Reconocen el deterioro del vínculo entre gobierno y sindicatos
El Frente Amplio se enfrenta al divorcio con nuevo sindicalismo
El País
La relación de sectores del Pit-Cnt con el
gobierno se deterioró rápidamente. Exsindicalistas de izquierda dicen
que por la inexperiencia de los gremios de la educación se inician
conflictos con medidas radicales que luego cuestan mantener.
Valeria Gil
El hecho de que el Frente Amplio tiene mayoría
dentro del Pit-Cnt hacía suponer que la relación entre el gobierno y los
sindicalistas marcharía sobre ruedas. Sin embargo, la huelga que
iniciaron el pasado 20 de junio los gremios de la educación marcó "la
ruptura del idilio que se vivió entre el sindicalismo y el gobierno de
Tabaré Vázquez", dijo a El País el politólogo Juan Carlos Doyenart.
Por su parte, el director de Factum, Eduardo
Bottinelli, señaló a El País que durante el segundo gobierno del FA "se
complejizó la relación entre los sindicatos y la izquierda", la cual
antes de que la coalición llegara al poder "era sólida y con objetivos
comunes". Esto, debido a que los gremios reclaman "cambios en el modelo
económico, otro reparto de la riqueza y otro manejo del déficit", agregó
Bottinelli.
La última muestra del deterioro en las relaciones se
manifestó el lunes 15 en la sesión del Consejo de Ministros, cuando el
presidente José Mujica cuestionó a los gremios de la educación y dijo
que los sindicalistas "ya no son lo que eran" antes.
Y durante el acto por la Jura de la Constitución el
jueves 18 se transparentaron una vez más las diferencias con los
sindicatos, cuando no se les permitió el ingreso a Plaza Independencia y
fueron ubicados tras las vallas. Los sindicalistas manifestaron su
indignación por la medida y el presidente contestó que algunos de ellos
se "victimizan" y se "desubican".
El diputado y exsindicalista bancario, Víctor Semproni,
dijo a El País que los gremios deben adoptar medidas en grado
ascendente y "no pueden arrancar un conflicto con una ocupación". El
legislador sostuvo que es respetuoso del movimiento sindical, pero
afirmó que, en el caso de la huelga de docentes, "los más perjudicados
son los estudiantes por la pérdida de clases".
Para el diputado Jorge Pozzi, por años dirigente
sindical en la Federación de Obreros y Empleados de la Bebida (FOEB),
ciertos gremios cambiaron las formas de encarar sus reclamos.
"Hay algunos conflictos que arrancan con el pie a
fondo y que después cuesta mucho mantenerlos, porque se quedan sin saber
qué hacer. Pero no creo que esto tenga la magnitud de un titular que
afirma que el Frente Amplio ha perdido el control en los conflictos",
dijo Pozzi.
"Hay compañeros que hoy optan por llegar a lo que
antes nosotros usábamos como último método. Ahora primero ocupamos y
después negociamos", acotó Pozzi.
Una visión parecida sobre el tema es la que tiene el
senador y exsindicalista Daniel Martínez (Partido Socialista). "Recuerdo
que siempre el Pepe (José) D` Elía decía que un conflicto aunque se
gane si te aislás del pueblo lo estás perdiendo, un poco el mensaje era
que el movimiento sindical tiene algo mucho más permanente. Si la gente
no lo entiende terminás perdiendo. Entonces creo que esto es un poco lo
que ha pasado. A veces si te aislás marchás al spiedo", indicó.
"Creo que en algunos casos los gremios pueden tener
gente sin experiencia y para mí las medidas tienen que tener algún
objetivo y no solo alimentar la bronca. Lo que hay que buscar es tender
puentes, convencer y generar un diálogo que permita cerrar los
conflictos", dijo el senador socialista.
El exsecretario general del sindicato de municipales
de Montevideo (Adeom), Eduardo Platero, dijo a El País que "no es
discutible el derecho de los maestros de hacer paros", pero agregó que
los gremios de la educación sufren "un gran desgaste" y existe "una gran
enemistad con la gente".
"Me parece injusto pegarles, pero me parece doloroso
cómo se están autoflagelando los gremios de la educación", indicó
Platero en referencia a las escasas posibilidades de obtener un
incremento salarial por encima del adelanto del 3% concedido por el
gobierno.
Para el ya retirado exdirigente de COFE y fundador
de la Convención Nacional de Trabajadores (CNT), Luis Iguini, el
conflicto de la educación es una muestra de "la evidente inexperiencia
de una cantidad de dirigentes sindicales, porque en la lucha sindical es
tradicional que las reivindicaciones sean respaldadas por la gente
(...) Es decir que llegábamos a las medidas de lucha una vez agotados
todos los medios, porque la falta de un maestro por un conflicto implica
que el niño no va a la escuela".
"Hubo conflictos muy serios durante los gobiernos de
(Julio María) Sanguinetti, pero siempre tuvimos la visión de dónde
estaba la luz, pero ahora cuando se empiezan a manejar algunas fórmulas
de cómo financiar los aumentos para la educación veo la
ignorancia de algunos dirigentes sindicales (...) Ellos están obligados
a ir a estudiar y dominar los temas presupuestales y a no hacer
conflictos sobre los plazos de vencimiento", dijo Iguini.
El excoordinador del Pit-Cnt y actual vicepresidente
del Frente Amplio, Juan Castillo, tiene una visión diferente acerca del
movimiento sindical y las críticas que surgieron desde el gobierno.
Dijo que el Poder Ejecutivo no puede temer a los cambios.
"Si seguimos el razonamiento de lo que hoy opinan
algunos (en el gobierno), cualquier militante gremial podría estar
diciendo: `la izquierda no es la misma que hace 10 años`. Yo no hubiese
concebido encontrar discursos de dirigentes políticos de izquierda
tratando de generar sombra sobre la lucha sindical o dudando sobre la
veracidad de la misma, buscando una tercera pata en donde no lo hay. Yo
me preocuparía por el día en que los sindicatos no se movilicen",
sostuvo.
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