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sábado, 12 de abril de 2014

TURISMO A LA VISTA. EXPECTATIVA EN “SANTA TERESA”. Por Julio Dornel

                                                  Escritor y periodista Julio Dornel





Si bien la costa rochense bañada por el océano Atlántico dispone de una cadena de playas  realmente fascinantes, es evidente que tiene otros lugares que se han ganado las preferencias del turismo que visita el departamento.
En los últimos años se viene incrementando una corriente de turismo ecológico con una marcada tendencia hacia los ríos, arroyos, lagunas, estancias turísticas y otros lugares, lejos del ruido donde la naturaleza suele mostrarse en todo su esplendor. En este sentido queremos destacar los parques nacionales de Santa Teresa y San Miguel, la cuenca de la Laguna Merín, el monte de ombúes, Cebollatí, las Sierras de San Miguel y el Cerro Picudo donde se puede disfrutar de los encantos de la naturaleza y una cultura local que tiende a desaparecer.


El departamento de Rocha hace muchos años que viene apostando al turismo con la intención de integrar los paisajes naturales a una programación que salga de los papeles y se convierta en la mayor promoción del Este uruguayo.
Es evidente que Rocha puede ofrecer una variada oferta turística  que va más allá de las playas atlánticas y que puede convertirse  en la palanca del desarrollo  económico y social de sus habitantes.
Sin embargo para ello se debe incentivar la actividad turística con iniciativas privadas y el estímulo de los organismos oficiales para fortalecer los proyectos de los operadores que luchan hace muchos años para mejorar la infraestructura turística.



De esta manera se podría mejorar la oferta y lograr una opción económica altamente rentable. En este sentido queremos destacar el trabajo que se viene realizando en el Parque Nacional de Santa Teresa para que los turistas puedan disfrutar de una cómoda estadía a pocos kilómetros de la frontera en una zona agreste y complementada por el Atlántico, la Laguna Negra, Punta del Diablo y La Coronilla. Es común que miles de carpas multicolores  se instalen en  las distintas zonas de campamento otorgando  una maravillosa complementación entre las bellezas naturales del complejo  y las reliquias históricas de nuestro pasado.

Cabe destacar finalmente las buenas condiciones que presenta el Parque y la preocupación demostrada por las autoridades que tienen a su cargo su administración al haber incorporado servicios elementales en beneficio directo del turista. A los artículos de primera necesidad que ofrecen los comercios debemos agregar las buenas condiciones de la caminaría interna, mejoras importantes en la zona de camping,  una eficiente información  turística y un correcto servicio de vigilancia. Una vez las zonas más frecuentas han sido el Chorro, Punta del barco, Cerro Chato y Las Achiras. Es posible que en la medida que los problemas de las ciudades van adquiriendo mayor relevancia  ante los ruidos molestos, los desórdenes del tránsito o la falta de limpieza, reconforta encontrar un lugar como la fortaleza para recomponer en pocos días las energías perdidas durante todo el año.
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