Los socialistas están embretados por sus diferencias internas
+ Gonzalo Charquero y Mayte De León
El Observador
Los sectores del Frente Amplio (FA) negociarán hasta
el último día del año por las candidaturas para la Intendencia Municipal
de Montevideo (IMM). Mientras el llamado grupo de los ocho espera la
respuesta de la senadora Lucía Topolansky para impulsarla, el Frente
Líber Seregni (FLS) aguarda una resolución oficial del Partido
Socialista (PS) para definir su postura.
Ante los vaivenes del acuerdo entre socialistas y el FLS por la
candidatura a la comuna capitalina, en el astorismo comienzan a manejar
alternativas para la contienda municipal y una de las posibilidades es
presentar un candidato propio del sector. El dirigente sindical de la
bebida, Richard Read, que suena como eventual candidato, manifestó a El
Observador estar pronto para asumir ese desafío.
Consultado sobre si aceptaría ser candidato a la IMM, el dirigente
afirmó que no tuvo ningún ofrecimiento formal pero dejó claro que la
idea lo seduce.
“Es como sentar a un jugador de fútbol aquí y preguntarle si quiere
jugar en la selección. ‘No, hay tantos buenos jugadores en el puesto
mío’. Mentira. Querés jugar. O un militante sindical que le digan si
quiere ser presidente del sindicato. Todos queremos estar, y eso es así.
Después, con la humildad que tenemos que tener, ¿no? Porque si nos la
creemos y las luces te encandilan, es como dice el Pepe (por el
presidente José Mujica): difícil que el chancho chifle. Yo sé que voy a
estar aportando con el voto y llevando a mi familia y amigos que voten
por el Frente. Y seguramente el equipo del Frente, el programa único del
Frente, va a hacer posible que sacudamos ese Montevideo disfrutable y
que lo padecemos”, dijo Read.
Más allá del lugar que ocupe, el dirigente sindical de la bebida
insistió en que trabajará en la campaña de Montevideo a favor del Frente
Amplio y mencionó planes para la ciudad.
“Montevideo debería ser como esas camas que no se tienden desde hace
días, hay que agarrar la sábana de abajo y sas, sacudirla. Precisamos un
sacudón importante, de mirar el Montevideo no 2015 ni 2020, mirar el
Montevideo 2030, 2035. Imaginar el Montevideo vial, del transporte, si
vamos a seguir con esta locura, donde en avenida Italia desde Comercio
hasta Propios hay alrededor de 180 coches en hilada y de los 180, 160
van con uno solo sentado adentro. La locomoción pública. Hay que pensar
si los corredores que se armaron, el corredor Garzón… ‘gracias por todo,
que te vaya bien’. Hay que pensarlo. Hay que tener fantasías con
Montevideo”, explicó.
Dirigentes de Asamblea Uruguay dijeron a El Observador que el
Ejecutivo de Montevideo del sector encomendó a principios de diciembre
la negociación con los socialistas bajo la condición de que se apoyara
la candidatura del diputado José Carlos Mahía en Canelones. Según los
informantes, eso fue avalado por el vicepresidente Danilo Astori. Sin
embargo, ante las dudas sobre la postura del PS estudian otras
alternativas como presentar un candidato propio.
Mientras el FLS analiza su posición, el grupo de los ocho, integrado
por el MPP, los comunistas y la Lista 711 de Raúl Sendic, entre otros
sectores, pospuso para el próximo viernes 2 de enero una reunión que
estaba prevista para ayer, donde tratará el nombre que propondrá para
las elecciones municipales, dijeron a El Observador fuentes del MPP.
Agregaron que la alianza espera el pulgar en alto de Topolansky para el
cargo.
Acuerdo en peligroEl astorismo y los socialistas
negocian por estas horas un acuerdo para las candidaturas de Montevideo
y Canelones. Las negociaciones estaban avanzadas pero se estancaron. El
FLS exige el apoyo a Mahía en Canelones, a cambio de acompañar al
senador socialista Daniel Martínez en la capital, pero las trabas
surgieron cuando la departamental de Canelones del PS dio su apoyo para
la comuna canaria al emepepista y eventual rival de Mahía, Yamandú Orsi.
La clave está en que la acción de la departamental de Canelones
deberá ser avalada por el Comité Ejecutivo Nacional Socialista, dijo a
El Observador el secretario general del PS, Yerú Pardiñas. Agregó que el
tema será tratado el lunes en la reunión semanal de ese órgano. En ese
escenario, la llave del acuerdo queda en manos del PS, sector embretado
por sus diferencias internas.
Los socialistas están divididos entre el ala ortodoxa, que domina las
departamentales de Canelones y Montevideo y es afín al MPP, y los
denominados renovadores, grupo al que pertenece Martínez y tiene mayoría
en el Ejecutivo socialista.
Las heridas entre ambos grupos quedaron abiertas tras la definición
de las listados del Senado (todos los electores fueron renovadores) y
diputados por Montevideo (todos los electos fueron ortodoxos) para la
elección nacional.
“Las decisiones de Canelones y Montevideo como departamental son
decisiones que siempre pasan en la dirección nacional por la relevancia
política de estos departamentos”, dijo Pardiñas, integrante de ala
renovadora. “Hay que considerar si se está dentro de la estrategia de
política de alianzas ya definidas”, agregó.