Buscar este blog

lunes, 5 de agosto de 2013

¿Vázquez en la estación Carnelli? EDITORIAL de El País




Hace algunos años atrás el expresidente Jorge Batlle se refirió a la etapa que estaba transitando hacia el final de su vida política como la "estación Carnelli": una estación de tren cercana a la terminal de Montevideo.
Por estos días, la senadora frenteamplista Moreira se ha referido a Vázquez como un candidato envejecido ya para la cita de 2014. Es como si el oncólogo ya estuviera esperando un tren en su propia estación Carnelli.
El apresuramiento en los tiempos políticos de una parte importante del Frente Amplio para solicitar a Vázquez la confirmación de su postulación presidencial no puede llamar demasiado la atención. Por delante, el conglomerado de izquierda tiene la definición, que implica negociaciones complejas, sobre el programa único de gobierno que presentará a la ciudadanía para 2014. La clave es lograr que Vázquez dé el sí, antes de que ese programa esté definido, y a partir de ese proceso de negociación programático (e incluso con la elección de su compañero de fórmula), dar una clara señal de que Vázquez estará maniatado por la fuerza política en la definición del rumbo de un próximo gobierno frenteamplista.
Porque ese es el problema de fondo que está teniendo una parte importante del Frente Amplio, cuyo reflejo fueron las declaraciones de Moreira. Vázquez ha dado contundentes señales de que se está tomando su estadía en la estación Carnelli con mucha libertad. En estos meses, ha dado a entender cosas que la izquierda militante no quiere asumir: que ya Estados Unidos no es el ogro imperialista de antes y que hay que tener con él una relación distinta; que Cuba no es un régimen al cual rendir culto; que la Justicia habla y es independiente también en causas relacionadas con los derechos humanos; que la marihuana es dañina y no hay que fomentar su consumo; y por supuesto, que está en contra de la ley que cambió el régimen sobre el aborto. Además, ha definido un grupo de trabajo propio, la Nueva Agenda Progresista, que nada tiene que ver con las negociaciones programáticas que se están llevando adelante en el Frente Amplio.
Ante este Vázquez en su estación Carnelli, la izquierda más adicta a la "profundización de los cambios" acepta la realidad electoral que señala que él es su mejor candidato, pero quiere ser la que fije el rumbo del tren. En esta coyuntura, teme que un Vázquez libre del peso ideológico frenteamplista desande algunos caminos tomados por esta administración -sin ir más lejos, el alineamiento internacional de patria grande mujiquista- a la vez que, a futuro, incline la balanza del manejo económico y de las reformas sociales en un sentido más astorista.
Así, el problema para esta izquierda no es solamente que Vázquez esté viejo para 2015, con sus 75 años a cuestas. El problema es que con su etapa de estación Carnelli se agudice su conocida forma de ejercer el liderazgo lejos de la estructura frenteamplista. ¿Cuántas veces renunció o amagó con renunciar y abandonar todo con tal de disciplinar a la izquierda?
En tiempos de estación Carnelli, ¿no habrá llegado el momento en que, efectivamente, será capaz de ejercer el poder completamente alejado de los apremios ideológicos de las bases frenteamplistas, e incluso, si no llegase a tener mayoría absoluta en el Parlamento, con acuerdos sustantivos con los partidos tradicionales? Ante esta perspectiva que quita protagonismo a la izquierda que encarna Moreira, la actual movida del MPP se hace inteligible: te pedimos que vayas, te condicionamos luego con el programa. Si amagas luego, desde tu estación Carnelli en el poder, a no cumplirlo, tenemos legitimidad para movilizarnos fuertemente y llevar el enfrentamiento político a extremos más graves que los actuales. Claro está, en esa movilización estará esa izquierda política y también su aliada sindical: quien crea que son independientes una de otra no entiende nada.
La verdad de la estación Carnelli de Vázquez es que no va a pasar nada sustancial. Porque, como lo ha demostrado muchas veces, para Vázquez antes que el interés del país está la unidad de la izquierda. Creer que estamos ante un Vázquez más sabio porque es más viejo, que da un giro ideológico profundo en sus declaraciones más moderadas, es no entender ese orden de prioridades tantas veces por él explicitado en los hechos. La estación Carnelli aquí, es una estación más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario