¿Los tribunales? Cerrados la mayor parte del tiempo. ¿Las oficinas para registrar un negocio? Igual. ¿El ministerio público? Se ha transformado
en una venta de alimentos para empleados del gobierno.
Poco a poco, Venezuela ha comenzado a paralizarse.
Los habitantes de este país llevan años acostumbrados a una aguda escasez, incluso de alimentos básicos. Sin embargo, Venezuela continúa adentrándose en territorio inexplorado.
Hace poco el gobierno adoptó una medida desesperada para ahorrar electricidad: decretó el cierre temporal de muchas de sus oficinas que ahora solo trabajan dos días por semana (de 7:30 de la mañana a 13:00).
Hace poco el gobierno adoptó una medida desesperada para ahorrar electricidad: decretó el cierre temporal de muchas de sus oficinas que ahora solo trabajan dos días por semana (de 7:30 de la mañana a 13:00).
Clic en este enlace
El momento oscuro de Venezuela: hambre, apagones y un gobierno paralizado – Español