Buscar este blog

miércoles, 8 de marzo de 2017

Libre de Furia Isabel Oronoz -- uy.press



 

Ni una menos. Tocan a una, nos tocan a todas. Paro general a partir de las 16hs, el 8 de marzo, bajo la consigna, Las mujeres paran el mundo.

 Clic en este enlace

Isabel Oronoz -- uy.press / Agencia uruguaya de noticias

Problema urgente e impostergable en nuestro País y Departamento “SUICIDIO”. Edil Emilio Rotondaro.




En referencia a este tema, creimos que debíamos realizar un planteo en la Junta Departamental de Rocha poniendo en la picota multidisciplinaria un tema de suma importancia, un flagelo para nuestra sociedad, que sigue en aumento.
Edil Emilio Rotondaro.
Un tema que esporádicamente se ha venido hablando y al cual creemos que se debe atender urgentemente ya que afecta a toda nuestra sociedad, a través de los años, y no hay ejecutividad ni respuestas practicas y concretas, solo análisis situacional y algunos diagnósticos a mediano y largo plazo. Días atrás pudimos constatar en prensa escrita la situación y las estadísticas de suicidio en nuestro Departamento y a nivel nacional.
A la fecha como Departamento nos situamos dentro de los primeros lugares con los índices más altos a nivel de Nacional y como País en América.
El suicidio es la primera causa de muerte violenta en Uruguay, lo que lo ubica como el país con la mayor tasa de mortalidad por suicidios del continente junto con Cuba.”
Es un tema que se menciona en prensa muy esporádicamente donde las autoridades vienen comunicando desde hace mucho tiempo que se vienen generando distintas alternativas para la contención de dicha problemática LA CUAL AÑO TRAS AÑO MUESTRA UN AUMENTO.
Según datos de prensa en nuestro Departamento en “barrios periféricos de Rocha donde la cifra de suicidios es de 40 cada 100.000 habitantes de acuerdo a la norma estadística general.”
La mayoría de los casos están registrados en hombres de entre 40 y 60 años, aunque constituye la segunda causa de muerte en jóvenes rochenses de entre 15 y 19 años. Es la tercera causa en la franja de 20 y 24 y la cuarta entre 25 a 29.”
Apelamos, a que en realidad, se genere compromiso médico e Institucional, del Gobierno Nacional y Departamental en abordar un tema que no es nuevo en nuestro Departamento y se constituye en un flagelo que a la fecha no se ha podido frenar, menos en pensar de erradicarlo.
Sabemos que se trabaja en el tema, pero consideramos que se debe trabajar aun mas en buscar las formas para minimizar y o erradicar esta problemática de nuestra sociedad.


Pedimos apoyo del cuerpo y que estas palabras pasen al Intendente Departamental, Directores de salud de Rocha, Diputados departamentales, Congreso Nacional de Ediles, Senador Javier García, Comisión de Salud Pública y Asistencia Social del Parlamento.
Gráficos:

martes, 7 de marzo de 2017

Wilson Sanabria, la cara de la corrupción


 http://www.espectador.com/

A medida que avanza la investigación surgen nuevas y más graves facetasde la operativa de Cambio Nelson en Maldonado y otros lugares del país.
Además de sucursales instaladas, Cambio Nelson tenía "agentes" endiferentes localidades del interior. Ellos eran los encargados de obtener dinero para colocar o realizar préstamos. Pero hay un caso particular en Colonia

La tarea de agente de Cambio Nelson en Nueva
Palmira la realizó un funcionario del Banco República, que ahora está en Carmelo como cajero de la sucursal local.

Nuestras fuentes indican que ese departamento la estafa alcanza “muchos” millones de dólares.

En Maldonado continúan los allanamientos a diferentes sucursales del Cambio.





 Clic en este enlace

Wilson Sanabria, la cara de la corrupción

RECORDANDO A DANIEL DE ARMAS. Por Julio Dornel.

Julio Dornel,Escritor, periodista

Conscientes de que será muy difícil encontrar palabras y obedecer sentimientos para expresar el dolor que significa recordar un amigo, publicaremos nuevamente la nota donde destacábamos la personalidad de Daniel y presagiábamos el triste desenlace.
Mientras aguardábamos el milagro de una recuperación fuimos extrayendo textos pertenecientes a una publicación de ZONA CHUY, donde destacabamos sus condiciones periodísticas y su trayectoria personal. Cuando recién completaba secundaria lo ubicamos como peón rural, panadero, comerciante, promotor y empleado en un aserradero. Funcionario público de UTE, Vialidad, policía, profesor de literatura, marinero, administrador de empresas, guía turístico y Curso de Comunicación para el Desarrollo.
Aficionado a la pintura también ha dejado su marca en el arte fronterizo y la literatura al haber conquistado tres premios departamentales con los cuentos “Mar Adentro”, “Germán” y “La Palma Sola”. En el periodismo se caracterizó siempre por defender las causas populares, con gran sentido profesional y un olfato especial para buscar la nota. Conductor de varios programas en radio y televisión se ha caracterizado por llegar al público con la nota humana que en algunos casos resulta conmovedora. Fanático del micrófono, simboliza al reportero del interior que supera todos los obstáculos para lograr la nota informativa.
Con muchos años en el periodismo local ha reunido el conocimiento y la experiencia que resultan de fundamental importancia en los medios de comunicación. Así es Daniel de Armas, discutido, polémico, pero con una audiencia consecuente que lo acompaña desde hace muchos años en los distintos medios de comunicación donde se ha desempeñado. Considera fundamental el ejercicio de la libre expresión del pensamiento, donde cada persona tenga la posibilidad de opinar. Su aventura en el periodismo comenzó en 1983 en la antigua Radio Chuy, conduciendo el programa “Crucero Musical”, pasando al cargo de operador cuando se retiró Jorge Izaguirre. Tras un pequeño “parate”, comienza a trabajar en el viejo canal 11 de Treinta y Tres, a cargo de la repetidora de Chuy. Fue el primer operador, vendedor y administrador, hasta que Jorge Méndez lo convoca para la primera etapa de Canal 4 Televisora Color, debutando con un periodístico llamado “INQUIETUDES”.

Entre la ética y la ola de calor. Mauro Mego


La izquierda en el gobierno, no solo aquí en Uruguay, sino en todo el mundo es siempre más vigilada por la opinión pública, por su historia, por su prédica, por su  razón misma de ser. Porque las izquierdas son las que se rebelan ante la injusticia del mundo, las desigualdades, el capitalismo y sus efectos inhumanos, es la que pone los valores de la solidaridad por sobre los de la competencia. No quiere naturalizar al mercado ni a la desigualdad, condena y combate la pobreza desde sus causas. Además es más vigilada por esas y otras razones porque en definitiva los poderes del mundo controlan casi todo, cada pasito que da la izquierda en dirección a ese mundo más justo es siempre flor de triunfo, cuesta, te lo cobran caro. Porque perder privilegios y echar una mano a quienes más jodidos están no es algo tolerable por algunas elites hambrientas de todo menos de comida, que ya les sobra. En ese marco de aguda vigilancia, las izquierdas del mundo se mueven, hay para todos los gustos, de todos los matices que se imaginen. Pero la izquierda, se sustenta no solamente en la búsqueda del poder como medio y no como fin, sino que se edifica sobre la base de una ética en sus procedimientos, con una muy fuerte carga de valores respecto de lo correcto, lo incorrecto, lo justo, lo limpio, la verdad. Toda una ética que la izquierda debe cargar consigo a cada paso que da y que en muchos casos no solo debe expresarse en un sitio determinado de gobierno sino en las esferas centrales de la vida vincular, que no implica la perfección puritana, pero sí tratar de acercar el “decir” y el “hacer”.
En todo este marco hay un debate no dado con total fortaleza y claridad pero que “subyace y sobrevuela”. Es decir, ¿La izquierda debe construir una vez que accede al gobierno-con las enormes limitaciones de la coyuntura histórica-utilizar las armas que combatió? ¿Si, como dijimos, a la izquierda todo siempre le cuesta el doble, se debe avanzar con fiereza sobre lo establecido sin valorar los medios? ¿En nombre de esos valores superiores vale justificar todo? Hay quienes sostienen que, como estamos en un territorio de total hostilidad, la construcción de una nueva “hegemonía” se debe hacer como sea. Allí florecen algunos relativismos complejos de digerir. Por ejemplo, todos sabemos que existe una gran embestida de los centros de poder real y sus derivas políticas, pero ver ese hecho objetivo no debe hacernos prescindir del análisis sobre nosotros mismos. Porque si bien estratégicamente hay que ver todo el panorama con las fuerzas de derechas y conservadoras que están al acecho, y es infantilismo prestarse al juego de dar aire a las opciones regresivas (porque implica no comprender en parte lo que pasa, los avances y logros) no debemos perder de vista que somos simples “obreros de la construcción de la patria del futuro” como pensaba el General Seregni.  La izquierda, que rema siempre el mundo contracorriente, tiene sobre sí una lupa más grande, no solo por su propuesta sino por su prestigio, su historia, sus aciertos y desaciertos, sus propias experiencias históricas, que las hay de todo tipo.
Dicho esto creo que debemos ser cuidadosos de valorar los enormes avances que hemos tenido y evitar los “mesianismos” internos que nada tienen que ver con la cultura frenteamplista. Del mismo modo pienso que debemos ser cada día más rigurosos con los aspectos éticos desde nuestra gestión, e incluso desde el interior mismo de las organizaciones políticas, sus praxis, sus manejos internos, sus pugnas.  Porque si los cargos, y las permanencias o re-posicionamientos en ellos, nublan nuestros deberes programáticos y estratégicos estamos el clima se vuelve espeso. Porque también hemos aprendido que la condición humana no distingue de ideologías, pero tenemos la obligación de pensar sobre ello desde nosotros mismos y desde nuestras fuerzas políticas. Que determinadas derechas hagan tal o cual cosa, o lo hayan hecho, puede hasta ser comprensible porque los intereses de sus espacios suelen no ser los del mundo que deseamos, pero quienes proponemos otra cosa: austeridad, apego al trabajo, solidaridad, humanismo, igualdad, cristalinidad, cuidado de la cosa pública (de todos y todas) tenemos que empezar por esos elementos. ¿Quiere decir esto que está prohibido equivocar? ¿Qué debemos ser infalibles? No, al contrario, somos tan humanos como para errar y errar, pero definimos al ser humano por sobre todas las cosas y es ese elemento y la confianza misma en el futuro humano lo que solventa la proyección de porvenir de cualquier proceso de izquierdas. Aquel “Hombre nuevo” del que se habló alguna vez o, para no ser tan grandilocuente, esa “construcción de ciudadanía” que demanda la hora.
Esta preocupación no es para entrar en alarmas ni mucho menos. La izquierda nuestra es un ejemplo en el mundo, y hemos llevado adelante 12 años de políticas de izquierda con las limitaciones de nuestra realidad y los equilibrios que nuestro país exige. Pero, el debate ético no está solo de un lado del mapa de la izquierda, sino que corta transversalmente a toda la fuerza, porque incluso detrás de algunas “causas revolucionarias” a veces hay cosas que no cierran. Se trata de construir dentro de nuestras fuerzas sobre la base de debatir qué lugar juega esa ética, de qué ética hablamos y para qué queremos gobernar, cómo equilibramos las convicciones y la responsabilidad, cómo tratamos de dar empuje a los cambios pero sin torpezas que nos devuelvan a los brazos de quienes representan los intereses contrarios a las mayorías populares. Eso lo haremos de brazos abiertos siempre, nada de exclusiones, pero sobre una síntesis que signifique avance pero con los pies sobre la tierra, porque hay que gestionar y tener ideología también, la segunda debería en la medida de lo posible marcar la cancha de la primera pero sin olvidar que somos humanos y que hemos propuesto una bella utopía, una ética a la que no debemos renunciar. Pero bueno, disculpen, debe ser el calor.