Pocitos: Parrado destacó “inexperiencia” de delincuentes.
Montevideo Portal
El psic. Robert Parrado, licenciado en seguridad pública, analizó
para Montevideo Portal varios aspectos relacionados al tiroteo
registrado en Pocitos. Según Parrado, “parece que estamos anestesiados”
por la sucesión de hechos violentos. Advirtió sobre el peligro de darle
un “perfil romántico” a los delincuentes menores de edad, y se mostró
contrario a que militares colaboren con la Policía.
El asesinato del policía Carlos Rodríguez durante un intento de
robo a un local del Correo en Pocitos el pasado lunes, generó todo tipo
de repercusiones a nivel social y político. En el hecho también murió
uno de los asaltantes, otro policía resultó gravemente herido y dos
menores de 17 fueron detenidos.
El psicólogo Robert Parrado, licenciado en seguridad pública, dijo a
Montevideo Portal que "pasada la bronca e impotencia por la muerte del
policía y lo grave de un evento criminal de características tan fuertes,
las reflexiones deben ser sobre el fondo, sobre cómo pasó, el perfil de
intervención de la Policía: por más que se llegó rápido, implica
analizar con qué medios llegó y con qué tipo respuesta donde hay una
rapiña en proceso, cómo se dispone la llegada del personal".
Otro aspecto al cual hizo referencia Parrado, fue la ayuda que prestó
un ciudadano que pasaba por el lugar. Este vecino colaboró en el
traslado de uno de los policías heridos, incluso conduciendo un
patrullero hasta el centro asistencial.
"Que un civil tenga que manejar un patrullero para transportar a un
policía herido, habla de la fragilidad con que el personal opera en la
calle, con las repercusiones que puede tener. Porque pudo tener las
mejores intenciones, pero estaba trasladando a un policía grave en un
móvil policial", enfatizó Parrado.
Inexperiencia
De los tres ladrones que participaron en el robo del lunes, dos de
ellos son menores de edad. El fallecido en el lugar era el único mayor.
A juicio de Parrado, el lugar elegido para el atraco habla de la "inexperiencia" de los malvivientes.
"Por más que tengan entradas o antecedentes por hechos graves, tenés
gente que se mete en la ruta del delito. Es gente que actúa más
impulsivamente. A eso hay que agregarle la cuestión social, que quizás
sea inadecuada y donde el perfil delictivo es el patrón de conducta
familiar. En realidad fueron a robar en una zona casi de encierro, por
las características que tiene Pocitos. En caso de haber tenido éxito el
atraco, era difícil escapar".
A juicio de Parrado, "no puede pasar que haya habido tantos disparos a
una hora tan complicada, donde el daño colateral es mayor. Cuando más
rápido llega la Policía, mejor debe estar preparado el personal para
evitar males mayores. Es hora de reflexionar sobre el fondo de lo que
está pasando. Cuando hablamos de menores de edad, en mi opinión se debe
evaluar la participación de la persona más allá de la edad de quien
participa en el evento criminal. Debemos diferenciar el perfil y la
atención de cada acción. Si no entramos en un perfil romántico: no
'queremos niños en las cárceles' cuando en realidad hablamos de jóvenes y
adolescentes. Nos olvidamos que participaron en un evento criminal
donde hay victimas directas y segundos afectados".
"Estamos anestesiados"
El tiroteo del lunes en Pocitos es uno de los temas que acapara la
atención de la población durante estos días. En trabajos y espacios
públicos se discute y analiza lo sucedido.
"Hay varios casos de mucha violencia en los últimos tiempos. Parece
que estamos anestesiados. Si bien son excepcionales, parecería que cada
hecho nos hace olvidar del anterior. Uno que está en esto todos los
días, tiene memoria y hace un acopio de información. La gente va
acumulando y lo que acumula es el sentimiento de inseguridad que es casi
inconsciente. Está proyectado y vamos generando un aislamiento que nos
lleva hacia adentro de nuestras casas, o poniendo rejas que nos alejan
del afuera. Se genera un sentimiento de discriminación y molestia. En
algunos casos con una mirada muy perversa que puede tener una mirada de
odio", advirtió el especialista.
Para terminar, se mostró contrario a que militares colaboren en
tareas inherentes a la Policía. "Hay gente que asimila el trabajo que
realizan los militares en misiones de paz, con el trabajo de la policía.
Pero el armamento es diferente, y la formación y sociabilización son
diferentes. Las funciones son ajenas. Militares y Policías son el agua y
el aceite".
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