“No estamos en contra de que en un
momento determinado lo hagamos”, dijo la diputada Mariela Castro, hija
de Raúl y sobrina de Fidel, sobre la idea de instalar un sistema de
partidos en Cuba. En entrevista con No toquen nada Castro dijo que
Amnistía Internacional “no es reconocida en Cuba por mentirosos” y habló
de los avances de la isla en los derechos de los homosexuales.
Publicado el: 19 de agosto de 2013 a las 07:55Por: Redacción 180
Entrevista a Mariela Castro en el programa No toquen nada de Océano FM.
Joel Rosenberg: Nuestra hada madrina.
Así llaman los travestis cubanos a Mariela Castro, la hija del
presidente cubano Raúl Castro. Esto lo cuenta en una nota Mauricio
Vicent, un periodista español que estuvo radicado muchos años en Cuba.
La razón para que la llamen así es que Mariela es una defensora de los
derechos LGTB de diversos ámbitos de la sociedad. Es directora del
Centro Nacional de Educación Sexual. Desde allí plantea una estrategia
educativa para promover el respeto a la libre orientación sexual e
identidad de género. Pero además tiene otras participaciones en la
sociedad y es autora de libros, por ejemplo La transexualidad en Cuba.
Castro está en Montevideo para la primera conferencia regional sobre
población y desarrollo de América Latina y el Caribe.
En el caso de Mariela hay que zafar de
"hija de" y de "sobrina de". Acá es doble. En la descripción de Twitter
que ella hace de sí misma dice "Licenciada en educación en la
especialidad psicología-pedagogía, máster en sexualidad y directora del
CENESEX". Podríamos agregar diputada por La Habana, desde febrero de
este año.
Está la conferencia internacional
sobre población y desarrollo. Vamos a ubicar un poco esta conferencia y
lo que está señalando el grupo de alto nivel que trabaja para la
conferencia. En este punto podríamos empezar por decir qué es el grupo
de alto nivel, cómo participan, quiénes, para ubicarnos un poco.
Mariela Castro: El grupo está integrado
por 25 personas de diferentes regiones del mundo, que fuimos convocadas
por el Fondo de Población de las Naciones Unidas y los organizadores de
la idea, y que fueron varias instituciones, organizaciones,
personalidades, que pensaron en la importancia que tendría crear este
grupo de personas con experiencia de diferente tipo en la temática para
que a título personal participaran en la propuesta de estrategias de
comunicación, de búsqueda por ejemplo evaluación de cómo se ha ido
implementando el programa de acción de El Cairo, búsqueda de
información, de investigaciones y reuniones para facilitar el debate y
el diálogo en torno a todo lo que se está reflexionando a partir de la
revisión del programa de la conferencia internacional de población y
desarrollo 20 años después. El año que viene se cumplen los 20 años, se
están preparando los debates con vista a que ahora en 2014 se va a
revisar hasta dónde se ha llegado en esta agenda, cuáles son los nuevos
retos que se plantean, si la agenda no se cambia, sigue siendo la misma
porque hay muchos países que han avanzado pero otros incluso han
retrocedido, otros no han cumplido estos compromisos.
A grandes rasgos, aquella agenda de hace 20 años, ¿de qué hablaba?
A mí lo que me parece más importante de
esa agenda es que por primera vez creo que 179 países la aprobaron en
función de que se presentaran los derechos de las mujeres, de las niñas,
la importancia en la salud sexual y reproductiva y los derechos
sexuales y reproductivos para el desarrollo, es decir, para el
desarrollo no se puede dejar de contar con las problemáticas de
población y especialmente con estas problemáticas de la población que
habían sido mal enfocadas. Es decir, la humanidad ha ido evolucionando
en su manera de ir abordando los temas de derecho y desde esa
conferencia estas temáticas empiezan a visibilizarse en el campo de los
derechos humanos pero también en la definición de políticas para avanzar
en estos logros.
Ustedes plantean voluntad política que
es importante. ¿Cómo está la región en esa materia para estos derechos?
¿Hay diferencias grandes entre los países?
En general nuestra región no va bien,
América Latina y el Caribe. Desde los avances de nuestros pueblos hay
cosas valiosísimas, en el mundo académico, en el campo de los
movimientos sociales, hay un potencial humano maravilloso en este
continente desde hace mucho tiempo, pero un potencial humano que ha sido
reprimido fuertemente y en los últimos tiempos ha logrado algunos
avances fundamentales y sobre todo ha ayudado a algunos gobiernos que
han emergido con este programa que responde mucho más explícitamente y
honestamente al os intereses del pueblo, y si no lo hacen totalmente,
tratan de hacerlo.
Alicia Bárcena, desde la CEPAL,
destacó los avances en Uruguay: la interrupción voluntaria del embarazo,
el matrimonio igualitario. ¿Cómo los ve?
Me parece maravilloso que Uruguay haya
dado estos pasos, como los dios Argentina también en los temas por los
derechos por orientación sexual e identidad de género, y México,
Distrito Federal. Lamento mucho que en nuestra región solamente tres
países -Cuba, Guyana y ahora Uruguay- tengan normativas que apoyan al
derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo en relación con el
aborto y garantizar entonces los servicios de salud, de asistencia, que
requieren para que esto se realice en condiciones óptimas y no en
condiciones de alto riesgo que es una de las causantes de la mortalidad
de las muejres en la región.
¿Cómo están con el matrimonio igualitario? Es una propuesta que tiene varios años en Cuba, ¿aparece estancada ahora?
Cuba desde los 60 tiene un avance en los
temas de derechos de la mujer, infancia y juventud, amplio. En el tema
de los derechos sexuales y reproductivos relacionados especialmente con
orientación sexual e identidad de género, en los últimos años es que
hemos dado los pasos más importantes. Las personas transexuales desde
1979 son atendidas institucionalmente. En el 88 se hizo la primera
operación de reasignación sexual. Y se retomó, por algunos prejuicios
que generó en la población, en el 2008, ya con una normativa explícita
del Ministerio de Salud para proteger a las personas trans. Con relación
al matrimonio igualitario iniciamos una propuesta en las modificaciones
que hemos hechos al Código de Familia, un código aprobado en el 95, que
se incluyeran diferentes elementos relacionados con los derechos de
orientación sexual e identidad de género, incluyendo el matrimonio y la
adopción. Esto generó un debate complejo en la sociedad cubana, entre
varias instituciones, personas a favor y en contra. En Cuba se toman
leyes por consenso, se trata de primero establecer diálogo antes de
someter a aprobación una ley, y hemos estado en ese proceso.
¿Dónde están las mayores resistencias?
Es en toda la población. Entre las
personas jóvenes hay contradicciones, entre las personas de mayor edad
también hay contradicciones. Personas a favor, personas en contra. En el
sector religioso hay iglesias que trabajan junto con nosotros en esta
estrategia educativa de transformar la consciencia, de aceptar estos
derechos y respetarlos, pero hay otras iglesias que no están de acuerdo.
Ricardo Leiva: Me imagino que la Iglesia Católica no.
Pero la Iglesia Católica tiene una
actitud respetuosa. No está de acuerdo pero es respetuosa, es cuidadosa.
Pone sus puntos de vista pero no nos confronta, no nos pone
dificultades. En el mundo evangélico hay algunas iglesias que están
apoyándonos, muy revolucionarias, pero hay otras que están en posiciones
muy cerradas que han escrito al Partido Comunista, a la dirección del
país, que amenazan con recoger firmas. Yo creo que tienen su derecho a
decirlo y a hacerlo también, y nosotros también tenemos derechos a
seguir trabajando por que cambie nuestra consciencia y la población
comprenda. Y te quiero decir una cosa que sí he podido apreciar y que me
ha gustado mucho en este trabajo: la población cubana es muy sensible a
los debates de justicia social y cuando tú llevas el tema y lo enfocas
desde el ámbito de la justicia social, del derecho de las personas a
vivir, respetando las reglas de convivencia tanto de las personas
heterosexuales como de las personas homosexuales y trans, las personas
lo aceptan. Incluso he tenido debates con grupos de personas ancianas y
después de terminar me dicen "si eso me lo explican entonces sí lo
entiendo". No puedo marcar un grupo determinado de resistencia, son muy
heterogéneas las posiciones a favor y en contra dentro de la sociedad.
RL: Decías que las leyes se aprueban por consenso. ¿Qué se entiende por consenso en este caso?
Se trata de buscar mayoría. Pero no
siempre se logra, por supuesto. Eso no quiere decir que ahora la ley no
se vaya a hacer. Lo que se dice es que no es inteligente llevar a
aprobar una ley, a someter a votación una ley, cuando no hay seguridad
de por dónde va la mayoría en el debate. Es una tendencia que se ha
hecho cuando se quiere lograr que se considera que es muy importante
para la sociedad. Este tema se considera de mucha importancia y ya
incluso el Partido Comunista, explícitamente en su conferencia en enero
de 2012 aprobó por primera vez en nuestra historias, un objetivo
dirigido a luchar contra toda forma de discriminación, incluyendo entre
otras, explícita, la orientación sexual e identidad de género.
¿Es un cambio que se ve en la vida pública desde qué momento? ¿Puede haber una marcha por el orgullo gay?
Yo creo que a partir de que el CENESEX
comenzó a hacer una estrategia de comunicación incluyendo campañas de
bien público para promover el respeto. Comenzamos a hacerlas en 2005 más
o menos y ya empezamos a hacerlas más visibles con acciones culturales,
de más impacto, como la celebración del 17 mayo, Día Internacional
contra la Homofobia, que comenzamos a celebrarlo en 2007. Ya en 2008
comenzamos a hacer no un día, una semana. Ya casi es el mes de mayo
entero. Y eso nos puso en contradicción con el campesinado cubano porque
el 17 de mayo es el Día del Campesinado Cubano porque fue el día de
1959 que se firmó la primera ley de reforma agraria. Entonces teníamos
que hacer un discurso esclareciendo la importancia que tienen estos dos
actos de justicia social en la historia de Cuba.
¿Con quién más confrontaron por esto? ¿Con algunos viejos líderes de la revolución?
De esa parte se ha ocupado mi papá. Con
sus viejos colegas, viejos compañeros de lucha, él se ha ocupado de
dialogar sobre estos temas. Yo no he tenido que darle muchos elementos
porque eso lo había hecho mi mamá, pero bueno, yo le voy llevando
elementos tácticos y también consulta porque a veces desde su
experiencia, me dice "este sector está más complicado, trabajen con este
sector". Da pistas que agradezco mucho, además le gusta que le
consultemos los jóvenes, que le pidamos su criterio.
RL: En la familia la pionera de esta postura es tu mamá.
Es mi mamá. Mi mamá trabajó mucho en este
tema y le resultó muy difícil porque era una época más compleja. Había
menos argumentos científicos para enfrentar estos prejuicios, ahora hay
más argumentos.
¿Qué grado de persecución tuvo la revolución con los homosexuales? ¿Se llegó a la tortura?
Tortura no, porque se abolió la tortura,
porque fueron revolucionarios que fueron torturados quienes hicieron la
revolución. Es una de las primeras cosas que quitaron, la pena de muerte
y la tortura. Más adelante se tuvo que retomar la pena de muerte para
proteger... Se usó muy poco la pena de muerte, sobre todo para proteger
de los actos de terrorismo de estado, porque Cuba es víctima permanente
del terrorismo de estado perpetrado, organizado y financiado desde los
Estados Unidos.
¿Está de acuerdo con la pena de muerte?
A mí no me gusta pero tampoco le gusta a
mi papá, tampoco le gusta a los revolucionarios la pena de muerte, pero
es un recurso que se recuperó para defendernos en ocasiones extremas, en
situaciones que no queda otra alternativa.
¿A qué grado se llegó con la persecución a los homosexuales?
Cuba, como dice Eduardo Galeano, se mira
con lupa. La homofobia que existía en Cuba es la misma que existe en el
mundo entero desde toda la herencia cultura, sobre todo española,
africana y española, pero la que dominaba era la española, y se heredó
de Cuba un código social que penalizaba la homosexualidad en la cárcel.
Cuando empezaron a cambiarse leyes en la revolución se cambiaron muchas
cosas, sin embargo eso no se había cambiado. Hasta finales de los 70,
principios de los 80, las personas homosexuales, si eran acusadas podían
ir a la cárcel. Conozco muchas personas que sufrieron mucho en ese
sentido, y justamente al entrevistarme, el testimonio que he tenido de
estas personas a mí me ha dado muchos aprendizajes y mucha fuerza para
emprender este trabajo.
¿Qué cuentan?
Conozco un caso que me impactó mucho. Un
muchacho trans, que su papá era el fiscal de la provincia de Cienfuegos
donde vivía, y su papá se sentía en la obligación, pero además tenía el
convencimiento de que ser homosexual era cosa mala, entonces su papá lo
metió en una cárcel, y sufrió horriblemente. Me pidió incluso mediar en
la relación con su papá y lo hicimos. Para mí fue muy emocionante.
Eso es una forma de tortura también, ¿no? Meter a alguien en la cárcel por su orientación sexual.
No es una forma de tortura pero sí hace mucho daño. La tortura hace más daño todavía.
La tortura de estar preso por su orientación sexual...
Estar preso es espantoso, yo quisiera que
la humanidad encontrara otra manera de castigar que no sea la cárcel,
pero en ese caso no podemos decir que es tortura. Tortura es muy clarito
qué cosa es. Pero sí me parece que en una relación padre-hijo es más
doloroso todavía que esto haya ocurrido. El pobre viejito es víctma de
los prejuicios también. Pude dialogar con los dos, ponerlos en contacto.
Llevé a su papá viejito a ver el espectáculo de transformismo donde
actuaba su hijo. Me dí cuenta de lo difícil que era para el viejito y
cómo él también estaba sufriendo. "Yo empecé a cambiar gracias a tí", a
partir de unos programas de televisión en los que yo participé. "Con las
cosas que dijiste me ayudaste a cambiar, yo empecé a entender que
estaba equivocada". Y por eso aceptó que yo mediara en la relación entre
ellos dos. Pero es un ejemplo, porque hay muchas historias. Por eso la
población que sufre por discriminación homófoba agradece el trabajo que
estamos haciendo y además participa, porque nosotros formamos activistas
por los derechos sexuales en las personas LGBT, incluso organizando
estas actividades contra la homofobia en mayo, y se ha ido un movimiento
cubano LGBT, y yo le puse H también, porque las personas heterosexuales
también participamos.
¿Cuál es la reacción de la gente en La Habana o donde se manifiestan?
Participan de una manera impresionante.
Participan del modo en que convocamos y la gente va incluso por
curiosidad, va para escuchar qué decimos, y cada vez es más masivo, y
esto se hace en todas las provincias.
La gente que está ahí ya te conoce.
Sí, claro. Hay quienes van por
curiosidad, para verme, pero entonces escuchan, ven, participan, ya
están participando más las familias, hemos creado un espacio de
consejería y orientación jurídica a la población en temas de derechos
sexuales y lo que nos llega al CENESEX, que no es todo lo que hay en el
país, hemos podido apreciar que en los lugares de mayor vulnerabilidad
de los derechos sexuales están sobre todo, por homofobia, en la familia
principalmente y en el sector laboral. En el sector laboral es ilegal; a
través de nuestra intervención se han sancionado directivos que han
violado los derechos de las personas por homofobia, se han tomado de
medidas. No hemos tenido que llevar a nadie a juicio porque las
instituciones reaccionan positivamente a nuestra solicitud de atender de
las problemáticas a partir de las cartas que nos llegan de las personas
cuyos derechos son vulnerados. Y la familia es una cosa muy dura, tanto
que este año en la jornada contra la homofobia la dedicamos a la
familia, a involucrarla más. "Por una familia libre de homofobia y de
transfobia".
Cuando se habla de cambios, yo leía
esa nota de Mauricio Vicent, un pedacito, hablaba de una "segunda
revolución". Se escucha también algunos discursos que quizás sorprendan
un poco o sean nuevos en Cuba. El año pasado María Castro estuvo en
Estados Unidos, ya había estado en el gobierno de Bush incluso, se armó
alboroto el año pasado porque estaba Obama...
Porque estaban las elecciones, estaba todo caldeado.
En una entrevista con Democracy Now,
dijo Mariela Castro: Para Cuba quiere que se fortalezca un sistema
socialista con mecanismos cada vez más democráticos y participativos.
¿Cuáles serían esos mecanismos?
Que los mecanismos instalados funcionen.
Porque por ejemplo, el sistema electoral, hay todo un grupo de
estructuras generadas por la revolución que propician la participación
activa y consciente de la población en distintos ámbitos.
¿Pero hoy es verdaderamente participativo?
En algunos sectores sí, en otros no. En
algunos momentos hay más participación, en otros momentos el nivel de
participación no me satisface. Entonces por ejemplo en las políticas de
juventud, hay varias organizaciones de jóvenes, está la Unión de Jóvenes
Comunistas, está la Federación de Estudiantes Universitarios, la
Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media, otras organizaciones,
pero hacen sus congresos cada cierto tiempo, evalúan sus retos,
establecen sus políticas. Ese mismo proceso, a veces yo veo que tiene un
mecanismo de participación pleno y otras veces no me parece tan
participativo. Es decir, formalmente participativo sí, pero trabajando
lo participativo, que me apasiona, yo veo que hay muchos elementos que
no se pueden quedar en el aire. Lo participativo no es una abstracción,
es una realidad en la que se va aprendiendo en la práctica. Si tú no
introduces nuevos elementos de análisis, nuevos elementos para la toma
de consciencia, la participación puede ser un ejercicio de reproducción
de prejuicios o de reproducción de viejos mecanismos. Lo participativo
no es solamente estar en el debate, es mucho más que eso, es introducir
reflexiones, introducir nuevos puntos de vista.
RL: ¿Se reflexiona sobre qué efectos podría tener romper el esquema de partido único para incentivar más la participación?
Bueno, pero el partido único es muy
participativo e inclusivo, y en Cuba no lo inventó Fidel como se lo han
atribuido, fue el recurso que encontró José Marti para lograr a través
de la unidad la plena independencia de Cuba al sistema español. Se creó
el Partido Revolucionario Cubano, eso unió todas las fuerzas para el
salto cualitativo en la lucha por la independencia.
¿Qué beneficios tiene hoy?
A veces es muy difícil ponerse de
acuerdo. Ustedes lo viven. Y a veces tiene que haber una autoridad
histórica o una autoridad moral, tanto organizativa, que un poco
propicie el escenario del debate para la toma de decisiones. Porque si
no hay respeto al grupo organizador no se puede avanzar.
RL: ¿Pero la única forma de lograr eso es con un partido único? ¿No puede haber un sistema de partidos?
Perdón, podría ser. Yo creo que no
estamos en contra que en un momento determinado lo hagamos. El partido
único es un recurso frente a una situación de hostilidad permanente.
Cuando nosotros dejemos de ser un país bajo asedio permanente con el
bloqueo económico-financiero y comercial que es fuertísimo, con campañas
a través de los medios de comunicación de hostilidad, de
desvalorización, de mentiras, porque es una campaña de mentiras
permanentes que hay en torno a Cuba, que además en red, en todos los
medios más importantes del mundo dicen el mismo guión. Se ve que lo
escriba una misma persona y todos dicen lo mismo, los periodistas
preguntan lo mismo.
¿Eso se defiende con partido único?
Hasta ahora el partido único ha sido
garantía para el socialismo, de unidad nacional, ha sido garantía para
tomar decisiones colectivas, ha sido fundamental para defendernos,
porque ha habido momentos en que la situación ha estado tan, tan crítica
bajo amenazas de intervención militar de los Estados Unidos, cuando
fuimos abandonados por el campo socialista, y hubo que tomar decisiones a
un nivel pequeño de aparentar que Cuba estaba apoyada por el campo
socialista, ya no lo estábamos apoyados por la Unión Soviética antes de
que cayera el Muro. La caída del Muro se veía venir en Cuba, y nos
preparamos para las situaciones más difíciles. Por eso resistimos.
Más allá de los medios internacionales
también hay expresiones de organizaciones internacionales como Amnistía
Internacional que señala en 2012 que "la represión del gobierno cubano
continúa y se tradujo en cientos de arrestos y detenciones breves. Los
periodistas y disidentes políticos sufrieron hostigamiento e
intimidación a manos de las fuerzas de seguridad y de partidarios del
gobierno que actuaban con la aquiescencia de éste". Sobre Amnistía y sus
informes, que sigue sin sede en Cuba...
No, Amnistía Internacional no es
reconocida en Cuba por mentirosos. Son absolutamente mentirosos,
manipulados y manipuladores en función de los intereses del poder a
nivel internacional. Tuve discusión con gente de Amnistía Internacional
en Nueva York y les dije: "ustedes son mentirosos, despreciablemente
mentirosos".
¿Pero quiénes? Acá en el país son muy respetados.
En el caso nuestro no. Primero, nunca denunciaron...
¿No hay persecución de la oposición?
No, y te lo voy a explicar ahora.
Primero, ellos nunca han denunciado el bloqueo. Ahora fue que lo
denunciaron y se limpian con eso. Pero después de 50 años hablan del
bloqueo. Nunca denunciaron los actos terroristas de los que en Cuba hay
más de 5.000 víctimas entre muertos y heridos. Nunca denunciaron las
campañas mediáticas, por decirles de alguna manera, para desacreditar a
Cuba y poder justificar el bloqueo y todas estas cosas que hacen.
¿Pero lo otro que denuncian es cierto?
No es cierto. Ellos no denuncian tampoco
ni lo han hecho todavía que el gobierno de los Estados Unidos tiene
dispuestos más de 20 millones de dólares con la expresión eufemística
"para el tránsito democrático en Cuba". Y con eso pagan grupos
mercenarios. En el mundo entero los grupos mercenarios son condenados a
la cárcel. Ellos inventan una disidencia que no existe.
¿Reporteros Sin Fronteras también?
También. Ha sido pública nuestra
confrontación con estas organizaciones. Se les paga. Y por Wikileaks ha
salido mucha información de cómo se les paga a estas organizaciones para
inventar una supuesta disidencia. Es muy fácil ser disidente pagado. Ni
siquiera tienen un programa de transformación, el pueblo no los
reconoce, no los respeta, porque se sabe quiénes son, son vecinos, se
conocen.
¿Y se puede expresar libremente?
Se expresan libremente, mucho más que nosotros. Publican por donde quieren.
Pero en Cuba. En un canal de televisión, en Granma, en Juventud Rebelde...
Mira, si fuesen opositores auténticos, a lo mejor, pero como tú vas a presentar mercenarios pagados para que digan mentiras?
¿Cómo se saca el carnet de opositor auténtico? En Uruguay cualquiera puede ser opositor.
Tenemos un sistema electoral diferente.
¿Pero cómo se considera al opositor si es auténtico o no?
En Cuba, un país chiquitico, todos lo sabemos.
Pero lo decide el gobierno.
Yo sé quién es mi vecino, tengo muchos
colegas vecinos, compañeros o no compañeros, que dicen opiniones muy
críticas. En algunas tienen razón, en otras no, y por eso no pasa nada. Y
tienen hasta periódicos digitales. Lo expresan en los debates públicos,
en sus centros de trabajo. Hay varios debates, hay muchos espacios de
participación en Cuba, incluso de organizaciones no gubernamentales.
Todos participamos en más de una ONG y expresamos nuestro criterios y
los publicamos en los periódicos digitales, en las web que vamos
creando, y tenemos posiciones críticas, ¿quién no va a tener una
posición crítica en su propia sociedad? Es imposible estar conforme con
todo.
¿Ellos pueden hacer un acto en una plaza en La Habana?
Lo hacen.
¿No son perseguidos después?
No.
Lo denuncian estas organizaciones.
Pero son mentiras, si el gobierno los protege. Telesur sí ha sacado todo eso. Es la única que lo ha filmado y lo ha sacado.
Telesur va del otro lado. Tiene una muy buena relación Venezuela con Cuba.
Pero van y filman la realidad, son
objetivos y se ve. Las distintas organizaciones se ponen de acuerdo y el
gobierno las acompaña para que no haya reacciones de la población,
porque la población reacciona ante la mentira y la falsedad. Por eso se
les puso protección, porque hubo una ocasión en que la población empezó a
reaccionar ligeramente con violencia, a decirles cosas, a gritarles, a
empujar, y empezaron a hacerles protección.
¿Hay algún opositor de los auténticos, que no sean pagos y mercenarios?
Sí. Hay personas, no grupos.
¿No se formó ningún grupo en tantas décadas?
Se agrupan para debates en temas
diversos. Pero programas específicos de transformación, nadie ha
presentado un programa. Cumplen órdenes, responden a un guión
preestablecido, tienen que leer determinados textos. Es público que son
grupos que han estado infiltrados por nuestros servicios de seguridad y
terminan siendo incluso infiltrados los jefes de la organización. Y al
cabo de los 30 años han salido a la luz y han contado todos los
mecanismos cómo han sido, han presentado todas las pruebas y evidencias
de cómo son grupos pagados por el gobierno de Estados Unidos.
¿No hay ninguno que no?
Los que son declarados mercenarios sí.
Pero otros no hay.
Otros no, los que no son pagados no son mercenarios, son por su cuenta.
Pero no tienen grupos.
Son grupos, ¿qué ser humano no se agrupa para debatir sus puntos de vista?
Ayer usted decía en TNU "ser
socialista es ser disidente, alternativo, desobediente, atrevido". ¿No
le cabe esta etiqueta a quienes hoy son disidentes en Cuba?
No les pasa nada. Incluso ahora están viajando. Ahora que cambió la política migratoria están viajando por el mundo.
Pero son disidentes, alternativos, obedientes, atrevidos.
No, al contrario, ellos responden a los mecanismos de poder establecidos.
¿A cuáles?
A los que impone el imperialismo de un
país foráneo que además nos hostiga y trata de dominarnos, que impuso
las dictaduras militares en todo este continente que trajeron la muerte,
la tortura, las desapariciones.
¿Por qué Cuba no es una dictadura hoy?
¿Qué entiendes por dictadura?
Un partido único que no permite la libre expresión, que tiene la prensa oficial solamente.
Eso no es dictadura.
¿Hay otra prensa que no sea la oficial?
Hay muchas prensas.
Hay muchos tipos de dictaduras.
¿Cuáles por ejemplo?
La de Pinochet es diferente a la dictadura de Cuba, sin lugar a dudas.
Por supuesto.
Pero si usted no tiene libertad de
información porque no hay prensa que no sea oficialista ya se le está
restringiendo a la población de algo básico.
Pero en Cuba hay una cantidad de prensa
que no te podés imaginar, tanto impresa como digital. Un montón de
publicaciones seriadas.
Yo solo vi Granma y Juventud Rebelde en la calle.
Esos son los diarios oficiales del
Partido Comunista y la Unión de Jóvenes Comunista, pero hay muchos
otros, está la de los sindicatos, de las organizaciones de masas, hay un
montón de periódicos...
Pero es oficialista.
No es oficialista porque responde a las
estrategias políticas de esas organizaciones, incluso organizaciones
científicas, no gubernamentales, las iglesias, tienen sus periódicos,
sus espacios en internet. Es todo un cliché que se ha ido construyendo
sobre Cuba pero fíjate, los cubanos no somos ovejitas obedientes,
nosotros no somos para nada así, somos muy críticos y somos irreverentes
cuando hay que hacerlo y damos los saltos cuando tenemos que hacerlo.
Un país que hizo la revolución que hizo no es un país obediente y
tranquilito y de ovejitas. ¿Tú crees que vamos a aceptar que se nos
imponga un gobierno que nosotros no elegimos?
Yo no mencioné en ningún momento eso.
Pero una dictadura es eso. Es algo que no eligió el pueblo, es algo que se le impone por la fuerza.
¿Cómo elige el pueblo? ¿Cómo te eligió diputada el pueblo?
El partido no puede postula y no existen
campañas electorales. Es el pueblo el que postula a nivel de barrio. El
50% postula el pueblo, el 50% las organizaciones sociales. El barrio
puede postular a Luisito Pérez que es el médico del hospital, que es muy
bueno, tiene vocación social, y dan todos los argumentos, y si el
barrio lo lleva a votación y están de acuerdo, adelante. Y queda en la
precandidatura. A mí me propusieron dos organizaciones sociales en
varias provincias en sus asambleas: la Federación de Estudiantes
Universitarios y la Federación de Mujeres Cubanas. Y lo supe porque me
vinieron a ver para pedirme si aceptaba. ¿Tú les vas a decir que no? Si
es una oportunidad que tengo para entonces a nivel de la asamblea poder
defender todas estas cosas que ando peleando hace tiempo. Tú aceptas y
entras en la candidatura y esto se lleva a votación en todas las
circunscripciones del país, las circunscripciones electorales,
custodiadas por las organizaciones de pioneros, los niños que son desde
más pequeñitos hasta la secundaria básico con un orgullo tremendo
custodian las urnas, es público el conteo, está lleno de periodistas, el
barrio está ahí observando y el conteo de votos es delante de todo el
mundo. Es absolutamente transparente. Quienes llegan como representantes
del pueblo es absolutamente genuino.
¿Han tenido verificación internacional esas elecciones, con aprobación?
Sí, llega un momento de gente a observar.
No sé exactamente pero es abierto, puede ir el que quiera a observan,
van los diplomáticos, van los periodistas, la prensa internacional, va
todo el que quiera a ver cómo ocurre y a donde quiera, no es organizado
ni pedir permiso ni nada. Entonces se publican en todos los lugares, en
la televisión, el periódico, una síntesis muy sintética de la biografía
de las personas, y el pueblo elige y valora. Y es muy observador sobre
si hacen su trabajo o no. Porque hay diputados que han quedado y después
no van ni a la asamblea, y después el pueblo más nunca los postula.
En octubre del año pasado pusiste en
un tweet: "El mundo entero observó un proceso electoral transparente,
riguroso, pacífico y democrático". Era Venezuela. ¿Puede haber
elecciones en Cuba como en Venezuela o como en Bolivia donde comparten
algunos lineamientos de ir hacia el socialismo, pero que son partidos de
oposición, con discusión, con prensa de oposición? ¿Te imaginás una
Cuba así?
No lo sé, no lo sé todavía, no lo he
pensado. Me parece que esos procesos son bastante desgastantes. Se
requiere recursos que podrían estar dispuestos para el pueblo. A mí me
gusta el proceso electoral cubano con algunos elementicos que me
gustaría perfeccionar.
Pero ese desgaste es la esencia de la democracia.
Bueno, en un país como el de ustedes no
queda otra, tiene que ser así, a menos que lo perfeccionen y hagan cosas
mejores. Pero en el caso de Cuba, que ya se pasó esa etapa...
¿Cuándo?
En 1959, cuando triunfó la revolución y
los partidos en el poder y los grupos económicos poderosos que dominaban
Cuba y que le sacaban todos sus beneficios a costa de la explotación
del pueblo se fueron de Cuba.
¿Y esta otra etapa de la revolución cuándo pasa?
No lo sé.
Porque tienen sus años también.
La revolución tiene etapas, ha tenido
muchas etapas, ha tenido momentos muy interesantes y complejos en los
que se han sacado nuevas tácticas de seguir la estrategia socialista. En
este momento estamos en una etapa de fortalecimiento de la estrategia
económica para seguir garantizando el proyecto social que se conquistó
con el socialismo, para seguir perfeccionando los mecanismos de
gobernabilidad democrática y participativa. Es decir, estamos en un
momento de ir perfeccionando lo que se ha ido creando, dejando atrás lo
que se considere que ya no es funcional a este proyecto y avanzar. No se
puede hacer socialismo si no es mediante la participación, y con la
participación se garantiza la democracia.
¿Qué hay después de Fidel y Raúl en Cuba? ¿Más revolución?
Más revolución, te lo aseguro, más revolución.
Mariela Castro, muchísimas gracias por este rato.
Gracias a ustedes también.
No hay comentarios:
Publicar un comentario