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jueves, 14 de diciembre de 2017

Una charla con Chumbo Cabral, un personaje rochense como pocos






A los setenta y algo Lazaro Chumbo Cabral tiene una muy rica historia de vida que es muy bueno conocer.
  Aprendió a leer y escribir antes de los cuatro años gracias a su abuela. Quiso ser militar y cura. Fue y es farmacéutico. Colorado y peñalorense, cristiano "pero no ya católico y menos con este papa con camiseta política".
Fue presidente veinte años del centro comercial y representante de las farmacias del interior.
Estuvo en Charlas de Altamar de Bitácora de Radio por Navegante FM 94.1.
Quedó mucha historia por contar.
Navegar es necesario
Otro aire en las mañanas de la radio

CONSIDERAN MUY POSITIVA LA REUNIÓN DEL GOBIERNO DE ROCHA CON VECINOS POR CARNAVAL DE LA PEDRERA

COMPLETO INFORME DE LA PERIODISTA ADRIANA PUGLIESE DE LA PALOMA HOY





 Copie y pegue este enlace en el navegador para leer la nota original

http://lapalomahoy.uy/nota/3202/hubo-intentos-de-todo-tipo-para-encauzar-el-carnaval-y-se-fracaso-con-los-intentos

domingo, 10 de diciembre de 2017

DIEGO GERMÁN MOYANO Y SU RICA HISTORIA DE VIDA. LICENCIADO EN TRABAJO SOCIAL Y MAGISTER EN EDUCACIÓN POPULAR


 

 
Escribe Juan José Pereyra Twitter@juano500

 
Tiene 35 años, nació en Durazno, es oriundo de Paso de los Toros y reside en Rocha desde hace algunos años.
Entre sus múltiples facetas es músico e incorpora su arte al trabajo cada vez que es posible.
En charla con Hay otra historia de Radio Fortaleza Diego Germán habló de su profesión y de su vida, cómo llegó a estudiar Trabajo Social y de su título de Magister en Educación.
Trabaja en la Agencia Nacional de Vivienda y es responsable de Trabajo Social en toda la región este del país. También lo hace para Alternativa Chuy, una institución que gestiona un Centro Caif en la localidad de Punta del Diablo.

Su fascinación desde niño por el circo y la vida que este genera lo llevó a estudiar y participar en ese mundo especial y mágico.
Siendo adolescente le pidió a sus padres que lo dejaran irse en una gira con un circo y no lo dejaron. Estaba en quinto del liceo.
Su tesis de maestría en Educación Popular culminó con una investigación participativa con artistas y ex artistas del circo uruguayo. Una parte importante de su estudio tiene que ver con aquellos circos populares, familiares, que al finalizar la actuación ponían en escena obras de teatro como Dionisio Díaz, Juan Moreira y tantas otras.
“Hoy quedan solo dos compañías que aún desarrollan algo de teatro. Es una expresión muy clara de difusión de cultura popular”, dijo.



Trabaja con la gente en educación popular en la búsqueda de soluciones de los problemas sociales de familias, grupos, unidades territoriales con el objetivo de mejorar la calidad de vida de la gente. Su tarea es compartida en algunos programas con otras disciplinas como la sicología, la propia educación, la comunicación comunitaria.
Lo hace en problemas de vivienda, salud, descentralización y participación ciudadana así como en programas para encarar la violencia doméstica, temas de infancia y adolescencia , adultos mayores. Esos programas son tanto públicos como privados y algunos financiados por la cooperación internacional.
Es un estudioso de los aportes del educador brasileño Paulo Freire .
¿Cómo encarar los cambios que necesita el sistema de educación formal en Uruguay?
¿Qué es para él el “ADN” de la educación?
Estas y muchas otras preguntas.
 
Les invito a escuchar la charla completa con el Licenciado Diego Germán Moyano.


sábado, 9 de diciembre de 2017

SEMBLANZA por Oscar Bruno Cedrés “Histórico 7 de diciembre”





En el fútbol de Rocha el 7 de diciembre integra una fecha histórica, es que ese día del año 2005, en el enjardinado Estadio Sobrero de nuestra ciudad, la celeste profesional del Rocha Fútbol Club daba la vuelta olímpica al obtener el Torneo apertura del fútbol profesional uruguayo de 1ª. División.
Se rompía la tradición, el hábito, de que los ganadores de los torneos organizados por la AUF siempre los eran los clubes de la capital, los de gran poder deportivo, económico, social, de gran insfractutura, principalmente los dos grande.
Primera vez que un Club del Interior de la República llegaba a ser el mejor, el campeón, tirando abajo la estadística, haciendo caer “la estantería”, haciendo que la noticia recorriera las páginas de la prensa mundial deportiva que lo gran novedad, en el país penta campeón mundial triunfaba un extraño, un orejano.
En la espléndida tarde del 7 de diciembre del 2005, Rocha Fútbol Club vencía por dos goles a 1 al Rampla de la Fortaleza, y los resultados que se daban ese día dejaban en forma adelantada como campeones a los celestes esteños.
Defendieron al equipo local conducido técnicamente por el fernandino Luis “Pichu” González, con José Luis Bitabarez como ayudante técnico, Álvaro García al arco, Matías González luego Cristiano Araujo, Diego Sosa, Darwin Noguéz substituido por el Bochón Ruben Rodríguez, Diego Ciz, Pablo Esquivel, luego Leonardo Maldonado, Martín González capitán del equipo, Luis Magureguy, Heber Caro, Pedro Cardoso el goleador del campeón, y Mauro Aldave, integrando además el plantel esa tarde Oscar Lemos como golero suplente, Pablo Seijas, Ricardo Chaparro, y el Pocho Martín Larrosa.
Los dos goles rochenses fueron convertidos por Luis Magureguy, el segundo mediante tiro penal faltando cinco minutos para finalizar el partido.
Los festejos también fueron históricos y únicos, ya que una VACA dio la tradicional y muy uruguaya vuelta olímpica, simbolizando que el plantel rochense tenía como su lugar de práctica el predio de Cáceres allá por la Avenida 1º. De Agosto, y siempre estaba una vaca pastando al lado del terreno de juego y ella se hizo acreedora a ser partícipe del título, el de los humildes, de los obreros, contrariando a la opinión de muy conceptuados periodistas capitalinos de medios de prensa muy poderosos.
La historia dirá que desde donde nace el sol de la patria, salió el nuevo campeón, el del Apertura 2005/2006, que jugaría luego dos finales frente al Nacional de Montevideo, que sería el primero y hasta ahora único equipo del interior que jugara una Copa Libertadores de América, que coparía la Tribuna América del histórico Estadio Centenario en el partido frente al Club Peñarol, en tarde también histórica por el empata logrado ante un grande en su feudo.
Si será histórico que desde el Palco oficial del Estadio Sobrero, el gran Alcides Edgardo Ghiggia, el campeón del Mundo de Maracaná, el que silenció al mundo futbolero con su gol, presenció el encuentro en el que Rocha se consagrara campeón.
Rocha Fútbol Club tenía como Presidente a Jesús Ramos, siendo algunos de sus compañeros el “Catete” Sosa, Carlos Julio Méndez Blanco, Juango Amorín, Marito Amaral, Arequelián, Mansilla, entre otros, que desde sus puestos de trabajo hicieron posible también el llegar al título.
Semblanza de recuerdo a la que no le pueden faltar los nombres de los pioneros, de los Juan Delgado, Carlos Silvera Guiterrez, Polito Calabuig, Niver Pérez, Heber Lema, Antonio Pereyra Montes, Alejandro Umpierrez, de las reuniones en Chuy, La Paloma, San Miguel, Rocha, buscando unir a todo un departamento futbolero, comercial y gubernamental tras un proyecto único que ese día vio la culminación a tantos días de reuniones, como tampoco olvidar el histórico día que llegaron los dirigentes de la AUF a visitar el Estadio Sobrero, el que fue copado por la parcialidad rochense, por toda la prensa rochense, mostrando que cuando se quiere se puede, que cuando se unen todos, se pueden realizar proyectos qujotescos.
Al ROCHA FUTBOL CLUB, al del 7 de diciembre de 2005, y al de todas las horas, esta semblanza recuerdo, homenaje, agradecimiento.
Diciembre/2017


viernes, 8 de diciembre de 2017

UNA EXPERIENCIA SINGULAR EN AGUAS DEL MAR ARGENTINO. Noé Zenón Suárez Casielles-



Dado todo lo que acontece a diciembre de 2017 en aguas del Atlántico Sur, en la búsqueda del submarino argentino desaparecido, luego del último contacto.
Me viene a la memoria aquella experiencia marina, allá, cuando comenzaba el año 1964 y me disponía a marchar con solo 20 años de vida, como soldado conscripto de la clase 1944.
Iba y fue todo un acontecimiento, que había decidido cumplir con la patria en el Sur, con un alto número de sorteo y luego de salir apto para cualquier parte del territorio argentino.
Todos los preparativos de embarque se llevaron a cabo en Mar del Plata, y el destino era el puerto de Comodoro Rivadavia, para luego viajar al GA9 con asiento en la sureña localidad de Colonia Sarmiento, enclavada en un valle del Río Senguer, un oasis maravilloso entre los lagos Muster y el Colhué Huapi, en la provincia de Chubut.
Zarpamos del puerto de la Perla del Atlántico, en la tarde con pocas horas de sol, en el ARA Bahía “BUEN SUCESO”, un transporte naval que servía a la Armada Argentina, según tengo entendido, desde 1950 a 1982, año en que fue hundido en aguas malvinenses, luego de ser capturado durante la guerra, y en el día de mi cumpleaños, el 21 de octubre de ese año, por la Marina Real.
Luego de un rato de navegación, se vino la noche, y poco pudimos ver desde el buque, ya que viajábamos en los camarotes y por ser una experiencia nueva, casi para todos, nos podíamos marear, cosa que a muchos le fue pasando, en mi caso no lo sufrí tanto, la fui pasando bien en todo el trayecto pese al movimiento. El comer poco era lo mejor, muchos optamos por duraznos al natural enlatados.
Al principio, el movimiento de la embarcación era bastante tranquilo y suave, pero, tengo entendido, que luego que pasamos al sur de Bahía Blanca, pueblo en donde nace mi madre en 1909; todo fue cambiando, al llegar a la altura del golfo San Jorge muy fuertes vientos y un oleaje descomunal, tuvimos que bajar de cubierta por las inmensas olas que lo envolvían de lado a lado, lindo de ver, pero de gran peligro, corría el agua como si estuvieran baldeando la cubierta, o tal vez mejor, por la fuerza en que lo hacía.
Cuando la nave llega al puerto de Comodoro Rivadavia, nombre que se da en honor al Comodoro Martín Rivadavia, nieto del patriota, aquel que en el pago de mis ancestros, se le quiso bautizar a un partido desprendido de Magdalena y diez años sin confirmarse, queda en nada; lo que hoy es Punta Indio.
Al acercarnos al mismo, que recuerdo como un larguísimo muelle de madera, largo como la esperanza de un pobre, creo que tuvimos que trasbordar para subir a él, y de allí caminar hasta tocar tierra, en donde descansamos, para luego seguir hacia Sarmiento.
Fue un viaje inolvidable y novedoso para mí, el ver nuestro territorio desde mar adentro, islotes que aparecían a medida que avanzábamos, una costa irregular, que se veía más cerca y en otra aparecía distante, en algunos de esos islotes de roca, una casita, y una especie de antena, o algo similar, lustrosos peñones bañados por el agua salada, solitarios, en nuestro mar Argentino.
Un triste motivo me ha movido los recuerdos vividos en el mar, un triste fin del navío que me llevó a cumplir con la Patria, hundido el día de mi cumpleaños número 38, en Malvinas.
-2017.