el Partido Independiente (por el centro).

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"El FA debe dirigirse a los frenteamplistas enojados" - Diario La República

viernes, 29 de julio de 2016

Factum: FRENTE AMPLIO CAE A 30 POR CIENTO Y EMPÌEZA A MEDIR EL "PARTIDO NOVICK"

"Registra la caída más grande de toda su historia y ahora queda en el nivel que lo que ahora es el Frente Amplio tenía 22 años atrás", dijo Oscar Botinelli.
 
 BLANCOS,COLORADOS,PI Y "PARTIDO NOVICK" SUMAN 45 POR CIENTO.



 http://www.factum.uy/analisis/2016/ana160729.php

Si hoy hubiera elecciones el Frente Amplio recogería un 30%, el Partido Nacional 25%, el Partido Colorado 8%, el incipiente Partido Novick el
8%, el Partido Independiente 4%, Unidad Popular el 2%, el Partido Ecologista 1% y voto en blanco/anulado/ninguno más los indefinidos totalizan el 22%. Se confirma la existencia de un “muro invisible”: los
que abandonan el Frente Amplio no van a los partidos tradicionales.
Aunque el Partido Novick comienza a perforar ese muro y capta un 1% de voto frenteamplista


 Clic en este enlace para leer la nota conpleta de la página de Factum Digital

Factum Digital | Uruguay

viernes, 1 de julio de 2016

SENADORA LUCÍA TOPOLANSKY “Si el Frente no tiene capacidad de generar recambio y los mismos tres van a ser Tabaré,Danilo y Pepe, intercambiándose, entonces estamos fritos”.




Escribe Juan José Pereyra Twitter@juano500

Entrevista exclusiva

Topolansky visitó hoy el Departamento de Rocha en el marco de la campaña electoral hacia las elecciones internas de la fuerza política en el gobierno que tendrán lugar el próximo 24 de julio.
Momentos antes de participar en un acto en la sede central del Mpp en la ciudad de Rocha, la senadora respondió algunas preguntas sobre la situación del país y la interna frenteamplista. Dijo que si el Frente Amplio no logra el recambio “estamos fritos”.




En la elección nacional uno conoce el país y al mismo tiempo, como participa toda la población, uno se vincula con un número muy grande de gente. En una elección interna uno se reencuentra con muchos compañeros y los temas que se discuten no son tanto los del rumbo del país sino más bien sobre la fuerza política, qué nos está faltando, la consolidación del trabajo político. Siempre se mezclan temas del país y uno aprovecha también para mirar las realidades de al lado, que esto es muy importante, porque la prensa transmite algo pero hay cosas que nunca van a salir en la prensa y que la pueden contar los vecinos. Ahí es una oportunidad de asumir más la realidad.

Hoy hay una situación complicada desde el punto de vista económico, regional,hay realidades nuevas en Brasil y Argentina. ¿Cómo ve parado al Frente Amplio hoy ante una realidad que cambió?

Desde la región están mirando al Uruguay como el país más estable y eso lo tenemos que cuidar como el pan. Estable institucionalmente, desde el ángulo de la transparencia, etc. En eso Uruguay se está destacando en Latinoamérica. No está creciendo como hubiéramos querido porque es muy poquito lo que va a crecer. El país que va a crecer más es Bolivia y después Perú, tecero estaría Uruguay, aunque Perú crece pero no distribuye así que crece con una montaña de problemas sociales muy duros y para nosotros ese no es el modelo.
El país tiene que pasar este momento.Uruguay es tomador de precios, no los fija. Cada resfrío que aparece en el mundo hace que nos engripemos. Brasil y Argentina están en situación penosa y eso nos pega pero no estamos en el 2002 ni hay un drama ni una crisis. Estamos en un momento, en una coyuntura difícil y tenemos que ponernos las pilas para salir adelante.

Usted dice "no quiero que Pepe sea de nuevo candidato a la presidencia" . Si lo hace es porque no tiene la certeza de que él no quiera serlo o que no vaya a serlo.

Lo que vaya a hacer él lo va a decidir él y el candidato que vaya a tener el Frente lo va a decidir la fuerza política. En lo personal yo prefiriría que no fuera .¿Por qué? Porque Pepe tiene 81 años, cuando termine la legislatura va a tener casi 85 años.Una campaña electoral es absolutamente desgastante. Hay que estar en todos los pagos, en todos los lados, en todos los actos, eso para empezar y después otros cinco años... terminaría gonernando con noventa años. ¿Es que en el Uruguay no hay nadie más que pueda gobernar? Estamos fritos. Seremos un país de viejos pero no tanto.Hay que darle lugar a las generaciones nuevas, los pingos se forman en la cancha.Esto no quiere decir que el Pepe se vaya para la casa, no se va a ir nunca ni va a dejar de militar hasta que no tenga una pata en el cajón. La voz de los viejos tiene que ser la experiencia acumulada. La voz de los jóvenes tiene que ser el dinamismo,el echar para adelante, el romper esquemas. Ha sido siempre así en la historia. Si el Frente, siendo el partido político más grande del país no tiene capacidad de generar recambio y los mismos tres van a ser Tabaré,Danilo y Pepe, Pepe, danilo y Tabaré, intercambiándose, entonces estamos fritos.

lunes, 27 de junio de 2016

CANDIDATOS A LA PRESIDENCIA DEL FRENTE AMPLIO RECHAZAN AFIRMACIONES DEL POLITÓLOGO OSCAR BOTTINELLI “PACHA” SÁNCHEZ: “TIRA UN BOLAZO CON GRAN INTENCIONALIDAD POLÍTICA”.





Escribe Juan José Pereyra Twitter@juano500

Tres de los cuatro candidatos nacionales a la presidencia del Frente Amplio visitaron Rocha y mantuvieron reuniones con dirigentes, militantes y medios de comunicación.
No pudo participar por razones de salud el dirigente Javier Miranda.
En un encuentro realizado con la prensa en la Casa del Frente Amplio en la ciudad de Rocha, Alejandro Sánchez, José Bayardi y Roberto Conde analizaron la actual campaña hacia la elección interna del 24 de julio. Por primera vez en la historia los residentes en el exterior votarán en la interna.
Este periodista pidió su opinión sobre la marcha de la campaña y afirmaciones del Director de Factum, Oscar Bottinelli para quien la votación, para no tener un resultado negativo, no debe ser inferior a la de 2012. En aquella oportunidad 170.770 personas votaron en la elección que consagró como presidenta de la fuerza política a la senadora Mónica Xavier.

“Tratar de hacer una interpretación de que si el Frente Amplio no logra convocar la misma cantidad de gente del 2012, querer inferir desde allí, de alguna manera como lo está haciendo la oposición política de que el Frente Amplio está desintegrándose y perdiendo fuerza, lo que tiene es una enorme intencionalidad politica de un señor que alguna vez apostó algo y perdió y hasta ahora cada vez que le ha apostado a algo a la izquierda viene perdiendo”, dijo el diputado Sánchez.
Bayardi y Conde también expresaron su discrepancia con los dichos del politólogo sin hacer referencia a “intencionalidad política”.

ALEJANDRO “PACHA” SÁNCHEZ

“El Frente Amplio está bastante desmovilizado, los niveles de participación no son los que deseamos, diría yo que no son los que los frenteamplistas desean en general. Después de estos meses de campaña esta es una de las cuestiones más recurrentes en todas las actividades que realizamos en todo el país, una de las cuestiones que están planteadas es de qué manera logramos que el Frente Amplio se movilice mucho más .Eso pasa por dos aspectos en los que los frenteamplistas hacen hincapié. El primero es cómo abrimos canales de participación incluso alternativos a los que ya existen, tenemos las formas de participación en las bases frenteamplistas son los comités de base pero evidentemente también vivimos en un mundo donde los cambios tecnológicos nos obligan también a abrir canales de participación de caracter digital para incrementar el vínculo que tiene la fuerza política con los simpatizantes del Frente Amplio, que no todos están adentro de la estructura de la fuerza polítiica. Esa es una de las grandes demandas que están plantedas a lo largo y a lo ancho del país.
También de qué manera fortalecemos la participación de los compañeros de manera presencial y eso quiere decir que necesitamos primero tener un Frente Amplio que recorra mucho más el país, acercar , acortar la distancia entre los dirigentes y los que tienen responsabilidades de gobierno y los compañeros de la base. Muchas veces otro de los reclamos es que los compañeros recorren poco los comités , están poco tiempo ,están solo en las campañas electorales, hay un despliegue territorial del Frente Amplio muy grande y lo que pretendemos es que eso sea de manera permanente y que esta movilizacióon nos permita comenzar ahora y no terminar el 24 de julio sino seguir hacia adelante.
Ese es el esfuerzo que estamos haciendo y en esta campaña hemos ido sumando grano a grano y la movilización se va armando más allá del frío y de las inclemencias del tiempo, la movilización cada vez más va tomando más color, más temperatura y va creciendo. Hoy el Frente Amplio está mucho más movilizado de lo que estaba cuando arrancamos esta campaña y creo que ya eso es de por sí un logro.
Habrá que ver cuántos frenteamplistas se sientan convocados el día 24 de julio.

UN SEÑOR QUE APOSTÓ Y PERDIÓ”

La interpretación que hace Bottinelli es claramente una interpretación de caracter político . Habría que buscar, me la voy a arriesgar, ya que Bottinelli tira bolazos yo también voy a tirar un bolazo en todo caso. No existe partido político en el mundo que en una elección interna vote ni siquiera por asomo el diez por ciento de su electorado. Si resultara que en esta elección el 24 de julio, no participan los 160 mil frenteamplistas que participaron en el 2012 y el número fuera cercano a cien mil eso significa que participó en una interna el diez por ciento del electorado, en una elección interna del partido, no obligatoria y eso es muy grande en cualquier parte del mundo.
Entonces tratar de hacer una interpretación de que si el Frente Amplio no logra convocar la misma cantidad de gente del 2012, querer inferir desde allí, de alguna manera como lo están haciendo la oposición política de que el Frente Amplio está desintegrándose y perdiendo fuerza, lo que tiene es una enorme intencionalidad politica de un señor que alguna vez apostó algo y perdió y hasta ahora cada vez que le ha apostado a algo a la izquierda viene perdiendo. Vamos a seguir desarrollando nuestra movilización de cara a convocar a todos los frenteamplistas y estamos convencidos de que el desafío es tratar de tener una cifra cercana a lo que fue la convocatoria del año 2012. De no alcanzar esa cifra de 160 mil eso lo único que nos dice es que el Frente Amplio tendrá que trabajar mucho más fuerte hacia el futuro para seguir recomponiéndose como fuerza política pero en absoluto eso podría ser un indicio de deterioro o deslegitimación del partido político Frente Amplio en esta etapa”.

JOSÉ BAYARDI

El ex legislador y ex ministro José Bayardi dijo que en sus palabras iría más lejos que Sánchez y aseguró que no hay partido político en el mundo que haya hecho participar en una interna no obligatoria para elegir sus autoridades entre el cinco y el siete por ciento del padrón electoral como lo hizo el Frente Amplio en 2012.

ESTAMOS EN UN CONTEXTO DISTINTO”.

“Los contextos cambian, creo que el análisis que hace Bottinelli es
político, como dice Pacha. No es un análisis de interpretación politológica porque él es politólogo, sino que está presuponiendo una valoración hacia adelante, no es un análisis de la fotografía de un momento determinado.
En el 2012 era la primera vez que elegíamos las autoridades con voto abierto, directo de cada uno de los afiliados al Frente Amplio .Era un contexto distinto, el país estaba en una situación económica distinta, teníamos muchos desafíos importantes en la agenda ,teníamos que consagrar la ley de interrupción momentánea del embarazo, teníamos que consolidar el tema del matrimonio igualitario, consolidar como desafío el tema de la reglamentación del cannabis. Había un montón de movilizaciones que estaban planteadas y dio lugar a que se expresara ese número de electores. Ho
y estamos en una situación distinta y tenemos un Frente desmovilizado, un Frente que ha dejado de discutir internamente de política como factor motivacional de los elementos de participación, situaciones que hay que corregir. Es un Frente que tiene que seguir incorporando canales de integración a la participación política y a la discusión a cantidad de nuevas realidades sociales que están, muchas reclamantes de temas puntuales , otras son etarias en términos de jóvenes y encontrar los canales de participación .Veremos qué da el resultado electoral y después del 24 de julio deberíamos ver, no en el mundo, sino en Uruguay, cuántos votos obtendrían los partidos tradicionales con 180 años de historia en elecciones realizadas como las hacemos en el Frente Amplio donde elegimos con el voto popular. Nuestra dirección no surge de cenáculos partidarios . Si en esa circunstancia nos viéramos superados ahí se podría comparar y sacar la extrapolación o la inferencia que hace Bottinelli.
Mientras tanto hay que trabajar para lograr los mayores niveles de participación porque los desafíos siguen estando planteados”.

ROBERTO CONDE
NO IMPORTA EL NÚMERO DE VOTANTES SINO LA CALIDAD DEL TRABAJO QUE ESTAMOS HACIENDO”

“Conozco a Oscar
(Botinelli) y sé de la seriedad de su trabajo pero no estoy de acuerdo con esta afirmación porque los momentos y las coyunturas políticas históricas son diferentes.
En 2012 estábamos viviendo todavía un momento de euforia política .Ahora estamos peleando en condiciones más adversas y vamos a seguir por cierto adelante .
Para decirlo muy francamente nosotros no estamos esperando 170 mil votantes ni nos importa, que quede claro eso,
esto no es una cuestión de cantidad sino de calidad .Hacemos una movilización primero de reafirmación del Frente Amplio, de demostración de su capacidad de organización y militancia y vamos a arrancar el 25 de julio con lo que tengamos y con lo que hayamos movilizado en estos tres meses, sea más, sea menos, sea mucho o sea poco. Nuestro objetivo es retomar a partir del 25 de julio las riendas de la vida política del país. No nos desvela con cuántos miles de personas votantes lo vamos a hacer o no lo vamos a hacer. El objetivo estratégico es retomar a partir del 25 de julio las riendas de la vida política del Uruguay. Para eso le vamos a dar conducción al Frente Amplio y para eso estamos acá. Si es con ciento setenta mil, si es con cien mil, con noventa mil o con 140 mil, ese no es nuestro problema.
Nuestro problema es darle conducción estratégica a la izquierda uruguaya y volver a insertarnos con fuerza en la sociedad y eso no depende exactamente del número de miles que vayan a votar. Depende fundamentalmente de la conducción que logremos darle al Frente, de la actitud política de lucha y de combate que podamos contagiar en todos los frenteamplistas y de la claridad estratégica que le demos a nuestro trabajo en los próximos tres años.
A veces, sobre todo a nivel del periodismo se invierten las cosas y muchos medios de comunicación le dan más importancia a la politología y a los politólogos que a la política. Los politólogos van atrás de la política, la política va adelante”.



En la primera parte del encuentro realizado en la Casa del Frente Amplio, los tres candidatos expusieron su pensamiento en relación a la instancia electoral del 24 de julio.

SÁNCHEZ

“El Frente Amplio es el único partido político en el Uruguay, en la región y más allá que decide construir su dirección al convocar a todos a elegir con el voto tanto el presidente de la Mesa Política Nacional como los presidentes de las mesas departamentales y nuestro Plenario Nacional de manera democrática, abierta convocando a todos los frenteamplistas mayortees de 14 años a ejercer su derecho a decidir. Esto nos habla del Frente que venimos construyendo y queremos construir, un Frente Amplio con mucha más participación, que intenta fortalecerse como herramienta para seguir construyendo y consolidando cambios. Esta fuerza política surgió hace 45 años porque no le gustaba la realidad del Uruguay y se organizó y construyó un programa para intentar superar las dificultades por las que atravesaba el pueblo uruguayo y más allá de las transformaciones que ha tenido el país en estos últimos doce años, nos sigue sin gustar la realidad que tenemos hoy .Todavía es necesario construir más cambios y para eso necesitamos una fuerza política movilizada y con capacidad de representar las demandas de nuestra gente. Una fuerza política con capacidad para escuchar a los frenteamplistas en todo el territorio nacional y con vocación de construir propuestas de cambio.
Estamos construyendo un mensaje unitario que reconoce la necesidad de que el Frente Amplio trabaje en conjunto entre las diferentes opiniones, visiones, sensibilidades que existen pero por sobre todas las cosas de cara a la construcción de propuestas junto con la gente, para la gente y con la gente.
Más allá de lo que suceda el 24 de julio tenemos claro que ninguno de nosotros es mejor que todos nosotros juntos.
Nuestro objetivo en esta etapa es estimular la participación de los frenteamplistas el 24 de julio. Tenemos un enorme desafío por delante que es demostrar que tiene el gobierno nacional y que ha llevado adelante una transformación muy importante . El desafío de elegir la conducción en un momento de crisis económica global y ni hablar a nivel regional, no solo económica sino también política. El desafío es demostrar que tenemos la capacidad de salvaguardar todos los logros y conquistas alcanzados en los últimos doce años y plantearnos como desafío que en plena crisis podemos seguir defendiendo los intereses de aquellos que más lo necesitan, podemos y debemos seguir defendiendo la actividad económica productiva con lo que implica de defensa del empleo y del salario .Tenemos también la obligación de seguir aportando construcciones programáticas. Quisiéramos que los y las frenteamplsias entiendan este desafío y para enfrentarlo se necesita una fuerza política fortalecida.
Las nuevas autoridades deberán enfrentar el desafío de las transformaciones que necesitamos para aumentar los niveles de participación de nuestros frenteamplistas y también aquellas nuevas sensibilidades de la sociedad a las que hay que abrir canales de participación.
Más allá de la importancia de las personas, nadie va a dejar de ver la importancia de los liderazgos que nos llevaron a los triunfos del 2004, del 2010 y del 2014, lo que importa es a qué partido político se le delegan las responsabilidades a nivel nacional y departamental.Son los programas de los partidos y las sensibilidades para llevar adelante acciones de gobierno las que marcan la impronta y la suerte que el país va a tener a nivel nacional y departamental.
El desafío es participar el 24 de julio”.

CONDE


Uno de los ejes importantes que estamos utilizando para este diálogo frenteamplista en todo el país durante esta campaña, un diálogo que nos va a llevar a intercambiar con ocho, nueve, quizás diez mil compañeros en todo el país, esto nos dará la posibilidad de reforzar la capacidad de movilización y de lucha por lo cual en ese diálogo estamos volcando algunos ejes que tienen caracter estratégico y tratamos así de contribuir desde la campaña al esclarecimiento de rumbo de los que tenemos que hacer en estos tres años y medio . Al contrario de períodos anteriores teniendo en cuenta que llevamos apenas un año y medio, estamos al principio de nuestro gobierno y sin embargo la temperatura del enfrentamiento político ya está muy alta .Hay una gran intensidad de lucha política en el país y asumimos que esto no va a cambiar hasta 2019-2020 .Como dicen los gurises vulgarmente, la política en Uruguay ya se transformó en política de palo y palo y va a durar tres años y medio y el Frente Amplio no está dando la talla de esta intensidad. No estamos teniendo la movilidad suficiente ni la respuesta enérgica que la derecha merece a todas sus campañas demagógicas y a sus provocaciones más allá que respetamos el legítimo derecho a ejercer la opsosición .
El Frente no ha respondido a los ataques y provocaciones de la oposición por falta de
trabajo y falta de actitud política de combate.Eso es lo que vamos a corregir ahora. No es que no tengamos razón, es que hemos dejado caer nuestra moral militante y hemos bajado nuestro nivel de lucha y eso es lo que estamos tratando de recuperar. Seguimos teniendo razón pero no estamos sabiendo defenderla como corresponde.
El Frente Amplio no está respondiendo en la forma serena y firme en que debe hacerlo.
estamos instalando esto en el debate, primero convocando a nuestra gente y no solo a los frenteamplistas sino a todos los ciudadanos a valorar lo que hemos hecho en el Uruguay en estos once años.Lo hemos tra
nsformado en un país diferente al que encontramos en 2005, enormemente más avanzado en todos los campos. Por cierto que los primeros desconformes con lo que hemos hecho somos nostros mismos porque siempre queremos ir más alláy no nos dormimos en los laureles y sabemos que tenemos todavia objetivos que cumplir y un trabajo de transformación por profundizar.
No vamos a permitir que se quiera desconocer con mentiras lo que hemos hecho.
No es cierto que porque se hayan cometido errores importantes en la planificación de las inversiones de Ancap por ejemplo, no seamos capaces de administrar un país y transformarlo de la manera extraordinaria que lo hemos hecho. No es cierto que porque haya habido algún caso aislado de corrupción en todos nuestros años de gobierno se pueda decir livianamente y provocativamente que nos hemos robado el país como acostumbran decir los blancos y los colorados en una provocación que no vamos a admitir y a la que vamos a responder como corresponde. Podemos probar número por número y año por año cómo creció la riqueza del país y cómo la utilizamos y esto es lo que le vamos a mostrar al pueblo y es con la verdad que vamos a dar esa batalla y que vamos a vencer . Podemos decir que en esta coyuntura internacional adversa, consecuencia de una crisis que no surgió en los países del sur gobernados por la izquierda sino en los países ricos del norte gobernados por la derecha . Ahí está la razón de la crisis, en la hiper concentración y especulación del capital financiero dominante en el mundo, esa es la razón de la crisis. A pesar de esa crisis de la que no somos responsables nos está pegando y nosotros en los tres años y medio que quedan de gobierno vamos a continuar aplicando nuestro programa y vamos a seguir avanzando aunque sea más despacio, aunque sea con limitaciones. No vamos a replegar nuestro programa, no vamos a dejar de construir proyecto progresista y esta será nuestra gran lección frente a nuestro pueblo , que es el que en definitiva nos tendrá que juzgar en 2019.
Mientaras tanto seguir levantando el ánimo, fortaleciendo la conciencia , deplegando mejor la organización de nuestro Frente Amplio para ponerlo en pie de lucha en todo el país".


sábado, 11 de junio de 2016

La mesa chica del presidente



 Quienes están cerca de Vázquez observan pequeños cambios en su forma de conducir el gobierno con respecto al primer mandato.



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La mesa chica del presidente | Noticias Uruguay y el Mundo actualizadas - Diario EL PAIS Uruguay

LA NEGATIVA A INVESTIGAR AL FONDES escribe Hebert Gatto


Siguiendo una costumbre inveterada, ya practicada durante el anterior gobierno, la Cámara de Representantes rechazó  la formación de una comisión investigadora para analizar la gestión del Fondo para el Desarrollo,  FONDES, promovida por el Partido Nacional.  Argumentó que el diputado Rodrigo Goñi, impulsor de la medida,   procuraba embestir contra un símbolo de la izquierda al “demonizar a la autogestión”. Por su parte los blancos, no sólo señalaron una mala gestión del organismo a investigar, signada por grandes pérdidas económicas, sino que denunciaron una operativa con fraude y corrupción.- La negativa a  esta investigación, si bien tomó estado público, lo hizo como un asunto menor.  Sin embargo, marca una forma de gobernar que merece reflexión.
Varias razones sostienen este juicio. En primer lugar para la izquierda el FONDES no es un instrumento más de la gestión de gobierno.  Como expresó ajustadamente el diputado del MPP Daniel Placeres  es necesario defender al FONDES  puesto que marca una de las señales de la “identidad ideológica” de la izquierda. Fracasado estrepitosamente el experimento de la socialización de los medios de producción que constituía una vía exclusiva para la justicia y la eficacia económica y que culminó con la absoluta paralización de la URSS y sus satélites, se hizo necesario conseguir nuevos modelos de identificación. Tal la autogestión, donde los medios de producción son de propiedad y dirección de los trabajadores mediante su intervención directa, sin la mediación de la rechazable propiedad privada.  En lo que constituye una modalidad en cierto modo similar a la propiedad cooperativa, que de generalizarse permitiría la consagración de un socialismo autogestionario, o sin tanta generalidad, la existencia de espacios comunitarios dentro de una sociedad de dominancia capitalista.
 En este esquema, es lógica la posición del MPP defendiendo al FONDES, probablemente uno de los pocos caminos (aunque imperfecto, en tanto no consagra la inexcusable propiedad colectiva) para limitar la propiedad privada de los medios de producción. Seguramente la última de las utopías, tan duramente castigadas desde fines del siglo XX. A pesar que esa defensa no puede realizarse mediante el secreto y la ocultación de sus resultados, los cuales muy por el contrario, deberían estar sujetos al escrutinio de todos. Mucho más cuando el asunto no se limita a una pugna ideológica, pese a la importancia de la misma, sino que está impregnada de otros elementos como la corrupción y el fraude. El FONDES no es propiedad de la izquierda, que puede, si así lo quiere, desinteresarse por el destino de su patrimonio. Es un bien de todos y como tal requiere cuidados especiales, y una particular atención en su manejo. La mera posibilidad de defraudación debe ser evitada, lo que no resulta tan claro en el presente caso, donde aparecen asuntos, como el de la ex imprenta Pressur, donde aparentemente se estuvo lejos de actuar con la debida diligencia.
    No con estas observaciones se cierran las objeciones sobre el modo de actuar del Parlamento. La posición del Frente Amplio negándose a divulgar el proceder y los resultados de un organismo constituyen una clara aplicación del “arcana imperii”, el secreto de estado que resulta incompatible con la democracia. Como se sabe, la relación histórica entre autoritarismo y censura informativa, ha sido constante. Desde el romano Tácito quien inventó el concepto, hasta Zinoviev, el que aludiendo a la URSS, creó la ficción  del terrible estado de Ibania, donde todo, incluyendo la información privada, era secreta, resulta claro que la información es el oxígeno de la democracia. Donde poco se conoce mal pueden tomarse decisiones en las que, incluso a través de la opinión pública, todos participen, como requiere la democracia moderna. Fue Kant, quien expuso con claridad el problema de la publicidad del poder al consignar que “Todas las acciones relativas a los derechos de otros hombres cuya máxima no sea compatible con su publicidad, son injustos”.- Más claro imposible. Por eso resulta imperdonable que el Frente Amplio, que en otros planos se ha mostrado tolerante, caiga en estos errores.
   

miércoles, 1 de junio de 2016

sábado, 28 de mayo de 2016

Esteban Valenti Sonaron las cacerolas



"Pero cuando suenan las cacerolas, no
te preguntes ¿por quién suenan? Están sonando por ti. Me siento responsable y me siento interpelado. Tengo memoria, pero no me bloquea el razonamiento y la sensibilidad y me duelen. Cada golpe, cada
bocinazo. Aunque sea en Pocitos y Punta Carretas.
Y me pregunto, que es la tarea más
difícil de todas, preguntarse ¿Qué pudimos hacer mejor? ¿Qué tenemos que
hacer mejor de aquí en adelante? ¿Cuáles deben ser nuestros desvelos y nuestras prioridades? ¿Es solo por el ajuste o como quieran llamarlo, que suenan las cacerolas, que tanta gente en el taxi, en el boliche, en las redes está con bronca? ¿No habrá una suma de causas, de fallas que
se acumulan en ese punto?
Y me interrogo sobre todo por el futuro,
sobre lo que le diremos y sobre todo sobre lo haremos desde el gobierno, desde los gobiernos departamentales.
Las cacerolas y las bocinas se pueden
despreciar, explicar, olvidar o directamente archivar. Yo con mi
banderita descolorida y vieja, voy a sentirlas sonar en el fondo de mis
ilusiones, de mi sensibilidad, primero humana y luego, bastante luego política. No sonaron por hambre o por necesidad, incluso en algunos casos sonaron por egoísmo, pero siguen siendo mis vecinos, uruguayos con los que comparto mi vida, las calles, las veredas y sobre todo la gran
ilusión nacional. Aunque sean diferentes".





Esteban Valenti -- uy.press / Agencia uruguaya de noticias

sábado, 23 de abril de 2016

La falsa medida frenteamplista. Mauro Mego





Hay algo nefasto. Diría que hay dos cosas terribles para la izquierda uruguaya: El izquierdómetro y el frenteamplistómetro. Ambos elementos, está claro, no tienen entidad física, pero si discursiva, política. Aun así causan un daño tremendo.
Ambos se usan en distintos sitios. Se usan hacia el seno de organizaciones políticas, se plasman a veces a través de medios de comunicación, se manifiestan en las redes sociales, y hasta en diálogos lisos y llanos, cara a cara. Han servido para todo, para objetivos razonables y para otros disparatados. Pero, ¿Dónde radica el drama de este asunto? Creo que estos elementos vulneran, en primer lugar, al sentido frenteamplista (al genuino, no el que “yo creo” que es) y en segundo orden integran una categoría alejada de la realidad uruguaya (la de todos los días, la de la calle, no la de los micro-universos políticos). Vulnerar ambas cosas corre el riesgo de  socavar las bases de un proyecto político que debe obligatoriamente leer la realidad lo más cerca posible.
Cuando algunos dirigentes, personalidades, militantes o simples ciudadanos categorizan, etiquetan, encajonan, empiezan a desarticular y erosionar la unidad de la izquierda uruguaya, aun cuando se intente barnizar con un aparente interés por preservarla. El Frente Amplio fue en 1971 una alianza de diversos sectores progresistas de la sociedad, pero que no nació para cerrarse en eso. Continuaron a lo largo de los años incorporándose otras visiones, otros orientales, provenientes de distintas culturas políticas, ya sea desde una tradición de izquierda como desde los mismos partidos fundacionales. Soy un férreo opositor a esa idea de que existen “puros” e “impuros” frenteamplistas. Considero que la idea se refleja en la praxis  más que en el discurso o en los antecedentes, aquello de que “las credenciales se renuevan todos los días”. Creo que el Frente Amplio, excesivamente sectorizado pero por otras razones, es la representación más plural de dos cosas: el “progresismo” uruguayo (cada vez con menos lugar en otros Partidos) y de la propia sociedad uruguaya. Cuando se intenta decir que el problema del Frente Amplio son los “recién llegados” o los que “no son originarios” de aquel romántico 1971 se comete un grave error. Desconoce la estrategia de amplia acumulación que nos llevó al Gobierno en 2004 (Encuentro Progresista, Nueva Mayoría), desacredita compañeros y compañeras, así como sectores políticos enteros: se recrudece el fratricidio. Lo mismo sucede cuando se traza una distinción entre aparentes “contaminados” o “moderados” y los “revolucionarios”, “sólidos ideológicamente”. Es bien sabido que en el Frente Amplio coexisten todas las visiones, pero existen todas con vigencia-sí y solo sí- se estructura la resultancia, la síntesis que es el FA, que no es la preeminencia de ninguna visión particular sino la traza de acuerdos que sostienen su propia existencia viva. No es posible subrayar que las complicaciones del Gobierno, o de la propia fuerza política radican en un sector o en uno o dos compañeros. Eso es reducir una realidad en la que sobran ejemplos para desarmar esa hipótesis.
Así como existen visiones que se regodean en cuestionar sectores o compañeros por su “derechización”, casi siempre desde un perfil revolucionario posmoderno aparentemente incontaminado e híper-izquierdista, lo mismo sucede con aquellas visiones que con el mismo lente de juez implacable fustigan duramente a otros campos de la izquierda por tildarlos de “desprolijos”, “fuera de época”, “utópicos”, y con ello resuelven a quién echar culpa de todos los males tanto del Gobierno como de la fuerza política. Esto deja entrever, entre otras cosas, que siempre existen quienes encienden estas visiones por considerarse dueños absolutos de una interpretación histórica, así como sentirse dignos de un supuesto “frenteamplismo original”, de buen pedigrí.  Esto produce un daño incalculable. Lo dañan tanto los que se sitúan como la vanguardia salvacionista de la izquierda como quienes se sitúan en la única forma posible y exitosa de hacer las cosas. Cualquiera de los dos caminos es  injusto, malintencionado, o simplemente equivocado. Creo que muchas veces nos falta-aunque pretendamos hacer gala de lo contrario-ser más frenteamplistas. Lo digo incluso desde el lugar que me toca, perteneciendo a una organización política concreta del FA. Nos falta reconocer el proceso amplio y generoso que ha sido el FA desde sus inicios, que tuvo en hombres y mujeres provenientes de todas las tiendas,  mártires del proyecto político que ayudaron a parir. Nos falta ser humildes para entender que nadie conserva la gema identitaria del FA sino que esa se cultiva todos los días con acciones, se pertenezca al sector que se pertenezca. Se olvida la identidad uruguaya, sus sentires y sus demandas, se usan categorías de otras tierras, experiencias de dudosa aplicabilidad para este país, se olvidan las particularidades de nuestro trayecto histórico. Es hora de imaginar un futuro con una cantidad de militantes híper-ideológicos pero lejos del sentir popular uruguayo, de la agenda de la gente. Esa sordera intelectual es un pecado mortal para quienes pretendemos hacer cosas concretas que mejoren la vida de la gente, y sobre todo de los más humildes. Podemos imaginar también un futuro tecnocrático y ascético, en donde de tanta “prolijidad” no cambiemos nada o terminemos “en el mismo lodo, todos manoseaos”. Por una u otra vía, ambos son dramas terribles para la izquierda.
Apaguemos el izquierdómetro y el frenteamplistómetro. Demos paso a la charla, a la tolerancia, a la convivencia democrática, a la generosidad de abrirnos a la amplitud y diversidad que somos, dejemos las formas de disfraz de la soberbia. Nuestro Frente Amplio no es propiedad de nadie ni de nada y a la vez es de todos. Ya sea desde un lado u otro de los acusadores, lo central es armar todos los días eso que es el Frente Amplio del Uruguay, que por suerte no tiene igual en el Mundo.

domingo, 17 de abril de 2016

RICHARD READ "Tengo diferencias y las digo, no se crece en el club de focas que aplauden"



 "Los cambios para los que están en la lona se siguen postergando". Foto: Francisco Flores.

"Era más fácil ser oposición que ser gobierno y aquello que nosotros
criticábamos hoy lo estamos viendo desde el gobierno. Esas cosas que
reclamábamos como cosas de la derecha las tuvimos que sufrir en carne propia, por ejemplo, en la enseñanza con el servicio esencial. No solo cambió el contexto sino también hay un problema en los cuadros de dirección. Me parece que hay un desgaste y una desvinculación con el uruguayo de a pie".

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 "Hoy las instituciones más creíbles del Uruguay son los bancos y las que aparecen últimas son los sindicatos. ¿Nadie se pone a reflexionar por qué la población nos ve en el último lugar? Creo que no hay crítica o autocrítica, creo que el statu quo pesa y se ha instalado como un gran comité de base que son los puestos rentados".
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"¿Necesitan que los vote poca gente para darse cuenta? ¿No alcanzó con las elecciones del BPS? ¿No alcanzaron las elecciones departamentales de 2010 en Montevideo cuando hubo muchísimo voto en blanco? No le quito mérito a él, pero ¿no alcanza con los 200.000 montevideanos que votaron a Novick? ¿Qué otras señales precisan los cuadros políticos para revisar un poco los comportamientos? Si solo falta que vote poca gente en las internas para que se den cuenta estamos en el horno. Hay señales mucho más fuertes".

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"Tengo diferencias y las digo, no se crece en el club de focas que aplauden" | Noticias Uruguay y el Mundo actualizadas - Diario EL PAIS Uruguay

lunes, 28 de marzo de 2016

Esteban Valenti advierte sobre derrota del Frente Amplio en 2019



"¿Es inexorable la restauración? En política nada, absolutamente
nada es inexorable, eso es lo que la hace maravillosa y divertida. Y muy
seria.

Tendría un aspecto positivo, algunos compañeros que se han
acostumbrado a que la política es casi sinónimo de algún cargo público importante y de confianza, tendrán que marchar precipitadamente hacia las 8 horas. No es tan grave, al contrario, es posible que nos volvería al llano de los comunes mortales y de la militancia voluntaria y popular. Se sabe, el roce con el cuero de los sillones causa escaras, no solo en el trasero. Las castas nunca fueron buenas, menos entre compañeros".





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Esteban Valenti -- uy.press / Agencia uruguaya de noticias

jueves, 10 de marzo de 2016

Para Vázquez, declaración del Plenario del FA no fue "oportuna"





Según informa Búsqueda hoy, al
mandatario no le pareció correcta la parte que alude a "debilitar la
institucionalidad democrática del país". No la consideró "oportuna ni
ajustada", señala un informe del semanario. Vázquez había respondido con la palabra "Bingo" cuando le preguntaron cómo impactaba la polémica de
Sendic en el gobierno, negándose a responder lo que no fuera
estrictamente institucional (aunque apoyando al vicepresidente).
De acuerdo a la información que maneja el semanario, a Vázquez no le cayó bien el episodio del título de Sendic, pero decidió escuchar sus argumentos tras entender que no había sacado provecho del supuestotítulo. "Esto ya está, Raúl., Hay que cerrar el tema", le dijo, según Búsqueda.
"Con Sendic hemos hablado normalmente como lo hacemos siempre. Sin problemas. El ejercicio de gobierno es siempre mirando hacia adelante.
Es como debe ser; no puedo perder el tiempo", dijo Vázquez al semanario.





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Para Vázquez, declaración del Plenario del FA no fue "oportuna"

martes, 8 de marzo de 2016

El camino del medio Mauro Mego



La izquierda tiene en su identidad una serie de nociones políticas, culturales, filosóficas e históricas que la distinguen de otros perfiles, podríamos llamarles “de derecha” o “conservadores”. La izquierda tiende a ir a las “razones profundas de los sucesos que emergen en una sociedad”, estudia y examina la Historia, el edificio social, las injusticias que encarna en su ADN nuestro sistema económico y social. De esa forma, los programas políticos de las izquierdas (concibiendo los diferentes grados, desde la social-democracia hasta la izquierda revolucionaria) ponen especial énfasis en las raíces de los asuntos de la vida social. De esa forma, por ejemplo, la delincuencia no es una “degeneración”, no es una alteración deliberada de un “orden natural”, no es un foco “indeseado y extirpable”; sino que hurgamos en las raíces, en su origen, en los “por qué” de los problemas humanos. No buscamos extirpar el fruto, sino cuidar la raíz. Vemos al Ser Humano como una víctima de las condiciones sociales, no como un gracioso victimario. La izquierda procura un cambio, en función de que concibe a la pobreza y la desigualdad como un asunto indeseable, vergonzoso, un drama moral. No cree en un “orden establecido e inmutable”, no cree que las “desigualdades generadas por la interacción social de nuestro mundo sean “naturales” e “incambiables”. Para eso, las izquierdas ensayan acciones, modelos,  para pulir o dinamitar las razones que generan dichas desgracias humanas. Lo hace bien fortaleciendo al Estado en Democracia, generando condiciones para “humanizar al capitalismo” o bien desarrollando acciones para sustituir el sistema por otro que no persiga la explotación del Ser Humano ni la consecución del lucro privado como horizonte. De estos ensayos hay para todos los gustos  a lo largo de la Historia humana, especialmente en nuestro “corto siglo XX”, como dijo alguna vez Eric J. Hobsbawm.
Nuestra propia identidad, brutalmente sintetizada en el párrafo anterior, se suma en el caso nacional a otra llaga feroz: el despliegue del Aparato Represivo en su versión de Terrorismo de Estado (1973-1985) que nos marcó para siempre. Este cocktail, nuestra perspectiva ideológica junto con las heridas de los años oscuros, son dos elementos centrales que habitualmente toman cuerpo cuando hablamos de una de las materias más sensibles para los Gobiernos del Frente Amplio desde 2005: La Seguridad.  Agréguese que también el Frente Amplio se dispuso administrar un Estado construido, dado, con culturas, con prácticas, con reglas ya establecidas, con vicios de décadas. El Frente Amplio no tomó el control del Estado “desde cero”, no dinamitó todo para empezar de nuevo, empezó desde dentro de sus entrañas a hacer cambios. Esos cambios han generado éxitos y fracasos, alianzas felices y feroces resistencias. Nuestra condición humana-dato confirmado-no es diferente por ser frenteamplistas, lamentablemente somos Humanos, con lo bueno y malo de ello, las tentaciones y las renuncias. De esa forma hemos ido aprendiendo como Frente Amplio sobre la marcha, hemos tomado idea de este universo. 
El Uruguay de los últimos-por lo menos-40 años ha venido sufriendo cambios dramáticos. Algunos relacionados con cambios globales, propios de los avances de las sociedades occidentales (tecnológicos, culturales, demográficos) y otros particulares de nuestra realidad nacional.  Un fuerte proceso de deterioro social y gradual ha sido la constante de  nuestro país. El Uruguay no es ajeno a los problemas sociales que han vivido nuestros grandes vecinos, Brasil y Argentina. Siempre hemos visto asombrados ambas realidades desde nuestra excesivamente autocomplaciente Historia particular. Hace ya muchos años que no somos la “Suiza de América”, dejamos de ser “el país de las cercanías” o “la sociedad hiper-integrada” de la que alguna vez habló Germán Rama. El Uruguay fue pacientemente desintegrándose  socialmente, fue viviendo un proceso de fragmentación social, marginación creciente que derivó incluso en la “territorialización de la pobreza”. No solo los orientales empezaron a diferenciarse respecto de su condición social, sino que ésta terminó haciéndose espacial (de ahí los llamados “barrios marginales” que no son otra cosa que el embrión de las favelas o villas vecinas). De esa forma, uno sabe hoy-y lo puede ver en los indicadores por zona o espacio- que no hay un solo Uruguay, sino que hay varios, tan distintos que asustan.  Espacios sociales con un comportamiento demográfico diametralmente opuesto al que a pocos metros se puede medir, niveles socio-educativos, formación, perspectivas, escalas de valores, hasta lenguajes y expresiones diferentes.  En simultáneo el afianzamiento de la dictadura del consumo (peligrosa en la medida de que no todos los actores de la sociedad tiene los activos para enfrentarla o asimilarla), la masificación de las drogas (de diferente calidad según el sitio social en dónde se esté), las “revoluciones ocultas” de las que habló C.Filgueira refiriéndose a los cambios en los arreglos familiares, y la desactivación creciente del Sistema Educativo Público, otrora el  gran agente integrador e igualador. El sueño vareliano se fue esfumando gradualmente y estos agentes ya no lograron contener el proceso anteriormente relatado. Ya no solo hubo Escuelas por un lado y  Colegios Privados  por otro, sino que-y a partir de la fragmentación creciente-también dicha división jerarquizante también se llevó al seno de las Escuelas Públicas existiendo “Escuelas de Contextos Críticos” y otras que no lo serían.
En este marco, tras el golpe fatal de la crisis de 2002 y subrayando que lo mencionado líneas atrás tiene también sus responsables políticos, es que hoy estamos mejor que América, pero peor que nosotros mismos hace 50 años atrás. En ese escenario se instala la Seguridad como política  pública.  El Uruguay de 2005 tenía una agenda urgente: la asistencia a los miles de compatriotas pobres, indigentes, desempleados y la re-construcción de la economía nacional. Fieles a nuestra idea de izquierda fuimos a poner al Estado al servicio del Uruguay real, el Uruguay que incluso comprobó que miles de orientales eran analfabetos,  a través del programa “Yo Sí Puedo” de alfabetización. Sí, leyó bien. Fuimos a la raíz de los asuntos, a no dejar solos a los orientales (en espacial Mujeres y Niños) que estaban demolidos por la crisis y no sólo por ésta.  Porque el drama-y continúa siendo- radica en que la fuerza reproductora de nuestro envejecido país la tiene los sectores más golpeados desde el punto de vista social, es decir, allí nacen los uruguayos del futuro. 
Pasado ese primer período de recomposición del Estado y la Economía, la Educación y la Seguridad se impusieron entre las urgencias. Y en la Seguridad la izquierda se encontró frente a un espejo complejo. Se pretendió instalar que el gran drama de la Seguridad eran los “menores”. Esa embestida conservadora fue demolida por la voluntad popular, porque en primera instancia bajar la edad de Imputabilidad no ha sido en ningún lado una medida eficaz, no resuelve, era más una apuesta de efecto  púbico que una solución. Pero cierto es que nos hemos visto conmovidos cada día más por noticias que nos muestran algunas cosas no menores. El nuevo Uruguay trae consigo también una “nueva delincuencia”. Entre el consumo de drogas, el fracaso del Sistema Educativo, las nuevas realidades familiares, el bombardeo del Consumo, la construcción de un “Yo contra-cultural” hecha por algunos sectores sociales han sido un combo explosivo. Adiós Robin Hood. Lo cierto es que no se puede soslayar que la izquierda ha aprendido. Dignificó el Salario Policial siendo de los de mayor crecimiento, dotó del más grande Presupuesto de la Historia al Ministerio del Interior, mejoró el ingreso y la formación profesional de nuevos Policías, se dispuso la dotación de nuevos servicios profesionales como Policía Comunitaria, Comisaría de la Mujer, inversión en Cárceles, la construcción del INR (Instituto Nacional de Rehabilitación)  para dar especificidad a la recuperación de los internos de nuestras inhumanas cárceles, combate a la corrupción y reestructura interna del Ministerio, etc. Pero más allá de estos datos objetivos que hacen que el Frente Amplio hoy tenga sobradas credenciales para hablar del tema en términos de gestión, el debate en la izquierda sigue. Y es raro.  Por un lado la derecha exige-y es lógico-más mano dura y acción represiva, pero por otro lado se expone desde la izquierda que existe un “perfil represivo”. ¿No es una de las funciones constitutivas de la Policía la represión del Delito? ¿A la Justicia y las Leyes nos les cabe también un papel central en este tema?
Hemos relatado al inicio el escenario social en dónde se desarrolla esta “nueva delincuencia”. ¿Qué códigos maneja? ¿Para qué delinque? ¿A quién roba o lastima? Allí el problema debe enfocarse abandonando la parcialidad con la que los uruguayos solemos ver la realidad. Así como  es costumbre que muchas veces  se vea, a modo de ejemplo, el problema ecológico sólo  desde la perspectiva biológica (dejando de lado variables tan claves como la civilización del consumo, el capitalismo, los avances humanos, la demografía, etc.) en este tema de la Seguridad se produce también un error similar. No podemos como agentes de izquierda abandonar la idea de que debemos  incidir en la realidad social para generar condiciones que permitan que no haya uruguayos que tomen el camino de la delincuencia, debemos seguir afinando políticas sociales, pero también debemos evaluarlas, corregirlas, sin tabúes, por el propio futuro de la izquierda. Pero tampoco podemos ingenuamente desconocer el nuevo carácter de los problemas de Seguridad, su nueva forma, sus nuevos códigos, su nueva praxis.  No puede plantearse siempre dicotómicamente  entre “más palo” o  “dejar hacer” y esperar que las políticas sociales resulten.  Hay que evitar que tenga seguridad quién pueda pagarla, hay que evitar canibalizarnos entre víctimas del sistema.
Hay visiones bastante intelectualistas, metropolitanas, que cruzan el debate público de Seguridad con argumentos bien válidos como los referidos. Está bien discutir y estudiar la realidad social, incidir en ella para construir igualdad de oportunidades; intervención social en los Barrios, acompañar a los niños que nacen hoy en el Uruguay, fortalecer la Educación. Está claro que los delincuentes que hoy tiran sin mirar con un arma de fuego son producto de décadas de destrucción del tejido social, y cuyos responsables políticos hoy se erigen en paladines de la gestión, pero también está bien que barramos sin piedad las bocas de Pasta Base que envenenan pobres, los exterminan. Claro que no es sencillo, y mucho menos en el marco de un Estado democrático, basado en las garantías y derechos individuales tanto como en la presunción de inocencia, pero es importante que desde una izquierda que debe administrar esta realidad ambas cosas se compatibilicen: una acción decidida sobre la sociedad, con el desembarco de todos los recursos en políticas sociales y económicas necesarios, pero también la consolidación de un sistema honesto y confiable de Seguridad Ciudadana, basado-como ha lanzado el Ministerio del Interior en el quinquenio anterior-en  la Convivencia Ciudadana, la interacción entre los actores que toman parte en la Seguridad pública a los efectos de ser eficientes en brindar las garantías para los ciudadanos uruguayos. Con especial previsión del peligro  que cuando la “inseguridad” ha crecido, la “soluciones” antidemocráticas tienden a aparecer en el horizonte discursivo, cuidado. Para cuidar la Democracia y construir un horizonte más justo es importante hoy tomar conciencia de la profundidad del problema. Primero debemos hacerlo desde la izquierda porque la derecha sabe muy bien su libreto y su programa está en ciernes. No podemos dejar que el futuro nos depare renunciar a nuestras Libertades (cómo ya se ha ensayado en otras partes del mundo) para atender los “peligros” sociales.  La realidad nos exige sensatez respecto ya no solo del diagnóstico, sino de cómo incidimos en una realidad llena de sinsabores y resistencias, con un Estado que muchas veces “patea en contra” y lleno de humanos, con lo bueno y lo malo de ello.
Afinemos nuestras políticas sociales, incidamos con mayor éxito en el Uruguay partido en mil partes de hoy, no le demos la razón a la derecha que afirma que es un  “gasto” todo el andamiaje social y económico que hemos puesto al servicio de los más infelices de nuestro país, pero también afinemos la confianza política, sin prejuicios filosóficos  ni ideológicos y encaremos con responsabilidad y eficacia la acción ingrata de combatir el delito contemporáneo y la consolidación de un modelo democrático pero firme que permita el pleno goce de nuestras Libertades pero cuidándonos más entre  todos los orientales.  Sin poses ni ingenuidades.

sábado, 5 de marzo de 2016

Constanza Moreira La oposición y los medios de comunicación armaron una estrategia contra Sendic que es “una bomba sobre la democracia uruguaya”


   Semanario Búsqueda.

Nº1857 - 03 al 10 de Marzo de 2016


Entrevista de Pablo Fernández y Daniel Lema


Fue la única que apareció en la conferencia y aguantó las ráfagas de los flashes. Ni siquiera estaban todos los dirigentes de la primera línea de la Lista 711. La senadora Constanza Moreira no dudó en ir para respaldar al vicepresidente Raúl Sendic. No pidió explicaciones. La líder del sector Casa Grande dijo en una entrevista con Búsqueda, que el Frente Amplio debió haber actuado más unido como respuesta al cuestionamiento que la oposición hizo de una de sus principales figuras. La oposición actuó en conjunto y armó un paquete que tiró como una “bomba sobre la democracia uruguaya”, opinó la senadora.


“Lo único que le cabe al Frente Amplio es respaldar a su vicepresidente”, según Moreira.


—Se cumple el primer año de gestión de Vázquez. Usted dijo en su momento que quería un nuevo gobierno del Frente Amplio y no un tercer gobierno. ¿Cómo analiza este primer año? ¿Es nuevo o uno más?


—¿Qué es lo que hace tan atípico este primer año de gobierno del Frente Amplio? Lo primero es el cambio regional. Cuando el Frente Amplio arranca en 2004, tenías el efecto dominó del giro a la izquierda del continente. Entra Lula, Kirchner, Tabaré y Evo. Ahora el gobierno gana, pero el primer año el panorama es muy sombrío políticamente para el prospecto de la izquierda latinoamericana, sobre todo por la victoria de Macri y la crisis brasileña y de Venezuela. Luego hay una perspectiva de crecimiento económico a la baja. Esos dos hechos le colocan unos límites grandes para ser nuevo, para ser mejor, para ser transformador, porque bueno, hay menos plata adentro y menos plata afuera. La característica de este gobierno es cómo mantiene lo que ha conquistado, cómo implementa algunas cosas extras con recursos más limitados que antes y evita la conflictividad social que se dispara con el período de retracción del crecimiento. No vas a poder hacer todo, vas a tener que elegir. En estos casos la precisión de tus elecciones es más determinante. Y controlar la conflictividad social que se dispara como consecuencia del enlentecimiento económico. Entonces, el primer año fue un año duro. La volatilidad enorme que va teniendo la opinión pública, la desconfianza hacia los gobiernos y la crisis de expectativas es tan grande que cada vez es más corta la luna de miel de los gobiernos, y en el caso de Frente Amplio no debería existir una luna de miel, porque no es que te casas por primera vez. Es un gobierno del Frente, ya vas por el tercer período.


—Usted dice que fue un año complicado. Algunos dirigentes oficialistas acusan a la oposición y a los medios de generar campañas desestabilizadoras. ¿Esos problemas no son del propio Frente Amplio?


—Esta afirmación la encuentro muy controversial. Son cosas distintas. Cuando la oposición juega encima del descrédito moral del partido de gobierno está haciendo un juego muy complicado, para cualquier país. Y eso es lo que pasó de alguna manera en la investigadora, ahí dije “vamos a ver cómo vivimos juntos después de esto”. Porque una cosa es tener una discusión política y otra llevarte a los tribunales. Ahí hay una jugada de la oposición distinta, ir a la denuncia penal. Eso empantana todo y todo eso va generando un desgaste de todas las instituciones políticas frente a la opinión pública. Ese es un juego de suma cero. Creo que la oposición está muy desgastada también, y entonces está desesperada y en eso el juego es el descrédito moral del Frente Amplio, sus personas, porque no hay gran discusión política. Porque si te acuso de mentiroso, se acabó la discusión política. Y los medios son los principales amplificadores de esto, en esto que yo llamo el efecto sangre. La oposición y los medios están jugando a este juego que no está bueno y advierto sobre eso: esto no va a terminar bien. Así no construís política y no construís democracia. Luego nosotros tenemos nuestros problemas. ¿Cuáles son? Nos quedamos sin conducción política, todo se desarmó al caer el cargo de Mónica y entonces el Frente está en un estado de debilidad.


—Usted advierte que estos cuestionamientos desde el punto de vista moral pueden terminar mal, pero tanto blancos como colorados dicen que el Frente Amplio hacía lo mismo cuando era oposición.


—No. Me parece que el Frente en la oposición siempre jugaba a tener mejores ideas de cómo conducir el país. El Frente creía que la inteligencia política la teníamos nosotros, no ellos. Y que si nos dejaban a nosotros, a través del voto, la oportunidad de demostrar lo buenos que éramos, íbamos a demostrar que éramos más buenos que ellos. Porque teníamos mejor diagnóstico, estábamos más cerca de la gente, representábamos a las fuerzas sociales de este país, a la clase media, a los intelectuales. En ese sentido, el Frente se sentía superior políticamente. Pero daba esa batalla y resistía los actos de gobierno, por eso hacía plebiscitos, referéndums, marchas. Era una resistencia a la agenda de gobierno, eso estaba bueno y para hacer eso el Frente necesitaba juntar mucha gente. El Frente Amplio reinventó la democracia directa para usarla como resistencia soberana a un gobierno arbitrario y jugó en el terreno de la política. El Frente acusando a los blancos y colorados de corruptos, de traidores; capaz que eso existía en algunos militantes, pero no era la postura general, la postura política el desprecio y el descrédito sobre el otro. Cuando se hizo la investigadora sobre Sol Petróleo y Ancap era un solo tema —acá metieron doce capítulos de muy distinto tamaño—, y las acusaciones no eran de ese tenor, (aunque) el Frente llevó el tema a la Justicia y esta desestimó la denuncia.


—¿Por qué está mal que ahora lleven el tema a la Justicia si en su momento lo hizo el Frente Amplio?


—Me parece que lo que muestran parte de los partidos tradicionales y sobre todo la derecha política, es que no te compiten más en el terreno de las ideas. ¿Por qué? Porque cuando vos mirabas la campaña electoral, ¿qué decían de distinto los otros competidores? Decían que iba a haber sistema nacional de cuidados, consejos de salarios. Eso es perder la lucha por las ideas. Al final había como una especie de sintonía programática. ¿Cuál era el caballito de batalla de la oposición? “Gestionás mal”. Entonces ahora dieron un pasito más: no solamente gestionan mal sino que además adolecen de fallas morales graves.


—En ese marco se da una situación con el vicepresidente Sendic. Primero lo de Ancap y luego lo del título de licenciado. En la conferencia que dio Sendic la semana pasada, usted fue de los pocos legisladores que estuvieron presentes. Estaban los de la 711 y usted. ¿Le llamó la atención que fuera poca gente?


—La primera cosa: ese día en particular y los que siguieron, sentí el alarido de la jauría contra una persona que además es el vicepresidente de la República. En ese sentido la condeno absolutamente. Pero es parte de este nuevo escenario que se está pintando en Uruguay, pintado con sangre. Si estuve allí fue para manifestar mi respaldo para con un vicepresidente de la República que estaba siendo atosigado de una manera cuasi desconocida en el Uruguay. Me impresionó la cuestión de los títulos. (El vicepresidente de Bolivia Álvaro) García Linera, Cristina Fernández y ahora Sendic. No sé qué pasa con los títulos, pero es como una estrategia también de descalificación moral del otro. No digo que haya una conspiración, pero hay tres episodios sobre títulos. Lo único que le cabe al Frente Amplio es respaldar a su vicepresidente. Está pasando una situación difícil y el Frente Amplio tiene que respaldarlo, nada más, punto.


—¿No le tiene que pedir explicaciones?


—Todas las explicaciones. Pero tiene que respaldarlo, es de tu familia política. Es un acto político indispensable, porque está después de Tabaré (Vázquez). Además tenés que respaldarlo porque sos un partido político y los partidos tienen que respaldar a los suyos; más allá de pedirle todas las explicaciones que se requieran. Esa me parece que debió ser la actitud y me parece que suman las dos cosas: lo de Ancap y lo del título.


Primero el cuestionamiento a la gestión de Ancap y ahora parece que Sendic miente a propósito de su título. Entonces si mintió sobre su título también mintió respecto de Ancap. Ese es el paquete entero armado y tirado como una bomba sobre la democracia uruguaya. El Frente tendría que haber actuado más unido en relación con Ancap y más unido en relación a su vicepresidente.


—¿Pero el hecho de que una persona de un partido político mienta sobre cierto tema significativo, no es importante para ese partido?


—Primero hay que ver lo del título, hay una reunión pendiente con Sendic. Después, la pregunta sobre la mentira es una pregunta moral. Yo pensaba en Clinton y en Bush. Vos tenés dos mentiras. El gobierno de Clinton había sido el período más floreciente de la economía estadounidense de los últimos años. Era un presidente súper, súper exitoso y con un gran carisma. Tanto es así que su mujer ahora está peleando por la Presidencia. ¿Con qué le dabas? ¿Le dabas con una discusión política? No, le dabas por otro lado y fueron a una cuestión muy, muy moral. Ahora, Bush mintió sobre la presencia de armas de destrucción masiva en Irak. Y esta es una mentira con consecuencias políticas claras. ¿Y alguien lo juzgó moralmente? Entonces yo creo que el Frente tiene todo el derecho a pedirle todas las explicaciones que quiera, pero lo tiene que respaldar, porque es el vicepresidente de la República y nosotros lo pusimos ahí. Y tiene que respaldarlo sobre todo porque la operación contra Sendic es una operación que mete a Ancap adentro y eso ya tiene una consecuencia política hacia futuro, que es el rol de las empresas publicas.


—El gobierno plantea poner técnicos al frente de las empresas públicas, cuando antes la discusión era sobre el papel que tienen en la distribución social.


—Claramente la designación de Jara (como presidenta en Ancap) quiere dar una señal en ese sentido. Yo nunca creo que la gestión deje de ser política. La gestiones siempre son políticas y tenés que tener claro los fines que priorizás. Hay un centro en la discusión que no estuvo en este debate y es que desde el principio el Ministerio de Economía dijo que necesitaba bajar el déficit y que las empresas publicas le aporten a rentas generales y que nos den un punto del PBI. Eso es mucha plata. Sobre las empresas publicas yo creo que hay dos o tres visiones. Esta el tema de que las empresas sean empresas del Estado cuya ganancia la utilice el Estado para políticas sociales, yo no estoy de acuerdo con esa visión, pero es una. Está la visión batllista tradicional de que las empresas públicas son servicios públicos para que les den a todos los ciudadanos los servicios en condiciones de igualdad. Después hay una tercera visión que es que las empresas públicas son un motor de desarrollo, en un país que tiene escasos agentes de desarrollo. La idea de que tengas a las empresas públicas como un motor de desarrollo está fantástica, pero yo creo que hay que tener una políticas de tarifas públicas. El Estado debería poder usar esta plata para volcar a rentas generales, pero vos tenés que dar servicios públicos de buena calidad y baratos.

domingo, 28 de febrero de 2016

La orquesta del Titanic No dejó de tocar Por Carlos Peláez


El fox de los ahogados sin consuelo
(Joaquin Sabina)

La orquesta del Titanic *



“Los músicos tocaron hasta la muerte” relató hace unos años Mary Hilda Slater sobreviviente de la tragedia del inmenso paquebote ocurrida el 14 de abril de 1912. Dos semanas después el padre del violinista de la Wallace Hartley Band recibió una carta de la empresa naviera. No era de pésame. La misiva decía: "Muy Sr. Nuestro. Estamos obligados a comunicarle que debe pagar la suma de 5 chelines que nos adeuda, tal como consta en la factura que adjuntamos, en concepto de gastos pendientes del uniforme de su hijo".
Esta imagen vino a mi cabeza reiteradamente durante la última semana a raíz de los insucesos que rodean a Raúl Sendic (h).
Primero con su pésima actuación como administrador de la estatal Ancap y ahora con el descubrimiento de que no tiene el título de Licenciado, que tan profusamente ha usado.
Y por más que hay quienes se empeñan en demostrar que nada tiene que ver una cosa con otra, ambos asuntos forman parte de lo mismo: la construcción de una mentira.
Como además hay otros que reclaman que “no se le pegue en el piso”, vale recordarles que no estamos hablando del hombre sino del ex presidente de Ancap y del actual Vicepresidente de la República.
Sus más cercanos dirigentes intentan convencer que todo se trata de una “conspiración de la derecha y de los medios”. Pero esta teoría hace agua desde el principio. Primero porque Ancap tuvo que ser recapitalizada en casi 900 millones de dólares y luego porque el mismo Sendic con 24 horas de diferencia dio dos versiones diferentes y contradictorias sobre su licenciatura.
Lo que no se pueden desmentir son los documentos. Estos revelan cómo durante su período al frente del ente, y los que siguieron con gente de su sector, se despilfarraron impúdicamente decenas de millones de dólares en circunstancias que ahora la Justicia deberá investigar.
Y también los archivos muestran cómo Sendic firmó documentos oficiales con un título que él mismo reconoció no tener y que además reclamó se mencionara al presentarlo (entrevista con Jorge Traverso)
Tuvo mil oportunidades para aclarar públicamente que no era licenciado como finalmente le reconoció el miércoles pasado a la periodista Patricia Madrid de El Observador. ¿Por qué permitió que continuara la mentira? es algo que está lejos de nuestro alcance precisar.
Pero de ninguna manera es un hecho menor como se intenta demostrar desde la 711. Por dos razones. Primero porque es un delito (Artículo 167 del Código Penal - El que se abrogare títulos académicos o ejerciere profesiones para cuyo desempeño se requiere una habilitación especial, será castigado con 20 U.R. a 900 U.R. de multa". Y art. 239 de la ley 9.155 - Falsificación ideológica por un particular. El que, con motivo del otorgamiento o formalización de un documento público, ante un funcionario público, prestare una declaración falsa sobre su identidad o estado, o cualquiera otra circunstancia de hecho, será castigado con tres a veinticuatro meses de prisión)
Segundo porque es inmoral. Le recuerdo a los amables lectores confundidos que la moral no trata sobre inspeccionar braguetas, sino que es el conjunto de normas socialmente aceptadas que determinan lo que está bien o mal.
Y sin dudas está mal que un gobernante se adjudique títulos que no tiene y encima mienta sobre ellos.

El problema de la orquesta

En tiempos contemporáneos rige la Ley Campoamor: “En este mundo traidor / nada es verdad ni mentira / todo es según el color / del cristal con que se mira”. Entonces, no deberían sorprendernos algunas reacciones.
Pero lo que esos mismos no alcanzan a comprender es que el paquebote construido en 1971 lleva rumbo de colisión. Mientras la orquesta sigue tocando, los marineros corren de un lado a otro y el capitán se niega a creer que el barco se le hunde.
No es sencillo entender como sigue esta historia. La Mesa Política del FA emitió señales de apoyo a Sendic promovidas desde el MPP. ¿Cómo quedará ese organismo si Sendic no puede probar que es licenciado? O peor aún, si alguien fuera procesado por el asunto Ancap.
Dos prestigiosos medios de comunicación vinculados a la izquierda como La Diaria y Brecha, señalaron jueves y viernes que el Presidente Tabaré Vázquez había manifestado su preocupación y malestar por la situación y en filas gubernamentales se calificó como “un horror”.
Los necios hicieron otra lectura. Primero descalificaron a esos medios y luego saludaron el “apoyo” de Vázquez a Sendic al dejarlo encabezar el próximo Consejo de Ministros. Se olvidaron que mucho tiempo antes el mandatario ya había coordinado la visita a varias escuelas en el día del comienzo oficial de clases a la misma hora de la reunión de ministros.
En acuerdo o desacuerdo con sus políticas, nadie puede calificar a Vázquez como un irresponsable. Ante sí tiene dos problemas graves: cómo resolver con bien para su gobierno y su fuerza política la gilada de Sendic y eventualmente encontrarse como vicepresidenta a Lucía Topolansky alguien que tiene poder propio y con quien discrepa en todo.
Esta no ha sido una buena semana para los frenteamplistas. El cruce en los debates es hiriente, malvado. Bastó con que alguien muy respetado, como el científico Héctor Musto por ejemplo, criticara a Sendic para pasarlo inmediatamente al bando enemigo. Lógica de fánaticos.
Y ese es el problema mayor. En la izquierda ha crecido la “barra de la Amsterdam”. Quienes todo lo ven como un asunto de camisetas o acaso un tema religioso: sólo creer.
Aquellos que intentan ponerle pienso son desplazados, acusados, señalados. La pregunta es entonces ¿cómo y con quién piensan ganar las próximas elecciones?
Porque en la lógica política de hoy todo se mide en votos, no importa qué votos. Ocurre que ni la institucionalidad ni la ética pública se miden en votos ni tienen dueños.
Fue justo parte de esta izquierda quien puso lo político sobre lo institucional, como si fueran dueños de la verdad absoluta. Despreciando además una construcción colectiva que respetó a cal y canto a las instituciones.
Una prestigiosa colega me recordaba: “Si los votos fueran los que santificaran a las políticas, la izquierda jamás se hubiera construido porque desde el 50 en adelante se pasó años sacando menos de 10% y después 18%.... No es un problema de votos. Es un problema de construir ciudadanía, comunidad, sociedad feliz....Y nada de eso se construye con mentiras”
El Frente Amplio sigue sin darse cuenta que el problema es interno. La derecha sólo disfruta.


(*) El título es una sugerencia de Fernando Santullo