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lunes, 3 de marzo de 2014

La vida de don Francisco Bruno,importante comerciante rochense contada por su hijo, el escritor Oscar Bruno

                   Escritor y periodista Oscar Bruno Cedrés



FRANCISCO A. BRUNO ISNARDI
Biografía”

Francisco Antonio Bruno Isnardi, nació el 9 de setiembre del año 1919 en la 7ª. Sección Judicial de Rocha, conocida como Garzón, en el departamento de Rocha.
Fueron sus padres Francisco Gabriel Bruno Diayuto, oriundo de la 2ª. Sección Judicial de Rocha, de padres italianos y Clorinda Isnardi Díaz, oriunda de la ciudad de Maldonado, de padres de origen español.
Fue el mayor de 8 hermanos, 6 varones y 2 mujeres.
Su padre tenía Almacén y Ferretería en la zona del Sauce de Rocha, conocida comúnmente como El Ombú, siendo el referido comercio parada o posta, de las carretas y diligencias, que venían por entonces de Montevideo, por el llamado Camino Real.
El nombre del comercio fue también el de la zona: El Ombú.
Esta casa natal construida por su abuelo y su padre, con el aljibe, los árboles frutales, palmeras, ombú, sigue igual sin tan siquiera habérsele cambiado los vidrios. El material para la construcción vino por tren desde el Puerto de La Paloma, siendo su procedencia italiana.
Comienza en la Escuela del Sauce, siendo su Maestra Directora doña Cata Pioli de Rodríguez.
Siendo aún un niño, la familia se traslada a vivir a la ciudad de Maldonado, en la zona de la avenida de entrada de la ciudad de San Carlos.
Continúa el ciclo escolar en un Colegio en la ciudad fernandina hasta cuarto año, dejando la misma para ir a trabajar el comercio de su tía Elena Isnardi y su esposo E. Presno, también lo hace en la Panadería La Virgen de su tía Isnardi y su esposo Tejera en la “cuadra” como ayudante en la elaboración, en ese período que vive en la capital y mientras concurría al Colegio hizo de monaguillo en la Iglesia de Maldonado
Luego ya siendo joven pasó a trabajar en la construcción en el balneario de Piriápolis.
Vuelve a su zona natal de paseo, concurre a una de las populares “kermeses” de la Escuela de el Sauce de Rocha y se enamora de la hija del “Alcalde de la 7ª. Sección”, con la que luego se casaría: María Luis Cedrés Martínez.
Se casaron en la ciudad de Rocha en el Juzgado de Paz, el día 26 de Julio del año 1941.
Tuvieron un hijo: Oscar Antonio y una nieta: Rossana Verónica Bruno de los Santos, dos bisnietos, Luca y Malú.
En el ámbito familiar y de las amistades como el “Quito”, sobrenombre que le pusiera su hermano Sergio, porque como le decían Francisquito, su hermano repetía: Quito.
Luego de casarse se radica con su esposa en el Balneario La Paloma, trabajando como mozo en el viejo y recordado Parador del Parque Andresito, donde hoy esta el Centro Cultural de la Intendencia Municipal de Rocha.
Lo hace por una temporada y se trasladan a la ciudad de Rocha, se radican en la casa de sus suegros ubicada en la Avda. Julio J. Martínez casi Lavalleja.
Comienza a trabajar en “El Molina del Pueblo”, propiedad de Don Francisco Vázquez Curcho, el que estaba ubicado en la calle Ramírez, entre Zorrilla y Ansina. Tenía en el frente del mismo como símbolo un arado pequeño puesto en la pared.
Este establecimiento comercial muy importante de nuestra ciudad durante muchas décadas, comenzado en los primeros años de la década del treinta y que cerrara por la mitad de la del setenta, era además de molino de harina, maíz, comercio mayorista, tenían en el terreno contiguo tambo, donde se le sacaba leche a las vacas que se pastoreaban en lo que hoy es la Plaza Ansina o en el terreno de en frente de la calle Ramírez, además de empresa de traslado de correspondencias y encomiendas a Montevideo, actividad que realizaba un hermano de Vázquez, Juan Carlos, en el tren o motocar que iba desde nuestra ciudad a la capital. Desde la Estación Rocha al comercio la mercadería se trasladaba en un “charret” tirado por caballo, siendo Aquiler Pereira quien conducía el mismo.
El reparto de mercadería en la ciudad lo hacía Bruno en bicicleta, habiendo tenido entre otros como compañeros de trabajo a Santiago Rodríguez, que era quien hacía el reparto en carro con caballo, el Pocho Sosa y Gómez que trabajan en la parte de almacén.
En este comercio Francisco Bruno desarrolló muchas actividades, era vendedor de lotería en la calle, encargado de sacar leche en el establecimiento donde hoy está Canal Ocho con sus oficinas y equipos de trasmisión.
También era el que hacía la tarea de molienda en el molino que daba a la callejuela Montevideo, hoy Sención.
Al tiempo que trabajaba en lo de Vázquez Curcho, tomó clases de “tenedor de libros” que era como se le conocía por esos tiempos a quienes se preparaban para llevar la contabilidad de las grandes empresas.
Don Victorio Forapagliero Vinoi y Don Francisco Váquez Curcho fueron quienes le marcaron el “rumbo” en el arte del comercio. Estas dos personas fueron grandes comerciantes, muy importantes en nuestra ciudad y marcaron una época y un estilo, del que Bruno fue un brillante representante a lo largo de toda su vida.
La familia Bruno luego de residir en la Avda. J. J. Martínez, pasa a la casa de la calle Rodó No. 30, luego al Barrio José Machado, alquilando la casa esquinera de Avda. Agraciada y Andrés Chevestre, frente de donde hoy está la sede del Club Lavalleja, propiedad de la muy popular y conocida Doña Juana Díaz.
En esos tiempos Bruno trabaja en la Empresa de Ómnibus de Jacinto de los Santos, lo hace como guarda en las excursiones que realizan a diversas ciudades, como a Montevideo a los partidos clásicos en el Centenario, a Chuy con paseos incluidos por la Fortaleza de Santa Teresa, entre otros.
A principios del cincuenta pasan a la casa de la calle Ansina No. 71.
En esos tiempos Francisco Bruno además de trabajar en el “Molino del Pueblo”, lo hace los fines de semana como mozo en el Rocha Atletic Club, cuando la sede estaba en la calle Treinta y Tres, los domingos lo hacía en la fábrica de pastas del “Pera” Schiavo, ubicada en la esquina de Leonardo Olivera y Lucio Sanz y Sancho y por las noches en su casa realizaba tareas junto a su esposa en cardo, tapizando sillas para la Fábrica de Juancito Nogueira, la que estaba en la calle Treinta y Tres casi Ansina.
En 1953 deja todas esas actividades y pasa a la cantina del Rocha Atletic Club, esta vez como socio propietario con la Directiva de dicha Institución. Tiempos de gran auge del viejo Club, que tenía un gerente, el señor Miguel Ángel Cola, 4 porteros, uno por turno, Hernández, Artigas H. Corbo, Álvarez, entre ellos, un encargado de la ropería, Eguren, dos orquestas estables, la típica de “Panchito” Teibo y la jazz de Domingo D!Elía, en la cantina Bruno tenía tres mozos estables, los fines de semana y los de grandes bailes se agregaban un ayudante en el mostrador y dos mozos. Mientras estuvo en esta actividad su esposa estuvo permanentemente trabajando con él. Los mozos estables eran Carlitos Rivero, el “petiso”, Cirilo Martínez, y Tulio Machado, el “chiquito”, los extras de los bailes eran Martínez y un argentino de nombre Ricardo y Tomás Pereira, para los grandes bailes se contrataba un encargado de lavado de vasos y limpieza de botellas, uno de los que más estuvo en esta tarea fue Luis A. Dominicci.
En el año 1955 pasa a vivir con su familia en el centro, Treinta y Tres esquina 25 de Agosto, a media cuadra del Rocha Atletic, un año después se mudan para la casa pegada, ubicada en 25 de Agosto al 148.
Trabaja en la Institución Social de la calle Treinta y Tres hasta marzo del 58.
Ese año comienza una nueva actividad para Francisco Bruno y su esposa: la comercial, como viajero primero, luego con la distribuidora.
Este establecimiento comercial rochense, fundado por Bruno, fue por más de cuarenta años distribuidora de importantes empresas nacionales e internacionales.
Comenzó con las actividades en marzo del año 1958, teniendo su residencia por entonces en la calle 25 de Agosto al 148 y el depósito en la misma calle, donde existía un galpón de los Rocca, pegado donde estuvo el Teatro ASTRAL, (qué digo... la vieja Fragata).
En los comienzos la Distribuidora, que con los años tendría como slogan: “EL DECANO DE LOS REPRESENTANTES”, vendía los productos de Oneto, Vignale & Cia. S.A. comercio mayorista de Montevideo que tenía una línea de productos muy importantes y conocidos por aquellos tiempos, como Yerba Toro, Sidra La Dominga, Hojas de Afeitar Cadiz, y lo hacía no solo en el departamento de Rocha, sino que también en las ciudades de San Carlos, Maldonado, Aiguá, Minas y Solís de Mataojo.
En 1959 se suma a la cartera de distribución los Vinos Boina Roja, que venían de Melo y los Productos BAYER, como sub distribuidor de Ledo Bentos Llano distribuidor en la capital olimareña y comienza la misma a crecer...
En la Navidad de 1959 se traslada hacia donde sería por el resto del su existencia el local de la Distribuidora: Zorrilla de San Martín No.68, con el teléfono 323.
Había que hacer kilómetros para ganar el peso y conservador como lo fue siempre Francisco Bruno, gastó poco en vehículos. Le conocimos la cupé amarilla marca De Soto; el Austín A-40 color negro; una camionetita SIMCA y la Crysler Rural modelo 51 que por más de treinta años fue su compañera de giras.
La década del 60 llega con un vendaval de oportunidades de mayoristas capitalinos que confían la distribución de sus productos a Bruno... a aquel modesto dependiente del Molina del Pueblo de Francisco Vázquez Curcho de los años 39. Ya tiene vuelo propio. Vende de todo... Tabacos, cigarrillos, papel de fumar, té, insecticidas, flores y coronas, golosinas, vinagres, detergentes, hojas de afeitar, yerba, heladeras, televisores, bebidas y buenos whiskys.
Y ahí surgen los nombres de Fleischmann Uruguaya Inc. y su larga lista de productos: Postres y flanes Royal y Royarina; Levadura seca Fleischmann, Polvo de Hornear Royal, las Gelatinas y los Bizcochuelos, luego vendrían los Helados, Salsa Blanca y Refrescos Royarina; Compañía Industrial de Tabacos con sus cigarrillos Nevada, Flor de Lis, Oxi Bithué, Plymouth, Colibrí y los Tabaco Toro, Cerrito o Yaguarón; Casabó con Papel Jaramago, Naipes Tatú y Papel Alquitrán; Té Hornimanns, Bayer con sus populares analgésicos: Cafiaspirina, Aspirina, Evanol, Aspirinetas, Instantina; Refagán, Aspirina C y los insecticidas: Mafú; los caramelos y dulce de leche de Moure y Cia: Glorieta; vinagres J.P. Gamberoni; la Imprenta S. Gómez de Minas, Sapriza Grundel; Productos Monte Cudine; Barraca Deambrosi y su Sal Sek y los Vinos argentinos “Promoción”; los productos Vesubio: Amarga, Grapa Miel, Cogñac El Peñasco, Anís, whiskys Tiller’s, Teachers, Doctors, Famous Grous (el escocés de la perdíz) y una extensa lista de grandes e importantes empresas más.
Fue Bruno otro de los personajes típicos de las calles de Rocha, fundamentalmente en horas tempranas de la mañana, por aquello de que había que repartir la levadura fresca Fleischmann a las panaderías, dentro de las que surgen los nombres de la de Silvera, La Francesa, La Española, la Victoria, Nuevos Rumbos, La Golondrina, La Italiana, El Cañón, La Comercial, La Uruguaya, Artigas, La Porteña, San Jorge, La Nueva Victoria.
Vale también recordar algunos precios de tiempos “ha”, como una botella de vermouth 21,36; la cebada malteada en paquete de 500 grs, 2.05; la fruta picada de Aromacos Ltda.. el kilo 28,oo; la caja de Aspirina C de 24 sobres 87,77; el vino argentino Promoción, en caja de 1 lt. 13 con 60; Amarga Vesubio la botella a 78,oo pesos, la caja de grasa vacuna Super Star de Fleischmann de 15 kilos, $ 100,oo, precios estos con la moneda uruguaya de hace más de 10 años.
En esta historia los medios de transporte de las mercaderías desde la capital tienen su lugar y hay que darle su inmenso valor, así el viejo y recordado ferrocarril fue de los primeros, hasta la Estación de A.F.E. había que ir un par de veces en la semana a buscar las encomiendas, también ya estaba Expreso Rocha que era todo un símbolo en el transporte carretero, no podemos olvidarnos de O.N.D.A. todo un emblema en la vida de nuestro país; luego vendrían Fernando Recuero; Transporte Bosco; Juan Carlos Maurente, hasta que llegaría el tiempo de que muchas Fábricas comenzaron a usar sus propias empresas transportistas como “El Tiburón” de Luis Martínez que traía los cigarrillos y tabacos; o los propios camiones de Fleischmann.
En noviembre del año 1988, en la Criolla del Este, la Empresa festejó junto a su personal, autoridades, representantes capitalinos de diversas empresas y amigos, los 30 años como distribuidora y los 25 años que se cumplían ese mes de la representación de Cigarrillos Nevada.
En noviembre de 1995, abrió sucursal en el Balneario La Paloma, con local en la esquina de Urano y Júpiter, que era atendida por su nieta Rossana Verónica Bruno.
La Distribuidora de Francisco A. Bruno, tuvo a lo largo de sus más de 40 años muchos empleados, desde los cadetes hasta los vendedores, pasando por los administrativos, al hoy recordar algunos pasajes de esta Empresa rochense, no pueden faltar los nombres de quienes siendo todos muy jóvenes ya no están entre nosotros: Mario Santos, que tuvo toda una vida como vendedor y que fue uno de los paladines de la misma; José Conde, uno de los primeros vendedores en la ciudad; Pedro De León, Cabrerita y George Viega, tres de los muchachos de los “mandados”.
En este recordar de nombres los primeros vendedores fueron Darli García Silvera en Rocha y Miguel Cruz en Castillos; Sonia Rodríguez y “Charo” Silva las primeras administrativas; Sergio Chápore, Juancito Willebald y Juan Carlos Deliotti los primeros mensajeros.
Marino Arriola, Ángel “Cacho” Eguía, Carlitos González Moreira, Wilmer Silva Ledesma, Silvia De León; fueron por gran parte de la historia de Francisco A. Bruno Representaciones, pilares que secundaron la diaria labor de la empresa por muchos años.
También quienes estuvieron en los últimos tiempos como Daví Pereyra, José Illia, “Cococho” Cáceres merecen una mención.
La empresa Francisco A. Bruno S.A., en sus algo más de 40 años, tuvo de las buenas y de las otras, en el invierno del año 1994, el comercio fue robado y los maleantes además prendieron fuego, ardiendo gran parte de uno de los depósitos.
Fueron su esposa María Luisa Cedrés y su hijo Oscar, quienes estuvieron junto al fundador Francisco Bruno desde el comienzo e inclusive luego de fallecer éste en julio del año 1995 siguieron por un tiempo más con las representaciones.
La empresa Francisco A. Bruno S.A. Representaciones, cerró sus puertas el día 4 de mayo del año 1998, habiendo marcado un mojón importante en el diario vivir comercial del departamento de Rocha, siendo permanente colaboradora de todo el quehacer cotidiano de la zona, instituciones de servicio, escuelas, acontecimientos deportivos y sociales, y todo el que lo necesitó tuvo el apoyo de la Empresa y sus propietarios, incluida la prensa.
Desde el 58 hasta el final de sus días estuvo siempre al frente de “su” empresa, marcando un estilo y perfil propio, de un comerciante de las viejas escuelas rochenses de Don Victorio Forapagliero y Don Francisco Vázquez Curcho.
Falleció en la ciudad de Rocha a los 76 años, el 9 de julio del año 1996, en su domicilio de la Avda. Juan Zorrilla de San Martín No. 68.
La vida social de Francisco A. Bruno fue mucha y también muy variada, su militancia política la hizo siempre dentro del Partido Colorado, primero apoyando la candidatura de Julio María Sosa, luego en el Batllismo de el Diario El Día y su lista 14, donde ocupó cargos dentro de la conducción interna de la Agrupación por los Ideales de Batlle, alcanzando a integrar listas a la Junta Departamental en los primeros lugares.
Era un batllista de la vieja guardia, la de Don Pepe Batlle con su socialismo y su coqueteo anarquista.
Su pasión por el fútbol siempre fue muy grande, hincha fanático de Peñarol de Montevideo, desde su niñez, admiraba a Raúl Schiaffino, a Roque Gastón Máspoli, a Obdulio Jacinto Varela. Tenía un dicho, en toda actividad que él emprendía le gustaba ser como en el fútbol: “el Cinco” como Obdulio, el que mandaba y el que distribuía el juego.
En Rocha su equipo lo fue River Plate, en él fue dirigente por la década del cincuenta y sesenta, junto a grandes directivos de los decanos como Fabián González, Conrado Corbo, Sánchez Eguía, el “Gordo Pizza”, Byron González, Cando González, poniendo plata de su bolsillo y también su casa para alojar jugadores que por entonces venían de la vecina ciudad de Maldonado.
Participó activamente desde su puesto de cantinero del Rocha Atletic Club en las colectas para los Campeones del Este de fútbol del 55 y en la de recolección de fondo para que Javier Barrios concurriera a los Campeonatos Mundiales de Ciclismo de Italia.
En el básquebol local su preferencia fue por los rojos de La Estiva, el CADER, lo que le costó más de un dolor de cabeza, y también su trabajo como cantinero del Rocha Atletic, que no aceptaban que “su Cantinero” fuera hincha del equipo archi rival.
En su pasaje en el Rocha Atlétic, tuvo participación muy activa en la organización de Campeonatos de Tenis de Mesa Inter. clubes, donde participaban entre otros representantes de Peñarol, Nacional, Rocha Atletic, La Parroquia, Bancarios, el Club Obrero, deporte que por entonces se conocía como el Ping Pong. Trajo a los por entonces 6 veces campeones nacionales, que eran jugadores del Club Nacional de Fútbol de Montevideo, también fue el propulsor del partido más largo y por entonces record jugado por estas zonas, casi 24 horas consecutivas lo hicieron Juan San Martín Teliz y el profesor Walter Nieves.
Su actividad en el Club Deportivo Unión fue larga y muy importante, en colaboración con otros grandes dirigentes que tuvo la Institución de la calle Gral. Artigas, como Juan Carlos Maurente, Niver Benencio Terra, Miguel Ángel Casanyes, Juan Carlos González Moreira. Ocupó varios cargos dentro de la Directiva siendo Presidente, Vicepresidente, Vocal, etc. En su Presidencia fue cuando más se le dio impulso a la construcción del primer gimnasio cerrado que tuvo nuestra ciudad, dejándolo habilitado para el uso no solo de los socios sino que vino a llenar una necesidad que tenía toda la sociedad rochense de tener un local amplio y cerrado para todo tipo de espectáculos.
Durante varios años Presidente de la Comisión de Fiestas de Verano y Carnaval de la Intendencia Municipal de Rocha, en esta trabajó con otro grande del Carnaval como lo fue Alfredo Núñez Silvera, y Herley Quartino, Juan San Martín Teliz, Ramón Fernández entre otros, llevando las fiestas carnestolendas a todas las ciudades y pueblos de nuestro departamento y de Maldonado.
Fanático de la selección de fútbol de Rocha, la acompañó a todos los rincones del país donde los celestes jugaran. En auto, taxi, ómnibus, en excursiones, con amigos, con la familia, pero siempre junto a los representantes de nuestro fútbol, desde el cincuenta hasta que su salud se lo permitió.
Le quedó en el debe el haber ido a Italia, a la zona de donde provienen los Bruno que viven en nuestra ciudad y Maldonado, que es Salerno, viaje que siempre quiso realizar pero que por diversas circunstancias se fue postergando y nunca pudo realizar. Para él Italia y todo lo que estaba relacionado con el país de la “bota” lo atrapaba y emocionaba mucho.

Oscar A. Bruno Cedrés
Octubre/07

Batalla, un "exiliado en democracia" que tendrá un "lugar mayor" en la historia


Un "soporte fraternal" para los familiares de presos políticos durante la dictadura, protagonista en momentos difíciles de la política uruguaya y un "traidor" para algunos. El libro "Hugo Batalla. Las luchas más duras" de Leonel García cuenta cómo el exvicepresidente de la República sufrió un "exilio en democracia" al tener que abandonar La Teja tras pasar al Partido Colorado.

Publicado el: 2 de marzo de 2014 a las 15:22
Por: Redacción 180
Hugo Batalla.

Hugo Batalla.

Joel Rosenberg: "Conciliación es el nombre de la calle de La Teja donde nació y vivió Hugo 69 de sus 72 años. Viviendo ahí fue hijo, padre, dirigente político, legislador, proscripto por la dictadura, abuelo, presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol y vicepresidente de la República. Hugo bromeaba con que Conciliación hacía un perfecto contrapeso con el apellido Batalla. Soñaba con nacer y morir en el mismo lugar. Es que la calle termina en el Cementerio de La Teja, apenas a seis cuadras de su casa donde la familia tenía un panteón. "Va a ser un entierro corto", bromeaba Batalla. No pudo ser. Cruel paradoja fue que la intolerancia, lo opuesto a la conciliación, obligó a Hugo y a su familia a irse de su calle y su barrio de toda la vida en 1995. Cuando murió, tres años después, fue velado en el Cementerio Central y su cuerpo, por decisión familiar, descansa en el cementerio privado Parque del Recuerdo. Fueron demasiado ingratos los últimos años ahí".
Este es un fragmento del libro Hugo Batalla, las luchas más duras, del periodista Leonel García. La emigración forzada de Batalla de su barrio es un punto central que recorre el libro porque no solo marca un momento de su vida, es también una referencia para entender el recuerdo que hay de él, de Batalla, el lugar que le reserva la historia. Gerardo Caetano está convencida que es la historia la que lo invisibiliza y es esto de forma injusta.
Gerardo Caetano: Tuvo un coraje, nada menor, sobre todo en la política uruguaya, tuvo mucho coraje para ejercer el derecho de cambiar. Él, en el error o en el acierto, de acuerdo a sus convicciones, cambió. Cambió cuando pensaba que debía cambiar. Y eso en la política uruguaya no se perdona. Por eso yo creo que la historia política cuando de alguna manera pueda construirse más sólidamente respecto a estos últimos años le va a deparar un lugar mucho más destacado a Hugo Batalla, y creo que este libro en más de un aspecto es como un anticipo de ese lugar mayor que la historia política le reservará a esta figura.
Ese libro es este trabajo de Leonel García. Leonel, ¿cómo andás?
Leonel García: Buen día, gracias por invitarme.
Vos habías elegido a Caetano para el arranque mismo del libro, por su visión.
Me pareció que era una buena manera de arrancar y poner un poco en el personaje, tanto para los no entendidos como para los iniciados en el tema.
Es fuerte lo que dice al comienzo del libro. "Reivindicar a Zelmar Michelini sin reivindicar a Batalla no se entiende, el primero que no lo entendería sería Zelmar Michelini", dice. ¿Cómo surge este libro? ¿Cuál es la inquietud que te lleva a este trabajo?
Hay varias afluentes que terminan en esta inquietud. Una de ellas es una cuestión familiar: mi madre era una admiradora de Hugo Batalla, admiradora políticamente hablando, y ella había escrito incluso un libro sobre Hugo Batalla, el único libro que había sobre él, que era para un trabajo más académico, una especie de tesis de posgrado de un trabajo de antropología dictado por Daniel Vidart. Era un trabajo más centrado en la parte humana más que en la parte política, fue en el año 92, todavía Batalla en vida y con una perspectiva muy distinta: en el Nuevo Espacio, recién había asumido la presidencia de la AUF. Ahí ya tenía una cosa muy importante para mí que yo carecía que era su palabra, y su palabra hablando de la familia, hablando de sus raíces en Italia, en Calabria y en Sicilia. Después por la propia condición mía de periodista a mí me interesa mucho la historia reciente y estaba viendo que cuando se realizaba la historia reciente, que es algo que me parece perfecto, me llamaba la atención lo poco que se hablaba de Hugo Batalla, que había sido un personaje y una persona esencial en la resistencia a la dictadura y en la transición democrática. Tengo recuerdos de cuando hizo la alianza con Sanguinetti y yo estaba en el liceo, imaginate, con 18 años de edad, siempre uno tiene que ser mucho más tajante y de blanco y negro, era considerado como una especie de traidor. Después uno va creciendo y va matizando un poco su pensamiento. Y luego fue finalmente la posibilidad de hacer un libro, cuando me contrataron de Ediciones B, un libro sobre perfiles. Es el único político del cual me interesaba escribir, en parte porque no se había escrito, en parte porque estaba un poco olvidado, en parte porque me llamaba mucho la atención que en la historia reciente no se mencionara, y lo poco que sabía era una historia muy buena para ser contada. Habla de un Uruguay que ya no está más, donde a través de la educación pública se podía ascender socialmente, que verdaderamente la escuela laica, gratuita y obligatoria era un factor de ascenso social y como una persona de un origen muy humilde puede llegar a vicepresidente de la República, pasar por tres partidos políticos, fundar dos. Hay mucha gente que ha cambiado de partido, pero pocos generaron el revuelo de él. Y además presidente de la AUF. Era una tremenda historia para ser contada.
Presidente de la AUF en un momento tremendo.
El peor. Muy distinto al de ahora.
¿Dónde encontraste las mayores facilidades y dificultades? Las frases que su nieto Joaquín escucha cuando alguien le habla de su abuelo son prácticamente las mismas. "Flor de tipo el doctor Batalla, qué corajudo era el Hugo, yo voté a tu abuelo, yo conocí a alguien que fue defendido por tu abuelo y lo adora" y la última pregunta que siempre aparece: '¿Por qué se fue con Sanguinetti?". ¿Vos tuviste un panorama similar a este?
Totalmente. Los dos pasajes -del Frente Amplio al Nuevo Espacio, pero sobre todo del Nuevo Espacio al Partido Colorado- son los que todavía han generado algunas heridas no cicatrizadas del todo. De un lado y de otro. También la familia sufrió mucho, sobre todo el último pasaje por razoens obvias. No te olvides de que cuando pasó del Frente Amplio al Nuevo Espacio, que es un pasaje que le costó muchísimo a Hugo Batalla, lo hizo casi con todo el apoyo de su sector, de la 99. Ahora se recuerda poco, pero la inmensa mayoría de la 99 se quería ir del Frente Amplio, incluso gente que luego volvió, como el actual senador Rafael Michelini. Y el pasaje del Nuevo Espacio al Partido Colorado, que a Hugo lo sedujo casi desde el inicio, realmente partió las aguas y generó una ruptura de la cual políticamente hablando significó el fin de Hugo Batalla. No solo logró una votación muy pobre, si Sanguinetti no ganaba las elecciones, Hugo se tenía que ir a su casa, porque no le daban los votos para senador. Y ahí, si bien todos le reconocen la parte humana de lo que hizo, ahí todavía te das cuenta al hablar con la gente que ese pasaje no terminó de ser digerido completamente, generó heridas que no han cauterizado del todo.
Pero hay una historia mucho más larga que es la que recupera el libro. Hablás de un Uruguay que ya no está y uno puede ir hasta una historia que involucra a Jorge Batlle y a un Hugo Batalla joven y sindicalista. Un Uruguay que ya no está porque en ese caso la madre del Jorge Batlle, la esposa del presidente, lo manda a hablar con los sindicalistas a Jorge Batlle y se encuentra con Hugo Batalla, que lo conocía del liceo.
Te das cuenta cómo era el relacionamiento entre el poder político, los gobernantes y la gente en ese momento. Le llega una carta a Matilde Ibañez, de la parte de mujeres de los obreros sindicalizados en Ferrosmalt, que estaban ocupando. Ahí llega Luis Batlle Berres y manda a su hijo Jorge Batlle Ibañez a hablar con los sindicalistas que estaban ocupando. El presidente mandando a su hijo a hablar con los ocupantes de una fábrica tomada. Ahí se encuentra con Hugo Batalla. Jorge Batlle, luego presidente, era un poco menor que Hugo Batalla pero habían coincidido en el Bauzá primero y en la Facultad de Derecho después. "Hugo, ¿qué estás haciendo acá?". Hugo estaba lleno de polvo, muy sucio luego de tres días de ocupación. "Jorge, yo acá laburo". "Vení vos y dos o tres más, vamos al Palacio Estévez y vamos a arreglar con papá, que se soluciona". Los mete a todos en el Ford y ahí lo va hablando y cuando Jorge Batlle los presenta a su padre pone especial énfasis en Hugo Batalla. "Acá está especialmente el amigo Hugo, que tiene las cosas muy claras", y se ve que las tenía realmente claras porque tanto lo impresionó a Luis Batlle Berres que lo incorporó a sus filas del batllismo.
Esto de cambiar nace allá a principios de los 60. En el 62 en un acto eran Aquiles Lanza, Hugo Batalla y Zelmar Michelini, y Batalla señala errores del Partido Nacional -gobierno- pero señala errores del Partido Colorado también. "Nos sentimos responsables del fracaso del Partido Colorado y responsables por la incapacidad", dijo. Esto enojó muchísimo a Luis Batlle Berres. Este camino de cambios y decisiones fuertes arranca a principios del 60.
Era un abonado a tener líos internos en política. Eso pasa todavía hoy. "Hay que barrer para adentro", lo estás empezando a ver en las internas. En aquel momento, que era un momento histórico muy particular -el Partido Colorado había dejado el poder después de casi un siglo-, que se mencionen "errores internos"... Cuando uno tiene un líder de corte más caudillesco como Luis Batlle Berres, los lineazos no son sugerencias, son verticalazos. "Nosotros no nos equivocamos, esto es una campaña en contra nuestra". Que aparezca un joven como Hugo Batalla, que todavía no se podía decir que era un cuadro principal como sí lo podía ser Zelmar Michelini, que salga a señalar los errores era un remezón absoluto. Entonces, alguien que quería sacar una lista propia lo que responde Luis Batlle Berres es "¿saben qué? Vayan y armen un sector nuevo si quieren, pero bajo el ala de la 15 -que es donde empezaron Hugo Batalla y Zelmar Michelini- no los queremos". Así nació la 99.
Hay otra gran ruptura cuando llega el gobierno de Pacheco. Así lo recordaba Gerardo Caetano, el historiador.
Gerardo Caetano: El doctor Batalla fue factótum de decisiones políticas extraordinariamente relevantes que lo tuvieron como protagonista líder en momentos muy difíciles. Por ejemplo, pocos saben que Batalla lideró en más de un sentido la salida de la lista 99 del Partido Colorado. Batalla afirmó incluso antes que Michelini la necesidad de que la 99 no podía quedarse en aquel Partido Colorado de finales de los 60 dominado por la figura de Pacheco Areco.
Otra gran ruptura, otra gran decisión, irse del Partido Colorado.
Era tremendo. Recién mencionaba Caetano a Batalla liderando la salida del Partido Colorado porque antes de que se fuera la 99 es bueno rescatar que hubo un intento de quedarse ahí, Zelmar Michelini quería formar un ala en la cual el candidato a la presidencia fuera un outsider: Líber Seregni. Como era un outsider algunos de los dirigentes colorados más afines a una línea izquierdista dentro del partido, caso Amílcar Vasconcellos, no lo quería apoyar. Y así también se fue forzando la ruptura, era evidente que la 99 en los hechos ya era una oposición al gobierno de Pacheco, no podía quedar ahí, y así se fueron, primero formando el Frente del Pueblo que es algo muy parecido a lo que luego fue el Nuevo Espacio, uniéndose con el Partido Democráta Cristiano, y luego sí el Frente Amplio. Hugo Batalla también fue el primero en disipar varias dudas de algunos compañeros suyos de sectores de izquierda más marxistas, como el Partido Socialista y el Partido Comunista. Ahora capaz que no llama la atención, pero en aquel momento unirse a esos sectores generaba muchas dudas.
El capítulo de la dictadura es muy especial porque además en ese caso hay consenso en la figura de Batalla. Se unen todas las voces, ¿no?
99,9% con una excepción que creo que está bastante patente en el libro que es Lucas Pittaluga. Es muy excepcional.
Batalla tiene una vuelta de la dictadura que es de una lección buenísima para la 99, esta es la elección del 99, la de 1984: 39% del Frente Amplio en todo el país y 43% en Montevideo.
Es ese el momento, tanto que llegó a sorprender al propio Frente Amplio. Según Yamandú Fau sorprenderlo y no gratamente.
Durante la dictadura Batalla llevó adelante una tarea de abogado, algo que resultaba casi utópico y por momentos contradictorio porque no tenía qué hacer, simplemente intentar tener noticias para trasladar a las familias.
Era una especie de soporte fraternal, era un "vamo arriba, vamo que se puede". También lo decía Javier Miranda, que era recordarle a los militares, cuya idea de Derecho era muy relativa, por no decir inexistente, que todavía habían normas. Pero más que nada era ser apoyo, ser consuelo, poner el hombro y en el caso de alguno detenido como preso político, una especie de correo entre ellos y la militancia, que funcionaba totalmente en la clandestinidad.
El abogado José Luis Corbo también realizaba esa tarea. Es uno de los testimonios recogidos en el libro y fuimos a preguntarle apropósito de qué hacían él y Batalla.
José Luis Corbo: Nosotros tratamos de cumplir con lo que eran nuestras convicciones, nuestros valores, nuestros principios y nuestra concepción de un estado de derecho y lo que habíamos aprendido en esa casita hermosa y grande que está en la calle 18 de Julio entre Eduardo Acevedo y Tristán Narvaja. Y tratando de defender esas cosas es que comprometimos todo nuestro quehacer. Más que eso quizás comprometimos nuestra vida y la de nuestros familiares. Ellos asociaran al defensor con el defendido. El defensor era un pichi, un tupamaro, un comunista, una lacra más, no era aquella persona que iba a defender valores y principios propios de un estado de derecho. Era para ellos un enemigo más.
"Fue un amigo que siempre tuvo la mano tendida a mi madre y a otras tantas madres que deambulaban de cuartel en cuartel". Esto dijo José Mujica a Búsqueda en 1998, también recogido en el libro. Y algo así dice Javier Miranda cuando le preguntamos por la actividad de Batalla en la dictadura y la cercanía con las familias.
Javier Miranda: Cuando se llevan a mi viejo el 30 de noviembre del 75 de madrugada, cuando lo vienen a buscar pero mi viejo no está, mi vieja hace dos llamadas: llama a dos personas, al "Bicho" Viera, íntimo amigo de mi viejo, escribano, compañero de facultad, y al otro que llama es a Hugo. Hugo era el eterno referente. Y todo el proceso desde entonces hasta que falleció mi vieja, fue un compañero permanente en casa. Pero compañero en todas, de acompañar a mi vieja a los cuarteles, a presentar las denuncias, pero también un amigo de ir a los cumpleaños y estar apoyando afectivamente a la familia, en términos más cotidianos, de pura gente. Hugo, una referencia permanente en casa, fue un apoyo absolutamente fundamental para todos, en lo político, en la denuncia, en el aspecto humano, puramente humano.
La elección del Nuevo Espacio al 89 fue la única que él va como candidato a presidente.
Exactamente. En aquel momento la gran popularidad que había obtenido Hugo Batalla, porque de alguna manera la gente se enteraba de lo que pasaba en la dictadura, y se había visto reflejado en su gran votación en el 84, fue el senador más votado del Frente Amplio, de alguna manera ese caudal electoral, esa imagen se siguió manteniendo en ese primer periodo de transición a la democracia. Y eso provocó mucho más de otros dirigentes de la 99 que del propio Hugo, la idea de que Hugo Batalla fuera candidato a la presidencia, lo cual colisionaba con el resto del Frente Amplio.
Sobre todo con Seregni.
Sí. No te olvides que durante mucho tiempo era una regla de oro del Frente Amplio que el candidato a la presidencia, a la vicepresidencia y las intendencias tenían que ser independientes, entonces alguien tan vinculado con un sector chocaba. La idea que se llevó a un Congreso de apelar a la ley de lemas y presentar una doble candidatura chocaba más todavía. Eso fue uno de los factores, no el único y tal vez no el mayor, que derivó en que se fuera del Frente Amplio y formara el Nuevo Espacio, y fuera por primera y única vez candidato a la Presidencia.
Hay un diálogo con Seregni, que Seregni le decía "Pongámonos de acuerdo en algo por lo menos, por lo menos en lo del candidato único", y la respuesta de Batalla es "justamente en eso no estamos de acuerdo".
Eso me lo contó a mí Oscar Botinelli, que por ese entonces era secretario de Líber Seregni y que había defendido a Batalla antes. Batalla era más un líder conducido -esto lo explica en el libro Gerardo Caetano- que un conductor. Al ser el vehículo de una expresión colectiva de la 99, una resolución entre mucha gente se demora más en tomar, y capaz de ahí se haya generado una fama bastante injusta de blando. Y como la 99 lo veía a él como líder, ahí se sustentaba mucho esa frase y esa postura de Hugo.
Otro de los motes que le caía a Batalla es el indeciso, dubitativo, blando. Caetano nos contaba esto.
Gerardo Caetano: Batalla para nada fue un hombre irrelevante que no participó en decisiones trascendentes. Fue un hombre que jugó roles fundamentales en momentos muy difíciles y en decisiones policías que con el tiempo fueron muy trascendentes. La fundación del Frente Amplio, su reconstrucción después de la dictadura, la forja de un cuarto espacio, la fórmula Sanguinetti-Batalla que fue un gran fracaso para la lista 99 pero fue decisiva en lo que terminó siendo aquel resultado electoral de un triple empate prácticamente, de la elección del año 94. Entonces eso de un político débil, que no participa de decisiones, un abordaje desapasionado de la historia política que le tocó protagonizar a Hugo Batalla queda fuera.
Él hablaba de esa elección que casi era un triple empate, que Sanguinetti lleva a Batalla, que logra una diferencia mínima, que además tuvo aquella noche de elecciones donde por diferentes canales no se sabía quién ganó. Termina ganando Sanguinetti, termina yendo Batalla a festejar a la casa del Partido Colorado y ahí me da la impresión de que comienza una etapa que el desmermamiento de la 99 lo lleva a una soledad política, queda con un solo legislador y muy solo Batalla.
Hugo Batalla empieza la paradoja de que llega a su posición política más elevada, de vicepresidente de la República, presidente de la Asamblea General, y llega al momento de menor relevancia y menor visibilidad. La Constitución te limita mucho ser vicepresidente, pero por otro lado también se dice cruelmente que en política la legitimidad son votos. Y si había algo que no tenía o tenía muy poco Hugo Batalla fueron votos. Si aparte tenés un presidente de una personalidad tan fuerte como Sanguinetti, tenés menos visibilidad todavía. Hay una encuesta de Posdata del 95 o 96 que habla sobre uruguayos más influyentes, y Hugo Batalla, que supuestamente era el segundo funcionario del país, está en el puesto 14. Enzo Francescoli era más influyente que Hugo Batalla. Además muchas de las posturas de Batalla, que él nunca renuncia a un tema fundamental para él como la búsqueda de la verdad, me da la impresión que era más búsqueda de verdad que búsqueda de justicia en el tema desaparecidos, choca mucho con la postura histórica de Sanguinetti que es aferrarse a la Ley de Caducidad y no apelar al artículo 4.
Él tuvo la esperanza de que Sanguinetti lo dejara llevar adelante el artículo 4.
Joaquín Gamarra es el que me dice explícitamente algo que muchos sostienen, muy pocos lo sostiene en "on", como que Hugo Batalla fue usado. Él es el que lo maneja más explícitamente Hay gente que dice que no y hay muchos factores que hacen pensar que él estuvo muy feliz en llegar a la vicepresidencia y llevó el cargo con la mayor dignidad y entusiasmo, pero también es cierto que quiso hacer más cosas de las que finalmente pudo hacer en el ejercicio del gobierno.
Diego Fau, hijo de Yamandú Fau, estaba muy cerca, y después fundó una lista junto a Joquín Gamarra, "Agrupación Hugo Batalla". Nos cuenta de "el Hugo", de cómo era Batalla aún como vicepresidente.
Diego Fau: La verdad que Hugo fue un político que jamás se lo comió el personaje. Estamos viviendo en un país en que generalmente a los políticos se los ha comido el personaje. Hugo era un tipo más. Hugo estaba con Pelé en su despacho de la vicepresidencia y sabía que a mí me encantaba el fútbol y me llamaba cinco minutos antes la secretaria: "cruzá que está Pelé", y yo crucé y le pregunté de Mazurkiewicz. Y después pasó con Fidel Castro. El despacho de Hugo Batalla en la vicepresidencia, en el pasillo no se podía caminar, había 30 o 40 personas. Lo llamó un conductor de Cutcsa y le dijo "venite ya", el tipo paró el ómnibus, bajó y lo recibió Batalla. Batalla es otro mundo. Yo respeto mucho y lo aprecio y voté a Mujica, pero yo creo que acá tuvimos un Pepe Mujica mucho antes y fue Hugo Batalla. Batalla fue el Pepe Mujica de hace 20 años, hasta el mismo Fusca compartían.
Recogiste muchos testimonios. Con el que quedó más resquemor fue Rafael Michelini por alguna frase cuando él pasa al Partido Colorado, que Batalla la tomó muy mal.
Durante la producción del trabajo Rafael Michelini me atendió muy amablemente pero yo no pude evitar percibir que tenía cierta incomodidad de hablar del tema. Los Michelini y los Batalla no eran amigos. Los amigos eran Zelmar Michelini y Hugo Batalla. A diferencia de otras familias, por ejemplo ellos tenían muy buena relación con Juan Pablo Terra y en su momento lo tuvieron con los Seregni, no había una relación de amistad. Aquella frase de Rafael Michelini en la campaña del 94, que Hugo Batalla había dejado de ser una referencia ética, cayó muy mal a Hugo y muchísimo peor a la familia de Hugo.
Javier Miranda: Cuando Hugo decide irse del Frente lo llamé por teléfono para decirle: "mirá Hugo, yo no estoy de acuerdo con la decisión que tomaste pero no tengas duda que para mí seguís siendo un compañero". Y me acuerdo la emoción de Hugo, que yo lo llamara para reafirmar mi afecto a él, pero además mi convicción de que si lo hacía era porque creía que era lo mejor, lo adecuado. Estuve más de una vez con Hugo siendo vicepresidente allá en la casa de Punta Carretas. Hay un poco de dolor también. Yo no estoy de acuerdo con las decisiones que tomó Hugo, creo que fueron errores políticos, me cuesta mucho entender la decisión de irse al Partido Colorado, ser el vicepresidente de Sanguinetti, pero estoy totalmente convencido de que Hugo lo hizo de la mejor buena fue, convencido de que era el mejor camino para todos. Y claro, y si partís de esa convicción te duele mucho, y a mí me dolió, y tuve discusiones con algunos amigos y compañeros cuando lo trataban de traidor. Creo que es una injusticia. Creo que tomó opciones políticas que no son compartibles pero eso no lo convierte en un ser deleznable ni cosas por el estilo, sino que lo convierte en un tipo que se equivocó en político desde nuestro punto de vista. Pero lo sigo defendiendo a capa y espada porque creo que fue un tipo absolutamente valioso y no tengo la menor duda de que lo hizo en base a convicciones políticas y morales.
El mote de "traidor" lo marcó, no lo pudo superar. Esa sensación del barrio y estar en permanente vigilia por el grito de "traidor" y "vendido" es algo que quedó marcado en el final de su vida.
Fue un exilio en democracia de alguien que se había quedado en dictadura en condiciones muchos peores, con el teléfono pinchado, habiendo sido detenido en dos oportunidades y amenazado constantemente y teniendo siempre la misma persona en un Fusca circundándole la casa. Fue algo que nunca pudo entender, porque él, que hacía un culto de la intolerancia, justamente eso era algo que no le cerraba, yn o le cerraba tampoco la cobardía. Porque todo se hacía en el anonimato, en la noche. En un incidente policial nunca quedó claro si las personas que estaban agrediendo en la puerta estaban armadas o no, eso fue la gota que desbordó el vaso.
La policía reacciona, casi mata a alguien...
Hugo tenía más miedo por los nietos que en aquel momento tenían 18 y 16 años, que salían y esas cosas, que justamente de noche al volver podía pasarles algo. Y ahí decidió irse, y se fue a un apartamento en Punta Carretas, casualmente donde vivía y vive Sanguinetti, lo cual no hizo más que alimentar la suspicacia, y fue un apartamento alquilado, cosa que le llamó mucho la atención a Jaime Roos. Hugo Batalla, tan atacado, tan acusado de traidor, de vendido, resulta que no tenía plata luego de cuatro décadas de actividad pública para comprarse un apartamento en Pocitos.

Selección Mayor ¡ROCHA ES EL NUEVO MONARCA DEL ESTE!



El 1 de marzo del 2014 será recordado durante mucho tiempo por el pueblo futbolero de nuestro departamento, ya que fue el día que la Selección Mayor se consagró por 17ª vez como Campeona del Este, tras superar a la de Maldonado por 1 a 0, con gol de Fabricio Fernández, ante unas tres mil personas que dijeron presente en el estadio Dr. Mario Sobrero, y que sobre el final celebraron como hace mucho tiempo no lo hacían, en una muestra clara que el amor por la casaca celeste está más vivo que nunca.
Inobjetable la consagración del combinado rochense, que en las finales ganó los seis puntos en juego ante los fernandinos. El sábado debió ganar por mayor diferencia, ya que de principio a fin dominó las acciones, con una gran posesión de balón que permitió el lucimiento de jugadores como Martín Larrosa, Christian Velázquez y Fabricio Fernández, solo faltó el puntillazo final a la hora de la definición, aunque alcanzó para lograr la primera meta; el campeonato.
Futbolísticamente había y hubo una gran diferencia a favor de Rocha, que aumento luego de la expulsión de Martín Nerón por una agresión a Fabricio Fernández, y la de Agustín Amoroso por una incorrección verbal en los fernandinos. Los últimos minutos estuvieron de más, con un encuentro -y campeonato- definido, los locales no quisieron y los visitantes no pudieron cambiar la historia, aunque en todo momento estuvo mucho más cerca el segundo gol de los celestes que el empate de los blancos, que jamás inquietaron a Oscar Lemos. 
El pitazo final del árbitro coloniense Marcelo Larrama se hizo esperar pero llegó, y esto permitió en primer lugar la celebración más que justa del seleccionado rochense, al que luego se le sumó el del pueblo futbolero que ingresó al campo de juego para fundirse en un abrazo con los campeones, y no es para menos, ya que hacía 7 años de la última conquista y 19 de la última vez que se había logrado como local en el estadio Dr. Mario Sobrero.
Rocha fue el mejor del Este, ganando 8 partidos de los 10 disputados. Perdió 1 e igualó 1. Anotó 18 goles y recibió 8. Se logró el primer paso, pero a partir de hoy se comenzará a trabajar pensando en el segundo y gran objetivo que se planteó este grupo conducido por Héctor Méndez, que es el campeonato del Interior. Recién el jueves se conocerá el próximo rival, que saldrá de la llave integrada por Durazno y Flores. El partido de ida se jugará el domingo 9, y los celestes serán visitantes, y la revancha el miércoles 12 como locales...



 


ROCHA 1–0 MALDONADO
Estadio “Dr. Mario Sobrero” de Rocha. Público: 2.800 personas
Arbitros de Colonia: Marcelo Larrama, Eduardo Castillo y Luis Geymonat.
Gol: 50’ Fabricio Fernández (R.)
Expulsados: 10’ Martín Nerón, 55, Agustín Amoroso (M)

ROCHA: Oscar Lemos, Gonzalo Figueroa, Alejandro Lioret, Hernán Molina, Adrián Díaz, Mauricio Rodríguez (60’ Diego Casuriaga), Martín Larrosa, Fabricio Fernández, Christian Velázquez, Enzo Pertusso (75’ Ezequiel Nuñez)  y Andrés Delgado (77’ Ruben Rodríguez). DT: Héctor Méndez.
MALDONADO: Nicolás Alonso, Ariel Suárez, Agustín Amoroso, Mauricio Capricho, Fabricio Cancela, Cristian Eguren (66’ Rodrigo Curbelo), Mauro González, Martín Nerón, Andrés Sención (57’ Gastón Lagos), Matías Pereyra (45’ Federico Esquivel) y Jonathan Sosa. DT: Eduardo Pelúa.



NOS DIJO... HÉCTOR MÉNDEZ
“Los ganadores son los jugadores, ellos son los grandes protagonistas, lo que te puede decir es que estoy contento por ellos, por el gran grupo humano que hay, date cuenta que hay 27 jugadores que están al firme, jueguen o no jueguen están todos, y nunca ha habido un problema... Por este campeonato no voy a ser más ganador que antes, no creo en esas cosas, esto es simplemente fútbol, hay cosas mucho más importantes, hay que intentar ser un ganador en la vida, en el día a día... Hoy se logró el primer objetivo, pero nosotros queremos estar en la final del Torneo del Interior, tenemos esa ilusión, y tendrán que jugar más que nosotros para quitarnos esa ilusión...”

"Quién lo conoce al Gral Seregni en Rocha? Edil dijo que "su único mérito fue apalear bancarios"

ÁSPERAS DISCUSIONES EN LA JUNTA DEPARTAMENTAL POR CAMBIOS EN EL NOMENCLÁTOR
 MONTERROSO PASARÍA A LLAMARSE LÍBER SEREGNI Y AVENIDA ITALIA RECUPERARÍA SU NOMBRE

 El Este
En una serie de considerandos la Intendencia Departamental de Rocha solicitó anuencia a la Junta Departamental para “ mantener a la Avenida Italia su nombre tradicional y nominar a la Avenida Monterroso como Gral. Líber Seregni, dado que ambas son de similar importancia”
“¿Quién lo conoce al Gral. Seregni en Rocha?” lanzó el representante departamental del Partido Nacional Elio Archondo en plena discusión respecto a la propuesta de designar Monterroso en toda su extensión con el nombre del destacado hombre público.
 “A mí me dijo una vez un General, “Seregni llegó a General porque era guardaespaldas de Luis Batlle pero jamás comió un guiso carrero en los cuarteles en ninguna parte del país” y aseguró que se niega a que “ el nombre del ilustre Monterroso, aquel hombre que Artigas designó para que redactara las Instrucciones del Año XIII se le pueda cambiar por un político”.

“EL EMBAJADOR DE ITALIA LES PASÓ UN RETO Y AHORA QUIEREN ENMENDAR”
Al comienzo del debate el también nacionalista José Luis Molina fue también muy duro al afirmar  “no voy a acompañar este Mensaje de la Intendencia.
Nos parece que no se tuvo en cuenta a la hora de tomar este tipo de decisión, cuando vino el primer Mensaje, de cambiar el nombre porque ganó el Frente Amplio y había que a cualquier costo ponerle el nombre, merecido por supuesto, de quien hoy se le quiere cambiar sin pensar que se le sacaba el nombre a una calle que representaba nada más y nada menos que un país, Italia, que por eso se llama Avenida Italia, país que ha colaborado muchísimo con nuestro departamento. Pero no se pensó en eso y había que ponerle el nombre de Seregni y no se pensó, ni se miró, ni se estudió absolutamente nada”.

“ES UNA DECISIÓN DEL FRENTE AMPLIO. QUE LA ARREGLEN ELLOS”
“Resulta que como viene después el Embajador de Italia y le pasa un reto al Intendente, y le pregunta por qué le sacaron el nombre de Avenida Italia para ponerle el de Seregni, ahora quieren enmendar.
Señor Presidente esos son los apuros, las atropelladas que meten a veces los que están en el gobierno hoy, de la cual estamos acostumbrados”, agregó el líder de Alianza Nacional en Rocha.

“Por ese motivo, no vamos a acompañar, votamos en aquel momento  porque era una decisión del gobierno que seguramente era pensada. Hoy nos damos cuenta que fue una decisión de atropello, de apresuramiento, inconsulta porque había que tener en una Avenida importante el nombre de Seregni, el cual nosotros creemos que debe estar. Pero que no se pueden hacer este tipo de atropellos para estar sacando y poniendo nombres todos los días”, sostuvo.
“Así que, señor Presidente, nosotros, por lo menos nuestro sector, o quien habla mejor dicho, no va a acompañar esta moción.
ARCHONDO: “SU ÚNICO MÉRITO FUE APALEAR BANCARIOS”
Esta es una decisión del Frente Amplio, que lo arregle el Frente Amplio”, concluyó Molina.
El edil Elio Archondo dijo que “ estuvimos años en la Junta Departamental de Rocha para que una calle de Rocha se llamara Manuel Oribe y nunca lo pudimos conseguir. Nunca pudimos conseguir que una calle se llamara Dr. Javier Barrios Amorín, nunca pudimos conseguir que una calle se llamara Dr. Alfredo C. Vigliola.
Y ahora qué mérito, ¿quién lo conoce al Gral. Seregni en Rocha?(...) Los bancarios cuando vino a apalear, cuando era Inspector General del Ejército, en el gobierno de Pacheco, el único mérito que tiene”, aseguró.
“¿Quién lo conoce al Gral. Seregni en Rocha?. A mí me dijo una vez un General, “Seregni llegó a General porque era guardaespaldas de Luis Batlle pero jamás comió un guiso carrero en los cuarteles en ninguna parte del país. Qué mérito tiene el Gral. Seregni, y nada menos que cambiarle el nombre por Monterroso, es una aberración, es una vergüenza. Que le pongan a un camino real cualquiera el nombre de Seregni si quieren, pero no vengan a ponerle a una calle, nada menos que la de Monterroso”, concluyó el edil nacionalista.

SAROBA : “SEREGNI SE MERECE UNA CALLE PERO HAY QUE PENSAR BIEN”
Graciela Saroba dirigente colorada que hoy milita en el Partido Nacional dijo que “ nuestro país es una colonia de inmigrantes, Rocha es uno de los departamentos que está conformado por esa colectividad de inmigrantes, mayoría inmigrantes italianos. A mí también me corre por las venas lo que es la sangre italiana.
En aquel momento cuando se cambia Avenida Italia por un nombre al cual respeto muchísimo, Líber Seregni, por ser un hombre que parte de su pueblo lo ha votado y respeto también a su gente. Me parece bien que la colectividad que ha ganado, el Frente Amplio, tenga un reconocimiento a Líber Seregni.
En aquel momento nosotros, en mi caso personal, no voté sacarle el nombre a la Avenida Italia para cambiar el nombre”.
Saroba solicitó es que el asunto pasara a consideración de la Comisión de Nomenclátor y “se trate de ver de qué manera mejor podamos salir de este tema”.

CONDEZA: “FUE COMO ROMPER RELACIONES CON ITALIA”
En su momento, José Condeza, también del Partido Nacional expresó:
“Yo no voté el cambio del nombre de Avenida Italia porque me pareció un disparate, me parecía que era como romper las relaciones con un país al que le debíamos mucho porque como se dijo acá, los inmigrantes italianos ayudaron a hacer este país y por otra parte hay muchos descendientes de ellos que se sintieron afectados.

Y también otra razón más, el cambio de la calle Avenida Italia, por más que se haga desde el punto de vista legal, la gente va a seguir llamándole Avenida Italia. Estos cambios no se pueden hacer atropellados, hay que estudiarlo muy bien”.
“SEREGNI SE MERECE ALGÚN RECONOCIMIENTO”
“No se puede cambiar un nombre por otro porque alguna razón hubo para poner ese nombre y más cuando ese nombre se grabó en la sociedad, quedó tan grabado que no se puede cambiar, no se puede cambiar de un día para el otro el nombre de una calle ni el nombre de un estadio como lo querían hacer. Ahora estamos en la misma situación, así de golpe cambiarle otro nombre a una calle. Me imagino que Avenida Italia va a seguir siendo Avenida Italia mientras exista Rocha y Monterroso también”, remarcó el edil Condeza.
“Me gustaría que sí, se estudiara un poco más esto para ver a qué calle se le puede poner Líber Seregni, que hay muchas calles, me imagino que sí, el Gral. Líber Seregni se merece que se le haga algún reconocimiento. Pero que se estudie más detenidamente este tema así que también estaría de acuerdo que pasara a la Comisión de Nomenclátor”, concluyó.
Finalmente, el veterano dirigente colorado Artigas Iroldi propuso que el tema volviera a la comisión de nomencátor porque al no haber consenso no se lograría la mayoría especial necesaria.
Así fue votado.

CONTINUACIÓN DE CALLE PIEDRAS A PARTIR DE ITUZAINGÓ SE LLAMARÁ ADAUTO PUÑALES

El Este
La Junta Departamental de Rocha dio la anuencia a la intendencia para dar cumplimiento a una solicitud de la propia Junta para designar ese tramo de la calle Piedras con el nombre del caudillo colorado.
SERGIO BONILLA: “VOTO CON LAS DOS MANOS”
El presidente del Cuerpo, el frenteamplita Sergio Bonilla dijo:  “ yo voy a votar no con una mano sino con las dos porque considero que hay personalidades en este departamento a las cuales no se les puede, de una palabra, manosear cuando se pretende homenajear a esas grandes personalidades.
Por lo tanto yo con todas mis manos voy a votar que se ponga el nombre de Adauto Puñales a una parte de la calle Piedras. No quiero en este momento tratar de buscar subterfugios cuando se nombra a estas grandes personalidades que ha tenido nuestro departamento”.

“HAY QUIENES CAMBIAN LO ACORDADO. YO NO CAMBIO.VOTO LO QUE COMPROMETÍ”
La también frenteamplista Grisel Caram destacó: “yo también adhiero a las palabras del señor Presidente Bonilla y voy a votar, primero que cumplo con mi palabra, yo comprometí mi palabra con esa calle Piedras y la voy a cumplir cosa que acá no pasó en este recinto con la calle Líber Seregni porque el otro martes había acuerdo y hoy los acuerdos han sido cambiados. Y está bien, todo cambia pero yo no cambio, yo di mi palabra, la comprometo y levanto también a dos manos como lo hace el señor Presidente”.
“ES POCO EL NOMBRE DE UNA CALLE PARA UN HOMBRE CON UNA VISIÓN TAN GRANDE”
Por su parte, la edil Graciela Saroba, hoy integrante de la lista 71 del Partido Nacional, proveniente del Partido Colorado aseveró: “ esto es un real homenaje, un verdadero homenaje a un hombre como muy pocos vamos a tener de Intendente como fue Adauto Puñales.
 La gran sensibilidad, la gran comprensión, la gran solidaridad que tuvo hacia las clases más necesitadas quedaron de muestra y de prueba las grandes obras que se hicieron. Esas grandes obras que se vieron con anticipación que eran necesidades que nuestro pueblo iba a tener a futuro. Así están funcionando hoy esos centros CAIF que en su momento se iniciaron”.
“Hoy, gracias a esos grandes proyectos que se hicieron en ese gobierno y que se pidieron, hoy se han fortalecido creándose más CAIF. Merenderos, que al día de hoy se han multiplicado por tres y las policlínicas barriales, algunas cerradas desgraciadamente y que la gente pide que estén abiertas fueron abiertas por necesidades sabiendo que el tema de salud tenía su prioridad” agregó.

“Adauto fue un hombre con sensibilidad y toda su gente lo acompañó. En él quedaron las grandes obras, vuelvo a repetirlas; se desveló el Partido Colorado por tres cosas fundamentales: la educación, la salud y la alimentación. Prueba de eso es lo que hoy están disfrutando niños y personas ya grandes.
Se han multiplicado por tres o por cuatro los comedores municipales, se han multiplicado por tres o por cuatro los merenderos y se pide con las dos manos que las policlínicas en todo el departamento estén abiertas y atendidas”, sostuvo.
“Así que creo que es poco hacerle un homenaje tan pequeño de una calle a un hombre con una visión tan grande.
Así que acompañaremos esto y ojalá que una de esas obras que tiene el departamento mañana lleven el nombre de Adauto Puñales”, concluyó la edil Graciela Saroba.