El Puerto de La Paloma se ha convertido en una parada excelente para las tortugas marinas. Allí encuentran aguas calmas, mayor temperatura y algas. Pero el dragado constituye un peligro concreto. El rol de la ONG Karumbé ante esta situación.
Adriana Pugliese // LPH
Agua, calma y algas
Las tortugas marinas pueden moverse varios kilómetros por día en busca de aguas calmas y comida, y una vez que las encuentran, allí se quedan. Esto es, justamente, lo que ocurre en el Puerto de la Paloma, lugar que se ha transformado en una parada excelente, ya que la temperatura del agua en esa zona es más elevada que en mar abierto y encuentran algas, un verdadero manjar para ellas.
Claro que no todo allí es positivo. Un puerto tiene sus riesgos: el dragado, los choques con embarcaciones, la contaminación - ya sea de ingesta de plásticos u otro tipo, entre otros peligros. Una de las zonas del Puerto donde hoy se encuentra el muelle de pesca artesanal, es el sitio preferido de las tortugas marinas que rondan nuestra costa.
Se viene la draga
En la última semana de febrero, autoridades nacionales se reunieron para oficializar el traspaso de 47 hectáreas del Puerto de La Paloma -que hasta ese momento eran gestionadas por la Dirección Nacional de Hidrografía-, a manos de la ANP (Administración Nacional de Puertos).
En la reunión, de la que participaron el Ministro de Transporte y Obras Públicas, Jorge Rossi y el titular de la Administración Nacional de Puertos, Alberto Díaz, este último expresó que lo primero que se realizaría, sería un “dragado en la zona del Muelle 3 para mejorar su profundidad”.
Para ello, entraría nuevamente en escena la draga…
¡Cuidado! Tortugas vivas
Andrés Estrades, Director de Karumbé, la ONG que rehabilita tortugas marinas desde 1999 explicó, en diálogo con La Paloma Hoy, que la primera alarma con respecto al dragado en el puerto, les sonó en 2011: “Ese año constatamos por primera vez cómo afectaba a las tortugas. Sobre todo la draga D7, que funciona desde un barco.” Estrades detalló que “al barrer el fondo, la draga succiona y despedaza a las tortugas, partiéndoles el caparazón, y matándolas en el momento. También hemos registrado mutilaciones de aletas.”
A relocalizar
Ante este peligro, ya en 2011 Karumbé habló con las autoridades encargadas del dragado: “Nosotros planteamos a los responsables de Hidrografía, un programa de relocalización de tortugas.”
El plan que llevan a cabo consiste en encontrar las tortugas en el puerto, capturarlas y relocalizarlas en una zona segura: “Entramos al agua con una red y las capturamos sin que se lastimen. Rápidamente, los animales son llevados a tierra y luego identificados mediante caravanas de metal, y foto-identificación.”
Luego, las tortugas son liberadas fuera del puerto, en una zona más segura. Algunas en la bahía, otras en Playa Los Botes: “Lo ideal- explicó Estrades - es relocalizarlas un poco más lejos, en el Parque Nacional Cabo Polonio, o en el área costero-marina protegida Cerro Verde… Pero, en definitiva, - afirmó -la idea es que las tortugas no estén o no ingresen a la zona portuaria mientras esté la operativa de dragado.”
Karumbé en el Puerto de La Paloma
El importante trabajo que lleva a cabo Karumbé puede verse fortalecido a partir de lograr una ubicación fija dentro del Puerto de La Paloma: Estrades nos explicó que esa propuesta está en curso. “Estamos esperando dos reuniones clave, con el Jefe del Puerto y con el Alcalde. Para ver definitivamente dónde vamos a ubicarnos”.
Imagen: Karumbé
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