Sorpresivamente, para alivio de la humanidad,
entró en un“parate” la invasión y/o bombardeo unilateral a Siria por la
U.S.A. Es obvio que es una derrota para la política yanqui, teniendo
en cuenta la aparente resolución de obviar la aprobación e información a
la ONU, como se hizo en otra época en Iraq. Bombardean, masacran, y
después se acuerdan de avisar. Esta vuelta en cambio, se puede sacar
deducciones de esta repentina aparente marcha atrás. En primer lugar se
deduce, por información de las agencias estadísticas americanas que el
65 por ciento de la población de EE.UU. reprueba la guerra con Siria,
es obvio, que el pueblo americano está cansado de guerras en el siglo
XX con intermitencias, en la mayor parte, de apenas un año. Terminan una
y ya están empezando otra. Es fácil deducir que después de Siria no es
improbable que siga Irán. Miles de familias en la U.S.A lloran hijos
que murieron en lugares lejanos que ni conocen, ni saben sus costumbres
o perfilesy que poco o nada les interesa, más allá de su gobierno, si
los gobernantes de esos lugares son criminales o no, teniendo en cuenta
que muchos de ellos los pusieron los yanquis y al poco tiempo
terminaron ejecutándolos. Cierto es que en la economía del imperio pesa
y muy mucho la industria armamentista: fábrica de aviones drones entre
otros, astilleros, construcción de submarinos atómicos y demás
etcéteras. No es poca cosa como para no presionar distintas guerras. Si
no las hay, las inventan. Hay que colocar los excedentes. Pero además
han despertado no solamente en lo interno sino en lo externo la
indignación mundial. El parlamento inglés a título de ejemplo, más
fríos, se han concientizado de esta barbarie y le votaron en contra a
Cameron sus aspiraciones bélicas. Señalemos que entre otras decisivas
presiones como son las religiones, particularmente la católica con su
Papa Francisco, se han opuesto radicalmente en una posición valiente y
elogiable, esto sin perjuicio de otras profesiones de fe como los
islamitas.Es de señalar la actitud del ayatolá Ali Khamenei que
anunció que visitará el Vaticano para agradecerle la actitud a su
Santidad ante la probable criminal guerra a Siria. O sea, lo que nos
han anunciado del “criminal”Bashar al-Asadno es diferente a la de todos
los gobiernos opuestos a EE.UU. y que no difieren gran cosa con lo que
los propios norteamericanos han hecho y hacen en el resto del mundo.
En el siglo XX, como ya lo hemos dicho, si se suman las víctimas de
Hitler, Stalin, Mao, Pol Post, por decir algunos, no llega a lo que las
guerras norteamericanas en esta centuria han cometido, sin perjuicio
de las guerras mundiales, las Coreas, Camboya, la Guerra del Golfo, la
de Kosovo, más de 70 invasiones en América entre otras, para ir
queriendo rematar ahora con Siria y un poco más adelante con Irán. Sale
prestigiado Vladímir Putin de Rusia, no por bueno ni por malo, sino
por prudente. Teniendo una visión más humanista. Obama que había
empezado bien, con promesas de cerrar Guantánamo y retirar tropas del
Golfo, ni una cosa ni la otra, está terminando como el final de la
ópera Norma. No ha cumplido, hasta ahora las promesas que el mundo con
expectativa aplaudió y sigue siendo el mismo imperio totalitario y
absoluto que se sigue autodesignando el sheriff del mundo, sin que
nadie se lo haya pedido. Cuánto durará esta pacificación? Es
imprevisible. Y lo más positivo y elogiable es la actitud de las
profesiones de fe como la Iglesia Católica que se enfrenta por sí a una
decisión absoluta como es la de un imperio. Es muy cierto que las
religiones juegan con un plus imposible de enfrentar que es Dios. A ese
Señor no le importan las bombas atómicas con las que lo puedan
enfrentar. Y tiene un valor ético que influye en la opinión mundial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario