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viernes, 25 de julio de 2014

Abriremos una investigación...Por Lilly Morgan Vilaró


Curiosa forma de admitir que sus misiles están aterrizando en lugares tan peligrosos como escuelas, hospitales y barrios residenciales llenos de civiles tiene el gobierno de Israel. En el caso de los 4 niños palestinos masacrados no por una, sino dos andadas de artillería desde una patrulla naval, (significando que el que disparó apuntó mejor la segunda vez) mientras jugaban al fútbol en una playa de Gaza, Israel dijo que iba investigar, ya que era imposible negar lo sucedido a plena luz de las 4 de la tarde, el por qué el soldado encargado de disparar, eligió hacerlo contra niños jugando y no contra integrantes de Hamas. Por ahora no sabemos cual fue el resultado de la investigación pero fuentes no oficiales deslizaron que la causa podría ser algo relacionado a algún caso de trauma infantil. Al parecer el joven soldado hubiese preferido estar jugando al fútbol con sus amigos en alguna canchita barrial de Jerusalem en vez de estar en una patrulla naval con órdenes de matar palestinos. Y cuando vio a los niños jugando al fútbol en la playa, hubo un clik o cortocircuito en su cerebro que lo llevó a disparar contra ellos.
Cuando un tanque israelí,dentro de Gaza, disparó y voló el tercer piso de un hospital, las autoridades militares de ISrael admitieron que con toda seguridad eso había, en efecto, sucedido. Pero que la culpa era de Hamas que al parecer y según pruebas irrefutables que ellos tenían pero no podían mostrar por el momento, porque estaban muy ocupados en su campaña militar, había guardado detrás de los antibióticos y vendas de un estante, un montón de cohetes. Pero que igual ya habían empezado a investigar, no sea que el soldado que disparó lo haya hecho porque él siempre quiso estudiar para médico y no pudo porque lo obligaron a entrar al ejército.
Y en esta última hazaña bélica en la cual alguien disparó contra una escuela de la ONU en Gaza que estaba siendo utilizada como refugio, matando e hiriendo a un montón de niños, mujeres y hombres, Israel declaró que seguro habían sido los de Hamas. Pero aclaró que ellos, casualmente, le habían estado diciendo a los de la ONU que se fueran del lugar porque ellos tenían pruebas irrefutables que allí adentro había cohetes de Hamas. Y que los de la ONU, de puro tercos nomás, se negaron a irse. Y bueno, si bien ellos están seguros que fue un cohete de Hamas, no descartan la posibilidad de que algún misil de Israel haya equivocado el rumbo. Por supuesto, prometieron investigar, para ver si el lanza-misiles no sufría alguna clase de trauma porque él siempre quiso trabajar para la ONU, preferiblemente en la sede de New York o Ginebra. Gaza no tanto. Y al ver la bandera de la ONU flameando, se flipeó mal.
El problema es que los funcionarios de la escuela de la ONU, han dicho que ellos le pidieron dos veces a los militares israelíes que hiciesen una tregua para poder evacuar a los civiles del lugar, ya que estaban en el medio del fuego cruzado. Y que esas dos veces, el pedido les fue negado.
Israel dice que es mentira. Que ellos los llamaron y les dieron 4 horas para rajar de allí. El encargado de la escuela dijo en un lenguaje un poco, pero solo un poco, más diplomático que el que yo transcribo, que no sabía de que carajo estaba hablando el coronel israelí. Y dijo tener los registros de las llamadas y lo que se dijo en ellas.
Israel prometió investigar.
L.M.V.

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