AMENAZA DE NUEVOS CORTES DE RUTAS Y DE VUELYA A LA HAYA
El País
A pocas horas de que Mujica informe al
gobierno argentino que permitirá a UPM aumentar su producción, ese
gobierno advirtió formalmente que para hacerlo debe haber
"negociaciones" entre los dos países y que si no volverá a La Haya.
Poco después de la finalización, este mediodía,
de la reunión del Consejo de Ministros, el presidente José Mujica
volará a Buenos Aires donde, en un acto de la firma Buquebus, coincidirá
con su homóloga de la Argentina Cristina Fernández.
El clima, aunque de festejo por la inauguración del
nuevo buque "Francisco Papa" de la empresa de Juan Carlos López Mena, no
será el más apropiado: la Cancillería argentina emitió anoche un
comunicado oficial advirtiendo que ambos países deben negociar un
eventual aumento de la producción de la planta fraybentina de UPM y que
si ese extremo no se lleva a cabo recurrirá a la Corte Internacional de
Justicia de La Haya.
En el comunicado, publicado anoche en el sitio web del
Ministerio de Relaciones Exteriores argentino, se reiteró que "la Corte
Internacional fijó el límite de producción en un millón de toneladas"
para la empresa UPM (ex Botnia), y que "es un error "hablar de un millón
cien mil", cuando emitió su dictamen luego de la controversia generada
por la instalación de la planta.
Mujica piensa hablar hoy con Fernández sobre una
fórmula para que ambos países avalen el aumento de producción pedido por
la empresa para su planta fraybentina.
Mujica no ha dicho en qué proporción planteará la
autorización a UPM. La empresa solicitó formalmente subir de 1,1
millones de toneladas de producción anual a 1,3 millones.
El propio presidente declaró días atrás a la agencia
noticiosa Bloomberg que ya había informado a la empresa, pero sus
voceros no lo confirman y están esperando un pronunciamiento oficial del
gobierno.
La decisión presidencial puede tener varios caminos.
Uno es concederle el aumento en toda su dimensión, es decir 200.000
toneladas más por año; otra posibilidad es que se le permita un aumento
intermedio, es decir de 100.000 toneladas pasando a 1,2 millones, en
este caso a cambio de algunos recaudos de tipo ambiental vinculados, por
ejemplo, con la temperatura del agua vertida al río Uruguay y con
la cantidad de fósforo.
Negociación.
Pero la Cancillería argentina tiene otra visión de la
cantidad de producción. "Todo cambio (en el volumen de producción) que
se realice en Botnia-UPM altera la sentencia de dicho tribunal. También
(la Corte) estableció que sea la Comisión Administradora del Río Uruguay
(CARU) la que asuma el control y vigilancia sobre los efectos de dicha
empresa sobre el río Uruguay. Ambos gobiernos ratificaron este
procedimiento", afirmó.
Argentina dice ahora que en marzo de 2012 "Uruguay
puso en conocimiento de la CARU una solicitud de aumento de producción",
y que en el mismo momento Uruguay también reconoció "que se
requiere la opinión de Argentina para decidir dicho cambio".
Y que oportunamente "la Argentina hizo saber al
Uruguay por intermedio de la CARU que la información recibida era
incompleta de acuerdo a los artículos 7 y 8 del Estatuto del Río
Uruguay y se solicitó información adicional para poder expedirse. La
Argentina reiteró en cuatro oportunidades la solicitud de información
sin recibir la información adecuada, por lo tanto aún no ha comenzado a
correr el plazo de 180 días para que la Argentina responda a la
solicitud uruguaya tal como queda estipulado en el artículo 8 del
Estatuto".
Por esta razón, Argentina consideró que "toda
decisión que se tome sin cumplir con dichos pasos procesales es
violatoria del Estatuto del Río Uruguay y de los posteriores acuerdos
firmados por las autoridades de ambas naciones".
Así, advirtió que si Uruguay "no espera los 180 días
luego de haber satisfecho el pedido de información argentino, o no haya
acuerdo entre las partes, el Estatuto del Río Uruguay establece que
debe resolverse por medio de negociaciones entre los dos países", y que
"en caso de no arribar a un acuerdo cualquiera de las partes puede
someter el diferendo a la Corte Internacional de Justicia".
Y concluye que "el interés de la empresa Botnia-UPM,
por más poderosa que sea, no puede promover la violación de fallos
internacionales ni acuerdos entre naciones hermanas. Y con ese espíritu
de respeto y amistad es que deben ser tratadas las presiones que intente
efectuar dicha empresa".
Larga data.
La decisión de acudir a La Haya por parte del
gobierno argentino, en caso de que Uruguay dispusiera aumentar la
producción de UPM venía manejándose en las últimas horas. El canciller
argentino Héctor Timerman dijo hace unos días -tras reunirse con el
gobernador Sergio Urribarri de la provincia de Entre Ríos- que su
gobierno será "inflexible" en su rechazo al aumento de producción de la
planta de UPM en Fray Bentos, porque se "aumentaría la contaminación" en
el río Uruguay.
Por su parte, el gobernador Urribarri señaló que si
Mujica autoriza a UPM incrementar la producción, el gobierno argentino
"tendrá que acudir nuevamente a la Corte Internacional de La Haya",
según informaron diversos medios argentinos.
En el último mes las tensiones con Argentina por la
planta de celulosa de Fray Bentos volvieron a reactivarse, luego de
conocerse que la empresa había solicitado al gobierno uruguayo aumentar
el tope anual para la producción de pasta de celulosa.
El jueves de la semana pasada, desde Nueva York, el
presidente Mujica anunció que planea darle la autorización a UPM, pese a
que el gobierno argentino ha expresado reparos.
LE PIDEN AL PAPA QUE INTERCEDA
La Asamblea Ambiental de Gualeguaychú se declaró "en
estado de asamblea permanente" ante la posibilidad de que la pastera
UPM (exBotnia) aumente su producción. Además el grupo pidió la
intervención del papa Francisco porque se sienten "indefensos ante tanto
poder". "Santo Padre Francisco: nos sentimos indefensos ante tanto
poder, solicitamos su intervención. Humildemente rogamos su oración, su
gesto, su ayuda, intercediendo ante los poderosos del mundo, para poder
seguir sintiéndonos fieles custodios de la creación de nuestro Señor",
dice la misiva, para agregar que "nos animamos a mostrarle nuestra
angustia y desesperación por la situación que padecemos", concluye la
carta al Papa.
Piqueteros protestarán hoy ante los dos presidentes
Fray Bentos | Daniel Rojas
Integrantes de la Asamblea de Gualeguaychú
manifestarán esta tarde en la puerta de acceso de la empresa Buquebus en
Buenos Aires, cuando Cristina Fernández y José Mujica se encuentren en
la inauguración del nuevo barco "Francisco Papa".
Ayer, mientras tanto, volvieron al kilómetro 28
de Ruta 136, paraje Arroyo Verde, donde durante cuatro años bloquearon
el paso al puente internacional San Martín que conecta con Fray
Bentos.
Desde que se conoció el pedido de aumento de
producción por parte de UPM, hasta el anuncio de que el gobierno
uruguayo accederá al planteo con algunas exigencias, las acciones en la
otra orilla del río Uruguay se han multiplicado a tal punto que la
asamblea se declaró en sesión permanente.
El malestar es creciente en Entre Ríos y ya no sólo
los activistas se pronuncian en favor de volver a la Corte de Justicia
de La Haya. El gobernador provincial y el intendente de Gualeguaychú han
manifestado su voluntad de recurrir a tribunales internacionales si
finalmente la planta de celulosa comienza a producir 1,3 millones de
toneladas anuales.
Ayer medio centenar de personas se reunió a un
costado de la ruta para entregar volantes a los automovilistas que
cruzaron desde y hacia Uruguay mientras la amenaza de apostarse
nuevamente en Arroyo Verde, crece acorde a las noticias que van
surgiendo en Buenos Aires y Montevideo.
El corte "es muy probable" reconoció a El País el
médico Martín Alazard, consultado acerca de la proximidad de la
temporada en la que el puente San Martín se convierte en el mayor paso
de personas de Uruguay.
"Si no hay una lucecita en el camino que avizore la
solución del conflicto con la disminución de la afectación, esto va a ir
`in crescendo` en la medida que las noticias son cada vez más
adversas", sostuvo el asambleísta.
Hoy viajarán a Buenos Aires por doble motivo. A
las 11 de la mañana se entrevistarán con el secretario de Medio Ambiente
de la Nación, Juan José Mussi y representantes de Cancillería, mientras
que sobre las 19:30 horas se trasladarán hasta las oficinas de
Buquebus, donde los presidentes Cristina Fernández y José Mujica
participarán de la inauguración de un moderno buque construido para unir
la capital argentina con Colonia. Los activistas tienen previsto
manifestarse con pancartas.
"La asamblea ha entrado en un estado deliberativo
permanente, de alerta, producto de las situaciones nuevas que van
apareciendo. Ya no quedan dudas de que Mujica autorizará a UPM el
aumento de la producción y eso es considerado como un aumento de la
contaminación. De hecho el propio Mujica ha planteado que hay una
alteración del ecosistema a través del aumento de la temperatura del
agua y de sustancias químicas contaminantes como el fósforo", denunció
el activista.
Alazard recordó que la campaña "decayó cuando empezó
a funcionar Botnia porque fue una bofetada que nadie creía. La segunda
bofetada la recibimos de nuestro propio gobierno que pasó de declarar la
lucha del medio ambiente como causa nacional a judicializar a los
asambleístas", dijo el activista Alazard que no descarta volver a la
ruta en el transcurso del próximo verano
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