Nos informábamos en internet que
los EE.UU. con el Reino Unido, Israel y los saudíes estaban formando
movimientos de carácter terrorista, francamente - según ellos-
tortuosos. Tenían precedentes con el “11S” entre otros, que fue
acertado ya que les permitió una razón fundamental para atacar las
naciones islámicas. (En los hechos se le dijo al general Wesley
Clark que querían atacar a siete de ellas). Hoy se estaría formando
el movimiento Tak siri-wahby que estaría recibiendo un gran aporte,
especialmente de los EE.UU., que quiere nutrirlo armamentísticamente
cosa fundamental para alimentar el Eje del Mal (USA, Israel, Arabia
Saudita e Inglaterra) de manera de colocar sus excedentes
armamentistas entre otras “menudencias”. Este invento tiene su
riesgo, no es la primera vez que terminan mordiendo la mano que los
ayuda y pueden darse vuelta en algún momento y terminar siendo
enemigos. Muchos gobiernos occidentales se quejan de jóvenes que van
a unirse a los terroristas sirios que asfixian con gas y torturan con
garrotes a mujeres jóvenes. Un ejemplo es Irak donde los asesinos de
este estado y el levante son la realidad más tremenda que puede
producirse de esta clase de monstruo. Otro es el norte de Nigeria
donde cientos de niñas se secuestran, violan y son vendidas como
esclavas por Boko Haram (200 víctimas conocidas y desaparecidas).
¡Salta a la vista que alguien tiene que financiar esta atrocidad de
Boko Haram! ¿Quién lo creó? ¿Quién lo financia? No olvidar que
la pobreza es paupérrima y en esa zona más del 60% de la población
vive con menos de dos dólares por día. Se han tomado videos de Boko
Haram (incluso publicados en la prensa) con vehículos blindados.
¿Cómo consiguieron el dinero? Incluso ¿quién le suministra la
artillería, armas largas y los blindados? Este tipo de elementos no
llueven como el Maná de los cielos, era y es el Eje del Mal, según
ellos. Y su clave a entender del Tak siri-wahby es interrogarse quién
inventó la motivación sicológica que dice a los jóvenes que es
legal matar a cualquiera menos a ellos mismos. ¿Quién avala
conductas tan denigrantes que justifica la monstruosidad de todo lo
que hacen, que no sólo es real sino que tiene la santificación de
Alá? Según ellos el mundo sabe la respuesta: son los saudíes,
apoyados por el imperio yanqui, inglés e israelita. En Baréin por
otra parte, los saudíes andan detrás de las torturas y muertes que
mantiene el régimen criminal de Al Jalifa, que utilizan hasta
escuadrones de la muerte para aterrorizar a sus ciudadanos que sólo
quieren un poco de paz y democracia. Por esos lares han sido los
ingleses sus principales actores. Sin perjuicio de ello también
EE.UU. y asociados han tenido que enfrentarse en los hechos a que
millones de sirios fueran a votar en forma masiva para mantener al
presidente Asad, quien era tildado de asesino y torturador de su
pueblo en forma inoculta. Sin olvidar el movimiento Hezbolá que
“pintorescamente” tampoco se le tilda como una organización
terrorista por el secretario de estado norteamericano John Kerry,
quien tendrá que empezar a admitir que su política exterior es hoy
completamente contradictoria sin lógica y obviamente sin moral,
supongo que Kerry, de ser cierto, tendrá que reconocer que el
monstruo está fuera de control. Como resultado de todo esto ¿dónde
está la solución? Por lo pronto es poco o nada lo que se puede
hacer dado que es parte integral de la existencia del estado saudí y
el régimen que mantiene su control. Claro si todo esto que nos dice
internet y que acá periodísticamente se ignora intencionalmente,
(la prensa informativa la domina la CNN) que además nos muestra una
Siria tiránica y absolutamente cruel, en los hechos y esto sí es
concreto el gobierno de Asad acaba de ganar una elección libre,
aceptada hasta por los mismos imperios, donde el 73% de la ciudadanía
concurrió a las urnas libremente, el equivalente a 10.319.723 votos
por mantener el mismo régimen, un hecho que ni la CNN y toda la
prensa cipaya osa mencionar. La oposición en Siria llevó un
candidato con un 4,3% y el otro un 3,2%. Más aplastante triunfo de
Asad no se le puede pedir, lo que avala su legítimo gobierno. Es
obvio que de seguir esta situación el régimen de Arabia Saudita
debería caer, para que la ciudadanía de esa sufrida nación
amanezca con una sociedad verdaderamente democrática y moderna. El
régimen saudita centro del Eje del Mal y sostenido por los imperios
muy pronto debería convertirse en un derrocamiento indispensable.
Leopoldo Amondarain
C.I. 950.556-0
Tel: 099 626 573