Escritor y periodista Julio Dornel
“Este
es un pequeño paso para el hombre, pero un gran salto para la
humanidad”.
Esta fue la famosa frase
pronunciada por el astronauta NEIL ARMSTRONG,
cuando el 20 de julio de 1969, conjuntamente con EDWIN ALDRIN,
pisaron por primera vez la superficie lunar. De esta manera dos
ASTRONAUTAS norteamericanos en nombre de la Humanidad llegaban a la
superficie lunar. Cabe señalar que Armstrong nacido el 5 de agosto
de 1930 fue el primero en pisar la luna, haciéndolo más tarde
Aldrin, señalando que lo hacía en nombre de toda la humanidad.
Finalmente publicó varios libros, sosteniendo una lucha permanente
con la depresión clínica y el alcoholismo. ARMSTRONG, había
estado en Montevideo dos años antes del alunizaje, acompañado de
funcionarios de la NASA y de su esposa, alojándose
en el Hotel Victoria Plaza, cruzando a la plaza Independencia para
rendir homenaje al Gral. Artigas.
Volviendo al alunizaje, debemos
señalar que el mundo festejó
alborozado el histórico acontecimiento. El hombre había llegado a
la luna, quitándole el misterioso encanto que durante milenios
había mantenido con la humanidad. El Papa Pablo VI desde su reducto
romano, saludaba a los astronautas norteamericanos que habían
concretado la hazaña. El vehículo espacial (APOLO II) había
depositado sobre la superficie lunar a los dos astronautas que eran
aclamados con los deseos de un nuevo destino para la Humanidad. Para
los poetas y los amantes, la luna ya no sería la misma. Había sido
pisoteada y violada por el Hombre, perdiendo para siempre su
privacidad. Tampoco la sentencia de la Iglesia se ha cumplido en su
totalidad. El Papa había sentenciado: “GLORIA A DIOS EN LAS
ALTURAS Y PAZ EN LA TIERRA A LOS HOMBRES DE BUENA VOLUNTAD. Todavía
no sabemos cuál será el resultado final del viaje espacial, pese a
los años transcurridos. El objetivo se había logrado. El Hombre
había llegado a la Luna. Un puñado de astronautas, frágiles e
indefensos ante las enfermedades, ante el dolor y la muerte, saltaron
los limites terrestres, para entrar con pasos gigantescos al ámbito
de las conquistas siderales. La hazaña fue de la Humanidad, pero
nadie podrá olvidar el nombre de estos astronautas que superando
distancias, nos hacen pensar en un mundo mejor, donde el hombre pueda
vencer también las dificultades que enfrenta diariamente y que sobre
todo…pueda vivir en PAZ.