Opinión Denunciar el holocausto palestino en la final de hoy Eduardo Sanguinetti

Publicado el 13/7/2014 - 7:00

La República

 

Filósofo, artista, activista político y social Eduardo Sanguinetti

 

Ante la atroz matanza del pueblo palestino, ninguna noticia y ningún comentario acerca de lo que sea tiene relevancia... sería trascendente que en la final de la copa del Mundo los dos equipos se manifiesten denunciando el holocausto de Palestina.

En mi sentir y pensar, dicho acto solidario, le daría sentido vital a la copa del Mundo, resistiendo incluso a la FIFA si fuese necesario.
La impunidad con que está accionando Israel tiene la complicidad de los mandatarios del mundo, quienes ya, aquí y ahora deberían cortar relaciones de todo tipo con este Estado. Si no lo hacen, no valen palabras de campañas políticas, candidatos cobardes ni presidentes funcionales a los genocidas. Es un buen momento para desobedecer a quienes detentan el poder. Ahora bien, si las poderosas corporaciones económico-mediáticas neoliberales no denuncian sistemáticamente minuto a minuto esta matanza ¿entonces? ¿Por qué no denunciar en la final de la copa del Mundo, ante la mirada de miles de millones de hombre y mujeres este holocausto?
La nueva ofensiva brutal de Israel sobre la desprotegida Gaza revela, una vez más, la soledad de los palestinos. No pueden contar con nadie que detenga a Israel. Nadie que se juegue, en contra de Estados Unidos, por la existencia del Estado Palestino. Una humanidad congelada y atemorizada ante el estado sionista; solo tímidamente se manifiestan desde las redes sociales, mientras los gobiernos no cortan relaciones de todo tipo con Israel, insisto. Creo sería una salida alternativa para cesar con este holocausto del pueblo palestino, llevado a cabo ante los ojos de toda la humanidad.
La construcción de un Estado Palestino está en punto cero. Existe el acuerdo de reunificación entre Gaza y Cisjordania, pero Israel no negocia con un gobierno nacido de ese acuerdo, porque Hamás no reconoce al Estado de Israel. Mahmoud Abbas ya dijo que el nuevo gobierno sí lo reconocerá, pero Israel usa cualquier pretexto para no negociar, sistemáticamente se niega a reconocer el Estado palestino.
La tremenda soledad en que el pueblo de Palestina asiste con pavor a su exterminio no tiene antecedentes en las últimas décadas de la triste historia de la humanidad. El derecho humano, aprobado hace décadas por las Naciones Unidas, de tener un Estado Palestino, al igual que existe el Estado de Israel, es bloqueado por el voto de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad y la ONU no hace nada para cambiar tal actitud, como así tampoco los estados miembros. Todos son cómplices de este holocausto.
“Lo más difícil es ser víctima de las víctimas”, decía Edward Said, y creo se podría aplicar al estado de las cosas en que hoy se debaten niños, ancianos, mujeres y civiles, siendo exterminados y torturados por Sion.
No seamos cómplices con nuestro silencio, asumamos en este momento histórico la actitud y aptitud de resistir al poder de los genocidas. Manifestémonos ¡ya! por un mundo donde quepamos todos en paz y armonía. Una revolución de paz para existir y de pan para comer. Creo que es la orden del día.