En la Cámara Baja el proyecto fue aprobado con los votos de los legisladores frenteamplistas
El Observador
+ Gonzalo Charquero @geceache -
Con los votos de los 50 diputados del Frente Amplio (FA), la Cámara de Representantes aprobó anoche el proyecto de ley que permitirá la venta de cannabis en farmacias y habilita el autocultivo de marihuana. El diputado oficialista Darío Pérez (Liga Federal), quien había convertido su decisión en una incógnita, comunicó en sala, tras ocho horas de sesión, que daría a su partido la mayoría parlamentaria para que el Estado uruguayo sea el primero de la región en permitir la comercialización de la droga. La votación final fue de 50 votos en 96 legisladores presentes.
La oposición votó en contra del proyecto pero los diputados Luis Lacalle Pou (Aire Fresco), Ricardo Berois (Unidad Nacional), Daniel Radío e Iván Posada (Partido Independiente), entre otros, acompañaron el artículo que habilita el autocultivo. Ahora, con la media sanción de Diputados, el texto pasará al Senado en busca de su aprobación definitiva antes de fin de año.
El debate tuvo ritmo cansino. La sesión comenzó sobre las 10.15 y a las 16 horas recién habían hablado ocho diputados. Además, la expectativa tanto de los legisladores como de activistas por la legalización de la marihuana estaba puesta en el lugar 15 de ese listado, correspondiente al diputado Pérez, quien hasta ese momento mantenía su resolución en silencio.
Mientras el Frente Amplio (FA) defendió el proyecto en base a la regulación del mercado y el aumento de derechos para consumidores, blancos y colorados acusaron al oficialismo de “ensayar” una respuesta que no garantiza una mejora de las condiciones actuales. Los argumentos fueron repetidos y no innovaron en relación a lo ya señalado durante todo un año de discusión parlamentaria que lleva el tema.
La espera por la palabra de Pérez duró más de lo previsto. Sobre las 16.45 horas una falla en el sistema de audio dejó sin funcionar a la totalidad de los micrófonos. La sesión fue retomada media hora después. Eran las 17.20 y en siete horas de sesión recién habían hablado 11 legisladores. El turno de Pérez comenzó apenas pasadas las seis de la tarde. El murmullo que dominaba la sala se transformó en silencio. Durante su intervención se escuchaban flashes de cámaras fotográficas. Tras criticar el modo en que el Poder Ejecutivo lanzó el tema, insistir acerca de que la marihuana es “una bosta” y enumerar los perjuicios de la droga, el diputado se pronunció a favor del texto: “Los órganos del Frente Amplio han tomado la determinación de seguir este proyecto. Mientras yo sea parte de este Frente Amplio voy a seguir esas reglas, a las que me someto”. Afirmó que una de las cosas que lo llevaron a acompañar la normativa fue el “efecto góndola” de acceso a las drogas que se produce en las bocas de venta.
A pesar darle el voto 50 al oficialismo, el diputado advirtió que la iniciativa tiene un 50% de posibilidades de fracasar. “Solo hay una certeza. Con o sin ley el problema va a seguir pasando”, afirmó.
Pérez sostuvo que la negociación con él comenzó al haber “imposibilidades de conseguir los votos fuera del FA” para lograr la aprobación. Pérez también dijo que la normativa debe ser sometida en una consulta popular. “Es un típico tema que debería ser zanjado por el pueblo oriental”, afirmó. Al terminar su intervención de 29 minutos fue abrazado por el diputado Doreen Ibarra, otro de los legisladores que planteó reparos a la iniciativa. Pérez saludó a la diputada Ivonne Pasada que estaba al lado suyo, recogió un papel que se le cayó al piso, y se salió de sala por unos minutos (ver página 4).
El debate
La oposición afirmó que la normativa aumentará el consumo de cannabis y acusó al Frente Amplio de fomentarlo. Blancos y colorados también señalaron que la marihuana es la puerta de entrada a otras drogas. En cambio, el partido de gobierno argumentó que el principal objetivo del articulado es aumentar los derechos jurídicos y sanitarios de los consumidores, y también mejorar las condiciones de acceso a la droga, que hoy en día son adquiridas en bocas donde se vende pasta base y cocaína. Los diputados oficialistas también insistieron en la necesidad de separar los mercados para reducir la llegada de personas a otras drogas. Los diputados oficialistas repitieron durante todas sus intervenciones que fumar marihuana no es recomendable.
Ante un planteo de la oposición, el frenteamplista Luis Puig (PVP) dijo que hay 200 camas disponibles para esos enfermos. La cantidad de consumidores, solo de marihuana, es 180.000, según el miembro informante, Sebastián Sabini.
El Partido Independiente no acompañó el proyecto en general pero votó a favor del autocultivo. El diputado Daniel Radío dijo que el avance sobre el tema “debe ser gradual”.
El Frente Amplio informó en sala que las mismas restricciones que hay para el humo de tabaco serán aplicadas al humo de cannabis.
Además, Sabini (MPP) argumentó a favor del registro de usuarios y dijo que las farmacias que digan a quién venden la droga serán sancionadas. “No va a haber un lugar de venta de cannabis en cada esquina. Los lugares se van a definir en la reglamentación”, afirmó el legislador.
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