PSICÓLOGA
ESTELA PEREYRA
“CONVERSAMOS
CON LA COMPUTADORA PORQUE YA NO TENEMOS CON QUIEN”.
Escribe
Juan José Pereyra
En diálogo
con El Este la profesional aseguró que es muy importante “darse
cuenta que lo que está imperando en nuestra cultura es una locura
irracional por tener cosas antes que ser”.
Analizó
la desintegración de la familia, la pérdida de valores y las
consecuencias de la globalización.
“Creemos
que sabemos de todo pero las cosas que realmente hay que saber no se
saben”, afirmó.
“La
farmacología en ansiolíticos es hoy la que da más ganancias en el
mundo, segundo está la industria alimenticia y tercero el
armamentismo”, destacó.
Este es un
resumen de una extensa entrevista.
“LA
GENTE SE HA OLVIDADO DE PENSAR.”
En este
mundo tan globalizado aparentemente todos sabemos de todo. Creemos
que sabemos de todo pero las cosas que realmente hay que saber no se
saben.
La gente
se ha olvidado de pensar. Se dan situaciones muy complejas y muy
tristes que han traído aparejada una enorme incomunicación cuando
se nos hacer creer que los avances tecnológicos nos han traído un
mundo nuevo de comunicación. Y en este contexto se da además el
fenómeno de culpabilizar a los jóvenes. A los adultos nos ha
costado mucho adaptarnos y adoptar el lenguaje, el manejo que hacen
los jóvenes. Son diferentes, son rebeldes y eso es natural y bueno
pero “la cultura” no lo ve bien.
Hay una
gran carencia de reconocimiento a los jóvenes que necesitan mucha
atención y no se les da. No hay quien hable con ellos.
CONVERSANDO
CON LA COMPUTADORA
Ha
habido obviamente una desintegración de la familia porque la
sociedad en la que uno está inserto lleva a que importe más tener
que ser. Lleva a que importe más que la mujer salga a trabajar para
comprarse una pilcha más o un televisor plasma a quedarse en la casa
y compartir con sus hijos otras cosas. Todo es muy discutible y como
no hay tiempo para pensarlo y evaluar qué es más sano, estamos
pagando muy caro todo esto a nivel del mundo.
Uruguay,
al igual que Argentina tiene una característica muy peculiar, con
raíces españolas e italianas muy fuertes, donde la familia tenía
un peso muy grande, donde la madre jugaba un factor de columna
vertebral en el núcleo familiar.
Hay una
disociación de nuestra historia frente a todo ese mundo, nos vamos
desarraigando y nos vamos convirtiendo en seres muy individuales y
terminamos conversando con la computadora porque ya no tenemos con
quien conversar.
UNA
REALIDAD QUE NOS ARRASA
Ya
no está aquel núcleo familiar donde estaba la abuela, los tíos,
los primos. No hay un liderazgo en el medio familiar que se imponga
frente al consumismo. No se puede. Por más que uno tome conciencia
es arrasado por eso, nos pasa a todos.
Yo marco
una diferencia: es muy importante darse cuenta. Darse cuenta que lo
que está imperando en nuestra cultura es una locura irracional por
tener cosas antes que ser.
A eso se
suma una falta de valores y todo se traslada a todas las esferas,
políticas, gubernamentales, de poder y termina en los jóvenes. No
podemos echarles la culpa, tenemos que revisar nuestra historia y ver
qué les estamos dando como padres, como familia, como sociedad.
Puede
parecer estúpido hablar del amor en este tiempo de violencia. Se
habla demasiado de las cosas malas y poco de las buenas. Estamos en
un gran momento para hablar del amor que tienen que tener los adultos
para con los jóvenes y no la violencia de los adultos para con los
jóvenes.
POR QUÉ
EL TIEMPO “VUELA.”
Me lo he
preguntado desde un punto de vista físico matemático y desde el
punto de vista cultural y creo que tienen que ver las dos cosas. Hay
información que no nos llega, que no se nos da como se debiera.
He hablado
con una persona muy metida en la Física de alto nivel, un genio en
Matemática y Física en el Uruguay.
Le
pregunté y me explicó que ha habido un corrimiento mínimo en el
eje de la Tierra y eso está produciendo toda una sensación de
velocidad que no se da a conocer para no provocar temor. Eso nos crea
un trastorno que tiene que ver con los tiempos reales, y se da más a
determinadas horas.
Por otro
lado también está la vida que hacemos. Yo me levanto tempranísimo
todas las mañanas y me digo que ese tiempo me lo dedico a mí porque
después que arranqué ya no paré, como no para nadie.
SIN
PENSAR Y PASADOS DE REVOLUCIONES
Eso tiene
que ver con ese aceleramiento, sumado al interno, porque estamos
pasados de revoluciones. No nos detenemos a pensar si esto lo hago
porque me gusta hacerlo, porque me da plata, porque me interesa, ¿por
qué hago esto?
Hablo con
jóvenes y les digo que está bien que estudien, los que lo hacen,
pero también tienen que tener tiempo para disfrutar y que hagan
cosas que sean disfrutables.
Hay padres
que imponen el “tienes” y atomizan a sus hijos con: tienes que
estudiar inglés, tienes que hacer gimnasia, tienes que hacer
computación, tienes que jugar al básquetbol. Muchas veces eso no
viene desde el lugar de los chicos sino del deseo de los padres.
El chico
se ve obligado a hacer una cantidad de cosas que no le permiten de
repente jugar con otros chicos y hacer picardías y tocar el timbre y
salir corriendo, cosas que a los gurises les encanta. Y no pueden
hacerlo porque no tienen tiempo para ese disfrute. Y eso no es
portarse mal, es parte del proceso de la infancia, como sería normal
que los jóvenes se reunieran y discutieran pero ya no tienen tiempo
para eso. Se reúnen para consumir drogas porque no hay elementos de
contención afectiva que lo permitan.
LA
PODEROSA INDUSTRIA DEL ANSIOLÍTICO
Todos
estamos sufriendo nuevos males que se dan a nivel individual, por
ejemplo pánicos y fobias que tienen que tener una base cultural para
que se den.
En la
época de Freud se daban otro tipo de problemáticas como la
represión, la inhibición. Hoy se dan mucho más los mecanismos de
defensa como la negación de la realidad o la renegación, que es ver
la realidad y renegarla.
Es un
mecanismo típico de determinadas estructuras de personalidad.
Hoy se
está dando mucho más dentro de las estructuras neuróticas todo lo
que tiene que ver con las fobias, con las neurosis obsesivas.
La
farmacología en ansiolíticos es hoy la que da más ganancias en el
mundo, segundo está la industria alimenticia y tercero el
armamentismo.
https://www.facebook.com/notes/graciela-cotelo-kagelmacher/las-soledades-posmodernas-y-las-redes-de-amor/10201457078375865
ResponderEliminarQuizá esto sirva para ilustrar por supuesto que sin la profesionalidad de Estela lo que se siente hoy en día
Graciela Cotelo
Gracias Graciela! Lo leí,está muy bueno! Un beso
Eliminarhttp://www.ebiblioteca.org/?%2Fver%2F63092
ResponderEliminarY esto
graciela