Mujica cansado del "estupidismo permanente en Uruguay"

"Me quedé sin el respaldo de mi fuerza política y sabía que la política de confrontación es estupidismo, pero caemos en un nacionalismo pueril y no miramos cuál es la conveniencia global del país. Ahora, que vayan los señores a buscar diálogo. A lo hecho pecho, banquen. Lo hago para que el Uruguay aprenda una lección de carácter histórico", aseguró.

El presidente José Mujica reconoció que decidió autorizar el aumento de producción para UPM como un "acto de cansancio por el estupidismo permanente en Uruguay" y para escarmentar a quienes pedían mayor confrontación con Argentina, aunque ello valiera poner en riesgo las relaciones de los dos países.

El presidente José Mujica fue entrevistado anoche en el programa "Primera Vuelta", de Tevé Ciudad. En la nota, realizada por el periodista Ricardo Scagliola, el mandatario habló sobre la relación con Argentina, la megaminería y la gestión de la intendenta, entre otros temas.
A juicio de Mujica, la megaminería "es muy importante si Uruguay cumple lo que ha legislado". "Si guarda plata para reconstruir el suelo, la megaminería puede ser lo mismo que en Alemania y otros lugares, aprovechar recursos, multiplicar la energía y con ello la cultura y el conocimiento. Ahora, si se da el lujo de despilfarrar esos recursos, si no guarda para suturar las heridas y no educa a la gente...", advirtió.
"La preocupación del medioambiente es correcta pero tenemos que encuadrar las cosas como son porque eso de creer que algunos quieren el medioambiente y otros cualquier cosa, es ofender", sentenció.
El presidente habló luego de las responsabilidades de la izquierda actualmente. "La izquierda tiene que resolver algunos problemas: que la gente tenga trabajo, pueda comer, tenga vivienda y acceso a la cultura. ¿De quién aumentó más el salario? De los trabajadores más jodidos, para mí eso es izquierda en el plano en el que estamos. Si eso no tiene importancia, no somos izquierda. Ahora, la izquierda es una escalera, debe ir avanzando", advirtió.
La relación con Argentina
En la entrevista, Mujica reconoció que le faltó apoyo de su propia fuerza política en algunas cuestiones. "Por ejemplo en la política exterior. La fuerza política no aprende de la historia, necesariamente. Hay un libro de economía de Oddone que inicia el estancamiento y crisis del Uruguay con Argentina en épocas de Perón. Ahí se trancó el país, aunque no quiero simplificar, es mucho más que eso. Pasamos años que no venía ni el loro y pagamos un precio alto. No aprendimos la lección", dijo.
"A la Argentina no le vamos a cambiar el carácter, es como es. Tenemos que lidiar con ella porque los países no se mudan, y hay que lidiar y tener habilidad. Pero acá todos se matan por pegarle a Argentina y yo traté de llevar adelante una política de negociar. Cambié de política porque Uruguay no me respaldaba. ¿Dónde está la burguesía que se queja que no puede vender? ¿O los señores del turismo que se quejan y me piden un gesto? No, papá, se acabó, estuve dos años bancando en que me decían de todo. Me quedé sin el respaldo de mi fuerza política y sabía que la política de confrontación es estupidismo, pero caemos en un nacionalismo pueril y no miramos cuál es la conveniencia global del país. Ahora, que vayan los señores a buscar diálogo. A lo hecho pecho, banquen. Lo hago para que el Uruguay aprenda una lección de carácter histórico", aseguró.
"Están bien empantanadas las relaciones, y empantanadas políticamente porque yo me paré en la cuchilla", dijo Mujica, que confesó que la autorización a UPM para aumentar su producción la concedió "como un acto de cansancio por el estupidismo permanente en Uruguay". "¿Valía la pena poner en juego las relaciones?", le pregunta el periodista. Sí, señor, valía, porque hay que aprender en historia. Yo lo dije 4.000 veces. Me aburrí de decirlo, pero ¿dónde están los medios de prensa que hayan defendido esa política? Ahora soy yo el que tiene que cobrar. Y que me relajen, pero tienen responsabilidad por no ver más allá", concluyó.
 
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