Durante toda la madrugada se discutió la posibilidad de que se lleve adelante un juicio político. Ediles del oficialismo, de la oposición y el propio intendente no llegaron a tomar una decisión
En una sesión maratónica de más de diez horas en la Junta Departamental de Cerro Largo, en la que los ediles, ante la presencia del intendente Sergio Botana, debían decidir si se votaba un juicio político al jerarca por el desvío de fondos públicos, terminó en un llamado a cuarto intermedio sin decisión definitiva.
Fuentes relacionadas al caso comentaron a El Observador que las explicaciones que brindó Botana no fueron suficientes como para tomar la decisión y se prevé que se retome la conversación el próximo martes.
Botana está enfrentando la acusación de frenteamplistas, pero también la de algunos ediles de su propio partido. El intendente tiene el apoyo de cinco de los 17 integrantes de la Junta que pertenecen al Partido Nacional.
La mayoría de los ediles oficialistas que ahora amenazan con votar en contra de Botana, formaron parte de sus filas cuando este ganó la intendencia.
De acuerdo a lo que informaron a El Observador fuentes del caso, la noche contó con varios momentos acalorados. En la página digital de la radio La voz de Melo se detalla que el punto fuerte del enfrentamiento se dio a las 3:30 de la madrugada cuando el nacionalista Hugo Saravia presentó documentación probatoria de que se compró luminaria con dinero destinado a construir viviendas.
El mismo medio detalla que Botana asistió acompañado por su asesor Alvaro Segredo, el director de Hacienda, Alejandro Duarte y el doctor Roberto Flores, grado cuatro de la Facultad de Derecho.
Cuando comenzó la sesión se realizó una manifestación a favor del intendente. Fue necesario que se cortaran las calles y que se hiciera presente la Policía.
