El precandidato blanco evitará tener una “obsesión rupturista”
En caso de llegar a la Presidencia de la República, el precandidato blanco Luis Lacalle Pou (Todos) no tiene previsto “desmontar” la política económica del gobierno del Frente Amplio y, por el contrario, continuará adelante con muchas de las grandes líneas trazadas durante los ocho años de administración de la izquierda.
“Una característica del enfoque que se está dando a los grupos técnicos (que trabajan para Lacalle Pou) es que no hay ninguna obsesión rupturista. La idea no es desmontar todo lo hecho por los gobiernos frentistas y empezar una refundación desde cero, sino recoger lo bueno que se haya hecho y corregir lo malo”, dijo a El Observador, Pablo da Silveira, un doctor en filosofía que coordina la agenda programática y el trabajo de los equipos que asesoran a Lacalle Pou.
Como ejemplo de ese cambio con continuidad, señaló que “no se está pensando en una derogación del IRPF, sino en volverlo un mejor impuesto mediante un régimen de tasas y exoneraciones que sea más inteligente y más justo”.
Esta actitud de Lacalle Pou de desmarcarse de la prédica tradicional del Herrerismo –conservadora y crítica de casi todo lo que surge desde la izquierda– no es nueva y ratifica su corrimiento hacia el centro político.
Lacalle Pou ya se ha manifestado a favor de despenalizar el cultivo personal de marihuana y se ha mostrado partidario de “socializar” el capital de las empresas públicas y de realizar una moderada reforma agraria. Además, el discurso “social” ya se ha hecho costumbre en el candidato que le disputa la interna blanca a Jorge Larrañaga (Alianza Nacional). “En nuestro país hay gente que no tiene cédula. Son indocumentados, NN. Ya no solo les falta agua y se cuelgan en los cables de la UTE para tener luz, sino que no van a la escuela y las ambulancias casi no entran en sus barrios. A solo 15 minutos de auto de este precioso barrio, se vive esa realidad”, ha dicho Lacalle Pou en una de sus charlas en Punta Carretas
Durante una entrevista con El Observador, Lacalle Pou advirtió además que los Consejos de Salarios –eliminados durante el gobierno de su padre, Luis Alberto Lacalle y reinstaurados por la izquierda–“llegaron para quedarse”.
Además, el diputado nacionalista no quiere aparecer como un político que vive cuestionando permanentemente la gestión del gobierno con palabras fuertes.
En un documento de circulación interna de Todos que se titula “Razones para un discurso de no confrontación” se advierte que “el Uruguay está cansado de confrontaciones, descalificaciones y acusaciones cuyo origen, en muchas ocasiones, vienen de décadas pasadas”.
En el escrito elaborado por asesores del postulante blanco se avisa que la candidatura de Lacalle Pou “busca innovar la forma de hacer política”, ya que esta actividad no se puede dividir “entre buenos y malos o entre iluminados y equivocados”. “Qué Uruguay se puede construir si durante la campaña electoral se edifica la personalidad de un candidato en base a agravios, palabras duras, descalificaciones o gritos de tribuna de partido de fútbol? ¿Qué innovación representa para un político subirse a un estrado a denostar a quienes, en el error o en el acierto desde el ejercicio del gobierno, aprobaron leyes, firmaron decretos, acordaron negociaciones o políticas con las que se está en desacuerdo?”, se preguntan los nacionalistas de Todos.
En cuanto al planteo económico de ese sector nacionalista, Da Silveira dijo que se está trabajando a partir de un modelo de “tres patas que procura integrar las políticas macro, las políticas sectoriales y el diseño de incentivos para alimentar esas políticas”.
“La idea es generar dinámicas económicas saludables, en lugar de generar dinámicas poco saludables y después intentar corregirlas. También hay una frontera importante con los técnicos que se ocupan de la parte social, porque esa es una preocupación esencial de Lacalle Pou: queremos eficiencia económica, pero eficiencia con rostro humano; los éxitos económicos no sirven si sacrifican a la gente o no impactan favorablemente sobre sus vidas”, resaltó Da Silveira.
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