miércoles, 10 de julio de 2024

ROQUE NARVAJA TENÍA RAZÓN./IGNACIO SALLABERRY

 


"Yo quería ser mayor/quería ser mayor/quería ser un hombre habilitado"


El trabajo cuánto más duro y a disgusto mejor, cuanto más cueste levantarse obligado por las mañanas para cumplirlo, más se estará cumpliendo con el propósito del hombre en su vida. Si, así, hombre con minúscula, las mujeres no trabajaban cuando se crearon estas máximas de la vida. O trabajaban en sus casas, a desgano también, con el agravante que no cobraban por dicho trabajo, más que lo que el hombre le daba para los gastos de la casa y algún regalo que le compraba de vez en cuando, además de vestirla claro está.


Esto que leíste no es machismo, es como estaba basada la sociedad, es como muchos padres (padre y madre), los míos por ejemplo, enseñaron a sus hijos que así es la vida, si uno se consideraba que quería ser parte respetable de ella. Todo lo que estuviera por fuera, sería mirado con malos ojos, menos, si ese alguien tuviese plata de antemano, o la hubiera ganado, sin importar mucho como.


Un cambio que se ha dado, porque el sistema lo precisaba, es que las mujeres comenzaron a trabajar en un porcentaje mayor al que antes lo hacían, eso trajo una nueva sociedad, que aún se está afianzando, lo que si no parece avisorarse, es que este cambio haya traído a más personas haciendo lo que quieren, sino por el contrario, ha aumentado el porcentaje de descontentos con las obligaciones laborales.


Planteada así la sociedad por estos lares, la diferencia entre un adulto y un niño es que ser adulto es ir a trabajar.


Si es a desgano mejor, si el poco sabor que se le encuentra es la repetición y los billetes a fin de mes, mejor.


Mientras el niño juega y cada vez menos, quiere entrar en ese mundo, dada la mala propaganda del mismo.


Ahora, ¿qué pasaría si el niño lograra hacer de adulto, lo que le gusta jugar de niño? Lógicamente habrá otros cambios, pero creo que será una transición que el niño-adulto no notará tanto. Si como la mayoría de las veces, termina haciendo algo obligado que está lejos de su gusto, aunque le encuentre sus cosas positivas, su vida será algo triste en el fondo.


Preparar a los niños para eso, para que sean felices en sus tareas de toda la vida, es lo que se debería hacer en las instituciones educativas. Eso, junto a la inteligencia emocional, son las acciones que nos pueden dejar un futuro de personas adultas, felices, no porque no vayan a tener problemas, sino porque lo que vivan, lo harán con otros cimientos emocionales, fundamentales para ver y hacer el mundo de otra manera, el nuestro ya lo recibimos así, y no lo hemos podido cambiar. Quizás este camino, sea un lugar interesante para transitar de aquí en más, si alguna huella queremos dejar.


"Ya no quiero ser mayor/no quiero ser mayor/prefiero ser un niño enamorado.


I.S.S.


Ignacio "Nacho" Sallaberry, diseñador gráfico, escritor, poeta, pintor. Ha participado de eventos artísticos como la intervención artística en Casablanca Paysandú, edición del libro de poesía "Sólo diré que no estás" editado por Abrace y el libro de cuentos "El error de la justicia y otros errores" editado por ARA.

En la pintura, ha ganado un premio por su exposición llamada Zita de Zitas, homenajeando la figura de Alfredo Zitarrosa (zitadezitas.blogspot.com) entre otras actividades artísticas que incluyen la música.

Hace un año y medio lleva adelante una emisora online llamada Tente en el aire, se escucha a través de tenteenelaire.com

Algunos de sus trabajos se comparten en este blog y otros los encontrarán en su blog letrasdetras1.blogspot.com

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