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sábado, 4 de enero de 2014

Prostitución: investigan más clientes


las menores obligadas a prostituirse brindaron nuevos datos en el juzgado

La Policía identificó a más clientes de Punta del Este y Cerro Largo de las siete menores que eran prostituidas por una banda de proxenetas. Siete madres están comprometidas por omisiones a la patria potestad.
La Justicia probó que un empresario de La Barra envió giros a una menor. Foto: Sofía Orellano
Eduardo Barreneche
El País
 
"A El Cata lo conocí a través de mi hermana. Hace como tres meses, yo fui a la casa de él y me dijo que si quería tener relaciones sexuales con él, me daba plata, que yo le pidiera lo que quisiera cuando precisara, me hacía regalos, me compraba lo que quería y yo accedí".
Este es el testimonio de una de las siete adolescentes de Melo que el líder de la banda primero sedujo y luego convenció a tener relaciones sexuales con otros "clientes" de la capital arachán y en Punta del Este.
Según investigaciones policiales iniciadas en octubre en Maldonado y en Cerro Largo, el líder de la banda conocido por las adolescentes con el apodo de El Cata, llevó a Punta del Este a cuatro menores de edad y las contactó con diversos clientes, entre ellos un empresario de 75 años que resultó procesado con prisión por la Justicia el pasado martes 31 de diciembre.
Las fuentes dijeron a El País que, tras las informaciones aportadas por las adolescentes, ahora resta ubicar a clientes de Melo y Punta del Este que pagaban entre $ 300 y $ 400 para mantener encuentros sexuales con las menores.
"Hace tres años lo conocí a El Cata en Fraile Muerto donde fui con mi prima. Ahí empecé a frecuentar su casa (en Melo) donde me trataba lo más bien", declaró una joven de 18 años en el Juzgado de Melo.
Consultada por el juez Javier Gandini sobre cuánto El Cata le pagaba por mantener relaciones sexuales, la joven respondió: "A mí me daba trescientos pesos. El celular de El Cata tiene una cantidad de números de viejos y milicos que llamaban para acostarse con (...) y con (...) El Cata las llevaba a las casas de los clientes y después las levantaba", agregó la joven.
El auto de procesamiento, que fuera publicado ayer en la página web del Poder Judicial, señala que el empresario de Punta del Este procesado, de 75 años, giró "importantes sumas" de dinero a través de redes de cobranza que fueron a parar al proxeneta.
Según la resolución judicial, el empresario también efectuó giros de dinero a través de una tercera persona, ya que por "la frecuencia y cantidad de dinero enviada", la agencia le impidió hacer los mismos hasta que efectuara una declaración que "nunca realizó".
Enseguida agrega: "dichos giros a nombre del líder de la gavilla eran en beneficio de una adolescente de 15 años. La vinculación de la adolescente y el empresario se dio en el mes de mayo (de 2013) a través de una amiga de ambos".
El fallo judicial indica que la menor concurrió a Maldonado expresamente a conocer al empresario "para tener sexo a cambio de beneficios económicos teniendo conocimiento de que se trataba de una persona adinerada".
La amiga del empresario puntaesteño relató en el Juzgado: "Mi hermano conoce bien a (...) (la menor de 15 años) y la vida que ella tiene, que mantiene relaciones sexuales a cambio de dinero. Ella consume drogas. Y le dijo a mi hermano que si conocía a alguien que tuviera plata para estar con ella, para mantener relaciones sexuales por plata porque como ella está con el tema de la droga necesitaba plata".
Agregó que cuando habló con el empresario en Punta del Este, le dijo que había una chiquilina que quería conocerlo. "Él me dijo que si queríamos, él pagaba los pasajes y nosotras íbamos" a Maldonado.
Una vez en Maldonado, el empresario la llevó a un restaurante y luego a un shopping donde le compró a la adolescente vestimentas (campera, championes) y un celular.
"Al final del día la aloja en una casa en la barra de Maldonado en donde mantienen relaciones sexuales y al otro día la menor vuelve a Melo", indica el fallo de la Justicia.
A partir de ese momento, agrega, comienzan los giros de dinero para la menor cuyo destinatario era El Cata, señala el auto de procesamiento.
Fuentes policiales dijeron a El País que un padre y una madre de las menores cobraron los giros y agregaron que la Justicia analiza si estas u otras madres incurrieron en omisión de los deberes inherentes a la patria potestad.
En tanto, otras fuentes del caso explicaron que varias de las madres enfrentan procesos en juzgados de familia de Melo por esta causa.
Otras adolescentes ratificaron que El Cata tenía un amigo empresario de Punta del Este. "El otro día, ese amigo lo llamó a su celular y le preguntó por la menor (que había viajado a Maldonado), a lo que El Cata le dijo que hacía días que no la veía. Por lo que el empresario le preguntó si no tenía alguna amiga para él. El Cata me dijo que (el empresario) era un amigo que dos por tres lo llamaba y le pedía que le consiguiera mujeres", señaló una de las adolescentes en el Juzgado.

La trama.

El modus operandi de la gavilla era sencillo pero eficaz. Se contactaban con menores de escasos recursos económicos, luego les ofrecían dinero y regalos a cambio de favores sexuales.
Según investigaciones realizadas por la Policía de Cerro Largo, las adolescentes vivían en los barrios Feder, Collazo, Mendoza y Trampolín. Los dos sujetos procesados, El Cata y otro individuo, vivían en el barrio Feder.
El fallo judicial expresa que desde hace varios años a la casa de El Cata en Melo "frecuentan adolescentes a las que les ofrece dinero, ropa, recarga de tarjetas de celulares o diferentes promesas económicas a cambio de tener con él relaciones sexuales, manifestándoles que las mismas podían tener novios y que a él no les molestaba".
El juez de Melo, Javier Gandini, en el auto de procesamiento explica que "esta situación la vivían las adolescentes en la casa del indagado no solo con él sino también con otros hombres que frecuentaban el lugar en donde bebían, comían, se drogaba y mantenían relaciones sexuales".
También surge que el indagado "en diversas oportunidades" se comportó como intermediario "ayudando a las mismas a conseguir `clientes` contribuyendo a que se prostituyeran en su casa o llevándolas a los domicilios de estos y luego yéndolas a buscar".
Una menor de 15 años declaró en el Juzgado que la mayoría de las adolescentes que concurrían a la casa de El Cata "se acostaban con él. Él les daba plata, championes, ropa".
Otra adolescente de 17 años confirmó que el líder de la banda seducía a las chicas que llevaba a su casa y luego las prostituía. "Según los dichos de las gurisas mismas, él tenía relaciones con casi todas", según expresa el fallo judicial.
Además la Justicia indagó a un primo de El Cata que residió durante un tiempo en la casa del líder de la gavilla y también obtuvo favores sexuales de las menores a cambio de dinero.
Una adolescente de 15 años testificó: "El Cata me dio $ 300 y mantuvimos relaciones sexuales. Y el primo de El Cata también me prometió dinero y mantuvimos relaciones sexuales yo y mi hermana pero nunca nos dio el dinero".

Ministra Kechichián repudió los casos de prostitución en Melo y Punta del Este

La ministra de Turismo, Liliam Kechichián, repudió los casos de prostitución de menores en Melo y Punta del Este. En un comunicado dijo que en el Ministerio de Turismo se sienten "indignados" por el involucramiento de "un empresario de la Barra de Maldonado relacionado con la gastronomía y la hotelería" en el caso.
Kechichián recordó que más de 300 operadores privados, entre hoteleros, agencias de viajes y establecimientos rurales, suscribieron un convenio marco para incorporar en sus empresas adhesivos y otros materiales en el marco de la campaña para la Erradicación de la Explotación Sexual Comercial de Niñas, Niños y Adolescentes.
El código de ética en la materia estableció que "todo operador registrado" está obligado "a colaborar con la prevención de la explotación sexual infantil, y fijando códigos de conducta dentro de los establecimientos para que no se ofrezcan servicios sexuales que exploten a niñas y adolescentes, y así poder evitar y denunciar a quienes ofrecen ese servicio".
En este sentido se informó que se "redoblarán" esfuerzos para evitar estos delitos.
El martes 31 de diciembre, un empresario gastronómico de Punta del Este fue procesado con prisión por mantener relaciones sexuales con una menor a cambio de dinero.
El abogado defensor del empresario, Leonardo Guzmán, señaló en el Juzgado que apelaría el fallo por considerar que no está probado que su cliente incurrió en una retribución económica a una menor, ya que le enviaba dinero para que la misma se costeara un tratamiento médico para una seria enfermedad.

El fallo del juez Gandini

El juez penal de Cerro Largo, Javier Gandini procesó con prisión a El Cata y a otro sujeto oriundos de Melo por reiterados delitos de retribución a menores para que ejecuten actos sexuales. Un empresario de Punta del Este, de 75 años, también fue remitido por cometer un delito de retribución a menores de edad para obtener a cambio favores sexuales.
También dispuso que todas las declaraciones de los indagados y de las menores fueran derivadas al Juzgado de Familia donde se analizará si sus familiares incurrieron en omisión a los deberes inherentes a la patria potestad.
El juez dispuso que técnicos del Instituto Técnico Forense u otra entidad estatal practiquen pericias psicológicas y psiquiátricas a los tres procesados.
Dos individuos, que habían sido acusados de ser clientes de la red de proxenetas, fueron liberados. Otros dos individuos mantuvieron la calidad de emplazados.
El magistrado ordenó que se formara un pieza presumarial para proseguir las investigaciones sobre más clientes de la banda oriundos de la ciudad de Melo como de Maldonado. En una oportunidad, el jefe de la banda llevó a cuatro menores a prostituirse en Punta del Este

Alto apoyo a baja de edad penal abonará la campaña electoral


El 64% apoya la reforma; en el Frente Amplio, 53% votaría

El plebiscito sobre la baja de la edad de imputabilidad de 18 a 16 años se perfila como uno de los principales temas de la campaña electoral de este año.

Los menores de 16 años y mayores de 18 serán juzgados por el Código Penal. Foto: archivo El País
Pablo Meléndez
El País
 
En principio, la medida -que fue impulsada por el Partido Colorado y el Herrerismo en el Partido Nacional-, cuenta con el apoyo del 64% de la población, lo que equivale a decir que casi dos de cada tres uruguayos avalan la iniciativa.
De acuerdo con el último sondeo divulgado la semana pasada por Equipos Mori, entre votantes blancos y colorados la posición a favor de la reforma es muy amplia: ocho de cada diez la apoyan. Y a pesar de que el Frente Amplio ha expresado su rechazo a la propuesta, sus votantes están divididos: 53% a favor y 47% en contra.
El Frente Amplio, el Partido Independiente y los sectores nacionalistas que respaldan la candidatura de Jorge Larrañaga rechazan la reforma, mientras que el Partido Colorado apoya la medida al igual que las agrupaciones que impulsan la candidatura Luis Lacalle Pou en la interna del Partido Nacional.
El diputado frenteamplista Julio Bango dijo a El País que la coalición de izquierda tomará el tema como uno de los ejes de su campaña y con eso se estima que "van a cambiar los guarismos" que arrojan las encuestas.
"Confiamos en que el debate va a jugar a favor de nosotros porque va a clarificar las cosas y ahí la gente tendrá claro cuáles son las propuestas específicas que se plantean", pronosticó Bango.
El legislador dijo que la última encuesta que arroja un alto nivel de apoyo a la reforma muestra una "estabilidad respecto a otras mediciones". "Es un estado de opinión que no ha cambiado en la medida que nosotros (el Frente Amplio) no hemos realizado acciones fuertes. En 2014 vamos a promover el debate público sobre el tema con la derecha", señaló.
Mientras tanto, el Partido Independiente decidió en noviembre de 2012 su posición contraria a la baja de la edad de imputabilidad y su candidato presidencial, Pablo Mieres, adelantó que defenderá esa postura "con optimismo".
Mieres dijo a El País que la reforma "no causará la más mínima mejora en materia de seguridad" y por eso advirtió que si se aprueba quienes la voten se sentirán "estafados porque no va a cambiar nada".
Por su parte, el diputado colorado Germán Cardoso, que fue uno de los responsables de la Comisión Nacional por la Seguridad para Vivir en Paz para recolectar las firmas que habilitaron el plebiscito, dijo que la baja de la edad de imputabilidad "se deberá discutir con seriedad y responsabilidad" en la campaña electoral. Cardoso sostuvo que más allá de que los sondeos de opinión arrojan que la propuesta tiene un "amplísimo apoyo", el tema "no se puede dar por ganado".
El diputado colorado dijo que quienes rechazan la propuesta "apelan al engaño y a la mentira" para "no discutir con seriedad". Y en ese sentido remarcó que "nadie está estigmatizando a la juventud como de manera falsa se ha puesto arriba de la mesa".
En el Partido Colorado, sus dos principales precandidatos, los senadores Pedro Bordaberry (Vamos Uruguay) y José Amorín Batlle (Batllistas de Ley) apoyan la baja de la edad de imputabilidad.
La abogada Fabiana Goyeneche, vocera de la Comisión Nacional No a la Baja, dijo a El País que el nivel de apoyo divulgado en la última encuesta de Equipos está "dentro del nivel que se esperaba".
"No damos el tema por perdido. Queda todo un año de campaña. Es una batalla que tenemos que seguir dando hasta el final", indicó Goyeneche, quien se desempeña como asesora de Políticas Sociales en el Ministerio de Desarrollo Social.

Blancos.

El plebiscito sobre la rebaja de la edad de imputabilidad divide a Jorge Larrañaga y Luis Lacalle Pou, los precandidatos que se encuentran en primer y segundo lugar en las encuestas de intención de voto entre los blancos.
Las posiciones sobre el tema está bien definidas en la interna del Partido Nacional: el movimiento Todos (integrado por Aire Fresco, Herrerismo, Espacio 40, Soplan Vientos y Más País) apoya la candidatura de Lacalle Pou y respalda la reforma; mientras que Futuro Nacional (Alianza Nacional, Correntada Wilsonista, Concordia Nacional y Compromiso Nacional) que impulsa la candidatura de Larrañaga la rechaza.
El diputado Álvaro Delgado, uno de los principales dirigentes de Aire Fresco, dijo que Lacalle Pou planteará "claramente" en la campaña electoral que "entre las medidas a tomar para mejorar la seguridad se encuentra bajar la edad de imputabilidad".
Delgado recordó que todos los sectores que apoyan la precandidatura de Lacalle Pou están a favor de la reforma, pero indicó que la seguridad "no cambia" solamente por esa modificación, sino que hay que apuntar a otras propuestas.
En tanto, el senador Carlos Moreira (Alianza Nacional), indicó que entre los votantes de Larrañaga la posición sobre la baja de la edad de imputabilidad "va a quedar librado a criterio de cada ciudadano". "No vamos a hacer campaña en contra", aclaró.
De todos modos, Moreira dijo a El País que los sectores que apoyan a Larrañaga plantearán los argumentos por los que rechazan la iniciativa. En tal sentido, opinó que lo adecuado es establecer penas más extensas e internación preceptiva en algunos delitos.

Qué dice la reforma

La reforma que se plebiscitará junto a las elecciones de octubre, establece que los mayores de 16 y menores de 18 años serán penalmente responsables y castigados de conformidad al Código Penal, por la comisión intencional de los delitos de homicidio, homicidio especialmente agravado, homicidio muy especialmente agravado, lesiones graves, lesiones gravísimas, rapiña, copamiento, extorsión, secuestro y violación. Los antecedentes no se destruirán y serán considerados en los procesos a los que puedan ser sometidos después de cumplir los 18 años. Se crea un servicio descentralizado para la internación y rehabilitación de los delincuentes menores de 18 años.

A M B U L A N T E S Julio Dornel

                                               Escritor y periodista Julio Dornel


SOBREVIVEN EN LA LINEA DIVISORIA
CON EL CURSO SUPERIOR QUE DA LA VIDA
RECAUDANDO LAS ESCARCHAS DEL INVIERNO
Y EN VERANO LA ESPERANZA PROMETIDA.


VENDEDORES AMBULANTES DE FRONTERA

COMPETENCIA CLANDESTINA EN LA AVENIDA
PROFESIÓN DE ALTERNATIVA EN LA VEREDA
LA RIQUEZA NATURAL MAL REPARTIDA.


DURA LUCHA FRENTE A FRENTE CON LA VIDA

IMPORTANCIA SOCIAL DESCONOCIDA
MARIONETAS DE CARTÓN EN LA AVENIDA
Y UN MENSAJE DE ESPERANZA COMPARTIDA.


FANTASIA Y REALIDAD EN EL CAMINO
VENDEDORES DE ESPERANZAS EN LA VIDA
AMBULANTES DE LA CALLE SIN DESTINO
AFINCADOS PARA SIEMPRE EN LA AVENIDA.


EN LA LINEA DIVISORIA SOBREVIVEN

CON EL CURSO SUPERIOR QUE DA LA VIDA
RECAUDANDO LAS ESCARCHAS DEL INVIERNO
Y EN VERANO LA ESPERANZA PROMETIDA.

Letra Julio Dornel
Música Nelson (Pindingo) Pereyra.

viernes, 3 de enero de 2014

"Nosotros los uruguayos" Por Julio Dornel

                                                     Escritor y periodista Julio Dornel


Existe en términos generales y salvo raras excepciones un panorama sombrío generado por el descreimiento que suele mortificarnos por el solo hecho de pensar que “somos menos” y que todo nos resulta imposible de realizar. Y es ahí en esas oportunidades que no encontramos nada positivo y terminamos recriminando a quienes triunfan en sus actividades, aflorando un rencor solapado ante el éxito ajeno. Surgen las pequeñas cosas que conducen al desgano, al egoísmo y a la envidia. Como será que nos sobresaltamos cuando nos cae algún elogio o recibimos algún reconocimiento por parte de la sociedad. Tenemos la virtud de trasformar todo en una competencia, como si la propia vida fuera un campeonato. Poco importa preservar los valores culturales, la tradición y la sabiduría. Solo importa prepararnos para competir y ganar bajo el nuevo slogan de “Competir es bueno, ganar es mejor.” Estamos en el circo romano con ropas modernas y debemos participar de la mejor manera, tomando partido sin preocuparnos mayormente por venerar a los grandes de nuestra historia o detenernos en las cosas pequeñas. Somos contra o a favor. Amigo o enemigo, Nacional o Peñarol, derecha – izquierda, y blanco o negro en una posición encontrada que figura en las mejores tradiciones de nuestro país. El escritor Marciano Duran ha sintetizado en extenso poema la identidad del pueblo uruguayo agregándole la cuota de humor que siempre complementa sus crónicas:

“es que somos nosotros, se nos ven las hilachas
“es que somos nosotros, los que el lunes que viene
“arrancamos la dieta o tiramos él pucho.
“Los de bajo perfil, los que como bandera levantamos los mates.
“Los de siesta estival, de veredas baldeadas.
“Somos nosotros los orientales.
“Somos el dulce de leche, los chivitos, los chaná
“los churrascos, chinchulines, somos bagayos del Chuy
“choripán, postre chajá.
“ Los que una vez por todas dejemos de esperar la ONDA.
“Seremos los uruguayos o no seremos nada.
“Es que vengo de aquel tiempo bueno
“en que laica era la escuela y laika era la perra.
“cuando ya no quedaban más tranvías
“y la ONDA se estiraba entre los trenes.
“Es que vengo de aquel tiempo mío
“en que se iba desde el sur discepolín,
“y el maracanazo era una gran mochila
“que doblaba nuestra espalda para siempre.
“Acá llegamos casi sin danos cuenta,
“dejamos de fumar a escondidas de nuestros viejos
“y empezamos a fumar a escondidas de nuestros niños.
“Limpiamos ríos y contaminamos arroyos.
“Y nos fuimos transformando en gente punto com,
“y las ovejas nacieron en frasquitos,
“y el ozono empezó a jodernos feo,
“y el Sida nos hizo tan fieles como precavidos
“y los primus se volvieron microondas
“y las madres de mayo siguieron preguntando,
“y window fue mucho más que una ventana
“y el Enzo se vistió de embajador
“y los chorizos se hicieron hamburguesas.....”
Cuanta razón en los versos de Durán para mostrarnos una realidad que olvidamos o no queremos ver porque los uruguayos somos así… POR SUERTE.

La oscura comedia de Pluna por Samuel Blixen

Brecha digital

Bien está lo que bien acaba: hace exactamente siete años, el 4 de enero de 2007, la oscura comedia de Shakespeare, con su trama errática y confusa, parecía haber inspirado al entonces ministro de Economía, Danilo Astori, para impulsar la privatización de Pluna. 
Como se sabe, la aventura no acabó bien, pese a los pronósticos del ministro. Aquel 4 de enero Astori anunciaba la privatización en estos términos: “Quiero decirles que el Ministerio de Economía ha venido trabajando permanentemente en este proceso, y quiero destacar cuatro características sobre las que me parece conviene poner énfasis. En primer lugar la profesionalidad con la que se ha manejado el desarrollo del proceso. El hecho de hacerlo profesionalmente es muy importante, porque asegura la búsqueda y el hallazgo de un buen resultado, a la luz del objetivo que estamos percibiendo. Cuando estas cosas no se hacen de esta manera, generalmente terminan mal, terminan con problemas que surgen, a veces con previsión, a veces imprevistamente, y frustran una experiencia de este tipo. En este caso está sucediendo todo lo contrario: profesionales de primera línea están participando en el desarrollo de esta búsqueda y seguramente este es un proceso que va a culminar con buenos resultados para el país”.
Las palabras del ministro hacían inequívocas referencias a la anterior privatización de Pluna, impulsada por el presidente Luis Alberto Lacalle, aparentemente sin profesionalidad. Como se sabe, en este caso la profesionalidad no aseguró el éxito, de modo que su anuncio como algo inevitable refleja cierta soberbia. El desenlace, siete años después, cuestiona en principio aquella profesionalidad, aunque es más exacto decir que el fracaso ocurrió pese a la profesionalidad de los técnicos que intervinieron. El recurso de las comparaciones es relativo y en todo caso los fracasos se explican, siempre, y antes que nada, por causas internas.
Esos elementos son los que, desde el principio, permanecieron ocultos, inconfesos, y son, precisamente, aquellos que hubieran aconsejado un triunfalismo más prudente. De hecho están presentes en las palabras de Astori al anunciar por primera vez la operación de privatización y sus bondades: “Y finalmente el volumen de la inversión, un volumen importantísimo para, no sólo la compañía Pluna, de modo de asegurar la solidez de sus operaciones en su futuro, sino también para la propia economía uruguaya en su conjunto; una inversión de 177 millones de dólares en dos años, tenga el destino que tenga, es para Uruguay una inversión muy importante; en este caso una garantía de la fortaleza con la que operará la compañía en el futuro”. Preguntado sobre la forma en que se concretaría la inversión, Astori explicó: “Hay una suscripción de capital inmediata de 15 millones, luego otros 10 aportados mediante líneas de créditos ya comprometidas, y el resto –o sea 152 millones– es un financiamiento que está fuera de balance para permitir la incorporación de las 20 aeronaves de las que hablábamos hoy”.
Lo que el ministro no quiso explicar fue que ese “financiamiento fuera de balance” por 152 millones de dólares no era una inversión directa –como había informado el ministro de Transporte Víctor Rossi–, no era una capitalización, no era un aporte para la “fortaleza” de Pluna “y de la economía en su conjunto”, sino una garantía soberana del Estado uruguayo para que los nuevos propietarios pudieran negociar la compra de los aviones. El ministro Astori omitió deliberadamente mencionar esa garantía que –hoy se sabe– fue la piedra angular de la negociación desde el comienzo, porque de haberlo hecho el negocio hubiera sido automáticamente cuestionado, no sólo por la oposición política sino por los eventuales interesados para quienes la gestión de Pluna hubiera sido muy atractiva con la garantía del Estado sustituyendo el grueso de la inversión.
La ficción de aquella inversión por 177 millones de dólares se mantenía el 12 de febrero de 2007 cuando, con la presencia del presidente Tabaré Vázquez, Astori firmó el acuerdo de “due diligence” que concretaría la operación. En la ocasión hizo malabarismos de cifras: el gobierno aportaba el 7 por ciento del capital de la nueva empresa pero se alzaba con el 25 por ciento de las acciones. ¿Cuánto valía aquella garantía por el 100 por ciento de la compra de aviones, que se seguía manteniendo oculta? Astori habló de las salvaguardas y los poderes de la comisión fiscal que otorgaban un control excepcional. Pues bien, las 20 aeronaves –que, según Astori, “van a lograr una transformación total de Pluna, no sólo jerarquizándola como línea fundamental en la región, sino además propulsándola como línea fundamental para constituir puerta de entrada y de salida de pasajeros originados y destinados en Europa y en Estados Unidos”– fueron apenas siete, y por ellas el Estado debió asumir una deuda de 137 millones de dólares con el Scotiabank, es decir, con el principal accionista del cuarto banco en importancia en Uruguay, el Nuevo Banco Comercial. La jerarquización, en los hechos, comenzó por la eliminación de los vuelos a España; y los controles terminaron, como se sabe, en el vaciamiento que condujo al procesamiento con prisión de los principales ejecutivos de Leadgate.
Alguien podría escribir una comedia sobre la historia –la historieta– iniciada en 2007: “Termina mal todo lo que comienza mal”. Una historieta que tiene tres principales responsables: el ministro Astori, que ensayó una especie muy particular de profesionalismo; el ministro Rossi, que puso la cara sin cortar ni pinchar; y el presidente Vázquez, que otorgó expresamente el respaldo político. Resulta sugestivo que la versión de las palabras de Astori del 4 de enero de 2007 en la página web de la Presidencia contenga algunas diferencias significativas con el audio reproducido hace algunos días en los programas periodísticos de radio Sarandí. En la versión oral Astori aparece mucho más enfático en anunciar el éxito del proceso como derivación inevitable de lo bien que se había iniciado; pero también hacía referencias expresas al respaldo que la iniciativa tenía del propio presidente Vázquez. La transcripción escrita omite esas referencias; y, por otro lado, el archivo de audio de esa jornada no está, como sí lo está el archivo de las palabras de Astori del 12 de febrero.
Siete años después, el ahora vicepresidente Astori ensaya una explicación de lo ocurrido: “Las opciones eran: dejar caer por completo a Pluna; que el Estado se hiciera cargo (no nos pareció correcto, porque ya se había gastado mucho dinero); y la tercera, buscar un socio”. Aun ahora, con los resultados a la vista y las resoluciones penales, Astori mantiene una mirada inocente sobre Leadgate y Matías Campiani: “Pusimos todo el empeño en buscar un socio que pudiera llegar a un resultado positivo; la experiencia fracasó. Analizamos todas las posibilidades, Leadgate fue la única que puso 2 millones para comprar el pliego y la única que puso 15 millones de dólares” de capitalización.
Explica de una manera muy peculiar el desastroso desenlace: “La caída a mi juicio fue por tres razones: el desequilibrio entre las (pocas) frecuencias y la flota; la relación entre capital propio y financiamiento, la firma se endeudó exageradamente; el precio del combustible, que era el más alto de toda la región, mucho más alto que el de sus competidores”.
Y elude empeñosamente comprometer su responsabilidad. ¿Se siente responsable?, le preguntan. “Después de haber visto los resultados, la verdad es que la experiencia terminó en fracaso. Fue una experiencia que se hizo con la mayor buena fe por parte de todos, con la mejor intención de parte de todos, y que salió mal.”
“Salió mal” es una pobre explicación para el costo de la aventura (una pérdida de cerca de 300 millones de dólares). Es insuficiente para todos los puntos que continúan oscuros: el otorgamiento de la garantía; la elección de Leadgate a partir de la opinión de un broker; la compra de aviones canadienses (que no son usados en la región); el descarte de un negocio con Brasil, más barato y bajo el paraguas de la integración regional; el endeudamiento con un banco que decidió instalarse en plaza; la incomprensible incapacidad de los representantes estatales para enfrentar y oponerse a los negocios y negociados que terminaron en quiebra y vaciamiento.
La buena fe y la mejor intención rechazan insinuaciones de corrupción, y seguramente es correcto, aceptable. Pero no diluyen las responsabilidades políticas de decisiones que no han sido justificadas y que no se explican por ingenuidad o ineptitud.