El presidente señaló que todo lo que ocurra en el vecino país tendrá "mucha importancia" en Uruguay
El presidente José Mujica recomendó hoy poner "las barbas en remojo" ante la posible repercusión de que Argentina entre en una situación de cese de pagos técnico a raíz de la decisión de la Corte Suprema de EE.UU. que la obliga a pagar a los llamados "fondos buitre".
Según consigna la página web de la Presidencia, el mandatario, fiel a su estilo campechano y distendido, citó el viejo proverbio "cuando veas las barbas de un vecino arder pon las tuyas en remojo" al ser consultado por la prensa sobre las posibles repercusiones de un "default" en Argentina.
Mujica apuntó que todo lo que ocurra en el vecino país tendrá "mucha importancia" en Uruguay, con sus repercusiones indirectas en sectores vitales para la economía uruguaya como el turismo o las inversiones extranjeras.
El pasado jueves Mujica ya se expidió sobre esta cuestión mostrando un apoyo sin matices a Argentina y pidiendo que instancias internacionales americanas, como Unasur, OEA o Mercosur, se expresen en bloque contra la decisión del alto tribunal estadounidense.
"Hoy o mañana nos pueden hacer lo mismo a cualquiera, y me parece que estas cosas hay que llevarlas a los foros internacionales y empezar a asumir actitudes colectivas", señaló entonces el mandatario.
Para Mujica, el fallo desfavorable para Argentina "directamente pega a todos porque, si Argentina pasa por una coyuntura muy difícil, va a repercutir en el resto de los países que tienen relaciones económicas con ella", añadió.
El pasado lunes la Corte Suprema de Estados Unidos resolvió rechazar la apelación presentada por Argentina contra la resolución del juez Thomas Griesa, que falló a favor de los fondos especulativos en el juicio contra Argentina.
Los fondos demandantes, a los que Argentina califica como "buitres", compraron bonos argentinos a personas o entidades que no aceptaron canjearlos en las operaciones de reestructuración de deuda organizadas por el Gobierno argentino después de la multimillonaria suspensión de pagos en que incurrió el país en 2001.
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