Dos días después
de que una de las empresas de opinión pública más prestigiosas del
país, la empresa FACTUM, presentara un resultado que indica un
fuerte crecimiento de la intención de voto al Partido Independiente
y un día después de que hayamos lanzado la candidatura del Dr.
Conrado Ramos como nuestro candidato a vicepresidente, el candidato
oficialista que generalmente había optado por ignorarnos en sus
discursos, sale dos veces en distintos lugares a calificarnos como un
partido de derecha similar a blancos y colorados.
Efectivamente, en
el programa Código País señaló que a su juicio nuestro partido
tiene un programa similar a los de blancos y colorados y ese mismo
día en un acto en Young señaló que el “Partido Independiente
formaba parte de la derecha de este país” sumándonos a los
partidos tradicionales.
Cuesta creer que
se trate de una casualidad. Históricamente el Dr. Vázquez había
optado por ignorarnos en sus discursos e intervenciones, refiriéndose
genéricamente a toda la oposición como “la derecha”. “Ningunear
al PI” fue la estrategia elegida por el Dr. Vázquez en sus
anteriores intervenciones. Sin embargo esta semana pareció cambiar
de estrategia y la emprendió contra nosotros optando por faltar a la
verdad de manera intencional y conciente.
El Dr. Vázquez
conoce a quienes integramos este partido desde hace muchos años,
sabe que en su momento muchos de nosotros integramos el Frente Amplio
y reivindicamos la representación de una izquierda socialdemócrata,
democrática, seria, responsable y moderada integrada por el doble
origen de compañeros provenientes de la democracia cristiana y de la
histórica lista 99 de origen batllista. El mismo Conrado Ramos, a
quien acabamos de elegir como nuestro candidato a vicepresidente,
formó parte de su propio gobierno.
Sabe que nuestras
convicciones y pensamiento están muy lejos de integrar el espacio
político e ideológico de la derecha. Sabe de nuestra decidida lucha
contra la dictadura en el pasado. Sabe que nuestras propuestas
actuales y nuestra trayectoria se han orientado definidamente a
buscar la justicia social y la solidaridad. También sabe, eso sí,
que no transamos con la izquierda autoritaria y radical que convive e
impone cada vez más su pensamiento dentro del Frente Amplio.
Y como el Dr. Vázquez sabe todo
esto, entonces cuando opta por meternos en la misma bolsa con blancos
y colorados calificándonos como la derecha, actúa de mala fe y sabe
que está mintiendo.
Es imposible no
vincular esta actitud con la tendencia de la opinión pública.
Existe una alta posibilidad de que muchos ciudadanos que, en su
momento votaron al Frente Amplio, ahora decepcionados y frustrados
por la gestión y los fracasos del gobierno, están pensando en votar
al Partido Independiente.
Algunos sondeos
de opinión pública indican esa tendencia y, al mismo tiempo,
muestran que la intención de voto al Frente Amplio no crece, sino
que por el contrario permanece estancada desde hace varios meses.
Entonces, el Dr. Vázquez ha optado
por la descalificación y la mentira, buscando entreverar las cartas
para ver si con esa intervención impide el crecimiento del Partido
Independiente.
Lo que queda
claro es que efectivamente nuestra prédica contra la mayoría
absoluta del Frente Amplio sintoniza con la opinión y preocupación
de mucha gente. Lo que también queda claro es que la verdadera
garantía de un futuro gobierno sin disparates ni radicalismos de
izquierda o de derecha, es el crecimiento del Partido Independiente;
porque es mucha la gente que quiere cambiar las cosas sin volver
atrás.
La existencia de graves falencias en
las respuestas de diez años de gobierno del Frente Amplio es
visible, y el intento de disimularlas o negarlas expresado en el
discurso del Dr. Vázquez choca con la realidad que indica lo
contrario. Igual que cuando pretende calificarnos como un partido de
derecha.