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martes, 5 de noviembre de 2013

Los cuatro policías involucrados en muerte de joven quedaron detenidos

TENSIÓN EN EL BARRIO SANTA CATALINA


El Ministerio del Interior informó en un comunicado que los cuatro uniformados fueron separados de servicio y quedaron a disposición de la Justicia.

Santa Catalina. Foto: María Inés Hiriart.
mar nov 5 2013 16:31
A su vez, la cartera de Interior informó que "a través de los partes policiales, declaraciones vertidas por los policías intervinientes y testimonios de vecinos y personas que estuvieron cercanos a los hechos, se han recolectado elementos -algunos contradictorios- sustantivos a la investigación".
Además llaman a "la mesura  y ponderación de todos en estos momentos de honda tristeza y congoja en una populosa zona de Montevideo, para depositar confianza en la Justicia y permitir el rápido esclarecimiento de los hechos acaecidos".
Por otro lado, la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo resolvió hacer un pedido de informes urgente al Ministerio sobre los hechos que derivaron en la muerte de un joven.
La secretaría de Estado deberá responder al pedido en un plazo de 48 horas. La institución plantea además al ministerio que tome medidas urgentes referidas a lo ocurrido, incluida una investigación de Asuntos Internos.
Sergio Lemos fue ultimado por efectivos de Policía en el barrio Santa Catalina en la noche de ayer tras presuntamente haber protagonizado una rapiña a un almacén junto a otro hombre, informaron a El País desde Jefatura de Montevideo.
La cúpula del Ministerio del Interior resolvió suspender las actividades previstas para hoy y se reunirá para analizar los hechos ocurridos anoche en el barrio Santa Catalina donde un joven fue abatido por la Policía. El ministro Eduardo Bonomi dijo en tanto que el joven disparó primero y por eso la Policía reaccionó. Los vecinos sostienen que el joven fallecido nada tenía que ver con la rapiña.
Luego de los incidentes ocurridos ayer en el barrio Santa Catalina la Unión de Trabajadores de Cutcsa informó en un comunicado que las líneas “D” e “I-185”, todas con recorridos que finalizan en la terminal Santa Catalina tienen restringido el servicio.
Un joven fue ultimado por efectivos de Policía en el barrio Santa Catalina en la noche de ayer tras presuntamente haber protagonizado una rapiña a un almacén junto a otro hombre, informaron a El País desde Jefatura de Montevideo.
Esta tarde, a las 19 horas, los vecinos convocan a una marcha con velas en repudio del accionar policial que culminó con la muerte de Lemos.

Bonomi: policía en Santa Catalina "respondió" a un disparo


Este lunes, mientras la policía tomaba declaraciones por una rapiña en el barrio Santa Catalina, un efectivo mató a un joven de 18 años por no acatar la voz de alto. El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que fue en respuesta a un disparo, mientras que los vecinos denuncian que el joven no tenía nada que ver con el delito.

Publicado el: 5 de noviembre de 2013 a las 16:22
Por: Redacción 180
Ministro del interior, Eduardo Bonomi (s/d Presidencia)
Ministro del interior, Eduardo Bonomi (s/d Presidencia)
La versión de los vecinos señala que el joven pasaba en moto por el almacen donde se produjo la rapiña y, tras no acatar la voz de alto de un efectivo, recibió varios disparos.
"La información que tengo es que hubo una rapiña, un policía estaba tomando declaraciones, él afirma que un muchacho en moto le tiró, él respondió", dijo Bonomi.
"Hubo un muerto, fue agredido el policía, y esto ahora está en secreto pre sumario, así que hasta que no avance no voy a hacer más declaraciones", manifestó el ministro, y agregó que "el que murió era mayor de edad".
Una carta de Veronika Engler, vecina del barrio, hija de Henry Engler y compañera de Jorge Zabalza, señala que el joven fue "brutalmente acribillado por el simple hecho, o la mala estrella de pasar por el lugar donde se había cometido una rapiña". "Al grito de alto se asusta y no detiene inmediatamente la moto que conducía, es baleado en una pierna y posteriormente le pegan varios tiros más por la espalda. Cae muerto en una cuneta antes de llegar a la esquina y aunque un delito no justifica una muerte, la triste verdad es que el chico ni siquiera tenía algo que ver con el robo a la almacen", señaló.
En la noche del lunes los vecinos se manifestaron cortando calles e incendiando gomas.
Según un comunicado del ministerio, "a través de los partes policiales, declaraciones vertidas por los policías intervinientes y testimonios de vecinos y personas que estuvieron cercanos a los hechos, se han recolectado elementos -algunos contradictorios- sustantivos a la investigación".
Los cuatro policías involucrados quedaron "preventivamente retirados de sus funciones y detenidos a disposición de la Justicia" en la tarde de este martes.

Vecinos piden que la Policía no entre más a Santa Catalina

TIROTEO


A las 19 horas habrá otra manifestación en repudio a la muerte de Sergio Lemos tras una rapiña en un almacén del barrio



Al mediodía todavía humeaban las cubiertas que entre la noche del lunes y la madrugada fueron utilizadas por los vecinos de Santa Catalina para cortar la calle Víctor Hugo para impedir el ingreso de policías luego de la muerte de Sergio Lemos en un confuso episodio tras una rapiña a un almacén del barrio.
La casa de la familia del joven fallecido era hoy uno de los puntos de reunión de los vecinos para manifestar su repudio contra la acción policial. Allí, la madre, Graciela, les comunicó que la Policía no le permite velar a su hijo. “Yo estuve con él y en la cara no tiene nada. No quieren mostrar la ropa”, dijo entre llantos.
Familiares y vecinos coincidieron con Jorge Zabalza, vecino de la zona, en que los efectivos le “dispararon a mansalva” al joven. Entre siete y nueve balazos fue la cantidad de balas que adujeron que le dispararon desde la esquina del “Almacén 28” ubicado en la esquina de Víctor Hugo y 24 de Octubre, frente a la escuela Nº 309. La oficina de Prensa de la Policía informó, en una primera instancia, que Lemos fue abatido con dos tiros.
El almacén hoy estaba cerrado. La dueña iba a concurrir al juzgado con las cámaras de seguridad. Los testigos del hecho aseguran que los delincuentes no pertenecen al barrio.
Una vecina mostró a los medios presentes en la zona tres cartuchos de perdigones que fueron disparados contra los manifestantes y que recogió en la calle. Ella misma fue alcanzada por uno en la espalda. La represión comenzó a la 1 de la mañana y, según los relatos de los vecinos, se utilizaron gases lacrimógenos para desperdigar la muchedumbre. Los piquetes se mantuvieron hasta las 3 de la mañana.
Los vecinos de la familia Lemos preparan una movilización para esta tarde y están recaudando fondos. Muchos aseguraban hoy que no quieren más policías en el barrio, puesto que desde hace tiempo se producen episodios de abuso policial y corrupción. “Santa Catalina no se va a quedar quieto”, decía uno. Otro le respondía: “Hasta que no matemos a un policía esto no va a parar”. Otros trataban de tranquilizarlos, diciendo que “no se puede ser como ellos”.
El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que de acuerdo a los datos que él maneja, el joven muerto disparó primero a un oficial de Policía que tomaba declaraciones luego de la rapiña. Esto, según indicó, fue lo que desencadenó que el oficial se defendiera y ocasionara su muerte. Según dijo a El Observador personal de la oficina de prensa de Jefatura de Policía, al joven se le encontró un revólver 38. En el barrio aseguran que Lemos no era un delincuente, sino un trabajador y que acudió al lugar en su motocicleta para “chusmear” qué había pasado en el almacén.

TENSIÓN POR MUERTE DE JOVEN "¿Hay que matar a un policía para que se tranquilicen?"


En Santa Catalina se vive un clima tenso y los vecinos denuncian "abuso policial"; aseguran que no dejarán entrar "a los botones" en el barrio


El clima entre los vecinos del barrio Santa Catalina es muy tenso luego de que un joven murió en un tiroteo con la policía. Las versiones del Ministerio del Interior y de las personas que estaban en el lugar son contradictorias.
La madre del joven fallecido dijo a El Observador que hasta el momento no se le entregó el cuerpo para realizar un velatorio ni las ropas de su hijo: "Me lo mataron como un perro", indicó la mujer rodeada de vecinos.
"¿Hay que matar a un policía para que se tranquilicen?", se preguntó una mujer que vive en el barrio y que asegura que "el abuso policial viene desde hace tiempo".
"O se la agarraron con los pibes de Santa Catalina por el día del abuso policial. ¿Quieren matar unos cuantos en Santa Catalina? Van a tener que pagar con la vida de ellos porque acá no queremos que entren más policías y sino vamos a hacer la ley del más fuerte", agregó.
También existe tensión con la dueña del almacén que fue rapiñada, supuestamente, por el joven muerto. "No le va a quedar otra que irse. Hay que prenderle fuego el almacén, la casa, la camioneta, todo. Ni quemándole todo paga la vida de ese chiquilín", dijo una de las vecinas que estaba en la casa del fallecido.
"Hoy vamos a hacer un piquete y van a tener que venir (la policía). Lo que queremos es justicia, que alguien pague por la muerte de ese chiquilín que tenía toda la vida por delante. Destruyeron una familia y un barrio (...) Que vengan con fierros (armas) y nosotros vamos con piedras", concluyó otro vecino.

ESPACIO PARA LA NOSTALGIA. EL “GORDO PELUQUERO”. Por Julio Dornel

                                                     Escritor y periodista Julio Dornel







Pese al esfuerzo realizado por los escritores locales, algunas profesiones han desaparecido definitivamente de la frontera sin dejar huellas que permitan a las nuevas generaciones un acercamiento directo con su pasado histórico. El encuentro con profesiones de la aldea, ha resultado siempre gratificante para quienes intentan recoger el testimonio de viejos vecinos sobre profesiones ya desaparecidas. En esas charlas informales surgen los primeros peluqueros del siglo pasado con Sadi, Pepito González, Cosme Acosta y el “Polaco” Pla, que dentro de sus limitaciones desempeñaban su oficio con dedicación, sin tener los instrumentos que existen en la actualidad. Por aquellos años solamente se cortaba, mientras ahora se lava, se seca y se pinta en varios colores. En la actualidad resulta muy difícil encontrar peluqueros de la vieja usanza con navaja, tijeras, algunos peines, talco y agua perfumada para después de la afeitada. Ahora son “coiffeur”. No dudamos que aquellos peluqueros marcaron una época en la historia ciudadana por tratarse de una profesión de trato personal y lugar sagrado para las confidencias o las últimas noticias. Sin embargo, un buen día apareció la máquina eléctrica para asombro de la juventud que se agarraba fuerte de la silla giratoria. Un recuerdo especial para Hugo Martínez, “el Gordo Peluquero” que llegó a Chuy en el invierno del año 1959, cuando la orquesta de los hermanos Mello animaba las reuniones bailables y Orlandito con su equipo de amplificación instalado en la avenida Internacional nos anunciaba que el Bocha Serrón se consagraba como uno de los mejores exponentes del tango, junto a la orquesta de Donato Racciatti. El 18 de Julio de ese año el popular “Valija”, se instala con peluquería frente a la plaza General Artigas. De esta manera con dos tijeras, una navaja, varios peines y sin espejo, recibió a su primer cliente Gabino Balduvino cobrándole 0.70 centésimos por el completo (barba y pelo). En materia de apodos nadie podrá igualar el récord logrado por el “Gordo Peluquero”, siendo muy pocos los habitantes de Chuy por aquellos años que escaparon a la sutileza de sus observaciones. Cuando no los inventaba los recogía de la calle y los patentaba en la peluquería que por aquellos años como decía el “Rata” Armando Fossati, era el centro cultural de la frontera. Por allí desfilaban diariamente los vecinos que sin utilizar los servicios profesionales del “Valija” querían enterarse de las novedades que solían pasar por el último divorcio o los amores contrariados de alguna pareja. Era reiterada diariamente la presencia de “Tongonazo”, “Nanico”, el “Coruja”, el “Gallo de Lata”, “Mafú”, el “Chancho”, “Fariña”, el “Golo”, el “Oso” el “Pato”, Camondongo” , el “Tornillo” y “Piñón Fijo” entre muchos.