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viernes, 13 de abril de 2018

La aventura del tango / Semanario Búsqueda EL HOMBRE INQUIETO Por Antonio Pippo Pedragosa







-Fue aquí, en Montevideo, donde se radicó un lustro, a los dieciocho años, donde halló su sitio en el mundo.
Aquí soltó el talento musical acumulado desde la niñez, y al más alto nivel, para
convertirse en uno de los grandes innovadores del tango. Aquí se inició como pianista de fantasía y humorista, y hasta clown, bajo el apodo de Rock, en el cine Defensa y en los cafés Victoria y Au bon marché. Aquí compuso su primera obra, El apache oriental,al que siguieron, en explosiva sucesión, entre otros, Bélgica, Sans Souci –con la colaboración de Cobián-, Rancho viejo, Sauce llorón, Fantástico y el tango milonga ReFa-Si,una de sus creaciones más famosas. Aquí conoció a Gardel, quien al paso del tiempo le grabó veintiséis temas. Aquí dio forma a su concepción del tango canción,luego de conocer Mi noche triste, de Contursi, del que tomó distancia pues no admitía incorporar letras a músicas escritas mucho antes y en tres partes: impuso la composición en dos partes con colaboración directa entre músico y poeta, creando, entonces sin saberlo, el que se llamaría luego “tango romanza”, que dio prioridad a la melodía y hasta influyó en el baile, que se hizo más elegante, de salón.
Enrique Pedro Delfino, Delfy para los amigos, pianista e instrumentista, compositor,director de orquesta, actor y humorista, nació en Buenos Aires el 15 de noviembre de 1895. Sus padres fueron dueños del teatro Politeama y allí, desde la niñez, se enamoró de la música, incluyendo la clásica, hasta admirar a Puccini, sobre todo, y a Verdi y a Wagner. Sus padres lo enviaron a estudiar esta disciplina a Italia, al Instituto de Turín,cuando apenas tenía doce años. Pero al regreso, quizás por el barrio, quizás por los amigos, sin dejar de apreciar lo clásico, ingresó a una vida adolescente bohemia y comenzó a gustar del tango. Es por este tiempo que inicia la aventura montevideana contada al comienzo.
De regreso de Uruguay, sus convicciones estilísticas se habían afirmado. En su ciudad,siguió breves meses presentándose como “el humorista del piano”, mientras no dejaba de componer. Muy pronto, junto a Osvaldo Fresedo, David Roccatagliatta y Agesilao Ferrazzano formó el “Cuarteto de Maestros” y al inicio de la década de 1920, época esencial para la evolución del tango, pasó algo inesperado: es contratado, junto a Fresedo y Roccatagliatta para integrar la Orquesta Típica Select, organizada por la RCA Víctor –muy disminuida por la competencia de la Nacional Odeón- para ir a grabar a Estados Unidos. Completaron el grupo el violinista argentino radicado en Nueva York
Alberto Infante Arancibia y el violoncelista alemán Hermann Mayer. Entre el 24 de agosto y el 2 de setiembre de 1920 la orquesta grabó cincuenta y tres placas de partituras ya registradas y una, Calle Corrientes, sobre un manuscrito escrito por Delfino.
Pero ese mismo año, al retorno a Buenos Aires, ocurrió otro hecho singular: Samuel Linnig, letrista y autor teatral, le propuso componer un tema en dos partes que pudiera pelear el rango de primer tango canción –dejando atrás a Contursi- de acuerdo a las nuevas pautas del tango romanza, para ser presentado en el sainete Delikatessen y cantado por la actriz María Esther Podestá.
No se les ocurría el nombre. Caminando una noche, tratando de hallarlo, Linnig vio a una linda morocha que los miraba desde la vereda de enfrente.
-Mirá esa milonguita… –le dijo a Delfino.
Y éste lo palmeó, alegre: -¡Encontraste el nombre…!
Muchos dicen que Milonguita fue, realmente, el primer tango canción. En fin, motivo de debates para otro día. Pero lo cantó y grabó Gardel, ¡y de qué modo!, convirtiéndolo en un éxito internacional, superior a Mi noche triste.
Delfino no paró y el éxito jamás lo abandonó. Escribió más de doscientos tangos, entre los que no se puede ignorar, además de los ya mencionados, Aquel tapado de armiño,Araca corazón, Dicen que dicen, No le digas que la quiero, Otario que andás penando,Padre Nuestro, Talán, talán, Suburbio y Ventanita florida.
Escribió decenas de obras para teatro y guiones de cine, colaboró con Gardel en Luces de Buenos Aires, actuó en Ronda de estrellas, 1938, de Jack Davison y dirigió la música de otros numerosos filmes.
Se le considera un continuador de la renovación iniciada por Arolas, Bardi y Cobián y un precursor de De Caro.
Murió el 10 de enero de 1967. Tristemente, unos años antes la vida, a veces tan injusta,lo había castigado de la peor manera: quedó ciego.

lunes, 9 de abril de 2018

¡Brasil duele! Por Rodrigo Tisnés



Que Lula da Silva es el político más popular de Brasil, y probablemente de Latinoamerica, no quedan dudas. Por algo su reciente reclusión ha despertado tanto fervor, a favor y en contra de su figura, de su inocencia o culpabilidad, e incluso del Juez federal Sergio Moro, quien lidera la descomunal investigación por el “Lava Jato”: en 4 años se han dictado unas 190 condenas contra políticos y empresarios.
Es tan descomunal como las dimensiones del país, un verdadero continente dentro de otro continente en todo sentido: geográfico, demográfico, económico, social, cultural y político. Por eso, lo que sucede en Brasil impacta tanto en el resto de la región, e incluso en el Mundo.
Antecedentes.
Podría decirse que la renuncia de Fernando Collor de Mello, un tecnócrata alineado con las políticas del Consenso de Washington en la oleada liberal de los 90’, para evitar ser destituido por corrupción, fue el primer anuncio hace bastante más de 20 años.
No obstante, el intrincado sistema político brasileño, siguió funcionando sin mayores alteraciones hasta fecha bastante más reciente.
En 2003, cuando el Partido de los Trabajadores triunfa en las elecciones nacionales, y Lula, su histórico líder, llega a la presidencia, se esperaba que generara cambios radicales en la política y la sociedad brasileña.
No obstante, con el pragmatismo propio de su origen humilde, se dio cuenta que si quería generar cambios profundos en la sociedad brasileña, debía –al menos en principio- convivir con la lógica negociadora/dadivosa del sistema de partidos, que presenta una atomización extrema en el Parlamento, en virtud de su sistema de adjudicación de bancas.
De esta forma, mientras cambiaba para bien la realidad de miles de familias pauperizadas a lo largo y ancho del país, mediante la implementación de los planes “Fome Zero” y “Bolsa Familia”, las dos políticas sociales más radicales en la historia de Brasil; por otro lado, comenzaban a llegar las primeras acusaciones por hechos de corrupción contra el gobierno del PT.
Alianzas peligrosas.
En las 4 elecciones ganadas por el PT, la vicepresidencia correspondió a políticos del PMDB: José Alencar y Michel Temer. Este partido, funciona como un típico “catch all”, lo cual le ha permitido jugar un papel estratégico en la política brasileña desde 1985, al punto tal, que se dice que es imposible gobernar sin su apoyo.
Dada la atomización del sistema de partidos brasileño, esta alianza siempre fue de conveniencia para ambos. El carisma de Lula lo hizo más viable entre 2003 y 2010, pero comenzó a resquebrajarse en los siguientes períodos de gobierno.
Y terminó por deteriorarse completamente con la recesión de la economía brasileña y el crecimiento de ciertas bancadas “ad hoc” como la Evangélica y la Ruralista. Ahí surge la figura del ex presidente de Diputados, Eduardo Cunha, precisamente del PMBD, quien usando su poder bloqueaba desde la Cámara los pedidos para iniciar un juicio por destitución a la Presidenta por una maniobra contable, habitual en todos los gobiernos, pero que servía en ese caso como excusa política para desplazarla del cargo.
Cuando el propio Cunha es acusado de corrupción, y la bancada del PT resuelve retirarle el apoyo para que la Justicia le pueda iniciar una investigación, Cunha movió sus fichas y habilitó el proceso del “impreachment” contra Rousseff, que fue simplemente una dantesca farsa, dado que su suerte ya estaba echada con el cambio en las alianzas políticas.
Una vez asumió Michel Temer, realizó un giro de 180º en la política brasileña, especialmente en materia social y económica: recortó políticas sociales, lideró una reforma laboral profundamente conservadora con el argumento de que es necesaria para “flexibilizar la economía y atraer inversiones”, y más recientemente resolvió militarizar la ciudad de Río de Janeiro.
Él también ha sido acusado de corrupción. Incluso hay una grabación bastante comprometedora. Pero, más pragmático que el PT, mediante acuerdo con otras bancadas, ha conseguido “blindarse” (por ahora) de ser investigado.
La situación de Lula.
Así llegamos a Lula, que tiene varias causas en su contra, pero que acaba de ser procesado por la supuesta propiedad de un apartamento, que habría recibido de la empresa Odebrecht a cambio de favorecerla en la licitación de obras públicas.
En realidad, muchos analistas internacionales sostienen que las pruebas por las cuales se ha condenado al ex presidente en este caso, son –en el mejor de los casos- bastante endebles. A esto se suma el hecho de que el proceso contra Lula ha sido por lejos el más rápido: 9 meses, contra 18 en los casos que había actuado con mayor rapidez anteriormente. No sólo eso genera suspicacias: en 2016 el Juez hizo pública la grabación de una charla entre Lula y Dilma Rouseff, que lo hizo merecedor de una observación.
Pero la suerte de Lula había quedado zanjada el martes de la semana pasada, cuando el Tribunal Supremo, en un fallo dividido, había resuelto no hacer lugar a un recurso de “habeas corpus” que hubiera posibilitado que siguiera en libertad.
De todas formas, el episodio más preocupante, ha sido la reaparición del Ejército, en la persona de su Comandante en Jefe, como actor político activo, al señalar que su institución no toleraría una señal de impunidad, en caso de que el Tribunal Supremo hiciera lugar al recurso de “habeas corpus”.
Luego de amenazar con no cumplir la condena, lo cual hubiese significado un grado de irresponsabilidad institucional mayúsculo de su parte, finalmente Lula negoció su entrega y desde el sábado se encuentra recluido en una prisión en Curitiba; mientras sus abogados diseñan nuevas estrategias que le permitan ser candidato de cara las elecciones presidenciales de octubre, en las que aparece como el clarísimo favorito.
En caso de no poder concurrir por encontrarse inhabilitado, las interrogantes sobre las próximas elecciones son mayúsculas, dado que ningún candidato parece reunir demasiadas voluntades.


domingo, 8 de abril de 2018

La noche. Cuento de Antonio Pippo





http://www.delicatessen.uy

Ocurría en Nochebuena, siempre.


Después de las celebraciones familiares, la sidra, los pan dulces, se abría la noche que nos hacía felices. Una noche abarcadora, redonda, libre, con el cielo aguardando quizás el alma de algún amigo, allá arriba, y el aire fresco empujando nuestras ansias locas, acá abajo. Una noche que resumía todas las noches, de las casas a las plazas, de los boliches al quilombo. Una noche que nos proponía otro mundo y otra vida y que, al mismo tiempo, nos empujaba a seguir bebiendo, a imaginar que amábamos y nos amaban y a bailar juntos lo que parecía la danza de nuestra salvación.


Misterio renovado e inexplicable de pueblo chico. Liturgia obedecida por quienes, tantas veces, aunque sólo muchachos, llegamos a querer, apenas, un día más.


¡Qué noche aquella!


Nos introducíamos en ella para devorarla a bocanadas. Lo primero que sentíamos era el olor a menta y a romero y a jazmines tempranos que atravesaba las calles angostas de los barrios más apartados, en ancas de un vientito suave, acariciante, melancólico. Después se nos venía encima la humedad, que se podía ver y rozar mientras caía sobre los focos amarillentos de las esquinas. Y, al rato, el silbato lejano del último tren, cruzando los campos y arrimando a los casas de las afueras –recostadas como oscuros esqueletos a las vías- la respiración asmática de una locomotora negra como la mismísima noche. A esa hora hacía rato que la humilde calesita había detenido sus hierros lacerados y ya no habían carros llevando verduras y frutas, ni niños descalzos y ansiosos, ni madres gordas recogiendo ropas de los alambres.


Cuando empezábamos a caminar, chispeantes por lo bebido, veíamos a gentes sentadas a la vereda, con botellas alrededor y nos sobresaltaban los cohetes baratos que reventaban cerca. Gente común, a la que saludábamos siempre, no faltaba más, porque siempre ofrecían un trago más para dar impulso a la recorrida. Y los otros, hombres y mujeres que hervían de ansias distintas y decían cosas secretas con la mirada; la veterana del marido viajante, al borde la extenuación de insatisfecha; Marisol, la menor de los Pérez, a la que bastaba tocarle una mano para que se le humedecieran los muslos; Fermín, borracho impenitente, que sólo quería hablar de fútbol; Cascarilla Batista, aguardando ese desfile nocturno para insistir en jugar al truco en cualquier parte; y los milicos de la comisaría, claro, esos del sueldo miserable y las caminatas absurdas, tomando dos o tres de arriba y retocando, con meras ojeadas, la lista de cornudos que se habían especializado en crear.


Esa noche, precisamente esa noche, era hermoso andar por el asfalto o por la tierra, yendo de una calle a la otra como si armásemos un imaginario picado en la penumbra. Y también lo era cruzarse con alguna chiquilina anhelante, escapada de una tutela ya hundida en profundo sueño, besándola casi hasta reventar contra las paredes más oscuras, levantándole la pollerita con desesperación, bajándole desprolijamente la bombacha blanca y penetrándola fuertemente hasta que gritara, sofocada de dolor y placer. Y pasar por los boliches de Curbelo o del Chiquito Otegui, que no cerraban, para tomar a las apuradas otro vaso de vino de la casa, ese de la damajuana con telas, y ojear las mesas sobre las que todavía se enredaban naipes y manos mugrientas, escuchando todos los chismes, cuentos, fantasías y mentiras del mundo. Y quedarse quietos, de pronto, al lado de la radio. abrazados por el humo del tabaco, sintiendo que la voz de Gardel se nos metía entre los huesos y nos hacía mejores, creándonos una nueva ilusión. Y escondernos, apretados, a un costado de la casa de Pepe, el rematador – al que el whisky importado hacía dormir temprano-, para ver a Rosita, su mujer, acostarse en el suelo de ladrillo del galpón con Ramiro, el sobrino político. Y correr unas cuadras más abajo, al barrio del Aserradero, sabiendo que podíamos robar alguna gallina a doña Margarita, cortarle el pescuezo y simular un rito satánico, dejándola colgada a la entrada del rancho de esa anciana que, puntualmente, se horrorizaba cada mañana y le rezaba a todos los santos. Y caer por el quilombo de La Mellada, abierto hasta el canto de los pájaros madrugadores, para pagarle una caña al Chiche Meneguzzi y pedirle que tocara “El amanecer”, sabiendo que cada vez lo hacía distinto; medir con fruición la redondez tersa de los culos de La Polaca y María Eugenia y, en una de ésas, hacer cola en el corredor largo iluminado por la luz roja de un farol destartalado para ocuparnos con una y soñar que podía quererte y gozar contigo; o bailar, simplemente bailar con la más pintada, un tango con cortes, sintiendo que el mundo era eso, cuadriculado y macilento, sobre el que danzábamos con encomiable elegancia para nuestro, a esa altura, inestable equilibrio.


Sin embargo... si uno fuese sincero, debería recordar algo más puro que ese universo desmelenado gastado en largas caminatas. Algo que se vivía esa noche de una manera distinta, más íntima, más profunda. Algo que, tal vez, nos permitió estirar la vida y los sueños más allá de los límites de aquel horizonte chico y apretado.


La soledad, buscada como una novia virgen.


El deseo de quedarse solo, pero absolutamente solo, sin compasión ajena, sin mitigaciones, sin amigos, mujeres ni madre, debajo del cielo oscuro e interminable pero con sus estrellas titilando sin cesar. Y mirar mucho más lejos que cada día, cual si la vista se transformase en una alfombra voladora de “Las mil y una noches”, suficiente para alcanzar el infinito, la nada. O el olvido piadoso. Y ahí, sí, volver a caminar, cargando el cuerpo hasta el penúltimo cansancio, deteniéndose, al cabo, en una esquina cualquiera, como si uno hubiese escapado de todas las envidias, de todos los egoísmos, de todos los temores. Y entonces respirar muy hondo, olvidando al alcohol, la fiesta, el vaho nocturnal, para atrapar el aire húmedo hasta el borde del ahogo. Y luego, al final, llorar sin resignación. Por suerte y de una vez, con lágrimas incontenibles y viejísimas, pese a nuestra juventud, lágrimas que –cual una descomunal memoria recuperada de pronto al aplastar al jolgorio embriagador- se convierten en decenas de rostros y nombres y lugares. ¡Y tantas palabras no dichas!


El Coco Luaces y su vieja radio de los galpones, que jamás supo cuánto nos importaba; el Pepe Pintos y la grapa con limón, esperando una despedida que no le dimos; Juan y el violín envuelto en una sonrisa, sin la satisfacción de nuestro respeto; Hugo Ruiz y el sueño de la libertad, creando a cada paso un poema de vida que no entendimos; el Cholo y su alma en una niña, muriéndose lentamente por el dolor de los otros; Blanca Rosa cantando en la cocina “La pulpera de Santa Lucía”, sin saber que su corazón la traicionaría en medio de nuestra ausencia; Nené y aquel poema sobre los muertos solitarios, que se le hizo carne y lo advertimos tarde; Robertito aferrado a las riendas del caballo fatal, demasiado lejos y demasiado solo; Andrés y su pirueta fatal en una calle cualquiera, mientras perdíamos el tiempo llenándonos de estupidez; el vasco Recarte, ensoñado, atropellando la vida con ansias locas porque no supimos detenerlo; y cuántos, cuántos hijos muertos de tantos amigos entrañables.


Y Natalia, que se fue con prisa de la mano del absurdo, buscando las estrellas, caminando entre nubes, bien cerca de eso que hemos llamado Dios. Natalia, que nos dejó con tanto por hablarle, con tanto amor por entregarle, apenas con un guardapolvos blanco y una moña y una cartera de cuero repleta de cuadernos prolijos. Natalia en tres o cuatro fotos, en un mural y en el alma. Natalia convertida en un pájaro azul, en un clavel blanco, en una gota de rocío que desciende del cielo abierto, eternamente.

Desde esa noche y para siempre.

Antonio Pippo, nació en Buenos Aires, pero no dudamos que se considera oriundo de San José de Mayo, pese a vivir desde hace varias décadas en Montevideo. Es periodista, escritor, investigador del lenguaje del tango, narrador oral en lunfardo. Trabajó en televisión, prensa y radio. Es autor de, entre otros libros, El quilombo y otros cuentos de otoño, Obdulio con alma y vida o Jazmín de noviembre. Es autor y recitador en los espectáculos poético-musicales Bien polenta y Tango íntimo. Este cuento, reescrito de forma parcial para Delicatessen.uy, fue inicialmente publicado por el autor en el libro El quilombo y los cuentos del otoño, en noviembre de 1993.


Fotografía http://senderos-musicales.blogspot.com.uy/


La aventura del tango CHAMPÁN PARA TODOS Por Antonio Pippo Pedragosa






Semanario Búsqueda

-Música, poesía, intérpretes.
Pero en el tango siempre hay algo más.
Hubo un lugar donde actuó la espectacular Mistinguette, de cuya visita se cuenta que,tras festejar en un reservado borracha de champán, salió olvidando su pollera, hecho que causó un gran revuelo por el intento de verle, más al natural, sus increíbles piernas.
Ese sitio lo visitaron, en sus treinta y cinco años de reinado en la noche de Buenos Aires, escritores como Pirandello y Albert Camus, nobles como el duque de Windsor y el príncipe Bernardo de Holanda, gente del espectáculo como María Félix, Orson Welles, Vittorio de Sica, Maurice Chevalier y Errol Flynn, músicos, bailarines y cantantes como Malcuzinsky, Stocovsky, Josephine Baker, Tito Schippa –quien cantó una noche, a la entrada, porque se lo pidió una anciana mendiga- y gente tan extraña como Alí Khan o el polígamo marajá de Kapurthala con su séquito de esposas, y tan indefinible como Walt Disney, que cada noche regalaba dibujos, ebrio, de Mickey y Donald a las bailarinas.
Era el Tabarís, el cabaré más famoso de Sud América en su época, al que en París “Le Quotidien” promocionaba así: Si vous allez á Buenos Aires, n´óubliez pas de faire un tour au Ta-Ba-Riz.
Más allá de la resonancia de sus visitantes, y de la actuación de famosos artistas contratados, siempre fue un espacio para el tango: Gardel era habitué y cantó repetidas veces y en su escenario debutaron, muy jóvenes, Troilo y Pugliese. Pichuco le confesó en un reportaje a María Esther Gilio:
-A los catorce años, ya de pantalón largo, empecé a trabajar contratado; ahí conocí a Vardaro, a Contursi, a Osvaldo. Hacíamos tango de vanguardia. Íbamos a trabajar a las seis de la tarde y no parábamos hasta que se iba el último borracho. Había días en que terminábamos tocando con el sol en la cara.
El Tabarís encabezó la belle epoque de la noche y la bohemia locas de los cabarés.
Entre la multitud de tangos que hablan de ese tiempo y esa vida hay que mencionar,cuanto menos, a Zorro gris, Grisetta, Madame Ivonne, Acquaforte, Tal vez será mi alcohol, Che, papusa, oí, Mano cruel, Esclavas blancas, Pucherito de gallina, Pompas,Moneda de cobre y Aquel tapado de armiño.
El Tabarís fue inaugurado el 7 de julio de 1924 en Corrientes 831, en la planta baja del Royal Pigalle, accidentadamente: no funcionó la calefacción y la honorable y nutrida concurrencia debió permanecer, y hasta bailar, con sus abrigos.
Su fascinante historia comenzó en 1905, cuando el local superior lo ocupaba el diario de origen francés “Le Courrier del Plata”; poco después fue adquirido por el teatro Royal, que ubicó en el espacio disponible abajo al cabaré Royal Pigalle, que cerró al poco tiempo. En 1924 Andrés Trillas, francés hijo de españoles que había llegado al Río de la Plata a las catorce años, compró el edificio, reconvirtió en teatro el Royal Pigalle y creó en su antiguo lugar, a todo lujo, el cabaré al que Cadícamo dedicó este verso: -Che bacán de rango misho, te diré algo:/ me alegra relojearte entre toda la mersa que va al Tabarís…
Los hombres entraban de smoking y las damas de vestido largo. Concurrían parejas,pero la mayoría del público eran hombres solos que usaban algunos palcos y reservados,ocultos por espesos cortinados, para caer en la tentación de las llamadas “poupés de importación”: jóvenes francesas y polacas, las primeras en fumar en público, con las que, al menos a partir de la medianoche, había que tomar abundante champán –cada copa costaba la mitad del sueldo de un trabajador común- y luego acordar al precio del encuentro carnal.
Pero a toda fiesta le llega su final.
En la madrugada del 19 de enero de 1959, desbordado por una muchedumbre, discurrió la última noche del mítico Tabarís. Una fortísima crisis financiera impuso el cierre.
Por años alquilado, por años abandonado, a punto de ser demolido, el edificio se salvó porque en 1981 lo compró el empresario teatral Carlos Rottemberg. No obstante, no fue la salvación definitiva: también acuciado por deudas, Rottemberg lo alquiló a una iglesia evangélica –una de tantas paradojas sorprendentes en la aventura del tango y sus lugares-, aunque en 2006 recuperó oxígeno económico, rescindió el contrato y sumó allí dos salas más a su circuito de escenarios.
Dicen que aun hoy por los alrededores hay quienes creen advertir, en una brisa de fiesta,los espíritus de Gardel, la Baker, la Mistinguette, Chevalier, los nobles y, claro, del gordo Pichuco…

miércoles, 4 de abril de 2018

GRUPO INVERSOR INTERNACIONAL ESTÁ DISPUESTO A NEGOCIAR DE NUEVO LA CONSTRUCCIÓN DE UN PUERTO DE AGUAS PROFUNDAS EN ROCHA. EMPRESARIO ESPAÑOL FRANCISCO LINARES MORENO: “SI EL GOBIERNO DEL PRESIDENTE VÁZQUEZ QUIERE HABLAR, ACÁ ESTAMOS”.




AUDIO COMPLETO AL FINAL DE LA NOTA
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El presidente de la Fundación Aurora es también “cabeza” de un importante grupo inversor de capitales fundamentalmente españoles-israelíes.
Participó activamente durante el gobierno del presidente José Mujica en negociaciones para la construcción de un puerto de aguas profundas en La Paloma .Se reunió en Galicia con el ex intendente Artigas Barrios y estuvo luego en Rocha. En Uruguay se reunió con el entonces presidente Mujica a pedido del actual presidente Tabaré Vázquez a quien había presentado el proyecto.
Linares Moreno hizo declaraciones al programa Bitácora de Radio de Navegante FM 94.1 desde Galicia, España.
El empresario ha presidido la Cámara de Comercio España Israel en Galicia y es quien está al frente de la Fundación Proyectos Aurora. Linares Moreno viaja permanentemente a los países donde el grupo inversor desarrolla proyectos en ramas como ingeniería, infraestructuras portuarias, construcción y comercio exterior, entre otras.
En la entrevista explicó cómo surgió el proyecto para Rocha que incluía, además del puerto de aguas profundas, obras de infraestructura como el ferrocarril, el transporte en barcazas por los ríos Paraná y Uruguay desde Bolivia y Paraguay hacia Colonia y desde allí, por tren eléctrico hasta La Angostura en Rocha. El norte de Argentina y el sur de Brasil utilizarían también la plataforma que movería todas las importaciones y exportaciones del Mercosur.
Dijo no entender por qué el proyecto fue desestimado. “Teníamos la financiación de los principales bancos privados del mundo capitaneados por la banca Roschild”, destacó.
“No puedo decir que el responsable del fracaso del proyecto haya sido el gobierno uruguayo. Sí de la comisión que nombró el gobierno que presidió el economista Pedro Buonomo. El señor Buonomo quiso tener un exceso de protagonismo, quiso dominar todo el proceso y nos dejó de lado. Nunca se nos dijo por qué, no sé qué intereses estaban en juego”,agregó.
“El proyecto está vivo. No hemos tenido ninguna señal del gobierno del presidente Vázquez. Si la tuviéramos estaríamos dispuestos a hablar, Lo primero sería ver si siguen vivos los canales de financiación. La forma en que se dio el proceso en que nuestro proyecto fue dejado de lado causó malestar en los bancos”, dijo el empresario.
“El proyecto generaría entre treinta y cinco mil y cuarenta y cinco mil puestos fijos de trabajo y unos treinta mil más indirectos.

Este es un resumen de la extensa entrevista:

“Asistimos a la petición de un gran amigo nuestro, el empresario uruguayo José Vila, gran persona, un hombre que se ha jugado las pesetas y todo por llevar adelante proyecto que contemplaba la construcción del puerto de aguas profundas en Rocha, en La Angostura, frente a la Laguna Negra. Al comenzar a trabajar vimos que era necesaria también toda una infraestructura que lo alimentara. Una vez diseñado el puerto , las comunicaciones y todo lo que se quería hacer allí, tomamos el proyecto , un Master Plan, y lo presentamos en el Ministerio de Transporte y Obras Públicas. La verdad es que les encantó y eso nos animó muchísimo a seguir apostando por la construcción del puerto y de todas las infraestructuras que eso llevaba como nexo”.

“DARÍA UNA VUELTA TOTAL A LA ECONOMÍA DE URUGUAY Y DE TODA LA REGIÓN”

“Desde el principio nos extrañó muchísimo que no se dispusiera una discusión técnica con el gobierno para ver la viabilidad del proyecto, la financiación y las grandes posibilidades que se abrían para Uruguay. Era y es un proyecto dinamizador de la economía que daría una vuelta total a la economía de Uruguay y en general a toda la región .También nos extrañó muchísimo que el gobierno, en un momento dado, encaminó el proyecto a través de una comisión pensando en la ley PPP (Participación Público Privada), Esto nos sorprendió porque nuestro proyecto era totalmente privado, no queríamos hipotecar al gobierno de Uruguay en una inversión de este tamaño. Buscamos los medios de financiación y la Banca Roschild , una de las más importantes del mundo a nivel privado capitaneaba el proyecto. Esto hizo que un grupo de bancos, los primeros siete bancos del mundo, dijeran que sí dado que veían que era una obra que no tenía ninguna dificultad para ejecutarse ,era muy importante para la exportación de todas las materias primas que salen de Bolivia, Paraguay, el norte de Argentina, el sur de Brasil y naturalmente del propio Uruguay. Esto daba un resultado muy positivo en cuanto a que la inversión era recuperable incluso antes de los plazos internacionales de 25 años .En este caso, el retorno del capital invertido se estimaba en 20 años. Eso incluía el puerto, también el ferrocarril , todo el sistema de barcazas, de hidrovía .
No entendemos por qué la comisión interministerial una vez aprobada la ley no se puso en contacto con nosotros sino que nos ve como unos más que podían ofertar .Tampoco entendíamos por qué el gobierno quería participar en la inversión .Se hizo un llamado a empresas interesadas y ahí vimos que la dirección que había tomado la famosa comisión encargada por el gobierno no estaba acertada porque las empresas que se presentaran serían constructoras pero ¿dónde estaba la financiación?¿dónde estaba todo el estudio financiero de esa obra? y ¿dónde estaban las infraestructuras ? Solo se hablaba de un puerto de aguas profundas aislado y además en una ubicación que fue cambiada que no es la más acertada”.

“TODO FUE MUY CONFUSO”

El empresario se refirió a los puestos de trabajo que la construcción del puerto y las infraestructuras generaría y cuestionó la forma en la que la comisión interministerial manejó la negociación.

“Todo fue muy confuso ,nunca se llegó a exponer públicamente nuestro proyecto que tiene muchos apartados y refiere a muchos aspectos. Las barcazas que serían modernizadas y llegarían desde Bolivia y Paraguay por los ríos Paraná y Uruguay hasta Nueva Palmira donde se haría un gran puerto de intercambio entre las barcazas y el ferrocarril. Las mercaderías irían desde Nueva Palmira por tren hasta La Angostura donde estaría el puerto de aguas profundas
.El proyecto contemplaba una moderna red de ferrocarril electrificado para mercancías y en Rocha tendríamos un puerto seguro con un calado de 24 metros de profundidad. En ese super puerto irían enclavadas una Zona Franca .Uno de los apartados se planteaba el posible traslado de la refinería de Ancap que está en Montevideo .
También se instalaría la boya , los petroleros descargarían el petróleo en el puerto eliminando todos los peligros que las operaciones tienen hoy. El puerto estaba pensado con un sistema de bloqueo para impedir cualquier accidente o derrame. En ese polígono había petición de grandes compañías multinacionales, tres de Corea del Sur, cuatro de China .
El puerto valdría tanto para salir con mercancías como para entrar con mercancías a toda la región .Esto implicaba la creación de entre treinta y cinco mil y cuarenta y cinco mil puestos de trabajo fijos más otros treinta mil de empresas auxiliares.
El puerto generaba también en toda la zona próxima, en un radio de alrededor de treinta kilómetros un desarrollo en cuanto a la agricultura con invernaderos y el establecimiento de empresas israelíes por la experiencia que ellos tienen en el tema. Uruguay sin haber invertido en la construcción del puerto cobraría, además de la concesión, los aranceles por el paso de esas mercancías por todo el país”

“NO VI UN INTERÉS PATRIO, VI UN INTERÉS PARTICULAR”.

“Fracasó por un intento de dominar totalmente el proyecto por parte, no me atrevo a decir del gobierno, sino de la comisión que presidía el economista Buonomo, un exceso de protagonismo que hizo que no se estableciera un debate en profundidad como les habíamos pedido .Les pedimos un gran debate con empresarios, economistas y técnicos del Estado para analizar la creación de ese puerto .Ese debate no le interesó a los miembros de la comisión gubernamental. Creo que veían más un negocio puntual donde había que elegir otro lugar para el puerto y posiblemente en la compra venta de suelos, expropiaciones, encontrar sus primeros ingresos, por decirlo de alguna manera. No vi un interés patrio, vi un interés muy particular”, dijo.

“VI QUE LAS ANSIAS DE BUONOMO ERAN MUY PERSONALES”

“Creo que como el proyecto venía muy desarrollado, venía con su financiación resuelta , con una serie de documentos de empresas multinacionales, las primeras grandes compañías exportadoras de la región , dejaba poco margen de resolución, poco espacio para la faena,Yo vi que las ansias de Buonomo eran muy personales. No sé si personales solamente por parte de él o si se escondía alguna razón política detrás. Lo veía muy inclinado a hacer una gira por Asia , por China primero, después por Corea , se anunció también por Rusia. Se informó en la prensa que tal gobierno de tal nación iba a financiar la obra. Vi a Buonomo muy inclinado a ser el protagonista y el capitán de todo .Nuestro proyecto estaba muy desarrollado y él tenía muy poco espacio .Si hubiera habido un espíritu de querer para Uruguay creo que lo primero que tendrían que haber hecho era pedirnos credenciales del proyecto , qué estábamos proponiéndonos, quién financiaba .Uruguay tiene las condiciones de transformarse en una base logística para toda la región y merecía la pena ser escuchados”.

“EL PROYECTO ESTÁ VIVO. SERÍA UNA PENA PERDERLO DEFINITIVAMENTE”.

“El proyecto está vivo. Los estudios costaron casi tres millones de dólares y los pagamos de nuestros bolsillos . Es un proyecto libre que está actualizado . No hemos recibido ninguna señal del gobierno. Si la recibiéramos lo primero sería ver si están vivos los canales financieros. Yo voy chequeando cada tanto y recibo palmaditas en el sentido de Sí, pero es el gobierno el que no quiere porque tuvo la oportunidad Sería una pena perderlo definitivamente.
Cuando el economista Buonomo decidió apartarnos y meternos en esa cocktelera de ofertantes para la construcción de un puerto que no se construyó, nosotros pedimos disculpas a la banca internacional .Ellos se sintieron molestos con las informaciones según las cuales el gobierno buscaba que el puerto fuera financiado por China o por Rusia. Nos decían, somos bancos importantes, ¿cómo nos han ignorado?
No sé por qué nos apartaron del camino.
Tenemos la misma ilusión que cuando presentamos el proyecto la primera vez. Uruguay es un país que está geográficamente ubicado en el punto exacto donde tiene que haber una gran plataforma logística por la que entre y salga toda la riqueza , la importación y la exportación de toda la zona del Mercosur. Es un lugar privilegiado.
El proyecto Aurora contempla un desarrollo turístico a partir de Rocha hasta Punta del este incluso con la llegada de transatlánticos .El desarrollo que se puede hacer en Uruguay es inmenso”, concluyó el comerciante que encabeza el grupo Aurora,