Sorprende baja votación respecto a mediciones previas
Espectador.com
23.06.2013 | 21.20
El director de Equipos Mori, Ignacio
Zuaznabar, analizó para El Espectador la baja votación que tuvo el "acto
de adhesión" voluntario en el que los uruguayos decidían si se
realizaba un referéndum sobre la despenalización del aborto aprobada en
2012
Para Zuaznabar fue “bastante sorprendente” la baja votación “respecto a las expectativas y mediciones previas”.Según las últimas encuestas, de mayo pasado, entre un 46 % y un 53 % de la población rechazaba la despenalización del aborto, mientras que hasta un 44 % la respaldaba.
A la hora de estudiar el resultado, el consultor afirmó que hay que analizar cuál fue el comportamiento de los principales actores políticos en torno al tema. “Si bien los principales líderes políticos estaban en contra de la ley y a favor de esta convocatoria, a nivel de movilización política los partidos tuvieron un desempeño tímido. No tuvimos una gran convocatoria de parte de los partidos políticos, quizá porque en todos ellos había diferencias de opinión pero lo cierto es que este no fue un tema que haya centrado la agenda política”.
“Hay dos lecturas posibles. Por un lado, es un llamado de atención. ¿Qué puede estar pasando en un país en el cual los principales candidatos expresan una posición y el 90% de la ciudadanía no se expresa en la misma posición? Es un mensaje fuerte”, reflexionó el experto.
La papeleta de recurso de referéndum tuvo el apoyo de los precandidatos presidenciales del Partido Nacional, Jorge Larrañaga (Alianza Nacional), Luis Lacalle Pou (Unidad Nacional-Todos) y Sergio Abreu (Dignidad Nacional), del Partido Colordo, Pedro Bordaberry (Vamos Uruguay) y José Amorin (Batllistas de Ley), del Partido Independiente, Pablo Mieres, y del Frente Amplio, Tabaré Vázquez.
En tanto, los expresidentes Jorge Batlle y Luis Alberto Lacalle también votaron. No lo hizo Julio Maria Sanguinetti que apoyó la despenalización del aborto desde el vamos.
“Tampoco fue una bandera con la cual los principales candidatos se involucraran fuertemente en el debate en estos últimos meses y muestra la importancia que siguen teniendo en Uruguay los partidos políticos como agentes de movilización. Cuando los partidos políticos muestran intentos de movilización tímidos, la ciudadanía también actúa en consecuencia. Entonces, uno podría leer esto como un síntoma de debilidad del elenco político o como un síntoma de que en ausencia de una movilización fuerte de los actores políticos, la ciudadanía no logra activarse por sí”.
Zuaznabar también se refirió a la participación tímida de la Iglesia uruguaya. “No vimos de parte de la Iglesia uruguaya un nivel de movilización ciudadana como probablemente se hubiera dado en cualquier otro país de América Latina en el marco de un debate similar”, opinó.
Para Ignacio Zuaznabar no hubo apatía por parte de la población pues –explicó- es una sociedad con una fuerte conciencia política, pero reconoció que para las generaciones más jóvenes no valoran el instrumento del referéndum de la misma forma que las generaciones que padecieron la dictadura.
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