Esta tarde falleció Héctor Manuel Vidal, uno de los directores más importantes que tuvo el teatro uruguayo.
En sus más de cuarenta años de trayectoria, Vidal compuso una trayectoria valiosísima que empezó en el viejo Club de Teatro y luego, bajo la dictadura, continuó a través de distintos grupos y después, en años de democracia, tuvo reconocimiento oficial cuando en dos oportunidades fue designado director artístico de la Comedia Nacional.
La fuerza de su creación estuvo asociada a textos universales que en años de asfixia política parecieron tanques de oxígeno de enorme vuelo artístico.
El nombre de Vidal también está asociado a puestas como Woyzeck, Galileo Galilei, Rinocerontes, Tirano Banderas, Tierra de nada y Rompiendo códigos. Más recientemente produjo Gatomaquia, sobre novela de Lope de Vega, una obra de enorme frescura y vitalidad que durante años estuvo ocupando escenarios de diferentes salas.
Vidal, de 70 años, además fue un gran animador cultural: un intelectual con gran capacidad analítica que le permitía entablar discusiones que algunas veces se exteriorizaron en cartas públicas.
Su velatorio se realizará en la empresa Martinelli entre las 9 y las 13 horas de este lunes.
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