Mario Kreutzberger Blumenfeld, el verdadero nombre del también creador
de los "teletones" solidarios, nació el 28 de diciembre de 1940 en
Talca, Chile, país al que sus padres, judíos alemanes, habían llegado
ese año huyendo del régimen nazi.
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Don Francisco: Sábado Gigante dice adiós | Televisión | EL PAÍS
La Convención Nacional del Partido Colorado se reunirá este sábado para decidir qué tipo de sanciones aplicará a
los 15 dirigentes que en las últimas elecciones decidieron apoyar a
candidatos no colorados.
La comisión de ética del partido
recomendará "amonestar" a los dirigentes que votaron o militaron a favor de candidatos del Partido Nacional, el Frente Amplio o de la
Concertación en el caso de Montevideo.
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Colorados impulsan amonestar a Jorge Batlle | Partido Colorado
Escritor y periodista Julio Dornel
Dos jóvenes artistas de esta ciudad, Rodrigo Ramos (Escuela de Cine del Uruguay) y Flavio Silva ( Escuela Técnica de Comunicación y Diseño) han elaborado un proyecto revolucionario que apunta a crear sobre la Avenida Internacional, una escultura referencial de la ciudad, que funcione como postal y carta de presentación para recibir al turismo que llega diariamente a esta frontera. Exponiendo los motivos del proyecto sus autores han señalado que no se debería concebir la identidad de un pueblo tan solo por los negocios establecidos, y que la fotografía turística sea la inexistente marquesina de la vieja "Magazine Chuí" o el cartel de "Bienvenido a la República Oriental del Uruguay" en la panamericana frente a los bomberos. Si analizamos la región, en el balneario Barra de Chuy aparte de tener el mar y la escollera del arroyo Chuy, existe la escultura bien lograda de "La Mano" que con el pasar del tiempo forma parte de la identidad de los habitantes de la Barra, punto de referencia en todas partes, abundando las fotografías en la web y en guías turísticas; así mismo, Barra do Chuí Brasil, posee como identidad al faro de dicho balneario. Ejemplos abundan, toda ciudad, pueblo o villa, tiene un punto turístico para identificarse y poder tomarse una fotografía más allá de la infraestructura o rubro a que se dediquen sus habitantes. El Chuy carece de dicho elemento, no se ha logrado tener una imagen consuetudinaria como referencia artística para los habitantes y para el turista; ya sea por desidia, las plazas, los marcos divisorios, etc., están olvidados y lejos del casco céntrico del pueblo como para que el turista se sienta en la necesidad de tomarlo como punto de referencia de nuestra ciudad. Es por este motivo que este colectivo quiere cambiar ese paradigma, después de muchas reuniones entre nosotros consideramos que es necesario identificarnos con algo, un monumento artístico que identifique a todos los chuienses. Lo que nos convoca, nuestra idea y su enfoque no se trata del solo hecho de erguir un monumento. Hablamos de la ciudad que los brasileños consideran más al sur de su país, estamos en el punto donde realmente nace el sol de la patria de los uruguayos; es la única ciudad fronteriza en el mundo entero que en los dos países poseen el mismo nombre, no nos referimos en plural cuando hablamos de Chuy/Chui sino que es una única ciudad en lo singular de la palabra; estamos en un lugar donde la paz reina con muchos emigrantes en un lugar tan pequeño, sin importar la religión, costumbre o forma de pensar, aquí dejamos la huella, el ejemplo de un mundo donde puedan convivir muchas culturas en fraternidad. Por eso, después de esta ardua investigación, es que llegamos a definir nuestro proyecto, que por cierto es inédito en estas latitudes. Con una técnica única perfeccionada por Julian Voss- Andreac es que decidimos, crear un marco divisorio particular, que no existe en ninguna parte del globo, al alcance del turista para poder llevarse un recuerdo del Chuy en una fotografía, de tal forma que plasme la idea de la unión que hay entre los pueblos y que “frontera” no sea tan solo la palabra simple y concreta que aparece en los tratados del mundo o en libros de historia. Es así, que si bien tenemos un límite, el mismo es imaginario y tan solo administrativo. Es tan grande la hermandad de culturas y países que posee nuestra ciudad que la frontera para nosotros es una línea inventada, que no divide sino que multiplica y potencia la determinación de un pueblo. La idea de nuestra escultura es que veas que existe un marco divisorio pero al colocarse de frente, con los pies en esa “línea imaginaria”, este desaparezca, pero más que quedar invisible, se funde con su entorno para que veas a través de él una única ciudad, la ciudad de Chuy, la frontera de la paz. En próximas ediciones ofreceremos más detalles sobre este proyecto que contaría con el apoyo de las autoridades municipales y la población de ambas ciudades fronterizas.
“¡Váyanse!”, fue lo más suave que algunos nacionales les gritaron a
las familias de refugiados sirios en la plaza Independencia la semana
pasada. “Sólo faltó que les tiraran piedras”, relató a Brecha –respecto
del ambiente que se vivió en la plaza– Lourdes Buzakr, directora de uno
de los programas educativos que recibió a algunos de los refugiados. Los
uruguayos se quejan: de lo cara que es la vida, de lo malos que son los
sueldos, del mal funcionamiento de los servicios, se organizan y
protestan. Al sirio que quiso hacer lo mismo, que con sus pocos recursos
y su escaso vocabulario logró formular un reclamo frente a periodistas
que no tenían ni tiempo ni, en muchos casos, interés por comprender cuál
era su situación, se lo llamó “de-sagradecido”.
En las redes, la conmiseración que la semana anterior había provocado
la fotografía de un niño sirio ahogado en las costas turcas se
transformó rápidamente en insultos a los refugiados en nuestro país.
Hasta ahí llegó, al parecer, la solidaridad uruguaya. Al instalarse
los extranjeros frente a la Torre Ejecutiva, en una acción colectiva de
protesta, el uruguayo promedio sintió que el honor patrio estaba siendo
casi que mancillado. Inmediatamente brotaron en los medios las más
variadas opiniones sobre supuestas barreras culturales que harían
imposible su arraigo en Uruguay, concebidas la más de las veces por
personas que nunca cruzaron una palabra con estas familias sirias.
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Hacerse cargo - Brecha
