Con la presencia de numeroso público y artistas
invitados, se realizó en la Sala 2 de Mayo de esta ciudad un emotivo
reconocimiento a la labor desarrollada por el profesor Jesús Perdomo en
el plano social, cultural y educativo del departamento. Por así haberlo
dispuesto la ciudadanía por voto secreto, el reconocimiento recayó en
el Prof. Perdomo, consistiendo el mismo en un documental de 30 minutos,
donde en apretada síntesis se pueden apreciar distintas etapas de su
vida con imágenes y relatos familiares, que en algunos pasajes
convocan a la nostalgia. El director del Centro Cultural Cristian
Silvera y el alcalde Raúl Servetto tuvieron a su cargo la oratoria
destacando en todo momento la trayectoria de Perdomo, inaugurando luego
la Sala de Eventos que llevará su nombre. Cabe señalar que la labor
del docente no estuvo limitada a la ciudad de Castillos donde reside
actualmente. La década del 60 marcó un hito importante en la cultura
fronteriza, al imponerse desde el Liceo Piloto una emancipación
histórica y literaria que fue cambiando lentamente el viejo estilo de
los actos patrios, al otorgarles un espíritu nuevo cargado de
creatividad y entusiasmo. Muchos acontecimientos y documentos
históricos de nuestro pasado fueron recreados por grupos estudiantiles
que tuvieron la oportunidad de revivir distintas etapas de nuestra
independencia, con disputas de frontera y conflictos de vecindad que se
vivieron en esta región.
SU PASAJE POR EL LICEO DE CHUY
Uno de los profesores que hurgo en ese pasado para
extraer de los textos el aprendizaje operativo que facilitara la
enseñanza de nuestra historia fue el Prof. Jesús Perdomo. Inquieto y
pasional lo vimos durante muchos años transitar por los salones del
liceo impulsando el interés de los jóvenes hacia las más variadas
manifestaciones artísticas, históricas y culturales. Entre muchas
actividades debemos destacar sus estudios de Solfeo e Historia de la
Música en el Seminario Interdiocesano de Montevideo, estudio y práctica
intensiva del Canto Gregoriano y Polifonía Clásica. Formó parte de los
Coros de Castillos y Chuy integrando además los Coros del Este, bajo la
dirección de los Profesores Néstor Rosa Giffuni y Néstor Rosa (h).
Sin exagerar en elogios podemos señalar que el Prof. Perdomo fue
durante muchos años el gran receptáculo de las inquietudes culturales
de la Villa aldeana, dejando una huella profunda en el terreno
musical del norte rochense. Con la temática “abierta” de sus clases fue
ampliando el horizonte cultural de una corte de adolescentes que lo
acompañaba permanentemente. Las representaciones teatrales, los coros
del liceo, los conjuntos folclóricos entre los que recordamos “VOCES
DEL SAN MIGUEL”,”LOS OREJANOS”, “LOS ESTRELLEROS” y “VIDALITA” como
así también otras manifestaciones musicales de Chuy y Castillos le
valieron el reconocimiento popular y el éxito logrado en cada
presentación. Los clubes sociales, las escuelas y liceos del
departamento, salas de espectáculos, peñas musicales y la organización
de festivales sirvieron siempre para que el Prof. Perdomo impartiera su
docencia musical.
Noches de Fogón
En 1964 los alumnos del liceo bajo la dirección
del Prof. Perdomo comienzan a organizar distintos festivales con la
participación de los más importantes representantes del arte nativo del
este uruguayo.
De esta manera desfilaron por los escenarios
del Club Social y de la Plaza Gral. Artigas “Los Estrelleros”
(Chuy) “Los Orejanos” (San Miguel) “Los Tupamaros (Minas) “Los
Quebradeños (Rocha), los recitadores Mirto Paladín, Ricardo Olivera y
Goyo Rodríguez, como así también los solistas Ruben Decuadra, José
Terra, Blanco Balao, Luis Peloche y los invitados especiales Cédar
Viglietti y Eustaquio Sosa. Por aquellos años las clausuras de los
cursos liceales se habían caracterizado por la realización de actos
de confraternidad entre la dirección, profesores, padres, alumnos y
población en general. Se cumplía siempre un extenso programa que
incluía cantos corales, exhibiciones folklóricas y grupos teatrales
dirigidos indefectiblemente por el Prof. Perdomo.
Durante muchos años las fiestas de clausura, al
margen del aspecto formal le brindaba al público un espectáculo
artístico, demostrando que la docencia liceal no se agotaba frente a
los alumnos sino que debía llegar también a la población.
La Patria que no vio Artigas
Otro de los sucesos del coro liceal fue sin
ninguna duda la puesta en escena de un extenso espectáculo
denominado LA PATRIA QUE NO VIO ARTIGAS y que se constituyo en un nuevo
éxito del Prof. Perdomo. Se logró de esta manera una perfecta
sincronización en la sucesión de acontecimientos en una nueva
modalidad de espectáculo artístico-cultural al evitar los tópicos ya
transitados de la vida de Artigas. Desde este enfoque surge el título de
la obra (LA PATRIA QUE NO VIO ARTIGAS) donde se puede observar la
evolución del Uruguay tras el alejamiento físico del prócer. Esta
evolución estuvo deliberadamente mirada en aquellos años, donde los
jóvenes liceales observaban con angustia las guerras, el hambre y las
injusticias que aquejaban al mundo. Se trataba de una obra de
“collage” con trozos de canciones, utilizando guitarra criolla,
eléctrica y batería, recitados, solistas y corales, proyecciones y
grabados, todo ello organizado en un montaje que iba progresando por
asociación de ideas o imágenes. Debemos recordar que la ambientación
visual estuvo a cargo de los profesores Jorge Calvette y Wanderlein
Techera.
Martín Fierro
En 1969 y tras una planificación que duro más de
5 meses se realizó el poema MARTÍN FIERRO, con la participación de
todo el alumnado del liceo. Dentro de un estilo lleno de ingenio y
naturalidad más de 300 alumnos fueron elevando artísticamente todos los
elementos del poema, hasta convertirlos en una vigorosa evocación de
la pampa, sus gauchos y sus costumbres. La interpretación de MARTÍN
FIERRO estuvo a cargo del Prof. Rodolfo Da Costa y fue evocando a
través del canto los distintos momentos de la vida del gaucho de don
José Hernández.
El Escritor
Autor de varias publicaciones, el Prof. Perdomo
ha estado siempre comprometido con la investigación histórica y la
identidad departamental. En el libro FRANCISCO DE LOS SANTOS EL CHASQUE
DE ARTIGAS, al margen de ofrecer un detallado trabajo sobre la vida de
este rochense que transporto los últimos “patacones” de Artigas para
liberar a los oficiales orientales que estaban presos en Brasil. Es el
propio autor que nos señala desde el comienzo del libro que “en todo
momento, la historia grande nacional y la pequeña crónica local se
relacionan y se iluminan mutuamente. La narración no resulta lineal. Se
presenta dislocada cronológicamente, repartida en un mosaico de
breves enfoques muy libremente asociados, que la comprensión del lector
sabrá ordenar.” En oportunidad de celebrarse el Bicentenario de la
Fundación de Rocha, la Intendencia departamental realizó un concurso
Histórico Literario orientado hacia el estudio y la divulgación de las
raíces de la comunidad rochense, que fue ganado finalmente por el Prof.
Perdomo con un trabajo centrado en la personalidad de don Pedro Amonte
de la ciudad de Castillos y que titulara EL GRINGO BUTIASERO.
En el prólogo de este libro el Prof. Rosalío Pereyra señalaba
que el autor “ha cumplido y cumple una amplísima y fecunda gestión de
profundo contenido humanístico. Formado en disciplinas de Filosofía y
Letras, ha estudiado canto, análisis musical, dirección coral y
periodismo. Con este bagaje cultural en permanente crecimiento,
Perdomo incursiona con éxito en los campos de la docencia, de la
comunicación social, de la investigación histórica y de realizaciones
artísticas de reconocido valor. Espíritu inquieto, promueve y realiza
una acción cultural de singulares perfiles cuyos alcances trascienden
fronteras. Como el famoso clásico, se podría decir, con legitimidad y
orgullo, que “nada de lo humano le es ajeno.” Justo y merecido
reconocimiento para un docente cuya trayectoria podemos valorar con
palabras de de Isa (nieta):”Me ha enseñado el valor de las cosas
pequeñas, de la humildad, de la lealtad sobre todo en la familia. Ha
sido un excelente esposo, padre y abuelo. Feliz 80 años TATA. Te
queremos mucho.