Después de reunirse con el canciller Timerman, el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri amenazó con volver a la Corte Internacional "si Uruguay decide unilateralmente” aceptar que la planta aumente la producción
El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri dijo que "si eventualmente se tomara una decisión unilateral, deberíamos analizar seriamente acudir nuevamente a la Corte Internacional de Justicia de La Haya".
Las declaraciones las hizo luego de reunirse con el canciller Héctor Timerman. En la reunión participaron también el intendente de Gualeguaychú, Juan José Bahillo, y el senador nacional Pedro Guastavino, informa La Nación en base a la agencia Télam.
"Si bien no hay una solicitud formal, nos preocupa enormemente la constante presión que hay por parte de la empresa al gobierno democrático de Uruguay", dijo Urribarri en conferencia de prensa después de la nombrada reunión y sentenció: "Argentina no autorizará ningún incremento de producción de pasta de celulosa a UPM".
Endurecimiento
El canciller Héctor Timerman dijo ayer a Radio Continental de Buenos Aires que su gobierno será “inflexible” para preservar el río que es de administración conjunta y comentó que la empresa extranjera “presiona” para conseguir un aumento de sus ganancias “sin hacer las inversiones y atender al cuidado del medio ambiente a la que está obligada”.
El embajador argentino Dante Dovena, le adelantó la semana pasada al presidente José Mujica en una reunión que tuvieron en el bar Tasande, que su gobierno no veía con buenos ojos que UPM aumente su producción anual de 1.1 a 1.3 millón de toneladas.
Mujica comentó ayer a La República que el tema será negociado entre Dovena y el embajador uruguayo Guillermo Pomi. A sus ministros el presidente le dijo que personalmente se encargará del tema según lo informó el secretario de Presidencia, Homero Guerrero. “El tema se manejará en los ámbitos que correspondan, lo demás es pura especulación”, comentó el jerarca.
Diego Cánepa, prosecretario de Presidencia, recordó que Mujica informará primero a los interesados y luego a la opinión pública y se espera dar una respuesta sobre el 26 o 27 de setiembre. El presidente Mujica parte el día 23 para Nueva York, a la Asamblea Anual de las Naciones Unidas, y estará en Estados Unidos hasta el 28.
Según supo El Observador, Mujica tiene previsto encontrarse con Cristina Fernández de Kirchner en Buenos Aires el 30 de este mes. El presidente y varios ministros irán en el viaje inaugural del nuevo barco de Buquebus que unirá ambas capitales en dos horas y media. En Buenos Aires lo estará esperando la mandataria que será la encargada de bautizar el buque.
Se espera que en esa oportunidad ambos presidentes dialoguen de los temas aún pendientes de resolución. Entre ellos está la profundización del canal Martín García, la aprobación para terminales para Nueva Palmira, obras en los canales del río de la Plata y la liberación de permisos de importación.
La idea de Mujica hasta la semana pasada para UPM era tomar el camino del medio que es permitir, sólo por este año, un aumento parcial de 100 mil toneladas y no 200 mil como pidió la empresa. Esa solución no convence en Argentina.
El ministro Timerman se reunió ayer con el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, el senador Pedro Guillermo Guastavino y el intendente de Gualeguaychú, Juan José Bahillo. El único tema fue UPM.
El canciller argentino, dijo que “la ley es clara. Hay un Tratado del Río Uruguay que impide que unilateralmente se modifiquen las condiciones ambientales del río” y “aumentar la producción es modificarla”, dijo.
Para Argentina el río ya fue afectado por la construcción y tiene innumerables muestras de ello, afirmó Timerman, sin explicar sus pruebas. Reclamó la formación de un comité científico integrado por representantes de ambos países, para “determinar el grado de contaminación al que está siendo sometido el río Uruguay, y que la empresa Botnia haga las modificaciones necesarias”.
“No debemos aceptar las presiones de un grupo extranjero, que no es uruguayo ni argentino”, dijo Timerman. “Se sabe perfectamente que si aumenta la producción, aumenta la contaminación”, agregó. “En este aspecto vamos a ser inflexibles” concluyó.
En declaraciones a radio Continental expresó que el pedio de UPM es para “presionar” a los dos países “para hacernos pelear, y conseguir un aumento en sus ganancias sin hacer las inversiones y atender el cuidado del medio ambiente al que está obligado”.
Timerman no aclaró a qué inversiones se refiere ya que según la Dirección Nacional de Medio Ambiente, la pastera no contamina. Argentina se negó permanentemente a dar a conocer los informes sobre el impacto ambiental de UPM.
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