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sábado, 2 de diciembre de 2017

LA HISTORIA DE LA NIÑA QUE A LOS CUATRO AÑOS YA VENDÍA “CUALQUIER COSITA” Y HOY ES LA DUEÑA DE DOÑA ROSA, LA PRIMERA TIENDA DE ALIMENTOS NATURALES DE ROCHA.








Escribe Juan José Pereyra Twitter@juano500

Valeria Talayer es muy joven. Trabaja y estudia desde hace años. En marzo pasado decidió iniciar un nuevo emprendimiento: una verdulería y frutería muy especial, que fue agregando nuevos servicios a la gente de la ciudad de Rocha.
Desde muy chica “le tiró” la venta: “mis padres tenían almacén, yo a veces lo atendía cuando no me veían, tenía unos cuatro o cinco años. No sabia sumar ni contar pero la atención al cliente... ¡un espectáculo!”, cuenta entre risas.
“Me gustaba mucho vender, vendía cualquier cosita. Cuando tenía cinco años escribí en una piedra “se venden caracoles” y claro me compraban solo por dejarme contenta. A los siete le pedí a mi madre que me hiciera plantas y con un carrito con ruedas de bici recorría la vuelta de casa vendiendo plantas con dos amigas y eso lo repetí varios años...me encantaba poder comprarme mis cosas. Además hice artesanías, collares, hasta comida para vender.
Aunque no tenía nada conscientemente planeado para mi, podría decirse que igual he continuado con la línea, me gustaba vender y hoy en día lo sigo haciendo”, asegura.

En entrevista exclusiva con el Blog, Valeria contó por qué decidió poner un comercio tan especial, por qué pintó un mural en el que homenajea a sus artistas preferidos y qué siente al ver cómo reacciona la gente al llegar a su comercio y encontrarse con esos genios de la pintura.
Doña Rosa está en la esquina de Florencio Sánchez y Sarandí, un lugar histórico de la ciudad. Allí funcionó durante décadas el famoso Almacén de Ramos Generales de don Carolino Féola, una postal de la ciudad y la vida comercial del siglo pasado.

Este es un resumen de la charla con Valeria Talayer.

-Eres muy joven para estar al frente del negocio. ¿Cuántos años tienes y qué hacías antes de Doña Rosa?

Tengo 27 años, antes de Doña Rosa estudiaba y trabajaba, aun trabajo en el mismo lugar que es la Dirección Nacional de Transporte. En el estudio he hecho un paréntesis por el momento pero no lo siento para nada definitivo.

-Cuéntame algo de tu familia, de tus recuerdos de la escuela y el liceo y qué te gustaba más, qué planes hacías para ti.

Soy la menor de cinco hermanos, somos tres mujeres y dos varones, nos criamos en un hogar bastante tradicional. Mis padres tenían almacén, yo a veces lo atendía cuando no me veían, tenía unos 4 o 5 años, no sabia sumar ni contar pero la atención al cliente... ¡un espectáculo! (risa)
Siempre fui muy tímida y aplicada en la escuela, quería llegar a Sexto y ser abanderada, cada año estaba pendiente de terminarlo con sobresaliente… fui escolta, no fue muy grato para mi en ese momento, pero igualmente estaba orgullosa de acompañar los pabellones.
El paso por el liceo ya fue diferente, hubo épocas de rebeldía, no tenía muchas esperanzas de irme a Montevideo a estudiar lo que me gustaba y en 5to abandoné. Luego retomé al año siguiente para poder estudiar algo terciario, aun no estaba decidida qué, pero lo importante era estar preparada para un próximo paso. Terminé el liceo e hice un curso técnico terciario en UTU, a su vez trabajaba y me mudé a Rocha para estar cerca. Al terminar el curso, para mi felicidad, llegó Bellas Artes al Cure y enseguida me inscribí. Tenía muy buenos compañeros y de todas las edades, una experiencia muy enriquecedora. El año pasado estaba cursando administración y contabilidad en el Cure, en este momento hice un paréntesis en los estudios por no poder dedicarle el tiempo que conlleva.
Nunca tuve planes claramente definidos, pero me gustaba mucho vender, vendía cualquier cosita. Cuando tenía cinco años escribí en una piedra “se venden caracoles” y claro me compraban solo por dejarme contenta. A los siete le pedí a mi madre que me hiciera plantas y con un carrito con ruedas de bici recorría la vuelta de casa vendiendo plantas con dos amigas y eso lo repetí varios años...me encantaba poder comprarme mis cosas. Además hice artesanías, collares, hasta comida para vender.
Aunque no tenía nada conscientemente planeado para mi, podría decirse que igual he continuado con la línea, me gustaba vender y hoy en día lo sigo haciendo.

- Algo que llamó la atención fue que una verdulería en un barrio tenga un mural pintado por ti en homenaje a Picasso, Frida Kahlo , Van Gogh y Dalí. ¿Por qué se te ocurrió inaugurar el negocio con una obra de arte?

Siempre me gustó dibujar, siempre me llamó la atención el arte. Antes de abrir se me ocurrió pintar algo e invité a mi hermana Nelly. Lo que hicimos fue un humilde homenaje a nuestros artistas favoritos, no sé si es una obra de arte pero es una forma de sentirlo propio, me encanta lo que hicimos, el momento compartido mientras se desarrollaba.. es un conjunto de cosas… y es nuestra forma de expresarnos, no pretende ser copia fiel, sino algo propio.


-Doña Rosa trajo una propuesta de frutas y verduras de primera calidad y además productos que la gente cada vez mira más y comienza a utilizar y que son muy difíciles de encontrar en Rocha. Granos, semillas, todos en gran variedad y que la gente puede comprar en pequeñas cantidades para ir probando. Hay una decisión cada vez más fuerte de elegir alimentarse sanamente y esa posibilidad la ofrece Doña Rosa.¿Cómo se te ocurrió embarcarte en algo que no sabías si la gente valoraría?

Surgió de la propia necesidad, de buscar y no encontrar, o de encontrar y que sea de mala calidad, viejo o envasado en grandes cantidades… empezó el plan, una tienda de alimentos con variedad y sobre todo calidad.
La parte de vender frutas y verduras de calidad es por la misma razón. No hay que olvidar que somos clientes también, el elegir uno mismo en el mercado no lo cambio por nada, vamos al mercado con la idea de conseguir calidad y cosas nuevas.
Si sería valorado o no, eso nunca se sabe, y creo que gran parte de las cosas que no se hacen es por miedo a que algo salga mal. Yo siempre digo que lo mejor es arriesgar, y si eso va mal, hay que ir a por otra cosa.

¿Cuando abrió Doña Rosa?

Doña Rosa abrió el 21 de marzo de este año.

-En estos meses se ha ido dando un cambio muy interesante. Se mantiene la oferta de frutas y verduras, incluso orgánicas, y con mucha fuerza el comercio se ha transformado en una tienda de alimentos naturales como las que se pueden encontrar en las grandes ciudades en todo el mundo.
Cuéntame cómo fuiste desarrollando esta parte de tu negocio y cómo ha ido creciendo el interés de la gente.

Lo que vamos logrando es la vista que nos imaginamos desde los comienzos, nos estamos acercando a la idea original, teníamos que ir acostumbrando a la gente e ir haciendo la clientela para ir incorporando productos.

-En el último tiempo, además de lo natural has incorporado productos para celíacos y diabéticos. ¿Qué puede encontrar la gente que tiene estas necesidades especiales en su alimentación o la de sus familiares?.

Tenemos para diabéticos todos los sabores de mermeladas y dulces Los Nietitos, gelatinas, postres para preparar, cereales, y queremos seguir incorporando productos.
Contamos con gran variedad en productos aprobados por ACELU; mezcla de tres harinas, harina de arroz, variedad de féculas, goma guar y xantica, además de las mezclas de bizcochuelo, pan, scones, y más.

-Cuando uno entra a Doña Rosa ve una enorme variedad de productos, muchos desconocidos, importados y hasta exóticos, como orejones de Turquía. ¿Se va animando la gente a probar? ¿Cómo reacciona ante lo nuevo y variado que ustedes ofrecen?

Escuchamos mucho el comentario de que no prueban porque nunca comieron, pero damos a probar, a veces no gusta y otras veces se han vuelto clientes de esos productos que justo no conocían. La mayoría de la gente ha reaccionado con entusiasmo incluso se armó hace poco en Facebook un grupo para compartir platos, recetas y opiniones, se llama “Doña Rosa - Tienda de alimentos”.
Hemos tenido buena respuesta de la gente y eso nos inspira a seguir y mejorar.

-Un clásico ya de Doña Rosa es el café molido a la vista, algo tan fácil de conseguir hace algunas décadas y que hoy solo ustedes tienen. ¿Por qué se te ocurrió y cómo responde la gente?

La ocurrencia del café no fue mía, en un momento estaba hablando con una vecina, Ana, y un amigo, Diego, quien fue el carpintero detrás de los muebles que tenemos desde el principio y salió el tema del café molido a la vista, y sinceramente me encantó y no se dudó ni un minuto y decidí que era algo que debía incorporar a la tienda.

-Es muy importante que quienes no conocen Doña Rosa sepan lo que van a encontrar. Te pido que me des un detalle de lo nuevo, lo que difícilmente se pueda encontrar en almacenes y supermercados.

Si te fuera a hacer un listado seria muy grande en la parte de frutos secos y semillas pero vamos a hacer un resumen;
Pasas de uva negra y rubia, ciruela con y sin carozo, arándano, dátiles con y sin carozo, orejones de durazno y damascos, fruta brasilera picada, mango y jengibre deshidratado, Nueces, almendras, castañas, avellanas, Semillas de zapallo, girasol, chía, lino, quínoa blanca y roja, mijo pelado, cous cous y muchísimo mas
Variedad de harinas; de arroz, de lino, de garbanzo, integral.
Productos para celiacos, productos orgánicos en variedad..
Frutas y verduras en variedad; papaya, arándanos, ananá, moras, caquis, chauchas, chauchas alubia, arvejas, espárragos, mostaza, kale, rúcula, espinaca, jengibre, radicheta, berenjenas ..
La lista es muy larga, pueden visitarnos de lunes a sábados 8.30 a 13.30 y de 16 a 21 y los domingos de 8 y 30 a 13 y ver un montón de productos más que no nombré.