Representantes del Partido Nacional indignados con dichos de Mujica sobre la llegada de presos de Guantánamo
El Observador
Varios representantes del Partido Nacional se mostraron indignados en las redes sociales con las palabras que el presidente, José Mujica, expresó esta mañana en su audición radial. El presidente criticó duramente a quienes se oponen a la llegada de presos desde la cárcel de Guantánamo.
“Más allá de lo reprobable que son sus modos, su destrato y su descalificación propias de su investidura, lo que a mí más me subleva es ver como un presidente de la República que tiene explícitamente prohibido por la constitución hacer política, ingresa de lleno a la campaña política y hace esas referencias”, dijo a El Observador Jorge Gandini, diputado por el Partido Nacional.
A su vez, agregó que habla de los temas electorales con “absoluto desparpajo” como si fuera un candidato más y que esto introduce un elemnto “distorsionante” a la campaña electoral.
“Si fuera un candidato tendría otra respuesta pero como es el presidente de la República nos obliga a tener un cierto respeto, pero él se mete en el barro y utiliza insultos y agravios impropios de cualquiera y mucho más de un presidente que lo tiene prohibido. Eso es lo que más indigna y subleva a quienes lo escuchamos con estupor”, finalizó Gandini.
Por otro lado, Pablo Abdala, también diputado por el Partido Nacional dijo a El Observador que la reacción del presidente fue lamentable y que para él había superado los límites ya que atacó tanto a “los blancos vivos como a los muertos”. “El presidente se mete con la historia del Partido Nacional y eso es muy grave. Creo que cuando Mujica descalifica la historia del Partido Nacional, descalifica a los grandes hombres que estuvieron en la conducción del Partido como el doctor Herrera y Wilson Ferreira”, expresó Abdala.
“Parecería que esta humillación ante los Estados Unidos que, lamentablemente está protagonizando, lo lleva a reaccionar con violencia. Yo creo que el presidente está ofuscado”, expresó. Según Abdala, esta humillación tiene que ver con la confesión de Mujica de que la contrapartida de traer a los presos de Guantánamo es la posibilidad de asegurar las exportaciones de determinados rubros. “Es la confirmación de que entonces el sentido humanitario que tanto invoca es solo una pantalla y que en verdad hay otro tipo de intereses”, dijo el diputado.
Además, en concordancia con el diputado Gandini dijo que agraviar no a una persona sino a una colectividad política como lo es el Partido Nacional, “nunca se había visto en los códigos de relacionamiento democrático y republicano”.
“El presidente cuando asume esas actitudes agraviantes para con una colectividad se pone en una actitud de líder de sector y deja de ser el presidente de todos los uruguayos. Yo creo que se puede coincidir o discrepar pero esto a la mayoría de nosotros nos genera una gran indignación, a mi por lo menos me la generó como ciudadano uruguayo y como nacionalista”, finalizó.