Historias de vida:FLAVIA COHELO

Flavia Cohelo, Directora de la Dependencia del Adulto Mayor de la Intendencia de Rocha:

“Pobreza exterior no significa pobreza interior, hay grandes riquezas adentro de las personas”

“La persona que conoce la pobreza es sumamente generosa y solidaria. Y es capaz de grandes gestos de generosidad”.

Flavia Cohelo trabaja con uno de los sectores más vulnerables de la población: las personas de la Tercera Edad pobres y generalmente abandonadas. Su propia historia de vida le permite acercarse a quienes más necesitan sin que se sientan invadidos en su dignidad y humillados.

En entrevista concedida al programa Cuarto Poder de Radio Fortaleza explicó el trabajo de su Oficina que permite dar una mejor vida y autoestima a quienes de lo contrario vivirían un calvario.

Entrevista de Juan José Pereyra

¿Qué es la dependencia del adulto mayor de la IMR?

Es una oficina que está creada dentro de la de Promoción Social que focaliza la atención a personas mayores de sesenta años. No solamente en aquellas que están en situación de extrema pobreza o en situación de soledad. También trabajamos en red .Rocha tiene una red de organizaciones en todo el Departamento que trabaja muy bien con gente que tiene mucha formación, que tiene una vida plena , tiene familia, tienen amigas , van al Club de Abuelos , van a las Asociaciones de Jubilados y Pensionistas , luchan por sus derechos gremiales , trabajan en política , están bien. La Intendencia cumple allí un papel de Secretaría .Nosotros hemos sido elegidos para ser la secretaría de esta red. Estamos en ese ámbito donde se tratan temas de intereses generales como la salud, la seguridad, la violencia .Se ha invitado el Jefe de Policía, han estado los dos diputados, la Directora Departamental de Salud y por otro lado está esa otra realidad que no hay quien la atienda y por eso nosotros nos hemos concentrado allí. Personas que están muy solas, los vecinos vienen, nos avisan porque la comunidad es muy solidaria realmente .El vecino es un aliado fundamental para nosotros y además nos hemos instalado en los comedores municipales en todo el Departamento por considerar que allí está realmente el más sufrido .Por tener que ir al comedor en primer lugar pero además cuando uno conversa con ellos ve que están muy solos , que están de espalda a la familia, que necesitan otros vínculos afectivos .Están desmotivados, con la autoestima muy baja y no se consigue nada cuando uno anda así. Cuando uno levanta la autoestima siempre que puede logra muchas cosas, emprende otras cosas y las logra y tiene una vida mucho más feliz.

¿Cuál es el trabajo concreto de la Secretaría?

La Coordinadora, que es esa red de la que hablábamos ya existía cuando se crea mi Oficina así que simplemente ahí hago un trabajo de integrarme, de aprender muchísimo. Hay gente que sabe mucho, grandes valores en nuestro Departamento. Cuando uno sale con ellos a otros lugares a Encuentros o Actividades ve cómo los valoran y cómo los quieren .Acá también, pero ese reconocimiento afuera es muy importante. La Presidenta de la Onajpu está en la Coordinadora representando al Hogar de Ancianos y al Club Los Ceibos. Estar al lado de una persona así es una experiencia riquísima. También está Cepar Uni3, Jubilados de Chuy, de la Barra, de Lascano, los Clubes de Abuelos de todo el Departamento, los Hogares de Ancianos .Esa es una parte del trabajo. Organizada, prácticamente funciona sola, yo simplemente acompaño. Soy una más en un equipo. Por otro lado están estas personas que viven solas que es muy difícil saber dónde están, cuántos son, cómo están, pero cuando nosotros nos largamos a la prensa y damos a conocer nuestras intenciones de trabajar con esa población es impresionante la cantidad de vecinos que empiezan a venir o a llamar .Entonces armamos un registro, los vamos a visitar con una Asistente Social y después ya no perdemos el contacto. Y lo otro es el comedor municipal que es una institución que es una referencia porque algunos van ahí , otros no van, pero se ven, se llaman y comentan la situación de su abuelo u otro familiar , que conocen a alguien que está muy mal y entonces el registro se va confeccionando así. Lo primero que tratamos de hacer…esas personan tienen un sentido de la dignidad muy especial, distinto al de otras generaciones, no quiere decir que los demás no lo tengan pero se sienten muy dolidos si uno de entrada les dice que tienen que ir al comedor porque lo están pasando tan mal. Esa cosa un poco violenta hace que la persona se ofenda y nunca más, nunca más te reciba. Entonces hay que ir con mucho cuidado, con mucho afecto y mucho tino y controlar el abrigo, que se estén alimentando y la salud.

A veces debemos hacer algunos trámites también porque son personas que no van al Banco de Previsión Social, no van a un abogado, a veces no van al médico. Hay que hacer todas esas coordinaciones de lo elemental .Toda la primera etapa de nuestro trabajo se centró ahí. Después nos pareció que teníamos que seguir avanzando y por eso empezamos a ir a los comedores y empezamos a hacer actividades recreativas. Llevamos gente que canta y baila, que hace humor. Y ¿qué sucede ahí? Que las personas empezaron a prepararse para ese día, empezaron a pasar al frente, a cantar, a bailar, a recitar y empezaron a ser aplaudidos ese día. Salen de la sombra de su casa donde se vive una rutina sin mucho sentido, comer, ver la tele y dormir. Al otro día lo mismo y ahí pasan a ser el centro de los aplausos: ese es su día .Ha sido maravilloso y ha pasado en todo el Departamento. Y los artistas locales que van y cantan gratis. Hemos recorrido todo el Departamento con el Pichón Castro, nos falta Lascano .Y ha sido tremendo. Yo pensé, después que cante él no va a cantar nadie, nos vamos a quedar todos mudos .Pero no es así. Levantan la mano y van y se animan y agarran el micrófono. Acá en el Hogar Estudiantil tuvimos una fiesta maravillosa porque estaban los jóvenes también. Y entonces cantó el Pichón y cantaron otras personas muy en familia, no llamamos a ninguna otra autoridad ni a la prensa. Algún periodista que nos pregunta a veces concurre pero no hacemos de esto nada que sea un espectáculo. Es una fiesta nuestra, en familia, porque ese es el fin, que la gente se sienta bien, que salgan contentos. Y han salido vínculos de amistad, han salido algunas parejas también y uno ve que para la fiesta siguiente la persona ya se preparó para ese día, la ves vestida distinto, nos pide ropa antes de la fiesta, y eso es muy importante porque elevando la autoestima la gente ve la vida de otra manera y emprende otras cosas

¿A cuánta gente atienden a través de la Coordinadora?

Tenemos en el registro algo más de cuatrocientas personas que va a costar sacarlas de esa situación porque hay hábitos de vida muy arraigados. A veces uno va a visitar a alguien que está en una vivienda muy precaria, pasando frío, y le ofrece la posibilidad de salir para el Hogar o para alguna otra casa y no quiere, no quiere. Entonces hay que ayudarlos allí donde están. Y a veces para el Municipio eso significa un esfuerzo económico muy grande: arreglar una casa cuando ya hay un Hogar de Ancianos pero cuesta mucho abandonar las mascotas, las pertenencias y prefieren estar ahí en esas muy malas condiciones. Revertir eso no es nada sencillo.

¿Se nota un abandono familiar hacia el adulto mayor?

Sí, lo hay, indudablemente. Sucede que en el Oriente la valoración del adulto mayor es totalmente distinta. Está en la cabecera de la mesa, es la autoridad en la familia, es el que da los consejos, el que marca las reglas, el que va indicando cómo vivir y acá es al revés. Lo vamos marginando, ya no se le consulta más nada, lo excluimos de las decisiones, los vamos sacando del Living cuando viene gente, pasa a la piecita del fondo y lo más dramático es cuando lo llevan a una casa de salud o al Hogar de Ancianos y no lo van a ver más. Y nos perdemos sabiduría, nos perdemos experiencia, historias de vida porque cortamos realmente. Hay algunos cortes que para un ser humano son brutales. De llegar a los setenta años y que se terminó tu familia .Ir al Hogar de Ancianos no tiene que ser algo dramático. Puede ser cómodo para la familia, puede ser cómodo para el abuelo siempre y cuando el vínculo se mantenga, la familia vaya a verlo, lo saque a pasear, se lo lleve los domingos, en los cumpleaños, en navidad. No es malo que vivan ahí, al contrario, están muy bien pero el tema es el afectivo. No se puede cortar así.

¿Por qué se llega a eso? Está en la condición humana eso de tirar como un mueble que ya no sirve a quien te dio la vida, te crió los hijos. Es muy duro eso, ¿no?

Es muy duro sí. Esto pasa en Occidente. Deberíamos aprender muchísimo de la cultura de Oriente. Tendríamos que mirar más esas cosas de Oriente. También nos pasa en Occidente con los niños y con los jóvenes. Una sicóloga hizo un planteo en la televisión argentina y decía no puede ser que un niño a los cinco años tenga un staff de profesionales trabajando para él porque como tiene la autoestima baja, porque los padres no están ocupándose de él tiene que ir a un sicólogo, a un fonoaudiólogo para terminar de aprender a hablar , después Inglés porque si no no existes si no sabes Inglés y al final generamos toda una cosa artificial detrás de ese niño y sentarse a leerle un cuento o acariciarle la cabeza no lo hacemos más. Estamos en una dinámica que nos impone este ritmo vertiginoso y nos olvidamos de lo que realmente importa. Nuestros niños, nuestros padres…

Me contabas que los artistas van a acompañar a los adultos mayores. ¿Pasa también con chiquilines o gente de mediana edad? ¿Si alguien quiere participar lo puede hacer?

Si quiere, ¡debe hacerlo! De hecho, Clubes de Abuelos, Ajupenro, han llevado obras de teatro .En el Club la Aguada, Homero Píriz con algunas señoras de ese club lo hicieron y fue un éxito impresionante. Nada profesional, graciosísimo, una empatía maravillosa con la gente, Ajupenro con una pareja de bailarines de tango y muchísima gente bailó.

Si alguien, una señora, un señor, un chico quiere participar en estas actividades ¿cómo se comunica con ustedes?

Puede ir a nuestra oficina en Florencio Sánchez 130 de 10 a 16 y allí se anota. O puede llamar al 4472 3559 y les aseguro una experiencia preciosa. Los chiquilines del Inau, del Hogar Femenino estuvieron allí contando cuentos, intercalando su actuación con la de algunos abuelos y fue hermoso. Muy interesante también es que en todos los cuentos había algunas notas comunes. En todos los cuentitos había un monstruo que la gente juzgaba mal porque era feo y lo que trataban de trasmitir es que hay que conocer primero para juzgar después. Los monstruos y los fantasmas de los cuentos nunca eran malos en realidad sino que la gente prejuzgaba, los perseguía y los terminaba matando y solamente el que contaba el cuento sabía del alma buena de ese monstruo .Es un mensaje valiosísimo para los adultos: no prejuzgue, conózcalos primero. Son experiencias preciosas. Tenemos los cuentos redactados en la oficina. Tendríamos que ocuparnos más de esas cosas, más de lo afectivo, más de la motivación, más de la alegría ,valorar más a los demás –hay un montón de cosas que decimos de nosotros mismos y no son verdad.

¿Como cuáles?

Como que la posición política puede ser una traba. Lo político se puede dejar a un lado y se puede trabajar muy bien en función de grandes objetivos como estos. Y esto se hace. En este trabajo hay de todo y siempre tratando que las cosas salgan bien y vamos todos juntos. Se hace. La comunidad es sumamente solidaria. El rochense es solidario. Uno pide algo y están. Pide ropa y están. A veces nos avisan dónde hay gente con serias carencias. Llaman. Vuelven a llamar. Avisan cómo está. Cuidan al vecino .Eso que a veces se da al interior de la familia de darle la espalda al adulto mayor en el vecindario no sucede. El vecino no te abandona aunque digamos lo contrario. Cuando la gente ve que la cosa es real, sincera, y que se hace, colabora se suma. Rocha es sumamente solidaria. Todo el Departamento es así.

Trabajan junto con el Mides, supongo…

Sí, nos apoyamos muchísimo particularmente en el tema situación de calle. Se armó un Operativo Mides, Policía, Salud Pública y la Intendencia para un apoyo para cualquiera de los tres que lo necesiten. Esto por la ley de internación compulsiva de personas en situación de calle. Primero los ve el Mides, luego Salud Pública y si la persona se niega la policía lo traslada a un refugio.

¿Pasó en Rocha?

No. Nos llamaron por un caso, fuimos con Magela Altier, conversamos con las dos personas que vivían adentro de un auto .Se negaban rotundamente. Al Refugio ni pensar decían. Claro, allí hay reglas: bañarse, no se puede estar alcoholizado, pero con las temperaturas tan bajas nosotros flexibilizamos y les dijimos que podían ir igual .Se siguieron negando. Hicimos contactos con unos vecinos, ellos nunca se enteraron que los vecinos estaban en contacto con nosotros y ellos los vigilaron y cuidaron. Les llevaron comida, hay una protección de la gente, como decía antes.

Parece que además de lo material una gran carencia de la gente que está en esa situación es en lo afectivo y ahí ustedes deben trabajar mucho, ¿no?

Claro, el cuidado en el diálogo, ¿verdad? Cuando uno va a conversar ahí hay que tener muchísimo cuidado .Esto sí que no lo puede hacer cualquier persona. Hay que tener una sensibilidad muy especial .El área de Promoción Social la tiene, tiene Asistentes Sociales muy sensibles y muy preparadas para esa tarea y contamos además con ese apoyo un poco anónimo de los vecinos. La persona no puede saber que ese vecino nos llamó porque se enoja con el vecino aunque el vecino está tratando de hacer lo mejor.

Parece quedar claro que una vez que la gente se empieza a integrar y a recibir la asistencia de los demás después no la quiere dejar, ¿no?

No, no. Y se enoja si nos vamos. Cambiamos la fecha a veces por problemas de agenda .Inclusive tenemos gente que va a todos los comedores no sólo al suyo. Tenemos que tener la consideración de avisarles, porque disfrutan, les gusta y para eso generamos estas actividades. Pero también tenemos otra meta bastante más ambiciosa para la que contamos con los Centros Mec.

¿Cómo trabajan con los Centros Mec?

Centros Mec ha aportado artistas para estas actividades y ha hecho un aporte fantástico a través de Alma Dalessandro. Nuestra idea es que ella entreviste a todos los adultos mayores que van al comedor y queremos hacer un libro con todas esas historias.

Cuéntanos más sobre ella.

Es un ser maravilloso, es un privilegio acompañarla. Es poetisa, escritora, profesora de nuestro Departamento .A mí me daba un poquito de temor llevarla a determinado ámbitos que presumía desconocidos para ella. Uno ya está acostumbrado y entra a cualquier lado porque además he vivido en lugares muy inhóspitos también y entonces estoy familiarizada. Pero en las primeras visitas que hicimos con ella me preocupaba. Y sin embargo se comunicaba con una tranquilidad, con una familiaridad con la persona a la que iba a entrevistar de una manera fantástica. Hacer un libro con todos los abuelos y abuelas que van a los comedores municipales nos parece una obra muy interesante para que las nuevas generaciones conozcan una familia que ya fue, reglas que ya no rigen, el sentido de la autoridad que ahora está un poco más difuso y es un gran error, el sentido de la dignidad, lo que era el maestro rural, el padre, la madre, el abuelo. Es muy interesante, es divertido y para la cultura del Departamento es un aporte muy importante. Ha entrevistado a casi todos los que van a los comedores de Rocha donde hay tres comedores, y una vez finalizado Rocha vamos a empezar a ir al interior con ella. Y esta tarea es un aporte de los Centros Mec. El vínculo con los Centros Mec ha sido fundamental, ha dado un impulso para concretar las cosas. Trabajar en red es muy importante. Lo que no aporto yo lo aporta el otro. Igual sucede con los jóvenes promotores de derechos Humanos. Centros Mec nos llamó, se hizo una reunión con los jóvenes .Ellos querían juntar ropa. Nosotros también lo estábamos haciendo entonces hay gente que se contacta con ellos, nosotros les proveemos el vehículo, ellos lo retiran y lo llevan al Refugio, ellos trabajan en forma honoraria y es algo muy valioso y hay que contarlo.

¿Qué te llevó a renunciar a tu banca de edila para dedicarte a una tarea que no es fácil? Tiene que haber habido algo muy fuerte en ti, supongo, para asumir este trabajo que tiene un contenido social muy importante.

La motivación más grande es que yo he tenido una vida muy dura. Pero muy dura. Muy, muy dura. Conozco la pobreza y conozco la indigencia. Sé muy bien lo que es la desesperación de no saber qué poner en la mesa a mediodía y son las diez de la mañana. No tener un abrigo decente para ir a hacer los mandados por ejemplo. Lo sé. Tener un hijo y desesperarse porque uno lo quiere ver bien y no lo puede vestir bien, no lo puede atender bien como necesita .Conozco todo eso. Conozco esa angustia. Conozco ese sentido de que te vienen a ofender cuando te vienen a ofrecer cosas. Uno se resiste un poco y no se deja ayudar. Lo sé perfectamente. Entonces cuando el Intendente me planteó esto me encantó. Estoy segura que lo puedo hacer. Puedo entrar a cualquier lado y hablar de cualquier tema porque lo he vivido, no estoy inventando nada. Esas cosas no están en los libros. Eso sólo lo sabe el que lo vive, el que lo pasa. La humillación que se siente y sobre todo cuando uno tiene formación y se da cuenta que está mal vestido, que está mal alimentado, que quiere estudiar y no puede y esa conciencia es algo terrible. Tener la motivación, la fuerza, la garra para salir adelante es fundamental pero con eso se supera todo, realmente. Y yo soy la prueba de eso. No pude seguir más en Montevideo y me tuve que venir pero no me quería dejar vencer ante la adversidad, quería ser abogada de cualquier manera y mis compañeras de clase me mandaban las fotocopias porque ni podía pagar las fotocopias. Y empecé a dar exámenes libre, tenía que estudiar el triple que el resto porque en esos casos se debe estudiar todo. Y así fui dando exámenes, mi hermano me ayudó muchísimo, pero pasé muchísimas dificultades. Y cuando me recibí me puse a llorar desconsoladamente. El último examen fue derecho Financiero, fue oral, estaban todos los estudiantes atrás mío, fue un aplauso precioso pero salí desconsolada. (Se emociona).

Era una mezcla grande de emociones…

El Intendente ya me había ofrecido el trabajo, yo le pedí una semana más para poder dar ese examen, lo salvé, me vine para Rocha con una felicidad enorme. Y eso lo logra no sólo el recurso económico. Hay que estar muy motivado, muy convencido de lo que se quiere, estar muy mentalizado en el objetivo, pero teniendo eso se puede todo. Realmente se puede todo. Adquirida la formación las puertas se abren. Por eso uno a veces se vuelve pesado insistiendo que los gurises tiene que estudiar porque en mi caso fue así. Si yo no hubiera estudiado no estaría acá ni podría estar haciendo todo lo que hoy puedo hacer en esta tarea.

Supongo que tu trabajo debe ser muy gratificante en el sentido que estás recargando tus propias pilas todos los días porque lo que das la gente te lo devuelve en afecto...

Sí, es así. La gente de los comedores cuando me ve por la calle me grita ¡¡¡hola doctora!!! Y es una alegría. Sé que alguien que viene a mi oficina viene cargado con algún sufrimiento. Y nuestras funcionarias tienen la directiva de tratarlos muy muy bien. No es como otra dependencia donde el contribuyente va, paga una cuenta y se retira. No es lo mismo. Allí ya van golpeados, no pueden salir con un golpe más, con una mala atención. Porque eso los afecta mucho más que a las personas que están en otra situación de vida. Hay que tener mucho cuidado. Y uno lo conoce porque lo ha vivido. Si no no te das cuenta. Nuestra dependencia es distinta a las demás. Hay que sentirlo, hay que saber cómo es la cosa para poder trabajar y yo me siento como pez en el agua. Y cuando recibo esas muestras de cariño realmente es fantástico. Dos personas que se conocieron en estas actividades y se casaron hace poco fueron a la oficina para que yo viera qué lindos estaban vestidos para el casamiento para el que faltaban como cinco horas. Ellos ya estaban prontos. La maquillamos a ella, le hicimos un peinado en el Refugio, se terminó de vestir, nos sacamos fotos y eso no hay nada que valga más. En general, el que tenga prejuicios porque una persona está mal vestida o habla de tal manera o tiene un comportamiento medio fuera de lo esperado se pierde muchísimo porque cuando uno conoce al ser humano se da cuenta que a veces el que es capaz de dar ejemplos no es el que está bien vestido o educado. No es. La persona que conoce la pobreza es sumamente generosa y solidaria. Y es capaz de grandes gestos de generosidad. Yo lo sé porque lo viví.

El trabajo que ustedes hacen le da sentido a la vida de mucha gente que sin esa ayuda su vida sería prácticamente un calvario…

Por eso elegimos los comedores, porque si esta actividad fuera en el teatro no va a resultar, no van a ir. Uno tiene que ir a su ambiente donde ellos se sienten tranquilos, la actividad no puede ser una invasión, tiene que ser algo que salga bien y ser nosotros muy discretos también. Yo voy con una funcionaria y nada más .Muy discreto todo. Nada de prensa, nada de autoridades .Y vamos con mucho cuidado y mucho respeto. Porque pobreza exterior no significa pobreza interior, hay grandes riquezas adentro de las personas por eso hay que tener mucho cuidado para no ofender. Todo va y viene. Hace no mucho tiempo llamamos a la hija de una señora que vive acá en Rocha, muy solita .Algunos problemas familiares la distanciaron. Y las hijas quedaron de venir un determinado día y no vinieron y una muchacha que trabaja conmigo me preguntaba ¿y ahora cómo le vamos a decir? Fuimos con el auto y le dijimos, mire, sus hijas tuvieron un inconveniente, no van a venir. Ella estaba toda bañadita, arregladita preciosa, esperándolas. No van a venir, pero usted se viene con nosotros al comedor que tenemos una fiesta. Ella quedó como medio con una mezcla de dolor se fue con nosotros y la estuvimos observando todo el tiempo y pasó bien. Compensamos un poquito. A partir de ahí todos los meses nos acompaña a todas las fiestas y de ese otro tema no hablamos más. Ella sabe lo que pasó, lo comprendió y nosotras sabemos que no se puede insistir más.

ENCASTRES

Cuando uno conversa con ellos ve que están muy solos, que están de espalda a la familia, que necesitan otros vínculos afectivos .Están desmotivados, con la autoestima muy baja y no se consigue nada cuando uno anda así.

Llevamos gente que canta y baila, que hace humor. Y ¿qué sucede ahí? Que las personas empezaron a prepararse para ese día, empezaron a pasar al frente, a cantar, a bailar, a recitar y empezaron a ser aplaudidos ese día. Salen de la sombra de su casa donde se vive una rutina sin mucho sentido, comer, ver la tele y dormir.

Han salido vínculos de amistad, han salido algunas parejas también y uno ve que para la fiesta siguiente la persona ya se preparó para ese día, la ves vestida distinto, nos pide ropa antes de la fiesta, y eso es muy importante porque elevando la autoestima la gente ve la vida de otra manera y emprende otras cosas.

En Oriente el adulto mayor está en la cabecera de la mesa, es la autoridad en la familia, es el que da los consejos, el que marca las reglas, el que va indicando cómo vivir y acá es al revés. Lo vamos marginando, ya no se le consulta más nada, lo excluimos de las decisiones, los vamos sacando del Living cuando viene gente, pasa a la piecita del fondo y lo más dramático es cuando lo llevan a una casa de salud o al Hogar de Ancianos y no lo van a ver más.