Buscar este blog

miércoles, 17 de mayo de 2023

DOÑA CHINITA, 106 AÑOS DE HISTORIA EN LA CORONILLA La particularidad de lo común hizo de ella una matriarca singular COLUMNA DE RICHAR ENRY

 


DOÑA CHINITA, 106 AÑOS DE HISTORIA EN LA CORONILLA


La particularidad de lo común hizo de ella una matriarca singular


COLUMNA DE RICHAR ENRY



Doña Chinita, como fue conocida Águeda Damas, no era una persona extraña para muchos melenses; pero fue el 5 de febrero de 2019 cuando se hizo popularmente conocida, luego de ser presentada como “La última lavandera de Melo…” en la publicación de un diario de alcance nacional, el día en que conmemoraba sus 105 años de edad.

Tiempo después, luego de contactar a algunos de sus familiares, se empezó a delinear lo que sería el pre-guión del documental audiovisual, que estará al acceso de todos muy pronto en mi canal, y que ya fue presentado con éxito en la ciudad de Melo con excelente marco de público y muy buenas críticas de los asistentes.

Más allá de los aspectos técnicos y formales de toda producción audiovisual, se buscó imprimirle una perspectiva humana, no desvinculada de su trabajo, pero sí más enfocado en su rol familiar, en el aspecto humano que todos estampamos en lo que hacemos y muchas veces queda opacado por la función que cumplimos en la sociedad. Plasmar esa mirada no fue tarea difícil, porque la propia personalidad de la entrevistada lo permitía: bastó iniciar nuestra charla y ella empezó a develar esas facetas más personales de su vida, y aunque con algo de dificultad auditiva, no tuvo empacho en descubrirnos diversos aspectos de su intimidad. Tal como la situación lo ameritaba, no podíamos apersonarnos sin un presente digno de tan grandiosa mujer, así que le obsequiamos una planta de Anturio, que representa la hospitalidad y la abundancia, y que además de la belleza natural de su follaje, prodiga unas flores espectaculares; y a cambio, ella nos regaló generosamente historias inéditas de su infancia traviesa, de su juventud divertida y de una vida esforzada, saliendo airosa incluso de la propia muerte.

Manteniendo la debida distancia con la protagonista, y apegados a la formalidad necesaria para el trabajo, nos fuimos adentrando en busca de la verdadera Chinita, con objetividad y seriedad. Un poco lenta en su caminar, pero muy viva en sus expresiones, pasar algunas horas con Doña Chinita y su entorno familiar el día en que celebraba sus 106 años de edad fue emocionante, ya que como ella bien recodaba: “de una familia de … hermanos, sólo yo quedo”.

De sus travesuras de infancia destaca algunas como la de zambullir con sus manos patitos en el arroyo, atar a su hermana a un carnero que castigaba para que la otra pudiera jinetear, hasta cuando siendo ya adolescente preparó el mate con mío-mío para darle a un pretendiente que iba a diario a tomar mate en su casa, con la excusa de conversar con el padre. No es menor decir que todo esto ocasionaba diversos castigos, que iban desde los muy graves -que le costaban días de reposo por las lesiones físicas recibidas- a reproches vehementes de sus progenitores; pero ni así dejaba de ser “bandida”, como ella misma lo señala.

Casada a muy joven edad con Francisco Viera, vivió gran parte de su vida entre el Barrio Cuchilla de las Flores y Estero Bellaco, y fue madre de cinco criaturas. La hija mayor, Yaisy (que nunca se fue lejos de su madre), guarda en su memoria difíciles momentos vividos juntas, cuando siendo ella sólo una niña y viviendo en Santa Clara de Olimar, iban en charré al paso La Yeguada a lavar ropa con una vecina y su hija, y cómo luego de un accidente trágico con el caballo, debieron transitar esos cinco kilómetros y medio a pie con los atados a cuestas, lo que se les hacía eterno; conserva asimismo, con gran sentimiento, el juramente que su madre le realizara a su extinto marido, quien le pidió que cuidara bien de ella cuando él ya no estuviera en este mundo, y cómo ella cumplió fielmente lo prometido hasta el último momento.

Adriana Bracco, nieta de Águeda, vive ahora en La Coronilla, Rocha, y muy cerca mora también su hija -la bisnieta de Agueda-, Lorena Cabrera; en oportunidad de entrevistar a ambas, además de percibir un gran aprecio y respeto por la figura de Doña Chinita y su historia personal, nos mostraron cómo la sienten presente en cada cosa del día, en cada prenda que la abuela tejió en croché, en sus costumbres y hasta en sus versos.

Chinita fue también madre de “El Pocho” (conocido comerciante del rubro gomería en el departamento de Cerro Largo), con quien convivió mucho tiempo, paseó por las termas y visitó la capital, también de Francisco “Pancho”, José y Amalia, todos siempre cercanos a la casa de la abuela, donde criaron a sus hijos e hijas, y hasta nietos, porque sentían que ese era un lugar acogedor donde todos se sentían seguros.

Sin enfermedades crónicas, con un apetito equilibrado y un gusto especial por una copa de vino y un vasito de cerveza, Chinita contaba su relación con la medicina y la única recomendación de comer y tomar mucha agua, lo cual para una anciana de su edad era admirable.

Como aquellas grandes mujeres que hicieron la historia formal, Doña Chinita, lavando ropa para otros, para nosotros también es grande: constructora de una historia informal, transmisora de tradiciones, forjadora de futuros que superaron la adversidad y gracias a su ejemplo lograron y logran hasta hoy día conformar familias, que trabajan y producen teniendo en ella el ejemplo de esfuerzo y perseverancia.

Esperamos que este audiovisual sea del agrado de todos, y que quienes tuvieron en su familia una bisabuela, una abuela o tía, alguna mujer que supo criar hijos, mantener una vida digna y dar esperanza a las nuevas generaciones, metiendo mano en el agua, pasando el jabón, refregando la espuma y planchando -muchas veces con almidón-, puedan ver representadas en ella a esas inolvidables personas, que sin pudor ni vergüenza pasaban a buscar la ropa sucia para traerla luego limpita y fragante, contribuyendo a que las personas vistieran de forma impecable y durmieran apaciblemente en sábanas perfumadas por su candor.


Morenita lavandera,

biguacita de la costa,

enrollate la pollera,

ponete a lavar la ropa.


Tu madre cocina charque, *

tu padre fue río arriba

y vos te quedaste sola

lavando ropa en la orilla.


Río de los pájaros – ANIBAL SAMPAYO










RICHAR ENRY FERREIRA - Productor y documentalista, investigador, escritor, Periodista y amigo de la naturaleza. 




martes, 16 de mayo de 2023

A 50 AÑOS DEL GOLPE DE ESTADO DE 1973 (I) COLUMNA DE HUGO MACHÍN FAJARDO

 

La memoria individual o colectiva conserva los sufrimientos o alegrías vividas, pero no es el único reflejo de la verdad.

La historia no puede estar atada a la memoria, ni a la política partidaria inmediata, ni debe hacerse de manera ideologizada.

Esta historia comienza cuando Uruguay tenía una de las democracias más estables de Latinoamérica. ¿Comienza ahí, realmente? Toda historia remite a otra historia anterior, que, a su vez remite a otra historia. Hay historias que se proyectan sobre otras historias. Hay historia que son contraseña de múltiples historias personales.

Es cierto, la historia no comienza de forma aislada, sino que está interconectada con la historia anterior y con la sociedad en la que se desarrolla. La memoria individual y colectiva puede influir en la percepción y en la narrativa de la historia, pero es importante considerar múltiples perspectivas y buscar fuentes lo más objetivas posibles para entender la verdad lo más completa posible, y no sólo una versión parcial de los hechos.

Además, la política partidaria y las ideologías también pueden influir en la forma en que se escribe y se enseña la historia, lo que puede llevar a una narrativa sesgada. Es importante que la historia tenga la aspiración de objetividad y se base en hechos verificables, para que pueda ser transmitida de forma justa y precisa a las generaciones futuras.

En resumen, la historia es un relato complejo y multidimensional, que está influenciado por muchos factores, incluyendo la memoria individual y colectiva, la política partidaria y las ideologías. Es importante abordar la historia con un enfoque crítico y equilibrado para lograr una comprensión precisa y completa de los hechos y su contexto.

Un hecho verídico puede dar lugar a una serie de interpretaciones. Cuando esas interpretaciones se llevan a la ficción, mediante la literatura, las canciones, surge la leyenda. El mito. Bajemos estos conceptos a tierra con preguntas concretas referidas al período de referencia:

—¿Cómo era el Uruguay previo al golpe de Estado del 27 de junio de 1973?

—¿Era la ¿«Suiza de América», cómo se popularizó por entonces?

—¿Quién denunció los «pueblos de ratas» existentes en los intersticios del latifundio uruguayo? El libro Detrás de la ciudad, escrito por dos católicos, fue una advertencia acerca de uruguayos que vivían en condiciones muy duras.

—¿Cómo incidió la «Guerra Fría» en los golpes de Estado dados en el Cono Sur en los años 60 y 70?

—La respuesta de Fidel Castro a la expulsión de Cuba de la OEA, ¿fue fomentar la lucha armada en toda la región, excepto en México?

—¿Qué fue la Ley de Seguridad del Estado votada por la mayoría del parlamento uruguayo en 1972?

—Los partidos de izquierda reunidos en el Frente Amplio ¿cómo actuaron ante la insurgencia militar de febrero de 1973?

—¿Cómo reaccionaron los partidos Colorado y Nacional ante la disolución del Parlamento y lo que después ocurrió en el país?

—¿Por qué la guerrilla del M.L.N. (Tupamaros) contribuyó a que se diera un golpe de Estado en Uruguay?

—¿Qué hizo la guerrilla tupamara contra la dictadura de Bordaberry y los militares?

—¿Quiénes resistieron durante trece años una dictadura que asesinó uruguayos dentro y fuera de fronteras, robó niños; encarceló a miles de ciudadanos secuestrados y torturados en dependencias estatales y clandestinas; despareció a opositores de los que nunca más se supo hasta hoy, medio siglo después?

—¿Qué fue la clasificación de la ciudadanía Uruguay en categorías «¿A», «B» y «C»?

—¿Cómo fue la solidaridad desplegada en diferentes países del mundo para con el Uruguay bajo la bota militar?

¿Realmente Líber Seregni, fue el preso político uruguayo más importante de entonces? ¿Fue Wilson Ferreira, el líder político uruguayo que militó desde su exilio? y Jorge Batlle, ¿fue el político que dentro del país no se calló?

Cuando esas interpretaciones son utilizadas por dirigentes de partidos políticos que las requieren para consolidar su presente y ganar un futuro, dejan de ser historias. Pasan a ser instrumentos de una estrategia política.

La verdad no ofrece los hechos recortados sobre un horizonte diáfano, sino que la verdad consiste en no-ocultar los hechos. [Segunda nota de la serie A 50 años del golpe de estado de 1973].




Hugo Machín Fajardo. Redactor Especial del Portal Análisis Latino y del Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL) y Analisiislatino.com, de Buenos Aires. Periodista desde 1969, una forzada interrupción entre 1973 -1985, no le impidió ejercer el periodismo clandestino. Secuestrado en 1981 por la dictadura uruguaya, permaneció desaparecido y torturado hasta 1982, en que fue recluido en el Penal de Libertad hasta 1985. Ex -docente de periodismo en Universidad ORT, de Montevideo. Ex vicepresidente de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU). Jurado del Premio Periodismo para la Tolerancia, 2004, de la Federación Internacional de Periodistas (FIP) /Unión Europea. Coordinó «Periodismo e Infancia-2005». Integró diversas redacciones periodísticas de medios y agencias de noticias en Montevideo, Uruguay. Reside en Colombia desde 2009. 15.05.2023


martes, 2 de mayo de 2023

A 50 AÑOS DEL GOLPE DE ESTADO DE 1973 / COLUMNA DE HUGO MACHÍN

 

Referirse a lo ocurrido hace cincuenta años en el Uruguay supone, al menos para mí, tres planos diferentes.


La historia contada en libros, alguna película, documentales, testimonios, historiografía.


La historia construida durante el tiempo que hemos vivido, lo que sucede al mismo tiempo que transcurre nuestra existencia y que es reflejada por los diferentes medios de comunicación, básicamente la prensa, libros dedicados al tema, aunque hoy también las plataformas virtuales tienen una especial incidencia en generaciones jóvenes. Una historia en la que sin saberlo a veces somos actores en nuestra propia vida, es una historia muy subjetiva.


La propia versión de la historia, la vivida, la experimentada, observada, documentada en algún caso, que, a su vez, se conjuga con las diferentes versiones que acompañan cada suceso: lo de la película Rashomon, de Akira Kurosawa, en que una violación y asesinato tiene cuatro versiones diferentes, según cada uno de los cuatro testigos.


Esos planos se nos mezclan en una nueva forma de subjetividad. El punto es —en eso, nuestro oficio periodístico colabora mucho— lograr un distanciamiento para que esa subjetividad no se traslade al producto final. Un riesgo no menor en este proceso, es creer que nuestras opiniones son las verdaderas.


No es fácil sustraerse a lo anterior: la explicación misma que se intente, puede ser una manera sutil de imponer lo que uno piensa.


A partir de tener esto bien presente, tanto en un guión, como en una edición para un producto audiovisual, como en la música y las fotografías utilizadas para evocar aquel tiempo, etc. es que podríamos obtener un producto realmente honesto y por lo tanto eficaz.


Sobre todo, en una sociedad dividida como es la uruguaya — y yo diría la mayoría de las sociedades hoy: estadunidense, mexicana, brasileña, argentina, ni que decir, peruana, colombiana— tenemos que ser realmente equilibrados, sin segunda intención de verdad, para que sea un producto que aporte. [Primera nota de la serie A 50 años del golpe de estado de 1973]




Hugo Machín Fajardo. Redactor Especial del Portal Análisis Latino y del Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL), de Buenos Aires. Periodista desde 1969, una forzada interrupción entre 1973 -1985, no le impidió ejercer el periodismo clandestino. Secuestrado en 1981 por la dictadura uruguaya, permaneció desaparecido y torturado hasta 1982, en que fue recluido en el Penal de Libertad hasta 1985. Ex -docente de periodismo en Universidad ORT, de Montevideo. Ex vicepresidente de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU). Jurado del Premio Periodismo para la Tolerancia, 2004, de la Federación Internacional de Periodistas (FIP) /Unión Europea. Coordinó "Periodismo e Infancia-2005". Integró diversas redacciones periodísticas de medios y agencias de noticias en Montevideo, Uruguay. Reside en Colombia desde 2009.







LICENCIADA VALERIA DELFINO PROPIETARIA SOCIA DE NUDAPROP “USTED PUEDE VENDER SU CASA, COBRAR Y SEGUIR VIVIENDO EN ELLA” AUDIO

 

Escribe Juan José Pereyra


Es un fenómeno que se cumple regularmente desde hace décadas en países del llamado primer mundo.

NUDAPROP URUGUAY fue fundada en 2017 y está ampliando sus actividades en todo el país.

¿Cómo funciona ,cuáles son las garantías y cómo informarse?

Les invito a a escuchar la charla de Delfino con Hay otra historia de radio Fortaleza

PARAGUAY SEGUIRÁ IGUAL Columna de Carlos Castillos

 

Las ilusiones de algunos paraguayos y paraguayas, de experimentar un cambio, al menos político, en su país, se diluyeron este domingo 30 de abril, al conocerse los resultados de las elecciones nacionales.


La Asociación Nacional Renovadora (ANR), más conocida como Partido Colorado, reafirmó su hegemonía y se alzó con una cómoda victoria que coloca en la presidencia al economista Santiago Peña, de 44 años.


Este técnico, de poca experiencia en la acción política y con pasado liberal, fue ministro de Hacienda entre 2015 y 2017, cuando gobernó el millonario empresario Horacio Cartes, su mentor político y principal respaldo.


Cartes preside el Partido Colorado, aunque debió tomar distancia en los últimos meses, después que el gobierno de Estados Unidos lo declaró “significativamente corrupto” y lo obligó a “desprenderse” de la dirección de sus numerosas empresas.


Le bloquearon las operaciones comerciales y financieras, las personales y las del Partido Colorado, pero Cartes se las ingenió para sortear esas dificultades e igualmente seguir incidiendo en la política partidaria y la nacional.


El nuevo presidente, que asumirá en agosto, está considerado “el delfín” de Cartes, aunque él prefiere identificarse con lo que llama “la renovación generacional” del partido, históricamente dirigido por veteranos de la política paraguaya.


Para estas elecciones la oposición intentó una “Concertación” entre partidos y grupos de centro-derecha, centro e izquierda, que presentó como candidato presidencial a Efraín Alegre, del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), pero quedaron muy lejos del ganador. Apenas 27,4 por ciento del total de votos, contra el 42,74 de los “Colorados”.


Paraguay tiene unos 6 millones de habitantes y poco más de 4 millones 700 mil estaban habilitados para votar, pero concurrió a las urnas solamente el 63,4 por ciento, poco más de 3 millones de hombres y mujeres.


El país tiene 24 por ciento de sus habitantes en la pobreza extrema y es reconocido internacionalmente como uno de los países más corruptos del mundo, además de otros graves flagelos como el narcotráfico, el contrabando, la extorsión, los secuestros, los homicidios, la mendicidad, el machismo y hasta la discriminación hacia su numerosa población indígena.


Un llamado Consejo Impulsor del Sistema Nacional de Integridad (CISNI), creado en 1999, trató de desplegar un Plan Nacional de Integridad –PNI– para enfrentar esta realidad, pero con poco éxito. Al menos visible.


Ellos mismos sostienen que “la corrupción no es solo el producto de la voluntad individual, sino el resultado de un marco institucional de escaso desarrollo normativo y prácticas administrativas deficientes”.


Reconoce que la “ineficiencia institucional” crea las condiciones necesarias para el desarrollo de la corrupción, al no existir, o ser precarios, los mecanismos de control en las instituciones públicas y privadas.


Una vez, estando en Asunción, la capital del país, le pregunté, fuera de micrófono, a un influyente ministro cuáles eran los rubros de la economía del país que funcionaban fuera de la ley. Y con un sorprendente sinceramiento y una mueca significativa respondió: “todos”.


“En Paraguay, la corrupción es una realidad que atenta contra el desarrollo y sostenimiento de la democracia” señaló el CISNI y no se vislumbran intenciones claras de modificar este estado de cosas, más allá de los discursos preelectorales.


Hay por delante un nuevo período constitucional de cinco años sin que se vislumbre alguna señal de que pueda cambiar este estado de cosas. La gente seguirá sobreviviendo como pueda, mientras una elite de privilegiados se aprovecha de todas las debilidades del sistema institucional.


Hasta ahora no ha aparecido ninguna figura ni ninguna fuerza política capaz de poner en riesgo esa hegemonía casi absoluta de los “colorados”, que consiguieron nuevamente mantener “despejado” el camino.


El 24,7 por ciento de la población extremadamente pobre, que en términos absolutos representan aproximadamente un millón 700 mil personas, seguirá sumida en la pobreza extrema, seguirá sin entender mucho cómo funciona la cosa, y menos cuáles son las causas de su desgraciada vida.


Si hasta ahora no lo hicieron tampoco se puede esperar que los gobernantes atiendan esa tragedia y busquen algún mecanismo para superarla. Si estas elecciones del domingo 30 de abril las hubiera ganado la oposición, seguramente sería lo mismo. Es mucho lo que hay que modificar estructuralmente y nadie ha demostrado verdadero interés por modificarlo.



*Carlos Castillos - Docente y periodista, trabajó en Radio Chuy, Difusora Rochense, El Espectador, Radio Carve, CX 30 La Radio, Emisora del Palacio FM y CX 36 Radio Centenario. Además fue corresponsal de la agencia alemana de prensa dpa en Uruguay, Argentina y Paraguay durante 22 años. Es egresado del Instituto Superior de Educación Física (ISEF) como Entrenador de Fútbol y desde el 2010 impulsa el Movimiento de Cine Con Vecinos-Uruguay que se dedica a producir documentales comunitarios y a talleres básicos en todo el país. Desde el 2011 participa del Movimiento ARA (Artistas Rochenses Amigos) para publicar y difundir obras de creadores de la zona.