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miércoles, 19 de junio de 2013

Magela Altier: la lucha por género y equidad


Magela Altier

UNA VIDA DE SUEÑOS, LUCHAS Y AFECTOS.




Más allá de buenas intenciones en los hechos cuesta, incluso a las propias mujeres, ver a otras mujeres ejerciendo roles que históricamente han pertenecido a los hombres”.

Escribe Juan José Pereyra


Nació prácticamente sin familia. Afirma que después tuvo varias, y que de la conjunción de todas ellas hoy tiene una muy grande, en número y calidad afectiva.
Vivió con Gorki, su pareja, en una pieza de tres por dos, sin baño ni muebles. Una cama y una caja de libros eran todas sus pertenencias.
Cursó magisterio en plena dictadura. “El Soldado” era material de lectura “recomendada”. Junto a muchos de su generación leyó a escondidas a Eduardo Galeano y Miguel Hernández entre tantos más.
Estudió periodismo. Integró una murga, ha militado desde muy joven a nivel político, social y sindical. Es poeta. Tiene más de cien entrevistas publicadas que espera algún día se conviertan en un libro.
Es madre de tres hijos y abuela “postiza”.
Quiere recordar y nombrar a tanta gente que teme olvidar a alguien.
Es jerarca municipal. Va y viene como siempre, en su bicicleta.
La Nueva Gaceta entrevista hoy a Magela Altier, una mujer que jamás ha dejado de luchar.

¿Cómo fueron tus primeros años, tu familia…?


El año pasado al realizar un Curso de Auxiliar en Adicciones tuve la oportunidad de elaborar mi genograma o sea la representación gráfica de mi constelación familiar. Fue un proceso al comienzo difícil pero que al final me permitió "ver" y valorar la cantidad de gente con la que me había vinculado, la enorme riqueza de afecto que había recibido y la fuerza que había logrado sacar de los momentos más difíciles. Tuve varias familias y con la conjunción de lo mejor de todas ellas hoy puedo decir que he logrado armar una gran familia de parientes elegidos/as y amigos/as hermanos/as además de Gorki, su familia y nuestros tres hijos/as: Laura, Rodrigo y Bruno. También a esta suma de afectos se une Tania, la hija mayor del primer matrimonio de mi compañero con las dos nietas, Nahia y Gianna.
Nací en Montevideo un 26 de abril de 1956. Mi apellido es Altier, así, peladito. Lo que antes significaba ser "hija natural", de padre desconocido y de madre ausente porque muy pequeña me dejaron en la custodia de una familia de Lascano. A los siete años, muere mi madre adoptiva, Hilda Pereyra. Así conozco y retorno por un tiempo a mi familia de origen que luego de escuchar un aviso en la radio deciden llevarme a vivir con otra familia, esta vez de Rocha. Quedo así a cargo de la Mama Chicha abuela de quienes hoy considero mis hermanos: Daniel, Horacio y Pablo Arboleya.
Tengo además dos hermanas "naturales": "Mimicha" y Luján, una que vive con mi madre en Buenos Aires y la otra en Montevideo.

Después vino la etapa del estudio…

Mi historia fue de muchas "idas y venidas" como la de otras gurisas de mi generación que tuvieron la suerte o la desgracia de no criarse con su familia de origen. Lo que hoy puede parecer excepcional era común en la Rocha de hace unas décadas: una niña para ayudar en las tareas domésticas a la que se le pagaba con techo, comida, protección y educación. No me fue tan mal si comparo con la situación de otras niñas de mi época. Siempre me gustó mucho leer y estudiar y no quería quedarme solamente con "las tareas propias de mi sexo". Eso me abrió puertas y relaciones y fui conquistando poco a poco mi autonomía con la ayuda y la influencia de mucha gente que me marcó de diversas maneras. Como anécdota puedo decir que me salvé de estudiar "Corte y Confección" gracias a la mediación de las maestras Beba Duposo y Alba Lombardi y del maestro Dagoberto Vaz Mendoza que convencieron a mi abuela de que debía dejarme seguir la secundaria.
Los primeros años los cursé en el Colegio Mª Auxiliadora de Lascano; de 3º a 6º fui a las Escuelas Nº1 Ramírez y Nº2 José Pedro Varela; parte de la secundaria la hice en el Colegio San José y culminé en el Liceo Nº1 de Rocha. Luego estudié Magisterio en el local viejo de la calle Julián Graña y 25 de Agosto en plena dictadura con todo lo que esto representó para esa generación: la lectura "recomendada" de la Revista "El Soldado", "Testimonio de una nación agredida", etc. y la prohibición de otras -entrañables- que leíamos a escondidas como el "Poema Pedagógico" de Makarenko, las obras de Galeano, la poesía de Miguel Hernández.
Como compañeras/os de Magisterio recuerdo a Virginia Vaglio, Graciela Acevedo, Graciela Rótulo, Shirley Núñez, Miriam Núñez, Edelia Torres, María Irma Dinegri, Petrona Sánchez, Ann Novoa, Alicia Garat, José Carlos Cardoso, Laura y Rosario Almandós, María Rosa Terra, Laura Corbo, Estela Féola, Nelkar Techera, Olga De León, Graciela Féola Zuescun... Como profesores/as a Wilson Rodríguez, a Doris Silvera, a Maribel Novo que nos trasmitieron la mística de la función educativa y no solamente la repetición de teorías de memoria.
En mi casa de la calle Treinta y Tres funcionaba una pensión estudiantil lo que me vinculó con gente joven de todo el departamento. Algunas de las muchachas un poco mayores me abrieron al conocimiento de textos comprometidos y a la música del mundo. Recuerdo a Beatriz Moreno y a Martha Silvera que hacían magisterio cuando yo aún era una jovencita. Ellas me regalaron mi primer vaquero "Blue Jean" con la lija que te los dejaba con apariencia de gastados aunque fueran nuevos. Al tiempo se las llevaron presas pero nunca olvidé los poemas y los cuentos de Mario Benedetti, la poesía y la prosa de Pablo Neruda, las novelas de Jorge Amado o la Cantata Sudamericana con Mercedes Sosa que después volvería a escuchar una y otra vez en la casa de mi amiga hermana Alicia Garat en Castillos junto a mi hermano Daniel: los discos de Serrat, The Carpenters, Edith Piaf, María Elena Walsh, Les Luthiers, Psiglo, Totem, Rada y Los Beatles, Los Olimareños o Jorge Cafrune. También allí descubrí a García Márquez, a Cortazar, a Mario Vargas Llosa y su "Guerra del fin del mundo" en la rica y diversa biblioteca de Rafael Garat, amigo entrañable, acompañadas de la cocina excepcional de Yolanda Cousillas, su esposa.




¿Cómo fueron los primeros años de militancia?

En el año 79 conocí a Gorki, recién salido de la "Cana", pelado en todo sentido y comenzamos una relación que dura hasta ahora. En un principio mi abuela no aprobó la relación y decidí irme de casa a compartir pan y cebollas. Tuvimos sí la ayuda de mis suegros que fueron, desde entonces padre y madre para mí. Por aquellos años comenzó a llegar algún material, la visita de compañeras/os con noticias frescas de movidas y reuniones clandestinas en casas de vecinos. Vivíamos en ese entonces en una piecita de tres por dos sin baño, sin muebles frente a lo de mis suegros. Una cama, un primus y una caja con libros eran todas nuestras propiedades y un vigilante siempre cerca controlando nuestros pasos. Creo que alguno de estos "tiras" como les llamaban, se hizo aficionado al Cine porque iban con nosotros, todos los martes a Cine Club.
Las elecciones del 80 que pusieron a consideración la Reforma Constitucional de la Dictadura le dieron el triunfo al NO aunque en Rocha ganó el SI y la movida que provocó ese triunfo tuvo sus repercusiones en nuestra ciudad. ¿Te acuerdas del de "Río de Libertad" el 27 de noviembre de 1983? Ese día nos concentramos en Plaza Independencia y escuchamos a Jorge Mego Vique que leyó la Proclama que en Montevideo tuvo como protagonista a Candeau. A mí me pareció que éramos muchos y recuerdo escuchar a los padres de Gorki, Roberto López Caballero y Lena Rodríguez con un ramo de camelias rojas afirmando que nadie podía faltar a esta cita. También las "caceroleadas" desde el patio, las reuniones en la casa de Henry Corbo y de Julio de la Llana y Mary Martínez, la elaboración del Boletín "Presencia", las primeras volanteadas, las reuniones en la Parroquia con el Padre Paco, con el Movimiento Cultural Rochense con Diana Da Silva, Susana Faget, Susana Altez y Cristina Pioli y el Grupo en Defensa de los DDHH donde conocí a mis amigas monjas Maruja, Carmen Martínez, Carmen Moreira y Marileo. ¡Cuántas reuniones para formar el Gremio de Magisterio con las Mellizas Graciela y Mary Núñez, con Gladys Altez, Cristina Pioli, con Beatriz Terra, el "Chino" Arrieta y Mario Machado! Con todos/as formamos la Murga Sindical "La Sembradora" que amenizaba las veladas festivas del sindicato y las salidas a conversar con la gente que muchas veces nos cerraba las puertas y otras comenzaba a entender y a compartir los nuevos caminos.
Después vendría la Campaña por el Voto Verde, los puerta a puerta, las primeras reuniones en el Comité del Frente Amplio, de la 1001, del Partido Comunista con tanta y tanta gente: Pepe Onandi, Wilson y Darío Montesdeoca, Esteban Barrios, Lilián Ureta, los Dufau, el vidriero Cruz y su Sra., Flor "Potota" Pérez Corbo, Ramón Dos Santos, Waldemar Silva, Pedro y el Jota Echeverría y sus otros hermanos, las hijas y nietas de Hermógenes Sosa, la familia de Perdomo y de Quela Dinegri, Asdrúbal Fernández y Martha Caram, Felipe Caram, Norma Rivero y sus gurisas, Alma Pereyra, Liliana Pedraja y el "Cabeza", Estrella Balao, Sonia Amalia y Héctor D'Alessandro, el "Cura" Laxalte y Lilián Techera. También recuerdo el primer grupo de jóvenes frenteamplistas que integramos con Darcy de los Santos, Ángel Delgado, Aníbal Pereyra, Olivier Vázquez, Lionnet, Ana Inés y Gabriel Carduz y Antonio Batista.



¿Cómo nació la periodista?

Cuando termino Magisterio me voy a trabajar a Lascano. Luego anduve por Castillos y aquí en Rocha en la Escuela 45 y la Escuela 7. Simultáneamente los hijos/as, las dificultades económicas, el estudio de periodismo (a través de la Fundación alemana Friedich Naumann y la docencia entre otros de Pepe Martins y Juan José Serrés). Luego la formación de la Cooperativa de Comunicadores "Sol Naciente" con la que comenzamos en Radio Fortaleza junto a Oscar Nicolini, Grazziella Fernández, Oscar González, Luis Silva "El Mago", Celia Calabuig, Rebecca Pereyra, Ana Altez programas como "Radioperiódico Desafío", "Hola Mamá" y "Chiquillada" un programa para niños/as en el que también participaba Oscar Iroldi y la pequeña Alejandra, hija de la entrañable compañera Susana Acosta, ya fallecida.
Vendría luego el trabajo en "Estediario" con Grazziella Fernández e Isabel Miraglia, mi pasaje por Vida FM junto al "Pato" Roberto, Jaime Quaglia y Rafael Rocha, la etapa de "Tu Semanario" con el "Ñato" Schiavo, los años de informativista en Difusora Rochense junto a Pablo Núñez, Alejandro Romillo, Claudia de Castro, Rosana Núñez, Karen Huelmo, Marisa Sosa, Marisel Sosa y Roberto Nelson Gutiérrez. Y por supuesto la experiencia más rica, la del Mensuario Cultural "Memorias del Popularte" junto a Richard "Pelonga" González, Marilú Rodríguez, Gorki, y tantos y tantas que también han integrado experiencias como las de Estación Esperanza (Osvaldo Graña y Jenny Vidal, Bettina y Rosa Acosta) o el Grupo de Escritores y la Biblioteca "Plural", el libro colectivo "Sonsueños, re-cuerdos y poemas" del que participaron los antedichos más Rodolfo Benencio, Teresa Barrios, Susana Pioli, Mabel Cal, Angela Cal, Mauro Aguilar, Alejandro Elías, José Ariel Cardoso, Elder Mazzullo entre otras/os.



¿Cómo es una pareja donde ambos militan intensamente? ¿Cómo se distribuye el tiempo en la atención de la casa y los hijos? ¿Se da el síndrome del “nido vacío” hoy?

Creo que lo fundamental para que una pareja pueda sobrevivir a las dificultades y desgaste de la convivencia es tener afinidades básicas y al mismo tiempo intereses diversos combinados con generosidad, sin mezquindades. Es de todos modos, una dura experiencia que se pone a prueba todos los días y que no está exenta de discusiones, negociación, nuevos acuerdos. Ha habido un proceso de aprendizaje mutuo en todo estos años junto a los/las hijos/as. Aún no ha llegado el síndrome del nido vacío porque la verdad estoy poco en casa. Además convive aún con nosotros Rodrigo que culminó el liceo y se prepara para entrar a Educación Terciaria el año próximo. Laura ha terminado las clases de la Licenciatura en Trabajo Social y le falta la tesis para recibirse mientras que Bruno está en 3º de la misma carrera. Además por motivos de trabajo voy seguido a Montevideo y siempre los visito, los llamo o nos comunicamos por Internet. No hay tiempo de extrañar.




¿Cuándo empezaron a interesarte los temas de la mujer y la falta de equidad y cuándo empezaste a trabajar decididamente en ellos?



Me preguntas por los comienzos de mis intereses tanto políticos como sociales y en particular los temas de género. Creo que todo ha ido en un proceso de intereses simultáneos muy vinculado al general por los DDHH. Y por supuesto la experiencia compartida con tantas y tantas mujeres en la docencia, en el periodismo, en el ámbito sindical, en la militancia política y en los encuentros específicos con el Grupo de "Cotidiano Mujer" y el de Seguimiento de los Compromisos de Beijing y sus materiales y talleres siempre presentes. Por supuesto las lecturas de libros, de escritoras -novelistas, ensayistas y poetas- me han permitido incorporar más y más conceptos que se enriquecen y dialogan con la práctica y la charla cotidiana con las compañeras.

Es bueno recordar que hace más de 15 años integramos en Rocha, un grupo de Mujeres Políticas de diversos partidos con Susana Féola, Grazziella Fernández, Rosario Cardoso, Emilia Prado, Diana Da Silva, Mabel Molina y poco después el Grupo "Renacer" de Lucha contra la Violencia Doméstica al que se sumaron Mary Inchausti, Lucy Suárez, Patricia Pereyra y la Escribana "Negrita" Barrios entre otras. Así se impulsaron charlas, talleres y encuentros y cada 8 de marzo se marcaba presencia en los medios de comunicación con los temas de género.
Era de alguna forma la réplica local de la que, en el marco de la CONAPRO formaron las mujeres de los distintos partidos, único ámbito (integrado entre otras por Margarita Percovich, Beatriz Argimón y Glenda Rondán) que se mantuvo por mucho tiempo con verdaderos logros en pos de los derechos de las mujeres.


¿Cómo surgió el trabajo institucional en los temas de Género y Equidad?

Comencé a trabajar en la Intendencia a fines del 2005 y en el 2006 se creó el Departamento de Género y Equidad para impulsar y transversalizar la perspectiva de género en todas las actividades que realiza la comuna. Y sobre todo para contribuir a la formación de un equipo técnico que aplique esa perspectiva en su práctica diaria.
Para ello se han realizado y se siguen realizando actividades destinadas a sensibilizar, informar y capacitar a los RRHH de la Intendencia, a las instituciones públicas y organizaciones de la sociedad, a los medios de comunicación y a la comunidad en general, en estos temas. Consideramos importante seguir trabajando en la lucha contra la violencia hacia las mujeres, en Salud Sexual y Reproductiva en pos de mayor autonomía para las mujeres propiciando además un Sistema Nacional de Cuidados que impulse la responsabilidad compartida en las tareas del hogar y la familia entre mujeres y varones. Tarea por cierto compleja porque debe producir cambios importantes en hábitos y comportamientos culturales ancestrales, no sólo en las mujeres sino también en los varones que se ven igualmente perjudicados por las consecuencias del patriarcado en sus vidas, sus afectos, su salud, su desempeño laboral, sus relaciones familiares y sociales. A esta altura se notan algunos avances pero falta mucho y es fundamental la perseverancia, el seguimiento y la evaluación de un trabajo que debe ser cada vez más en equipo y coordinando los esfuerzos de las distintas instituciones involucradas.


Cuéntame sobre tu trabajo concreto en la Dirección

Una de las áreas que requiere nuestra mayor atención es Casa Refugio "Comuna de Rocha" donde tratamos que mujeres y varones en situación de exclusión vayan recuperando sus derechos ciudadanos básicos: a la salud, a la identidad, a la nutrición adecuada, a la no violencia, a la capacitación y al trabajo. Allí llegan personas que tienen serios problemas de salud, físicos y mentales, adicciones o uso problemático de sustancias, sufren las consecuencias de la desintegración familiar y social y por supuesto la falta de vivienda, trabajo y redes de sostén. Es un desafío que nos pone a prueba día a día, que requiere mayor capacitación, evaluación, seguimiento y un esfuerzo de coordinación con las otras instituciones (MSP, ASSE, INAU, MIDES, INMUJERES, BPS, JDD, Ministerio del Interior, MEC, otras áreas de la IMR, Centros de Enseñanza, etc.) así como la información en tiempo y forma a la población y a los medios de comunicación para lograr su comprensión y apoyo.

El hecho de ser mujer ¿hace que cueste más a la hora de ser escuchada para considerar temas y tomar decisiones?
Sin dudas las mujeres tenemos dificultades para actuar con toda nuestra potencialidad en los ámbitos de gobierno. Más allá de buenas intenciones de gobernantes progresistas, de cuotas votadas para ejercer la llamada discriminación positiva, en los hechos cuesta, incluso a las propias mujeres, ver a otras mujeres ejerciendo roles que históricamente han pertenecido a los hombres. Los varones pueden llegar a vernos como "rivales y trepadoras" y aquellas que están en condiciones de acceder a lugares elegibles, pueden sentirse inseguras, no aptas. Parece que nunca tenemos la capacitación suficiente para "estar en carrera".

Las mujeres somos el 52% de la población y estamos presentes en todo el quehacer social, económico, cultural, laboral productivo junto a los varones. Además seguimos siendo las mujeres quienes nos encargamos, todavía en la mayoría de los casos, del mundo de los cuidados (el llamado trabajo reproductivo) que determina la llamada doble jornada. ¡Ni te cuento si además participamos en un sindicato, en un partido político, en una ONG, en la comisión del barrio o la escuela! Ahí se nos transforma en una triple responsabilidad para la que aún no hemos logrado encontrar ayuda de manera tal que podamos participar con tranquilidad y lucidez. Incluso somos criticadas o nos sentimos culpables si descuidamos las llamadas “tareas propias de nuestro sexo”. Es por eso que a las mujeres nos cuesta tanto vernos en roles de desempeño público. No sólo porque no nos educaron para ello, porque con legitimidad podemos no estar motivadas o no tener vocación para ello (como tantos varones) sino porque en realidad nos cuesta el doble o triple de esfuerzo. Debemos reconocer que, fruto del trabajo de las mujeres organizadas, hemos avanzado muchísimo. Este gobierno ha promovido el desempeño de muchas mujeres en lugares destacados y lo hemos hecho muy bien porque nos gusta trabajar en equipo, porque no dudamos en preguntar si no sabemos algo y porque estudiamos mucho y nos capacitamos para la tarea específica. No en balde, de todos los cursos de capacitación participan por amplia mayoría las mujeres. Pero claro, siempre falta. Y en el ámbito de representación político partidaria estamos aún lejos de una representación equitativa. A los partidos políticos les cuesta mucho ubicar mujeres en los primeros lugares y a la población aún le cuesta mucho elegir mujeres. Incluso a las propias mujeres nos cuesta vernos en esos desempeños. El mundo político es duro, competitivo y aún pensado desde lógicas masculinas, con tiempos, discursos y hasta horarios que no se adaptan a la vida de las mujeres. Salvo excepciones, nuestra jornada está muy fragmentada, tironeada por mil exigencias cotidianas. Lo que decía antes: la doble y triple jornada.
Habrá que seguir trabajando en fortalecer la autoestima de las mujeres y mostrar a nuestras niñas y jóvenes, los modelos que en los mil ámbitos del trabajo, la cultura, el arte y la historia, la ciencia y el periodismo han ejercido con solvencia miles de mujeres de todas las épocas y lugares del mundo.


¿Algo que no te haya preguntado o haya quedado “en el tintero”?

Me encanta el cine. He visto mil películas y hay mil más que me gustaría ver. Amo mis veranos en Antoniópolis que es la "Arcadia" a la que todo ser humano sueña con volver aunque ya no exista tal como la conocí. Otro lugar donde me encuentro conmigo misma es Valizas, su Cerro Buena Vista y el paisaje único que desde su cima puedo ver. Me gusta escribir, en especial poesía y lo hago desde hace bastante tiempo. En cuanto al periodismo, en la época en que trabajaba en "Tu Semanario" hacía una entrevista semanal a una persona de Rocha en doble página y también la entrevista de tapa. Y en "Estediario" desgrababa y armaba a diario todo el material. Es un asunto pendiente hacer un libro con las más de cien entrevistas que considero potables, aunque hice muchas más.



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