Tabaré
Viera, Washington Abdala y José Amorín Batlle, ayer en la sala de
ministros del Palacio Legislativo. / Foto: Nicolás Celaya
Santiago Sánchez
ladiaria
Tras su viaje “psicodélico”, el Turco Abdala respaldó candidatura de
Amorín y prometió volver con una libertad que “antes no tenía”
El
mediático ex diputado Washington Abdala pasó a engrosar las filas de
Batllistas de Ley, sector colorado que respalda la precandidatura a la
presidencia de la República del actual senador José Amorín Batlle.
El respaldo, que Abdala adelantó mediante una publicación en su muro de Facebook, fue anunciado oficialmente ayer, en una pequeña sala del segundo piso del Palacio Legislativo colmada de dirigentes del sector.
La vestimenta de Abdala (que llegó con saco, corbata, vaqueros y championes) dejaba en evidencia el cambio de estilo respecto del otrora “soldado del Foro Batllista”, quien rompió su estrecha relación con el líder del sector Julio María Sanguinetti en 2008 y un tiempo después se alejó de la política y se volvió escritor, comediante y panelista en programas de televisión, entre tantas otras cosas. “Soldado no quiero ser más, ya salí con un montón de heridas”, bromeaba ayer en la previa del acto, para luego sugerir que ahora será “un obrero del partido, qué sé yo... una cosa así, un laburante”.
Luego, durante su oratoria, que fue sin micrófono, Abdala se mostró muy agradecido con Amorín y el otro senador de Batllistas de Ley, Tabaré Viera. Dijo que después de su viaje “medio psicodélico”, en el que estuvo por fuera de la vida política y pensaba que no iba a “volver más”, “cuando hacés el retorno es muy emocionante”.
También aseguró que vuelve “con esta libertad que antes no tenía”, y dijo que “rompió con mucha cosa” de su pasado como dirigente político. “Vengo hasta con algunas coincidencias con el gobierno. Perdí mucho dogmatismo”.
Consideró que el PC “no es un partido de derecha, donde nos quieren ubicar; por su historia no lo es, es un partido humanista, republicano, avanzado, es el típico partido que durante toda su vida peleó para que las clases medias tuvieran un sostén importante”.
Se desvió un poco de su discurso, y tras disculparse por hacer “terapia colectiva” planteó desafíos para el sector Batllistas de Ley: “Esta biblioteca del batllismo tiene que crecer, porque si no el PC no va a ser el partido que todos imaginamos, y esto no es en contra del otro grupo [Vamos Uruguay, liderado por Pedro Bordaberry], esa gente está trabajando, somos nosotros los que tenemos que crecer”.
Al finalizar el acto, sostuvo que todavía no tiene pensado si será candidato a algún cargo de representación nacional, y aclaró que eso tampoco le “saca el sueño”: “Quiero ir sólo a la interna a ayudar. No estoy con la conspiración de... esa mentalidad que antes sí tenía, de que si hacías esto y lo otro salís diputado. Yo hoy vengo a ayudar”.
Abdala será candidato a convencional y presentaría su propia agrupación en la elección interna de junio.
Amorín, satisfecho con la incorporación, opinó que el ex diputado es un “batllista”, un hombre “muy inteligente y con mucha experiencia, que ha hecho un viaje interesante: dejó la política, se alejó y hoy tiene una mirada distinta”.
El respaldo, que Abdala adelantó mediante una publicación en su muro de Facebook, fue anunciado oficialmente ayer, en una pequeña sala del segundo piso del Palacio Legislativo colmada de dirigentes del sector.
La vestimenta de Abdala (que llegó con saco, corbata, vaqueros y championes) dejaba en evidencia el cambio de estilo respecto del otrora “soldado del Foro Batllista”, quien rompió su estrecha relación con el líder del sector Julio María Sanguinetti en 2008 y un tiempo después se alejó de la política y se volvió escritor, comediante y panelista en programas de televisión, entre tantas otras cosas. “Soldado no quiero ser más, ya salí con un montón de heridas”, bromeaba ayer en la previa del acto, para luego sugerir que ahora será “un obrero del partido, qué sé yo... una cosa así, un laburante”.
Luego, durante su oratoria, que fue sin micrófono, Abdala se mostró muy agradecido con Amorín y el otro senador de Batllistas de Ley, Tabaré Viera. Dijo que después de su viaje “medio psicodélico”, en el que estuvo por fuera de la vida política y pensaba que no iba a “volver más”, “cuando hacés el retorno es muy emocionante”.
También aseguró que vuelve “con esta libertad que antes no tenía”, y dijo que “rompió con mucha cosa” de su pasado como dirigente político. “Vengo hasta con algunas coincidencias con el gobierno. Perdí mucho dogmatismo”.
Algo habrán hecho
Ya en terreno político partidario, Abdala dijo que volvió porque sintió la necesidad de “defender al batllismo”. “El Partido Colorado [PC] es un gran partido y me duele verlo tercero, y para cambiar eso hay que laburar”.Consideró que el PC “no es un partido de derecha, donde nos quieren ubicar; por su historia no lo es, es un partido humanista, republicano, avanzado, es el típico partido que durante toda su vida peleó para que las clases medias tuvieran un sostén importante”.
Se desvió un poco de su discurso, y tras disculparse por hacer “terapia colectiva” planteó desafíos para el sector Batllistas de Ley: “Esta biblioteca del batllismo tiene que crecer, porque si no el PC no va a ser el partido que todos imaginamos, y esto no es en contra del otro grupo [Vamos Uruguay, liderado por Pedro Bordaberry], esa gente está trabajando, somos nosotros los que tenemos que crecer”.
Al finalizar el acto, sostuvo que todavía no tiene pensado si será candidato a algún cargo de representación nacional, y aclaró que eso tampoco le “saca el sueño”: “Quiero ir sólo a la interna a ayudar. No estoy con la conspiración de... esa mentalidad que antes sí tenía, de que si hacías esto y lo otro salís diputado. Yo hoy vengo a ayudar”.
Abdala será candidato a convencional y presentaría su propia agrupación en la elección interna de junio.
Amorín, satisfecho con la incorporación, opinó que el ex diputado es un “batllista”, un hombre “muy inteligente y con mucha experiencia, que ha hecho un viaje interesante: dejó la política, se alejó y hoy tiene una mirada distinta”.
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