“EL CHASQUE DEL PALMAR” Por Julio Dornel.

 Escritor y periodista Julio Dornel

En adhesión al Bicentenario de la ciudad de Rocha, el Departamento de Cultura de la Intendencia Municipal auspició en aquella oportunidad un homenaje al Dr. Amadeo Molina Faget y un audiovisual denominado “El Chasque del Palmar”. Se valorizaba en esa oportunidad la labor desarrollada por el Dr. Molina sobre la historia del departamento, entregando a sus familiares una imagen realizada por el artista castillense Humberto Ochoa. El poema conductor del audiovisual estuvo a cargo de Everton Rodriguez Sención y el libreto del mismo al Prof. Jesús Perdomo. Participaron además Verónica Perdomo, Juan de la Cruz y Jesús Perdono en voces para el guión y la grabación estuvo a cargo de Juan Carlos Posadas (Emisora Atlántica). Imágenes a cargo de Juan Luis Martínez y canciones de Rosalío Pereyra, Los Zucará, Ruben Decuadra, Jesús Perdomo y Danilo Antón, interpretadas por José Ariel Cardoso, Karen Decuadro, Verónica Perdomo, Ximena González y Jesús Perdomo. En el folleto correspondiente a la promoción del evento se publicaron históricos documentos, aportando nombres, fechas y circunstancias que rodearon la vida de Pérez del Puerto, De La Rosa y de Miguel De Los Santos, padre del “chasque del Palmar. Bajo el título de Humanizadores de Nuestro Campo, el Dr. Molina señalaba que “los investigadores Sala de Touron Rodriguez de la Torre, han publicado un mapa de salidas fiscales de tierras, en nuestro territorio durante la colonia. En dicho mapa impresiona la sucesión continúa de enormes latifundios. Sin embargo Maldonado, Rocha y Melo se ven como zonas de pequeñas propiedades. Ello se debe fundamentalmente, a la acción de dos hombres; Rafael Pérez del Puerto y Agustín de la Rosa, fieles ejecutores de las lucidas directivas sociales españolas del siglo XVIII. Pérez del Puerto el fundador de Rocha, Intendente de la Real Hacienda de Maldonado, orientó su obra colonizadora en dos sentidos: administrando las Estancias del Rey y repartiendo campos y fomentar los establecimientos útiles lo que significaba una divisa humanizadora. Pérez del Puerto delegó la facultad de repartir campos, en la jurisdicción de Santa Teresa, al Comandante de ella Agustín de la Rosa, quien aconseja al Virrey Melo que “debe admitirse poblar las estancias a la gente vaga, perdida y abandonada, que viven del robo y del contrabando. Los culpables de los males no son estos, sino los latifundistas. Las gentes sin tierras no pueden trabajar en las estancias, porque las poseen los ricos y las hacen trabajar por medio de esclavos obligados por la necesidad y dedicados al robo y al contrabando. Antes de alejarse a colonizar Cerro Largo, el Comandante de la Rosa dejó una sucesión continua de estancias adjudicadas a indios, entre los que se encontraban Santos Montiel, Martín Flores, Antonio Pintos, Julián Vera, Cayetano de la Rosa, María Marandarí, y Miguel de los Santos, el padre del “Chasque del Palmar”.