Escribe
Juan José Pereyra Twitter@juano500
AUDIO
AL FINAL DE LA NOTA
(SE
PUEDE DESCARGAR)
Es
autor de varios libros de poesía y de canciones que están en la
cabeza y el corazón de la gente, como Los Boliches, interpretadas,
entre muchos, por Alfredo Zitarrosa y Yamandú Palacios. Gestor
cultural, bohemio, “soy el último dandy”, dice riendo.
Nació
en Rocha y fue a la escuela Ramírez. “Ahí nació la poesía”,
dijo al programa Hay otra historia de radio Fortaleza.
Ciudadano
ilustre de Montevideo, miembro de la Academia Nacional del Tango de
Argentina, gestor cultural, Nacho Suárez ha tenido una intensa vida
en la que creó mucho y conoció y trató a decenas y decenas de
artistas, escritores, poetas y hasta a un exiliado, “el Cholo”,
que terminaría sorprendiéndolo de una manera impactante. Era
compañero de ruedas de amigos, vino y mate cuyo nombre no conocían
que un día se fue sin avisar. Dejó dicho que no quería despedirse.
Tiempo después abrió el diario y leyó: Hernán Siles Suazo será
el nuevo presidente de Bolivia”.
Nacho
Suárez habló de todo, recordó sus inicios en la televisión ,de
sus programas donde tuvieron lugar los cantantes populares que nacían
con fuerza.
Contó
sus años de televisión y de crítico de arte en diarios y
semanarios , de sus programas de radio.
La
anécdota quizás más desopìlante : una noche con varios whiskys
arriba se fue con Ivan Kmaid “el gran turco”, al Hotel Cervantes
a pedir la habitación en la que habían estado Jorge Luis Borges o
en la de Julio Cortázar para hacerles un homenaje. Cuenta con mucho
humor cómo les fue con el (frustrado) homenaje.
“La
poesía para mí nació en la escuela Ramírez. Un rayo destrozó un
pino que estaba en el patio y el pino pasó a ser una leyenda para
las nuevas generaciones: “el árbol añejo”.
Su
maestro mandó hacer una redacción sobre el rayo y el árbol. Nacho
escribió un poema. Al maestro no le gustó, le discutió y hasta le
dijo que se retirara de la clase.
“Allí
estaba yo en el corredor, sintiéndome horrible. Con túnica
almidonada, moña azul enorme, zapatos lustradísimos y sintiéndome
muy mal, con una angustia tremenda. Y pasó lo que más temía:
siento los pasos detrás mío del director de la escuela”.
Era
el maestro Rosalío Pereyra, personalidad educativa a nivel de Rocha
y del país, profesor de Literatura y poeta.
Cuando
le preguntó qué pasó, el niño poeta le respondió: “hice algo
muy malo, el maestro me echó”. Le preguntó qué hizo y él
respondió : “un poema”. El director lo leyó y le dijo, “ven
conmigo”. Nacho pensó que eso era terrible porque a la dirección
llevaban a “los niños malos”. El director convocó a toda la
escuela al salón de actos y la desolación de Nacho niño crecía.
“Todavía me van a humillar ante todos”, pensó.
Ya
con todos los alumnos en el salón de actos, Rosalío Pereyra dijo
que en una comunidad todos somos necesarios, los panaderos, los
médicos que nos cuidan, los soldados que cuidan las fronteras. Todos
son fundamentales. Y también están los poetas. Los reuní acá para
celebrar que en la escuela tenemos un poeta. Acá tenemos uno y
escribió un poema que quiero que todos conozcan, dijo.
“No
pude leerlo, lloraba, me emocioné, todavía hoy, en este momento, me
emociono, así que lo leyó él”. dijo a Hay otra historia.
Ese
día nació el poeta con el respaldo de un enorme docente, también
poeta.
LA
CULTURA Y LA TELEVISIÓN
“Desde
que empecé en los medios hace cincuenta y cinco años años se
repite la misma frase : “Déjese de joder con la cultura Nacho.
Vamos a hacer algo importante. A la gente hay que darle mierda,
decían los gerentes y los yernos de los dueños que con un sí o un
no determinan la vida de tantos.
Tengo
el honor que me corrieran de todos lados y cuando me echaban por la
puerta yo me colaba por la ventana”.
Les
invito a escuchar la entrevista completa con el poeta Ignacio Nacho
Suárez.