Cuando en el Liceo estudiaba para Historia aquello de las Provincias Unidas, y en Literatura recorriá las letras de los 'Cuentos de la Selva' de (Horacio) Quiroga, nunca imagé habitar esos caminos de la selva misionera, y transformarme en el Vera' Mirí en una comunidad mby'a guaraní (indígena).
Quizás nunca había pensado en aprender el guaraní, y que 'Charrúa' tomaría un impacto trascendente en mi vida más allá de 'la garra..." con que se identifica la Celeste' (Selección de Fútbol).
Dejar el mar de mi (La) Paloma, para adentrarme en la tierra del Yaguareté, en la tierra roja de la Triple Frontera (Brasil, Argentina, Paraguay), tan cerquita de una de las 7 Maravillas del Mundo (las Cataratas de Iguazú) nunca estuvo en mis planes hasta que la Docencia Comunitaria de los ideales y filosofías de mi vida se hizo andar en mis Caminos de Tiza (www.facebook.com/caminosdetiza/ ) tan lejos de mi puerto natal.
Hoy llevo mi bandera (🇺🇾) en un guardapolvo (así le dicen a la túnica blanca en Argentina) que por caminos de tarefa (donde se produce la Kaa'/ Yerba) y empedrado (calles de barro y piedra) llevan en un puñado de Tizas, la Educación a cientos de Mitaí ('niños' en lengua guaraní) que en las Tekoas (aldeas), parajes/colonias rurales del interior profundo de nuestra Patria Grande, donde le Mate y el Tereré se funden con el Portuñol y la lengua originaria.
Allí, en estos lugares, recuerdo los bancos de mi Escuela N° 52 (La Paloma), en esos pilares de una Educación laica, gratuita y obligatoria, pilares que por estos lares a veces se olvida... pienso en mis Maestras, y a veces olvido que por mis caminos, a veces (muchas), soy el único Educador que llega, ya no a enseñar Lengua, Matemáticas, Ciencias... sino para enseñar sobre Dengue, Leishmanisis, ura, Pediculosis, a prevenir accidentes con animales ponzoñosos, a prevenir la Tungiasis ('Pique'), en lugares marcados por el Trabajo y la Mortalidad Infantil, el contrabando y la Trata de Personas.
Ya no hablo de niños sin túnicas ni moñas... hablo de descalzos, que en una casa de nylon, cartón y madera, engañando la panza con un reviro (comida típica de la zona hecha con harina, agua y sal), corren a abrazar a su 'Maestro' cuando lo ven llegar a la distancia.
'Las grandes escuelas están donde los grandes maestros' me repito, para justificar que un árbol y un par de troncos se tornan mis aulas, donde quemo bosta de vaca para espantar los mosquitos, donde un fogón con una pava (caldera) calienta el invierno...
Miro mi Uruguay a lo lejos, y veo sus Maestros y Escuelas Rurales, y no dejo de pensar en lo Maestros de las Escuelas Interculturales Bilingües que genero (y que tengo el asombroso honor de que algunas de sus aulas lleven mi nombre); veo las críticas a la Educación en mi país cuando recorro profundas desigualdades e injusticias pedagógicas que encuentro aquí, en la tierra de Andresito Guacurarí y Artigas, y pienso en mis becas en el CeRP y la UdelaR, el hogar estudiantil que albergó mis pasos ('Rosalío A. Pereyra), las oportunidades que tuve... la que no tienen mis guríses.
Llevo a cuesta la enseñanza de docentes que fueron mis referentes, mi Maestra Daguel (Morales), el 'Bubi' Mora, e intento ser para mis Docentes Auxiliares Indígenas como ellos fueron para mí inspiración, acompañamiento.
Quizás habito los lugares donde una imagen romantiza mi acción al dar clases con monos o coatíes en el hombro, sin que se sepa que detrás estoy enseñando zoonosis, parasitósis, higiene... problemas que golpean y abundan.
Escribo estas palabras para que se entienda/atienda la riqueza de nuestro país en bienes y servicios, en la presencia del Estado, en la alternacia de partidos/gobiernos en el Poder (aquí hay gobernadores con más de 30 años en el cargo y existe la reelección indefinida); el valor que en estas regiones tendría un modelo UTU, un Plan Ceibal, y el impacto real y trascendental que tendrían formatos como los CAIF (aquí logramos desde Escuelita Ambulante uno similar primero y único en una comunidad originaria, denominado Espacio de Primera Infancia/EPI).
Pienso en los Hospitales y Policlínicas uruguayos sin la parafernalia de estos lares de una cosa llamada Obra Social (que genera grandes diferencias en tiempos y costos de atención y/o acceso a medicamentos, órtesis, prótesis, tratamientos, etc.), mientras traslados grandes distancias, incluso alguna vez a caballo, a niños con Discapacidad a un turno médico, a un control...
Marcho, cargando como dice algún medio por acá "con la escuela al hombro" buscando generar algo que en Uruguay hace años existe... los Maestros Comunitarios.
Soy hoy, una silla vacía en mi casa, una voz en el teléfono, pero lo hago convencido que cada tiza que gasto es una bala que no se dispara, y cada escuela que fundo una cárcel que no se construye; y aunque lejos de mi faro, donde hoy me arrullan el canto de grillos y cigarras no el vaivén de las olas, estas letras invitan a los uruguayos, a los rochenes, del mar al arrozal, del médano de la Vírgen al Curupí, a (re)valorar lo que tenemos mientras analizamos lo que nos falta.
Hoy llevo la Tekom'boe ('Educación' en guaraní) como la pensó Rosalío, con los ideales de Varela, con los mísmos sueños de Cora Vigliola de Renaud, para que no haya otros Dionisios' Díaz; ya no por calles de adoquines, ni con sueños de pescadores, sino bajo el manto de ibirapitás a sueños de tareferos...
Julio Manuel Pereyra
'Huevo'
Educador Comunitario/Fundador de la única propuesta itinerante Educativa de América
Palomense
Activista por los Derechos del Niño y de los Pueblos Indígenas
Radicado en Misiones (Argentina)
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