Implicados en secuestro
de la ginecóloga –Justicia dispuso cinco procesamientos– dijeron que la
eligieron sin mayor información; tenían estructura para consumar más
raptos
El Observador
La jueza en lo penal de 10ª turno, Dolores Sánchez, procesó anoche
con prisión a cinco personas por su responsabilidad en el secuestro de
la ginecóloga Milvana Salomone.
A Gustavo
Lepere Medero, poseedor de antecedentes penales e identificado como jefe
de la banda, le imputó "un delito de secuestro en concurrencia fuera de
la reiteración real con un delito de incendio".
La
magistrada también procesó a O.S.F. por "un delito de secuestro en
calidad de coautor", a A.E.R.A. como "coautor de un delito de secuestro
en concurrencia fuera de la reiteración con un delito de incendio en
calidad de autor", a A.M.L como "presunto autor de un delito de
encubrimiento" y a M.C.F.C como "presunto autor de un delito de
receptación", según informó el Poder Judicial en su página web.
La
fiscal María de los Ángeles Camiño había solicitado anoche el
procesamiento con prisión de cinco de los 12 mayores detenidos el martes
por el secuestro de la médica.
"La Fiscalía ha
podido solicitar cinco procesamientos. Todos con prisión", dijo a la
prensa la fiscal, quien además informó que siete de los detenidos
quedaron en libertad "y por ahora sin perjuicio".
Camiño
también señaló que los delincuentes tenían lista una estructura para
realizar más delitos de ese tipo. "Tenían una infraestructura preparada
para más secuestros", dijo.
Según señaló, la investigación sigue abierta e incluso una persona continuaba prófuga hasta ayer.
En
tanto, según supo El Observador, uno de los procesados estaba en buena
posición económica y tenía cuatro taxis. Otro de los procesados es un
entrenador vinculado con el boxeo.
El eslabón perdido
Según explicó Camiño, desde que Salomone fue tomada como rehén hubo
"muchísimas reuniones de coordinación". Aseguró que se trabajó con la
víctima y su familia "con una reserva tal que ustedes muchas cosas no
saben y tal vez no las sepan nunca".
Al ser
consultada por los motivos de por qué la banda eligió a la ginecóloga
como secuestrada, la fiscal prefirió no contestar. "Eso está dentro de
la investigación. Yo diría que se lo pregunten a las autoridades
policiales. No me puedo expedir sobre ese tipo de detalles", comentó.
En
ese sentido, al referirse a las razones que llevaron a los delincuentes
a enfocarse en la médica que permaneció cautiva durante 29 días, uno de
los investigadores que desarticuló el secuestro dijo anoche a El
Observador que "ese es, por el momento, el eslabón perdido".
En
sus declaraciones, el jefe de la banda, Lepere Medero, se negó a
confesar cómo llegaron hasta la profesional. Uno de los detenidos ensayó
una declaración acerca de que eligieron una zona pudiente al azar.
Planificación
La casa donde estuvo secuestrada la médica ginecóloga Milvana Salomone.N. Garrido
Para la Policía no cabe ninguna duda de que el secuestro fue
planificado con tiempo, y que los secuestradores conocían a la víctima y
los lugares que frecuentaba. "Nadie se cree que la hayan elegido al
azar. La eligieron por algo, pero se ve que es lo suficientemente grave o
pesado que no lo quieren decir", afirmó una fuente allegada a la
investigación.
En tanto, el jefe de Policía de
Montevideo, Mario Layera, en declaraciones realizadas ayer en el
programa En perspectiva de Radio Oriental, sostuvo: "Hasta ahora no
podemos confirmar más allá del tema del secuestro. Todo el resto de
posibilidades, hipótesis y todo lo demás, no se corresponden con los
hechos que hoy conocemos".
Consultado sobre
cuál es la razón por la que los secuestradores apuntaron contra
Salomone, Layera respondió: "Ahora no le puedo contestar".
La médica de 48 años, que había sido secuestrada el 17 de mayo
cuando llegaba a su casa del Parque Batlle al regresar de Florida, su
departamento natal, fue liberada el martes sobre las 7 de la mañana en
una zona rural cercana a Progreso, por la ruta 32, muy cerca de donde
está ubicado el haras de su hermano.
La familia
de Salomone había pagado el viernes el rescate de US$ 300 mil. El
responsable de entregar el dinero (que fue recuperado casi en su
totalidad en los allanamientos realizados tras la aparición de la
médica) fue su marido, que fue guiado por los secuestradores hasta Punta
Gorda, donde pagó el rescate.
La investigación
policial detectó y reunió datos sobre los secuestradores con bastante
antelación a que se produjera la liberación de Salomone, pero se tomó la
decisión estratégica de esperar y seguir sus movimientos.
Tareas
de vigilancia, análisis del cruce de llamadas y hasta información
aportada por reclusos fueron claves para la investigación, que en todo
momento fue coordinada por altos mandos policiales y por la jueza
Sánchez y la fiscal Camiño. "Acá se quiso priorizar la vida", dijo el
martes el abogado Jorge Barrera, quien representó a la familia Salomone
en el proceso.
El jefe de Policía de Montevideo, Mario Layera, dijo
el martes que hubo "circunstancias que se filtraron y dificultaron la
investigación". Entre ellas, mencionó la divulgación en los medios de un
video de una cámara de seguridad que mostraba un auto negro que seguía a
la camioneta de la médica, que tras el secuestro apareció incendiada en
Sayago.
Aislados y uniformados
En
tanto, el director nacional de Policía, Julio Guarteche, informó que
siguiendo instrucciones del ministro del Interior, Eduardo Bonomi, los
procesados serán alojados en un sector aislado del penal de Libertad,
con 80 plazas, específico para reclusos con mala conducta y
secuestradores. "Va a haber un nivel diferente dentro del penal, un
nivel de mayor dureza. Los individuos estarán aislados, con uniformes,
sin radio, ni televisión", aseguró Guarteche al ser entrevistado ayer en
el programa Pisando Fuerte de Metrópolis FM.
"Es un endurecimiento del sistema de progresividad que se está instalando en las cárceles", dijo.